Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Veinte

Canción del capítulo: IU - Jam Jam

•••

JooHee terminó de lavar los platos que habían usado para el almuerzo, le agradaba escuchar a las niñas reírse tan seguido con TaeHyung, el chico de por sí era gracioso en ocasiones y muy dulce, tan diferente como JungKook, por alguna razón podía permitirse ser más segura con Tae que con su amigo, no sabía si tenía que ver con las emociones también, pues a diferencia del rubio, el pelinegro de piercings aparecía más en sus pensamientos haciéndole tener cosquillas en el estómago. Al secar sus manos con el pañuelo de la cocina escuchó la notificación de su teléfono, era un mensaje.

Bellina:
¿Vendrás esta noche al club?

JooHee:
No, lo siento. Sabes que fue la mudanza y me siento agotada.

Bellina:
Sehun dijo que nos necesita a todas esta noche.

JooHee:
¿Te escribió?, no me ha llegado ningún mensaje de su parte.

Apenas envió ese y recibió el dichoso mensaje de Sehun.

Sehun:
Esta noche sin falta, llevas dos. No te sugiero llegar a la tercera, JooHee.

—Que oportuno—susurró. Abrió el chat con Bellina escribiéndole.

JooHee:
Acaba de escribirme. ¿Hay reunión de nuevo?

Bellina:
No lo sé, su mensaje no es muy específico que digamos.

Bellina:
¿JungKook irá de nuevo al club?

—Un cliente llegó con su auto que presentaba fallas—resumió para luego añadir—Ese cliente era Sehun.

El temor de inmediato surgió en ella.

—¿Qué?, ¿Te dijo algo?, ¿Te hizo algo?, te dije que esto era peligroso...

—JooHee—JungKook tomó sus brazos—Él no sabe que nos conocemos—aquellos ojos azules pasaron de miedo a confusión—Mi jefe le dio mi nombre recomendándome para solucionar el problema de su auto, sólo eso. Incluso tengo su número en mi teléfono.

Tal vez Sehun no sepa quien es, pero sabrá reconocerlo si lo ve de nuevo. Si sabe que pasa toda la noche con JooHee comenzaría a colocarle el ojo encima, lo mismo sospecharía Katie si vuelve a verla con él. Pasó su mano por su cabello prefiriendo que el pelinegro no fuera más, el temor de que le pasara algo se estaba volviendo común desde que aceptó su ayuda.

JooHee:
Esta vez no, hablaré con él.

Bellina:
Te veo en la noche entonces.

—Las niñas acaban de quedarse dormidas mientras les leía un cuento—TaeHyung apareció en la cocina—¿Estás bien?, te ves preocupada.

—Oh, no, estoy bien—forzó una sonrisa—Creo que las niñas están más cansadas que nosotros.

—Las dejé dormidas en el colchón de HeeRan.

—Gracias por la ayuda, Tae.

—No es nada, JungKook ha hecho énfasis en lo importante que es esto—bajó las mangas de su sudadera—Ahora debes encontrar un empleo, ¿No?

—Eso es lo que sigue en la lista—asintió.

—Hay muchos locales por esta zona, soy amigo de algunos dueños por visitarlos constantemente—y añadió—Hablaré con ellos para conseguirte algo.

—Gracias de nuevo—sonrió—A este punto es agradable saber que JungKook y tú salen de lo ordinario de las personas.

—¿Qué quieres decir?

—No parecen esperar nada a cambio. Ese tipo de personas están en peligro de extinción.

—Ah, sí—se sonrojó un poco rascando su cabeza—Si necesitas algo puedes buscarme, estoy en el piso de abajo en la primera puerta junto a las escaleras.

—¿Puedes darme tu número?

—Claro—aceptó su teléfono agendando su nombre entre los contactos—Ah, ¿JungKook no te ha escrito?

—Pensé que te habría escrito a ti.

—No.

—Puedes irte a casa, comenzaré a organizar las cosas...

—¿No necesitas ayuda?

—No, estaré bien.

El timbre de la puerta se escuchó, TaeHyung fue a ésta encontrando a su amigo allí justo a tiempo.

—¿Tu madre?—JooHee había comenzado a organizar las cosas en la cocina. TaeHyung había tenido que irse cuando un cliente del taller lo llamó pidiéndole ayuda con su auto—¿Hace mucho que no la veías?

JungKook desenvolvía los objetos que iban en ese ambiente pasándoselos a la chica.

—Digamos que visitarnos no es algo común.

—Debiste quedarte con ella, me siento mal sabiendo que está sola por mi culpa...

—No te preocupes, en mi familia el afecto no es común.

