Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

9.- Dilema muy grande

Los días pasaron volando. Hablaba casi a todas horas con Damien, desde que me levantaba hasta que me acostaba, y había decidido quedar el fin de semana que estaba por venir. Se sentía extraño no estar todo el tiempo en casa con Evann pero  me notaba más y más ocupada: si no eran grupos de estudio o proyectos de puntuación extra, eran pedidos personales de algunos de mis compañeros. Esta sensación me era vagamente familiar pero no sabía de qué.

—¿Qué tal hoy? —descolgó Damien.

Ahora solía llamarme justo antes de comer. Sabía a qué hora terminaban mis clases al mediodía y llamaba sin falta para acompañarme de alguna manera mientras iba hasta el campus principal. En un principio, se había ofrecido a llevarme hasta allí pero me negué a su amabilidad.

—Uf, cansado —resoplé.

Damien se rio.

—Siempre son cansadas pero nunca dices que lo quieres dejar —comenta—. ¿Seguro que eres una universitaria normal?

—Lo único que me mantiene viva son las sesiones de laboratorio —expliqué mientras me ponía los auriculares para andar más cómodamente—. Mañana estaré todo el día.

Escuché cómo aplaudía y silbaba.

—De verdad que no entiendo cómo pudiste meterte en semejante carrera si sólo te gusta un aspecto de ella.

—¡No! Si en el fondo me encanta todo el contenido. Son sólo las conferencias. Son tan... monótonas y largas, eternas.

—Hablas como si no supiera cómo son. Aún así, a mí me fascinaban. De acuerdo, tal vez si fuera el colegio, me habría dormido, pero lo encontraba todo súper interesante. Sobre todo las de un profesor en particular. ¿No hay uno más vivaz en todo el departamento de ciencias naturales?

—Tal vez el de astrofísica pero yo soy de la rama bioquímica.

—¿Por dónde vas ya? —cambió de tema.

—Casi llegando al campus principal. ¿Tú qué haces?

—Investigando sobre restaurantes fuera de Londres. Pensaba llevarte fuera de la ciudad esta vez. ¿Alguna preferencia?

—Ninguna, me fío de tu gusto.

—De acuerdo, pues. ¿Qué tal si vamos a mi villa, salimos a comer y luego damos un paseo por Weybridge? También conozco al dueño de St George's Hill, si le pido permiso, también podemos pasear por ahí.

—Suena bien —saludo a Callum silenciosamente—. Te cuelgo, hablamos luego.

Apenas he terminado de quitarme los auriculares cuando Callum me agarra por los hombros.

—Dilema muy grande —dijo dramáticamente—. Este finde es la fiesta anual en Queens' pero Luke —véase su crush de otra universidad— irá a otra que se celebrará en la punta de la ciudad. ¿Qué hago?

—¿Qué fiesta anual de Queens'?

—¿No te ha invitado Damien? Es el cumpleaños de Deena O'Hannagain y todos los años alquila todo, sí, todo, el Queens' para hacer su fiesta. En verdad era hoy su cumpleaños pero le gusta celebrar a día completo por lo que lo celebrará el sábado.

—Pero Damien me acaba de decir que me llevará a Weybridge el sábado...

—Frena, frena, alma de cántaro. ¿Dónde me has dicho?

—Weybridge. A su villa.

—¡Será verdad! Nena, el irlandés éste está sacando la artillería pesada. De todos estos años como cotilla profesional, jamás he escuchado que Damien se saltara sus deberes sociales por una chica —me da un codazo en las costillas—. Te tocó la lotería.

—¿Por qué lo dices así como si Damien fuera una mina por explotar?

—Mira, rubia, no puedes ser más estereotípica en esto. A ver si tu cabecita inocente lo pilla. No es por tratar a la gente como objeto, pero estamos hablando de un O'Hannagain. Y estamos hablando del más sexy y el más prometedor: administra las financias del bufete y modela para Ralph Lauren. ¡Ralph Lauren!

Ladeé la cabeza. Seguía sin entender qué tenía que ver todo eso conmigo.

—Y ese tipo perfecto va a llegarte a ti, una rubita con la mente más limpia de todo Londres, a su mansión privada cuando podría disfrutar de incontables mujeres en la fiesta de su hermanita. Algo me dice que está colado por ti hasta las trancas.

—Me dijo que quería ir lento...

—¡Eso mismo! Damien es un señorito de la clase alta, acostumbrado a tener todo lo que quiera cuando lo quiera. Y está yendo a tu ritmo. ¿Sigues sin verlo? —niego y Callum se da una palmada en la frente—. Dejémoslo en que está rompiendo reglas por ti. ¿No te parece romántico? Ojalá fuera gay porque es muy mi tipo. Y va y se fija en ti. De verdad que no lo entiendo, si tan poco ves cómo te aprecia, deberías cedérmelo a mí. Prometo que lo cuidaré bien.

—Sólo hay... un problema...

—¿Uhm?

—Yo... no puedo dejar de compararlo con Evann y no puedo evitar pensar en que es injusto para él.

—Nena, el otro día me dijiste que te hizo olvidar esos malos rollos. Algo no encaja.

—A ver, sí, me hacer centrarme en él pero, nada más regreso a casa o nada más cuelgo, no puedo dejar de pensar cosas como "Evann también solía llamar" o "Evann pillaba mejor mis chistes". De verdad que intento pasar de pagina, y debo hacerlo, pero simplemente vuelve para atormentarme.

—Por eso mismo necesitas a Damien. Escúchame bien —Callum me miró fijamente a los ojos—, bonita de cara. Para superar a un chico, necesitas a otro. Las heridas se curan cubriéndose con nuevas células que reemplazaron a las que había antes.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro