Capítulo 33
Treinta minutos

ChaeMin tenía sus manos atadas a una parte sobresaliente de la pared. Aquella pequeña recepción contaba con luz, estar allí le trajo amargos recuerdos, todo ese desastre estaba ocurriendo por su culpa también, desde un principio no debió apoyar a SunOh con el proyecto Utopía. Taecyeon murió por su culpa, no pudo hacer nada y volvía a ocurrir con JungKook y HyoIn. Se sentía de muchas maneras, escuchó pasos de uno de los pasillos, miró hacia allí identificando a SunOh poco después, en segundos supo que no era SunOh.

—JungKook.

El chico se acercó con una tijera cortando lo que ataba sus manos. ChaeMin notó algunas venas negras en sus manos.

—Hoseok y TaeHyung están en la sala de control, necesito que llegue allí, me ocuparé de SunOh.

—¿Dónde está HyoIn?

—No lo sé—respondió evitando su mirada.

—SunOh se ha inyectado un suero que hizo con el ADN de ambos—advirtió. Tomó las manos del chico mirándolas—Él también tiene sus venas así. ¿Qué te hizo?

JungKook la soltó retrocediendo.

—Ve con los chicos.

—Quiero ayudar, no dejaré que lo que pasó con Taecyeon se repita.

—¿Taecyeon?

—SunOh hizo que saltara del segundo piso, con esa maldita inyección puede controlar diferentes poderes—habló rápidamente—NamJoon, YoonGi y SeokJin están en la casa, sé que los está controlando.

—TaeHyung y Hoseok consiguieron un bebé en una de las cápsulas.

—¡¿Qué?!

—Está con ellos ahora, necesito que vaya allí. Me ocuparé de SunOh.

—HyoIn...

—No sé dónde está, la última vez estaba...sangrando por su culpa.

Un fuerte portazo hizo que ChaeMin diera un respingo. JungKook le indicó que fuera por otro pasillo con los chicos, SunOh caminaba furioso y un tanto frustrado. ¿Nada podía salir bien acaso?, al llegar a recepción no le sorprendió ver a JungKook allí esperándolo.

—¿Dónde está? —exigió saber.

JungKook apoyó sus manos del escritorio manteniendo una expresión seria. Estaba cansado y harto de ese hombre.

—Tienes tres opciones, ¿Te refieres a la doctora Choi, al bebé en la cápsula o HyoIn? —indicó—Escoge.

SunOh bufó ladeando su cabeza. JungKook notó sus venas oscuras sobresalir por el cuello de su abrigo, tenía una mirada de locura en su rostro, no le demostraría miedo, estaba harto de eso y quizás estaba harto de ser bueno con los malos.

—No te servirá esconderla.

—Deja de ser estúpido, dime, ¿Dónde la tienes?, fui a su habitación y no estaba allí, sólo quedó rastros de su sangre. ¿Dónde está HyoIn? —se acercó peligrosamente y se detuvo a mitad del camino cuando comprobó que no era actuación—No sabes dónde está—el enojo apareció de inmediato. JungKook lo empujó contra la pared aferrando sus manos a la camisa del doctor—¿Dónde demonios metiste a HyoIn?, ¿Qué le hiciste?

—No te hagas el héroe cuando no lo eres.

—No te creas el supervillano cuando no lo eres—contraatacó—Sin mí, sin HyoIn o sin los demás, no eres nada—una sonrisa burlona se dibujó en sus labios—Me parece que el único inútil aquí, eres tú, doctor Jeon.

SunOh llevó sus manos hacia las del chico entrando en su mente, en efecto, no mentía. No sabía en realidad donde estaba la chica, golpeó a JungKook con una de sus piernas intentando derribarlo o hacerle perder el equilibrio, el pelinegro de sus manos envió una descarga eléctrica que SunOh esquivó. Éste golpeó su rostro salpicando sus nudillos con su sangre, lo empujó contra uno de los escritorios golpeando su cabeza contra la mesa.

JungKook cayó al suelo intentando incorporarse de inmediato. Su labio estaba roto mientras el lado derecho de su rostro se encontraba rojo por el golpe.

—¿Ves?, incluso sin poderes puedo ganarte—ahora fue él quien lo sostuvo de la camisa con una sonrisa victoriosa. JungKook tomó sus manos intentando enviar descargas eléctricas a él, como SunOh podía controlar su poder aquello sólo fue una caricia que le hizo reír—Sigues siendo un inútil con poderes o sin él.

El chico le escupió la sangre acumulada en su boca salpicando parte de su camisa y su rostro. SunOh estampó su puño en el rostro de JungKook, cuando iba a recibir un golpe en el estómago, el cuerpo del doctor salió disparado hacia la pared.

JungKook pudo escuchar claramente una voz en su oído, una voz femenina muy familiar.

—Treinta minutos.

▪︎▪︎▪︎

Hoseok y TaeHyung llegaron a la casa del doctor Jeon luego de tomar el auto de éste. ChaeMin se encargaría del bebé, pero ellos debían ir por los demás antes de que repitieran lo mismo que Taecyeon. Tae palideció al ver el cuerpo de Taecyeon en el suelo con la cabeza en una posición extraña, su estómago se revolvió mientras sus nervios se dispararon, afuera el cielo oscureció dejando escuchar truenos.

—No puedo, no puedo.

Hoseok volteó a verlo.

—¿Tae?

Se acercó a él, éste se había agachado cubriendo sus orejas mientras temblaba. Estaba teniendo un ataque de ansiedad, estaba siendo mucho para él.

—Oye, tranquilo—intentó calmarlo dando palmaditas a su espalda—Respira, intenta respirar profundo—lo vio intentarlo unas cinco veces. TaeHyung abrió sus ojos mirándolo y Hoseok sonrió un poco—Eso es, también tengo miedo, pero debemos buscar a los demás, así regresaremos con JungKook.

—Taecyeon está muerto...

—No lo mires.

—¡Está allí al frente!, ¿Cómo no voy a...?—se calló cuando Hoseok tomó su rostro entre sus manos. Con ojos bien abiertos lo miró—¿Vas a besarme?

—¿Qué?, ¡No!, iba a golpearte, pero creo que sería muy agresivo. Escucha, tienes que mantenerte firme, la doctora Choi dijo que el doctor Jeon está controlando a los demás. Necesitamos romper ese efecto en ellos.

El sonido de una puerta los colocó alertas, TaeHyung se levantó del suelo siguiendo a Hoseok, el sonido había venido de una de las puertas de arriba, revisaron las habitaciones sin conseguir a los demás. ¿Dónde se habían metido?

—¿Y si se fueron?

—La doctora dijo que estaban aquí—Hoseok frunció el ceño rascando su cabeza.

—¿Revisamos las escaleras extras?

—¿Escaleras extras?

Tae le señaló las escaleras que llevaban a una puerta. Ambos fueron allí saliendo al exterior, estaban en la azotea de la casa, se acercaba una tormenta debido a las emociones de TaeHyung.

—¡NamJoon! —allí estaban los demás. Tanto NamJoon como YoonGi y SeokJin permanecían de pie con la mirada perdida—¿NamJoon?

—¿Jin? —Hoseok movió su mano frente a sus ojos.

YoonGi fue el primero en avanzar, los otros dos lo siguieron.

—¿A dónde van? —susurró Tae. Fue cuestión de minutos para que Hoseok comprendiera, los tres se detuvieron en la orilla de la azotea y dieron un paso al vacío.

TaeHyung y Hoseok corrieron a ellos, Tae atrapó a NamJoon, Hoseok a Jin y con su poder detuvo la caída de YoonGi. Fue entonces que volvieron en sí un tanto aturdidos.

—¡¿Qué carajos es esto?!—YoonGi que flotaba palideció más de lo normal con la altura.