—Está pasando por un momento difícil por esa ruptura, debiste quedarte con ella—estiró su brazo colocando las tazas en el estante. Lo complicado era colocar las que iban más atrás, un pequeño chillido salió de sus labios cuando sin querer su brazo ocasionó que casi se cayera una de las tazas, JungKook fue ágil atrapándola a tiempo decidiendo ayudarla—Gracias.

—¿Prefieres que te acerque una de las sillas?

—Creo que es mejor—asintió. Dejó que el chico acercara una de las sillas del comedor ayudándola a subirse colocando sus manos en la cintura de ella, JooHee sintió calor en sus mejillas por ese contacto, intentó ignorarlo fingiendo que nada pasaba.

—Hay mucho silencio sin las niñas.

—Cuando éramos solamente HeeRan y yo no me gustaba el silencio—pudo organizar mejor las cosas una vez JungKook la soltó—Me hacía pensar más las cosas que no debían pensarse.

—¿Todavía te pasa?

—Con dos niñas es menos probable que haya silencio. ¿Puedes pasarme los envases de allí?—señaló otra de las cajas—Debo contarte algo, Bellina me escribió poco antes de que vinieras...al igual que Sehun.

El semblante de JungKook cambió a uno serio. Le entregó los envases donde se guardaban algunos ingredientes entregándoselo.

—Dime que no irás al club esta noche.

—Debo ir. Al menos solo esta noche...

—Ya te mudaste, JooHee, no necesitas hacerlo.

—Lo sé, digamos que esto es mi despedida—una vez organizado el estante JungKook la ayudó a bajar con sus manos en su cintura, JooHee tuvo sus manos en los hombros de él tragando con dificultad por esa manera de verla—Algo me dice que vaya esta noche, tengo...un sexto sentido...

—Iré entonces.

—No, si Sehun te ve allí y sabe que estás conmigo toda la noche sospechará, además de que sabrá quien eres...

—No me digas que te deje sola en ese lugar, después de lo que vi la última vez con ese grupo de imbéciles me niego a dejarte sola.

—JungKook, he tenido momentos peores...

—Y no necesitas tenerlos más—susurró mostrándose molesto—No vayas, por favor. Quédate.

La chica lo miró en silencio unos minutos, nunca hubiera imaginado que alguien además de HeeRan le pediría eso, aquellos ojos oscuros de JungKook le hicieron sentir tan mal como ver a la niña pedirle que se quedara con ella.

—No me hagas sentir más culpable de lo que me siento.

—¿Para qué te quiere allí?

—No lo sé.

—Yo sí, para manipularte y seguir hundiéndote—ella rodó los ojos sabiendo que era cierto. JungKook tomó su rostro entre sus manos juntando sus labios poder resistirse. JooHee sorprendida entró en pánico un segundo, pues no tardó en mover su boca con la de él. Cerró sus ojos dejando caer sus manos por el pecho y abdomen del pelinegro deteniéndose en su cintura.

JungKook se acercó mucho más dejándola prisionera contra el mesón, acarició sus mejillas siendo un beso dulce cargado con una pasión que pareció incrementar más que en el club, JooHee le permitió recostarse de su cuerpo sin haber distancia alguna entre ambos. El piercing de su labio inferior estaba tentándola mucho.

Por un instante detuvieron el beso respirando agitados, los dos tenían los labios hinchados al menos un poco, JooHee acarició el piercing de su labio inferior preguntando lo que estaba muriendo por hacer:

—¿Puedo morderlo?

A JungKook le recordó su sueño, su corazón se volvió más loco al encontrarlo seductor ese gesto, su nueva fantasía. Con un movimiento de cabeza asintió dándole el permiso, JooHee depositó un corto beso a su boca, otro un poco más largo y en el tercero mordió su labio inferior justamente donde el piercing se encontraba sin llegar a lastimarlo.

El jadeo que JungKook soltó hizo que ella sonriera complacida, estaba disfrutando demasiado ese momento. Su boca depositó cortos besos a su cuello escuchándola suspirar, JooHee inclinó su cabeza de lado, encontró sexy como jalaba cuidadosamente de la manga de su suéter exponiendo su hombro dejando besos húmedos allí.

—Eres hermosa, JooHee—miró sus ojos azules—Y mereces algo mejor, tanto tú como esas niñas.

—Omma—la voz de HeeRan hizo que ambos se separaran en el acto. Molesta por esa cercanía sus ojos se llenaron de lágrimas, su temor por ser abandonada por su madre se hizo más fuerte.

—HeeRan...—apenas dio el primer paso la niña fue corriendo a la habitación cerrando con fuerza.

Para HeeRan, JungKook es un intruso que quiere robarse a su mamá y ella tiene miedo de que JooHee las deje por él.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro