Capítulo Ø4
Después de esa noche las cosas nunca volvieron a ser las misma, ya no lo miraban de la misma manera.
No pudieron dormir esa noche, cada vez que cerraban los ojos eran teletransportado se a esa habitación y revivían lo sucedido una y otra vez.
Al día siguiente para su desgracia había clases, aun moribundos tuvieron que ira cada uno ignorando a su familias para no preocuparlos mas de la cuenta.
Lucy, Gray, Juvia, Jellal y Levy estaban en el mismo salon los peli-azules estaban parados y sus miradas no estaban enfocados a nada mientras que la rubia y el pelinegro estaban acostados en sus pupitres. En el caso de Romeo bueno estaba en el baño de hombres vomitando su desayuno, solo recordar a la "niña" le causaban asco.
Lucy: ¿Donde esta Erza?
Jellal: Repartiendo castigos
Cierto, Erza es parte del consejo estudiantil y por ende esta al tanto de los movimientos de los alumnos por si hacen algo prohibido, si hacen algo los castiga y por algún motivo que desconocen los amigos ella lo disfruta hasta cierto punto la desestresarse.
Las clases pasaron normal, aburridas como siempre, así hasta llegar a la hora de descanso. Todos estaban acostados en una mesa del comedor, nadie tenía hambre.
Lucy: ¡Moo! ¡Estoy harta!
Dijo levantándose para quedar sentada y todos sus amigos la imitaron.
Levy: Cierto ¿Que… fue eso de la niña?
Erza: ¿De verdad era tu...? —Parecía indesisa por lo que susurro —¿Tu hermana Jellal?
Jellal: No, no creo, Mei debería tener la edad de Romeo-kun
Romeo: Em… chicos?
Gray: ¿Que pasa?
Romeo: Por todo el susto y eso, agarre los discos y no me di cuenta hasta que llegue a casa
Juvia: ¿Enserio? Juvia no puede creerlo
Levy: ¿Deberíamos verlo?
Lucy: No, bueno nose, tengo curiosidad ¿Y ustedes chicos?
Gray: Mejor esperemos a salir y los vemos en la casa de Lucy
Lucy: ¡¿Y porque en mi casa?!
Levy: Vamos Lu-chan
Juvia: Si Lucy-san su casa es grande
Lucy: No se…
Erza: Okey, en la casa de Lucy será
Dijo con un brillo en los ojos y decidida, amaba ir a la casa de rubia porque siempre tienen pasteles de fresas. En cambio la rubia solo pudo suspirar al saber que ya no podía hacer nada, después de que Erza lo dijo ya no podía cambiar de opinión.
Con eso terminó el descanso y regresaron cada quien a clases, en una dónde les tocaba a todos estar juntos (una clase que mezcla grados) la profesora anuncio que tendrían tres alumnos nuevo mañana y esperaba que fueran buenos con ellos, eso fue raro normalmente los nuevo llegan a principios a a la mitad después de empezar clases, y estos "alumnos" llegarían cuando solo faltan unos tres cuatro meses para acabar el año escolar.
Simplemente raro.
Las demás clases fueron normales y por fin pudieron poner atención a la clase y no estar pensando en la niña del edificio abandonado ¿Tal vez la emoción de saber que hay en los discos? Quien sabe.
Lo descubrirán en un par de horas ¿Que habrá en esos discos?
Continuará…
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