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02: De mal gusto

Pese a que era algo que hacía usualmente, levantarse temprano no era una de las cosas favoritas de JongIn, por el contrario, lo hacía sentirse mal humorado y fruncir el ceño más de la cuenta. Así que una vez en el aeropuerto, dándose cuenta de que ni siquiera contaba con el número de KyungSoo y JongDae, se sintió fatal de no poder estarles marcando cada cinco minutos para que se dieran prisa, porque ese día había decidido llegar incluso antes de la hora.

Se había sentado en la amplia sala de espera que pese a ser demasiado temprano, era transitada por las personas que a diario tenían que salir del país o volar a otros lugares con asuntos personales o de trabajo, como lo era su caso. Había pensado que se iba a aburrir de lo lindo escuchando el golpeteo de los tacones en la loseta de las mujeres al caminar, sin embargo, se sorprendió cuando unos cinco minutos después, a lo lejos pudo notar una silueta que se le hizo bastante conocida.

No era de buena estatura, pero JongIn debía reconocer que los pantalones le lucían bastante bien, pese a que su expresión seria matara cualquier intento de que alguien se le acercara a coquetear. JongIn suspiró aliviado cuando KyungSoo lo vio y se encaminó hacia donde estaba, con una mochila únicamente colgando en sus hombros.

ㅡ ¿Eso es todo lo que llevarás? ㅡ JongIn arqueó una ceja, preguntando en cuanto el otro terminó de acercarse.

ㅡ Buen día para ti también, Kim. ㅡ respondió KyungSoo, indeciso sobre si debía sentarse al lado del alto a esperar por JongDae o debería ir por un café para terminar de despejarse.

ㅡ Buen día...

JongIn resopló mientras desviaba la mirada porque bueno, era cierto que quizá no era de su incumbencia lo que el otro llevara de equipaje, pero no podía creer que llevara un traje en una mochila, le parecía inaudito, por eso era que había preguntado, no porque en verdad le importara.

KyungSoo lo observó y se acomodó las gafas sobre el puente de la nariz por mero acto reflejo, más que porque lo necesitara. Decidió entonces que quizá debía poner un doble esfuerzo si quería que aquella misión saliera bien y si el moreno no pondría de su parte, así que intuyendo que había sonado un tanto grosero, se aclaró la garganta para responder la pregunta que el otro había hecho.

ㅡ JongDae se encarga siempre de registrar mi equipaje, es algo que hemos hecho desde que recuerdo.

JongIn arqueó una ceja y asintió, con un poco más de curiosidad que antes, sobre todo por el hecho de que el hombre le había respondido pese a toda la tensión que aparentemente se creaba a su alrededor cada que hablaban.

ㅡ ¿Es como tu sirviente? ㅡ JongIn preguntó divertido, a manera de broma, pero KyungSoo rodó los ojos porque obviamente no sonaba como una.

ㅡ Es un asunto de equipo, yo me encargo de los boletos y el papeleo, él se encarga de otras cosas. Somos un equipo, Kim.

ㅡ Claro, tú vienes con parte de tu equipo, yo vengo solo, se me olvidaba ㅡ el moreno resopló y se recargó sobre el respaldo de la hilera de asientos.

Fue entonces que KyungSoo decidió que había tenido suficiente de ser buena persona y que debía conseguir un poco de café.

ㅡ Tú vienes con nosotros, somos un equipo ahora, te guste o no te guste.

ㅡ Ni siquiera tengo sus números, ¿dónde se supone que está? ¿Qué estamos esperando? ㅡ JongIn respondió, un poco a la defensiva, cuando KyungSoo comenzó a encaminarse hacia la cafetería que estaba cerca.

El moreno se levantó de inmediato y lo siguió sin más, llevando consigo su bolso, puesto que él también ya había registrado su equipaje desde que llegó. Al notarlo, KyungSoo siguió caminando sin inmutarse y sin girarse para responder, simplemente lo hizo, aunque le pareciera poco respetuoso, JongIn tampoco era respetuoso con él de cualquier manera.

ㅡ No los tienes porque en cuanto JunMyeon terminó de hablar, pusiste la hora y te fuiste de la oficina, pareciera que no te importaba ㅡ KyungSoo se detuvo finalmente frente a la barra de la pequeña cafetería para hacer su pedido y JongIn esperó paciente hasta que hubiese terminado ㅡ JongDae está despidiéndose de su novio, no tardará y podremos abordar, vendrá a tiempo. ¿Gustas café?

