Sesenta y uno
Sana tomaría más fotos de aquellos documentos que se guardaban en la caja fuerte, los que ellas no capturó con la cámara de su teléfono, JooHee se reuniría con Karina la cual era una opción de ser testigo para el juicio, al salir del edificio, ambas madres se acercaron al auto de Sana. La bebé fue colocada de nuevo en su silla mirando a su madre.
—Me había olvidado de lo pequeños que pueden ser—JooHee acarició una de sus pequeñas manos.
—A veces me da miedo cargarla—comentó—Es tan...frágil, pero al mismo tiempo quiero apretarla y llenarla de besos.
—Me pasa—sonrió divertida.
—¿Te comunicaste con JungKook?
—No, me dejó un mensaje diciendo que su padre lo necesitaba con urgencia—lo cual le pareció raro.
—¿Está bien?
—Dijo que luego me explicaría. Tomaré un taxi que me lleve con Karina...
—Déjame llevarte. ¿Qué te parece si pasamos a comer algo primero?, hemos pasado horas en esa oficina y tengo algo de hambre—ofreció—Anda, yo invito.
—Gracias, está bien, acepto.
El restaurante estaba un poco lleno manteniendo cierto ruido en el local, Sana había pedido una sopa de algas mientras que JooHee pidió su plato favorito, jajangmyeon. La bebé se encontraba en brazos de su madre muy tranquila y callada, era totalmente diferente a HeeJin quien estuviera inquieta queriendo comer lo que JooHee estuviera comiendo.
—Es una bebé muy tranquila, ¿Llora poco?—preguntó a Sana antes de llevar comida a su boca con sus palillos.
—En realidad, sí—miró a Naomi. Tenía poco cabello en su cabecita, Al ser tan pequeña aún no se notaba mucho parecido de sus padres—Cuando duerme debo supervisar que esté respirando, pensaba que los bebés eran escandalosos por naturaleza.
—HeeJin es una pequeña muy alegre desde que nació. Cuando la tuve en brazos por primera vez no lloró, sólo me sonrió como si supiera quien era—eso le causó ternura a Sana.
—¿HeeRan fue así?
—No, HeeRan siempre ha sido muy inteligente, cuando era más pequeña y le decía algo parecía comprenderme—masticó un poco bebiendo del jugo que habían pedido—Todos los niños tienen personalidades diferentes. ¿Siempre quisiste ser madre?
Sana tomó un bocado de arroz y una cucharada de la sopa. Masticó primero antes de responder.
—Comencé a desearlo luego de casarme. No quería tener hijos fuera de un matrimonio, mis padres...solían decirme que no era lo correcto.
—Le dijiste a JaeHyun que tus padres murieron por una sobredosis de una droga...
—Ellos solían beber mucho, sabía que en ocasiones se drogaban, era yo quien los atendía y luego por la mañana cuando no recordaban nada fingía no saber tampoco—explicó—En los documentos que había aparecieron sus nombres, Sehun les hizo un gran pago. La fecha era exactamente el día que supuestamente nos conocimos por casualidad.
A JooHee le pareció notar cierta amargura en su voz.
—Así que él...
—Me compró a mis padres—asintió—Estoy segura que él los asesinó. Aunque al mismo tiempo siento que fue su primo.
—¿Puedes hablarme un poco de esa persona?, mi amiga lo conoció en la secundaria, no lo he visto a pesar de conocer a Sehun desde hace años, ¿Quién es Suho?
Sana acomodó mejor en su brazo a Naomi, bebió algo de jugo resumiendo lo más que podía.
—Suho es el primo de Sehun, como dije. Nunca me dio buena espina, el otro día casi me descubre revisando las cosas de Sehun e insinuó que debería divertirme con él mientras su primo no estaba en casa...
—Así que es justo como su primo.
—No debería preguntarte esto, pero...¿Cómo...llegaste a quedar embarazada?, me refiero a...—incluso el preguntarlo le hizo sentir incómoda, la curiosidad la motivaba.
—No pasó porque lo quise—respondió entendiendo a donde quería llegar—Fui...dama de compañía personal de Sehun por esos nueve meses—sintió vergüenza de contárselo a su esposa—Él me llamaba, yo me presentaba en su casa...
—¿Fuiste a nuestra casa?
—Lo siento mucho.
—El año pasado él mismo me pagó un viaje a Italia, quería visitar algunos lugares de allí. Dijo que no podría acompañarme por el club, tenía mucho trabajo—JooHee pudo entender mejor porque nunca la vio. Ni siquiera habían fotos en esa casa y cuando asistía lo menos que veía era a su alrededor—Es un...
—¿Conoces la historia de sus padres?
—Dijo que el club era de su padre.
—Cierto, ¿Qué te dijo de su madre?
—Ella trabajó en la casa para él...
—Trabajó para él...en el club—Sana no podía creer que todo en su vida era una jodida mentira, si no hubiera estado presente cuando tuvo a Naomi creería que la bebé tampoco era suya—Ella era una dama de compañía, de allí nació Sehun.
—Cada cosa que escucho no deja de sorprenderme.
—Puedo preguntar, ¿Cómo es él como padre y esposo?—sintió algo de curiosidad al respecto.
—Como padre creo que es bueno, suele colocarle atención a la bebé cuando está en casa—miró a Naomi. La siguiente respuesta fue un poco más difícil—Como esposo...en ocasiones debo esforzarme por saber lo que quiere—JooHee escuchó con atención—A veces está de mal humor, otras veces es bueno conmigo, siempre debo dejar que de el primer paso para saber en qué estado de ánimo se encuentra. Es primera vez que le digo esto a alguien.
—¿Sabes por qué se niega a dejarme tranquila?, porque para él soy mercancía, soy un objeto que ha poseído mucho tiempo—hizo una pausa—JungKook apareció en mi vida demostrándome que no le pertenezco a nadie, eso es algo fatal para Sehun, no acepta que ya no puede controlarme.
—Lo siento mucho, JooHee. Lamento todo lo que mi esposo te ha hecho, lamento todo lo que estás pasando, al igual que tú quiero lo mejor para mi hija y eso no es quedarme al lado de Sehun—lo siguiente le sorprendió—Luego del juicio pediré el divorcio.
—¿Estás segura?
—Desde que empecé a investigar todo esto me di cuenta que también he sido un objeto para él, he sido la esposa sumisa que nunca se entrometería en los asuntos de su esposo—indicó—Ahora es casi imposible para mí quedarme de brazos cruzados.
—¿Te creerá cuando le digas que dejaste a Naomi con una amiga?
—Usaré la excusa de necesitar un descanso.
—JungKook dice que no debemos mostrarle miedo, es lo que más disfruta.
—No le tengo miedo hasta que pienso en mi hija, mi miedo es que la lastime.
—Es exactamente lo que siento con las niñas.
JungKook entró al departamento cerrando la puerta detrás de sí con el pie ya que tenía las manos ocupadas con algunos ingredientes que había comprado. El día se había ido volando, desde la mañana todos estaban ocupados con algunas cosas, miró la hora en el reloj de su teléfono siendo las siete de la noche, envió un mensaje a JooHee queriendo saber si seguía en casa de Karina ya que el último mensaje había sido por la tarde cuando ella misma le dijo que pasaría a verla en su casa en compañía de Sana, no tardó en recibir respuesta donde la pelinegra decía que en breves minutos volvería. Una llamada entrante de TaeHyung le hizo responder casi de inmediato.
—¿Sí?
—Estoy subiendo con las niñas.
Se acercó a la puerta abriéndola, en el corto pasillo contó hasta cinco cuando divisó a Tae venir con HeeJin en brazos, no esperó que HeeRan saliera corriendo a él con una sonrisa en el rostro mientras su mochila saltó un poco en su espalda.
—¡Ahjussi!
JungKook sonrió recibiéndola con brazos abiertos, la cargó sintiendo como sus pequeños brazos lo apretaban.
—¿Me extrañaste mucho con pocos días de haberme ido?
—Sí—admitió—Tae oppa dijo que se sentía mejor, ¿Es verdad?
—Me siento mejor con ustedes dos aquí—la dejó en el suelo. TaeHyung le entregó a la bebé quien se removía inquieta en sus brazos queriendo que el pelinegro la cargara y le colocara atención.
—Appa—HeeJin sonrió contenta cuando besó su mejilla. Los cuatro entraron al departamento dejando los bolsos en la entrada, HeeRan al no ver a la persona que buscaba sintió curiosidad.
—Ahjussi, ¿Dónde está omma?
—Tu madre vendrá en un rato, ella cree que siguen en el pueblo.
—¿Por qué?
—Porque JungKook quiere que se lleve la sorpresa de verlas aquí—explicó TaeHyung.
—Compré algunas cosas en el mercado, prepararemos la cena y la sorprenderemos cuando vuelva—la sonrisa se dibujó en el rostro de nuevo de la niña quien parecía contenta con la idea.
—¿Todo bien en el camino?—preguntó el chico a su amigo.
—Todo bien. Quería pasar por el hospital, pero la hora de las visitas ya habrá acabado—acomodó su cabello rubio. HeeJin al estar en el suelo se colocó de pie entre algunos tambaleos, siguió a su hermana a la habitación que compartían dejando ambos chicos solos.
—JooHee se encargará de la hija de Sana por unos días—susurró.
—Que bien—al asimilar las palabras se corrigió—Espera, ¿Qué?
—Sana tiene un mal presentimiento, no quiere que su esposo lastime o haga algo contra la bebé.
—¿Crees que lastimaría a su propia hija?
—Con todo lo que ha hecho, no me sorprendería.
—¿Qué pasó con el abogado hoy?
—Sana tiene mucha evidencia, no sé en qué quedaron, me enteraré cuando JooHee regrese, sé que ella hablaría con Karina para pedirle que fuera testigo en el caso.
—Tu ex.
—No fuimos nada.
—Pero tuvieron algo.
—Es lo que menos importa ahora, JooHee volverá y quiero tener la cena lista para ella. ¿Vas a quedarte?
—Iré a mi departamento para asearme un poco, dejaré mis cosas y volveré. ¿Estarás bien con las niñas?—ante su pregunta se respondió él mismo—Sí, estarás bien.
JungKook lo miró irse quedando con ambas niñas. Recogió el bolso con cosas de ambas pequeñas dirigiéndose a la habitación de ellas, HeeJin intentaba subirse a la cama de su hermana luchando con sus piernas cortas, la ayudó a lograrlo y al agacharse alguien saltó a su espalda.
—¿En qué necesita ayuda, ahjussi?
—Comenzaremos por lavar algunos ingredientes—se levantó sosteniendo a la niña llevándola detrás—¿Tienes hambre?
—No—un gruñido de su estómago le hizo sonreír avergonzada—Tal vez un poco.
—HeeJin, ¿Tienes hambre?—preguntó a la pequeña quien sonrió viéndolos—Manos a la obra entonces.
HeeRan lo aceptó :3
PD. ¡La historia llegó a las 100k de lecturas! :D ¡Gracias!
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