JongIn negó con los labios fruncidos y también la nariz, mientras KyungSoo se hundía de hombros y pagaba la cuenta para después esperar por su pedido. Al verlo ahí parado, serio y con los brazos cruzados, a JongIn le pareció como cualquier otro chico, con su estatura y porte parecía cualquier persona, no un agente secreto.

KyungSoo se percató de que la mirada de JongIn no lo abandonó ni un segundo y le incomodó pensar que pudiera estar criticándolo a sus anchas, con el descaro de saber que incluso él sabía que lo estaba viendo.

El bajito aceptó el pedido de café y lo llevó a su boca, para después soplar un poco antes de darle un sorbo pequeño, estirando los labios para ello.

JongIn se giró hacia otro lado, para buscar con la vista a JongDae, a quien encontró a un par de metros, demasiado empalagoso para su gusto. El hombre estaba abrazándose a otro chico más bajito que él con todas sus fuerzas y sus labios se mantenían pegados a los del otro hombre, dando un espectáculo a los que transitaban y tenían tiempo de ver cómo se comían la boca segundo a segundo que pasaba.

Al moreno le extrañó, y se aclaró la garganta, sintiéndose incluso un poco mal por ser partícipe de aquel momento que parecía tan personal.

ㅡ ¿Siempre... es así?

ㅡ ¿Dae? Sí, se despiden como si no fuera a regresar. ㅡ KyungSoo asintió, sin siquiera voltear a ver hacia el lugar donde el otro se encontraba, porque ya sabía lo que se encontraría, lo había presenciado muchas veces atrás.

ㅡ Pero vamos a volver. ㅡ JongIn se pasó la diestra por los cabellos y los despeinó un poco a su paso, mientras que KyungSoo simplemente asintió y le dio otro sorbo a su café.

ㅡ Lo sé... pero es algo suyo, de cualquier manera.

ㅡ Por supuesto. ㅡ JongIn coincidió en ello y se mordió el labio inferior, echándose a andar de regreso a la sala de espera para esperar a abordar su vuelo.

Aquel era sin lugar a dudas el comienzo de un viaje extraño, el más raro de todos los que había emprendido, a una misión extravagante donde no sabía siquiera qué pasaría a continuación, pero se sentía extraño, sentía que de alguna manera, las cosas saldrían bien si él y KyungSoo lograban congeniar aunque fuese un poco.

✧ ✧

ㅡ Tengo una buena noticia y una mala, ¿cuál quieren primero? ㅡ JongDae soltó con una sonrisa nerviosa.

Habían llegado a Jeju hacía un par de horas, se habían dedicado a rentar un automóvil porque pese a que se suponía todo estaba preparado, a BaekHyun algunas veces se le pasaban algunas cosas como esa misma. Así que después de ello emprendieron al lujoso hotel donde se estarían hospedando hasta el fin de semana si es que todo salía acorde a lo planeado, aunque en realidad aún no habían decidido el plan que debían ejecutar.

KyungSoo frunció ligeramente el ceño, enfocado en JongDae y decidió su respuesta de inmediato. ㅡ La mala.

ㅡ La buena ㅡ JongIn musitó al mismo tiempo, después de haberse entretenido observando un poco el panorama, girándose finalmente hacia sus compañeros.

Ambos agentes se observaron de reojo y JongDae suspiró, porque no quería presenciar una escena que los delatara como los niños chiquitos que eran.

ㅡ Bien, igual diré las dos, así que no vayan a pelear. La buena noticia es que BaekHyun reservó dos habitaciones, considerando que el lugar está prácticamente lleno el fin de semana ㅡ el muchacho les sonrió con positividad ㅡ la mala es que tendrían que compartir una habitación.

JongIn inmediatamente rechistó como protesta ante ello. ㅡ ¿Cuál dijiste que era la buena noticia? Porque BaekHyun debió reservar tres.

ㅡ JongDae acaba de decir que el lugar está abarrotado, Kim.

ㅡ De ninguna manera voy a compartir habitación contigo, ni en tus sueños, Do. ㅡ JongIn arqueó una ceja y KyungSoo simplemente cerró los ojos, respirando profundamente, porque no quería continuar con la escena ridícula que el otro había comenzado.

ㅡ ¿En mis sueños? No es como si se tratara de un asunto personal, puedes dormir en el piso ㅡ KyungSoo se hundió de hombros ㅡ o en la bañera, si tanto te molesta mi presencia.

El bajito comenzó a caminar, arrastrando su valija mientras era seguido por JongDae, así que él se apresuró a seguirlos al elevador por su cuenta, porque JongDae se había negado a tomar la ayuda del botones que le ofrecieron en la recepción. Por muy extraño que aquello le pareciera a la recepcionista, él conocía a su gente y sabía que lo mejor era evitar que el personal viera como esos dos comenzaban a pelear como perros y gatos.

ㅡ No voy a dormir contigo en la misma habitación, yo puedo quedarme en la habitación sencilla. ㅡ JongIn volvió a protestar.

ㅡ Pero está a mi nombre... ㅡ JongDae se mordió el labio esa vez y después asintió como si no pasara nada ㅡ pero bueno, a mí no me molesta dormir con KyungSoo, así que si eso hará que hagas tu trabajo lo mejor posible, está bien para mí. Pero escúchame bien Kim, vinimos acá a trabajar en equipo y necesitamos hablar sobre cómo vamos a lograrlo.

Cuando la puerta del elevador se abrió finalmente en el pasillo de sus habitaciones, JongIn observó a KyungSoo salir, seguido de JongDae, viendo como ambos se acoplaban bastante bien. Era verdad, lo que el hombre había dicho era verdad. Tenía que aprender a lidiar con el hecho de que era compañero de equipo del agente perfecto ese, y acoplarse al plan que debían comenzar ese mismo día si querían tener una misión exitosa.

Pero podía hacerlo desde su habitación propia, no compartida, como debía de ser.

ㅡ Pido el lado izquierdo de la cama ㅡ JongDae exclamó cuando llegaron finalmente a la puerta y KyungSoo asintió sin más. Entonces se giró hacia el moreno y le entregó la tarjeta de la otra habitación. ― ¿Vamos a bajar a cenar, no?

ㅡ Claro, tenemos qué hablar del asunto.

ㅡ No creo que sea conveniente hablar de ello en el restaurante, podríamos hacerlo acá, después. ㅡ KyungSoo ni siquiera lo observó, simplemente se dedicó a ver la puerta de la habitación y después la abrió, dando por terminada la conversación entre ambos.

ㅡ Desempaca y en una hora nos vemos en el vestíbulo.

ㅡ Hey ㅡ JongIn lo interrumpió cuando el muchacho ya estaba metiéndose al cuarto ㅡ pásame tu número, por cualquier cosa.

Y JongDae sonrió, pese a que las cosas se veían mal, creía que al final si hablaban como la gente, podrían llegar a limar asperezas, como aparentemente estaba sucediendo con ese pequeño detalle.

✧ ✧ ✧

Cuando JongIn llegó a la mesa del restaurante, sus dos compañeros ya se encontraban ahí, el moreno observó a KyungSoo un poco relajado, con una camisa de vestir con dos botones abiertos y sus típicos lentes que lo hacen ver más serio de lo que ya era. El agente llegó y se sentó frente a él, al lado de JongDae, saludándolos con un ligero cabeceo y disculpándose por la tardanza, puesto que se había quedado dormido, ya que no había dormido mucho en la noche debido a que se puso a preparar su equipaje.

KyungSoo optó por no decir nada al respecto y su mirada siguió sigilosa hacia una de las mesas al otro lado del restaurante, junto al bar, donde se encontraba el hombre que buscaban junto a la mujer de Kim NamJoon, o a su futura ex mujer, la verdad eso no tenía importancia en ese momento.

ㅡ Es bonita ㅡ JongIn comentó, observando la silueta de la mujer en cuestión, haciendo que KyungSoo arqueara una ceja de inmediato ㅡ muy bonita.

ㅡ Si te gustan las mujeres así, está bien ㅡ KyungSoo se hundió de hombros sin más, pensando en que quizá había elegido mal las palabras y había sonado muy irrespetuoso.

ㅡ Me gustan las mujeres de todo tipo, Do. ㅡ JongIn esbozó una ligera sonrisa, una sonrisa con sorna ㅡ ¿a ti no?

JongDae se aclaró la garganta. ㅡ El mesero ya viene con nuestra comida, te pedimos lo mismo que nosotros, espero no te moleste.

KyungSoo no lo volteó a ver, mucho menos intentó responder la pregunta. Había escuchado por los rumores, que JongIn era un jugador, y aunque tenía ese aspecto despreocupado y demasiado presuntuoso, KyungSoo nunca había pensado que fuera real, había creído que era una fachada, pero en ese momento se preguntaba si se había equivocado al respecto. También había escuchado que al muchacho le gustaban los hombres de la misma manera que las mujeres, lo cual él consideraba posible y no era asunto que le importara, pero su manera de responder lo dejaba un poco intrigado, solamente eso.

ㅡ Voy al tocador, ya regreso.

JongDae asintió cuando su compañero se levantó y JongIn no se inmutó, recibió su comida y pidió un trago para comenzar la comida de buena manera.

✧ ✧ ✧ ✧

Lo que menos esperaba KyungSoo al salir del baño, eran que le ocurrieran esas dos cosas. La primera ocurrió justo cuando salía de los sanitarios. No se había fijado al dar vuelta en la esquina de la habitación de regreso hacia el restaurante y sin querer empujó con el hombro a una mujer. Por supuesto que se disculpó de manera inmediata, haciendo una reverencia de noventa grados porque no había querido ser irrespetuoso, mucho menos meterse en algún problema.

Sin embargo, su sorpresa fue tal cuando se irguió de nueva cuenta y observó frente a sus ojos a la mujer que venían a vigilar, a Im NaYeon. La mujer le sonrió gentil y KyungSoo bajó la mirada de inmediato, bastante apenado.

ㅡ Lo lamento mucho, no fue mi intención.

ㅡ  No pasa nada ㅡ ella respondió, posando su mano sobre su brazo, como para indicarle que en verdad no sucedía nada. ㅡ Tampoco me fijé.

Fue entonces que KyungSoo notó que sus ojos estaban ligeramente brillosos y sus mejillas se mostraban sonrosadas sobre su piel blanca. Al parecer estaba un poco pasada de copas, o quizá tenía algo más.

ㅡ ¿Está todo bien? ㅡ se atrevió a preguntar, por mera cortesía. ㅡ ¿Necesita algo?

NaYeon negó al instante y después bajó la mirada, soltando un suspiro. ㅡ Ya sabes, problemitas amorosos.

ㅡ Es una lástima ㅡ KyungSoo respondió sin más y ella levantó el rostro de inmediato, sorprendida por aquella respuesta.

Las pupilas le brillaron y le dedicó una mirada gentil nuevamente. ㅡ Soy NaYeon, Im NaYeon.

ㅡ Encantado, señorita. ㅡ KyungSoo le tomó la mano que la otra había estirado para el saludo y le reverenció de nueva cuenta ㅡ soy KyungSoo.

ㅡ KyungSoo es un buen nombre, me gusta. ㅡ Ella volvió a sonreírle ㅡ ¿te hospedas aquí?

ㅡ Sí, vine con unos amigos, me quedo hasta el fin de semana.

ㅡ Oh, eso es genial... KyungSoo ㅡ la mujer bajó la mirada de manera delicada y sonrió complacida ㅡ un... amigo estará dando una fiesta este fin de semana, podrías venir con tus amigos, es algo importante y de gala, pero no importa si no vienes de etiqueta.

A KyungSoo en verdad le sorprendió escuchar aquella invitación, porque no creía que fuera posible que la señora fuese invitando a todo el mundo a una fiesta tan importante, pero lo había hecho, aunque él no fuese obviamente todo el mundo.

ㅡ Me encantaría, si no es molestia.

ㅡ La molestia sería no volver a coincidir contigo, cariño ㅡ Ella le sonrió y KyungSoo tragó saliva, sintiendo la mano sobre su brazo de nueva cuenta, pensando que sí, esa vez era un coqueteo abierto.

Pero él no solía hacer las cosas así, ese no era su estilo, si ella le coqueteaba quizá podría seguirle el juego, ver hasta dónde podía llegar e incluso quizá sacar un poco de información. Pero así trabajaba JongIn, no él. Así que simplemente asintió de nueva cuenta.

ㅡ Por supuesto, señorita.

ㅡ Ah, eres un caballero... eso te hace mil veces mejor que todos los hombres en este restaurante ㅡ NaYeon suspiró con aire gracioso ㅡ cualquiera hubiera aprovechado para llevarme a la cama, pero no tomaste la oportunidad.

KyungSoo le sonrió entonces y negó en silencio. ㅡ Es usted muy bella y valiosa como para hacer algo así, señorita.

ㅡ Definitivamente espero volver a encontrarme contigo, KyungSoo.

Y KyungSoo asintió, quedándose inmóvil cuando ella se acercó para dejarle un beso en la mejilla y después se dio la vuelta para seguir su camino. El corazón le latía bastante acelerado, puesto que no era algo común que le sucediera, pero creía que había actuado de manera correcta. Creía que lo había hecho bien.

No podía entender muy bien la ideología de algunas personas, el conocer a alguien y coquetear con él para acostarse una hora después, no era algo que hiciera, por lo que no podía entender muy bien a las personas que lo hacían, aunque tampoco las criticaba, cada quien podía llevar su sexualidad como quisiera, eso bien lo sabía él.

Sin embargo, no se esperó sentirse así de incómodo cuando se acercó a su mesa, observando la espalda amplia de JongIn y el perfil de JongDae, que hablaban con aparente seriedad, pese a que éste último siempre se empeñaba en querer hacer las cosas menos serias, para facilitar el ambiente.

Pero lo que escuchó, fue lo que realmente lo descolocó.

ㅡ Deberías relajarte un poco, KyungSoo no es malo, de hecho es un buen compañero.― JongDae habló.

ㅡ Parece que trae un palo en el culo todo el tiempo.

ㅡ Es serio, es comprometido con su trabajo, es lo que pasa... además de que es bastante atractivo, ¿no lo crees?

KyungSoo se detuvo, obviamente, sintiéndose helado cuando el moreno negó sin más y entonces JongDae le dio un codazo.

ㅡ No puedes negarme que no lo es, KyungSoo puede ser caliente si se lo propone, te dejaría con las ganas si él quisiera.

ㅡ ¡Ja! No tengo interés en asuntos como ese, no me acostaría con él ni aunque me pagaran. ㅡ JongIn se hundió de hombros.

Y KyungSoo decidió que era suficiente, así que terminó de acercarse, haciendo que JongDae lo viera y que terminara la conversación en ese mismo instante, aclarándose la garganta de inmediato.

ㅡ Tardaste, la comida se te está enfriando ㅡ JongDae comentó.

ㅡ Si bueno, casi consigo una cita ㅡ KyungSoo sonrió y tomó la copa de vino con la diestra, llevándola hacia sus labios mientras observaba a JongIn de frente, que extrañado por lo dicho, arqueó una ceja al instante.

ㅡ ¿En serio? ㅡ preguntó el moreno con curiosidad ㅡ ¿Y por qué volviste? Podías haberte tomado la tarde para que se te quitara el estrés.

KyungSoo empuñó la mano bajo la mesa, peso su rostro se mostró impasible hacia el comentario venenoso de su compañero. ㅡ Pasa que estoy de trabajo, no vengo a vacacionar.

ㅡ Claro... ㅡ JongIn soltó como si la respuesta de KyungSoo fuese una excusa obvia.

ㅡ ¿Y quién era? ¿Estaba guapo?

JongIn observó a JongDae ante la pregunta hecha y KyungSoo negó de inmediato.

ㅡ NaYeon, Im NaYeon estuvo coqueteando conmigo fuera del bar.

ㅡ Vaya, creí que no te gustaba jugar así.

ㅡ Y por eso estoy aquí, Kim. Porque ese no es mi estilo. ㅡ KyungSoo respondió entre dientes, comenzando a comer finalmente.

JongIn lo observó y después observó a JongDae con curiosidad, por supuesto que podía contrarrestar aquella respuesta, pero al final había decidido que no quería pelear en medio del restaurante. De cualquier manera debían ponerse de acuerdo en cómo trabajar.

ㅡ Me invitó a la fiesta, así que de cualquier manera iremos.

ㅡ Doblemente invitados, eres genial ㅡ JongDae le dio unas palmaditas en el hombro a KyungSoo y éste sonrió relajado.

JongIn lo observó sonreír por primera vez de aquella manera, simplemente ante una broma o un comentario de su compañero, sin burla detrás, haciéndolo sentir extraño. En verdad se notaba relajado y sus labios formaron una figura extraña, JongIn creyó en ese momento que el bajito se veía mejor sonriendo.

Que su sonrisa en verdad valía la pena ver.

✧ ✧ ✧ ✧ ✧

Cuando regresaron a la habitación para darse un baño antes de decidir si bajar a cenar o permanecer en el cuarto para hablar y después dormir, KyungSoo se dejó caer sobre la cama, sintiéndose extraño.

Por algún motivo, las palabras de JongIn se sentían demasiado cercanas en su memoria, el tono despectivo que había usado le fastidiaba y también podía imaginarse su rostro arrugando su fea nariz mientras lo decía. KyungSoo le era repulsivo a JongIn y eso le había quedado bastante claro.

Se sentía extraño porque él no buscaba agradarle, el que algún hombre guapo lo hubiese rechazado antes no le había importado mucho. Bueno, en parte golpeaba su ego y lo hacía sentir un poco mal, pero nunca se había considerado realmente así, del todo feo, indeseable para alguien, considerando los rumores, JongIn podía gustar de hombres, pero no de él, lo cual hería su orgullo un poco.

Así que se preguntó si tenía algo de malo, o simplemente no era tan atractivo. O quizá era el motivo de que se repelían a morir lo que hacía que el otro quisiera alejarse y lo viera de aquella manera tan indiferente.

Nuevamente, el bajito se repitió que no debía importarle, puesto que él no le gustaba tampoco. Era lo suficientemente maduro como para aceptar que sí, JongIn estaba guapísimo, era muy atractivo, pero su altanería y su actitud lo jodían muchísimo y eso lo hacía restar demasiados puntos en su lista.

Aún con ello, JongDae lo escuchó suspirar y se acostó a su lado, dejándose caer del lado izquierdo de la cama, mientras lo volteaba a ver para finalmente hacerse cargo.

ㅡ ¿Sucede algo?

ㅡ ¿Crees que soy feo? ㅡ KyungSoo preguntó sin más.

JongDae tragó saliva, extrañado y también un poco temeroso por la pregunta. ㅡ Eres guapo, KyungSoo. Si no tuviera a Min, te conquistaría.

KyungSoo esbozó una sonrisa ligera por el reconforte que su amigo intentaba hacer en él sin lugar a dudas, por eso amaba a JongDae, porque siempre lo hacía sentir bien, así que KyungSoo siempre procuraba hacer lo mismo con él.

ㅡ Te acostarías conmigo si te pagaran, ¿verdad?

JongDae cerró los ojos en ese momento, asintiendo sin más a sabiendas de lo que se trataba el asunto, porque en verdad había querido que no se tratara de ello, que realmente su amigo y compañero no hubiese escuchado ese comentario tan hiriente.

ㅡ ¿Escuchaste, eh? ㅡ JongDae preguntó sólo por hacerlo, porque ya sabía la respuesta. ㅡ Es un pendejo, no le hagas caso.

KyungSoo negó en ese instante, sonriendo por la manera en que su amigo llamó al otro. ㅡ No le haré caso, pero...

ㅡ Tú podrías seducir a quien quisieras si te lo propusieras, no necesitas demostrarlo. ㅡ JongDae replicó al instante.

Y KyungSoo asintió, porque tenía razón y eso lo hacía lo más interesante del asunto. Si se lo propusiera, ¿podría seducir a JongIn? Él había dicho que no.

ㅡ Ahora, vamos a abrazarnos hasta que se haga la hora de Min.

ㅡ Estás demasiado mal acostumbrado, le diré a MinSeok que te compre una almohada de su tamaño. ㅡ KyungSoo sonrió y se quejó, pero ni se movió cuando las manos de JongDae lo envolvieron por la cintura y lo arrastraron hacia él, para abrazarlo con fuerza mientras lo acomodaba de lado y le pasaba uno de los pies por la cadera. ㅡ Yah, vas a subirte todo encima.

ㅡ Ese es el punto, necesito mimarte justo ahora ㅡ JongDae lo apretujó contra él y KyungSoo suspiró, dejándose enroscar por el cuerpo de su amigo mientras que se acomodaba para que él durmiera a sus anchas, en esa extraña pose, porque bueno, así estaba acostumbrado el hombre.

Mientras que él, trataría de descansar un poco para dejar de pensar en lo que había ocurrido. No había ido a vacacionar, necesitaban ponerse al trabajo en cuanto antes les fuera posible... pero antes, una siesta no les caería nada mal.



notas:

Tardé pero espero que les haya gustado ;)
Quiero un amigo como Dae~

besos posholatosos

🌠ary

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