Capítulo 7
Atmoquinesis

JungKook despertó por la mañana escuchando algunos ruidos de la cocina, de nuevo había dormido en el sofá dejándole su cama a HyoIn, frunció el ceño somnoliento al incorporarse en el mueble, dos bolsos grandes se encontraban en el sillón, le recordó a los que usaban las personas al acampar, no eran suyos para nada. Caminó hacia la cocina encontrando a la chica con ropa diferente y preparando algo de comer.

—Buenos días—se enfocó en su ropa haciendo una suposición.

—Buenos días, el desayuno estará listo en un momento.

—Esos bolsos del sillón...

—Ah, sí, los robé.

Los ojos del chico se abrieron a más no poder.

—¿Qué?

—Escuché algunas voces cuando desperté, al parecer había un grupo pasando cerca, no habías despertado, necesitaba ropa y la encontré—señaló los Jeans que tenía más una blusa negra junto a una chaqueta entre negra y blanca que le quedaba un poco grande, los botines tenían algo de tacón, aunque ni con ellos alcanzaba al chico—No se dieron cuenta, tengo experiencia en esto de robar.

—No quiero que lo hagas.

—No es nada, a veces debes sobrevivir.

—Pero no robando, HyoIn.

La chica rodó los ojos molestándolo un poco.

—Tú le robaste a NamJoon y no te dije nada.

—¿De qué estás hablando?

—No soy tonta, NamJoon no te daría tantas cosas, además, vi la fecha de caducidad de algunos productos y aunque unos estaban cerca de dañarse, otros tenían mucho tiempo por delante todavía—se cruzó de brazos—No soy la única ladrona aquí.

No supo que decir ante eso.

—Prométeme que no robarás.

—No puedo.

—Oye, HyoIn...

—A veces es necesario hacerlo, no estoy asesinando a nadie, las personas no salen heridas, necesitaba ropa y la conseguí—se encogió de hombros—¿O acaso ibas a comprarme ropa?

De nuevo guardó silencio, no tenía dinero para hacer eso, una parte estuvo de acuerdo con ella mientras la otra se oponía.

—Iré a asearme.

▪︎▪︎▪︎

NamJoon apareció en compañía de TaeHyung presentándolo a HyoIn y JungKook. Aquello no podía ser una coincidencia, algo estaba pasando que provocaba el despertar de esas habilidades. Kim TaeHyung tenía el poder de atmoquinesis, controlaba el clima a su antojo, sus emociones influenciaban mucho en el clima siendo un desastre como HyoIn al ser tan novato en su descubrimiento.

—¿Cómo te diste cuenta de ello? —JungKook lo miraba con curiosidad. Había pasado tanto tiempo solo y ahora de repente había más personas como él, no mentiría, se sentía un poco más confortado al saber que no estaba solo.

—No lo sé, yo...me he sentido sofocado estos días, tengo deudas que pagar, el trabajo de la tienda no me ayuda del todo y...—tomó una bocanada de aire. En su mirada se notaba cansado, su cabello cobrizo estaba más arreglado dándole un aspecto más decente, a HyoIn le sorprendía la inusual belleza del chico, era muy tierno o eso le parecía—Estuve cerca del abismo, literalmente.

Ella supo lo que significaba.

—No sabía que estuviste sintiéndote así—NamJoon lo miró—¿Por esa razón no fuiste a trabajar?

—Estaba pensando en renunciar, mi mente colapsó también, lo siento, hyung.

El silencio amenazó con volverse incómodo. HyoIn aprovechó de intervenir.

—Deberíamos buscar respuestas, si tenemos estas habilidades debe ser por algo—miró a los tres chicos—Quiero ir a la ciudad y buscar en las bibliotecas o en los cibercafés.

—Puedo ir contigo—se ofreció NamJoon.

—HyoIn cree que somos superhéroes—JungKook sonrió burlonamente escondiendo sus manos en los bolsillos de su pantalón.

—No, creo que tú eres un héroe, eso es diferente—corrigió.

—Debe ser agradable que tu pareja sea poderosa como tú—ante las palabras de Tae ambos voltearon a verlo.

—No somos pareja—JungKook fue el primero en decirlo—Somos amigos por cosas del destino.

—Las relaciones suelen iniciar así.

La pelinegra se sintió un poco cohibida con el tema y NamJoon con la mirada le advirtió a su amigo que no siguiera con ese asunto.

—Te acompañaré a la ciudad.

—Gracias, NamJoon.

—No la pierdas de vista, tiene manos...ágiles—insinuó JungKook.

▪︎▪︎▪︎

Ir a la ciudad con NamJoon fue mejor ya que esta vez pudieron tomar un taxi desde la carretera, HyoIn se sintió extraña en el cibercafé, inconscientemente pensó en robar, pero Nam se encargó de pagar lo que quisiera pedir. Era la primera vez que alguien le decía eso. Ambos estaban sentados junto al otro en diferentes ordenadores.

—Ambos buscaremos por cuenta propia, hechos científicos, cosas sobrenaturales, no lo sé, pero algo relacionado al tema—indicó y el chico asintió entendiendo.

—Bien—HyoIn escribió en la barra del navegador acomodándose en la silla. NamJoon sintió curiosidad, no pudo evitar preguntarle—HyoIn—volteó a verlo—¿Tu familia no estará preguntándose por ti?

—¿JungKook no te lo dijo? —ante su silencio supuso que no—Soy huérfana, crecí en un orfanato.

—Lo siento.

—Está bien, no puedo extrañar a alguien que no conozco—regresó la mirada a la pantalla.

—Él...dijo que reanimó tu corazón.

—Sí.

—¿Por eso dijiste que JungKook era un héroe?

—Ujum.

—¿Cómo vivías antes de eso?

—¿Por qué estás preguntándome? —su tono fue un poco hostil. Tantas preguntas le estaban molestando, había vivido tanto tiempo sin importarle a nadie y de repente había tres chicos tan raros como ella que parecían entenderla—Lo siento, es que...—chasqueó la lengua recostándose de la silla.

Ese brillo triste se notó en sus ojos.

—Cuando te conocí supe que tenías la misma mirada de JungKook—susurró—Tienen una chispa en sus ojos, como si al mismo tiempo estuvieran decepcionados de algo o alguien...

—Quizás de esta vida de mierda—interrumpió con aire pensativo—Cuando TaeHyung dijo que estuvo al borde del abismo...entendí que estuvo cerca de tomar mi decisión, sino hubiera sido por JungKook...no estaría aquí, pero al mismo tiempo...el deseo de no querer respirar sigue en mí—decirlo en voz alta fue más doloroso.

—¿Quieres acabar de nuevo?

Se supone que al ser salvada debía estar agradecida y debía haber aprendido la lección. Pero en cambio, ese vacío en su corazón no se iba. Ni siquiera el hecho de tener un poder la animaba a quedarse. A NamJoon le preocupó verla así.

Tampoco supo que decir.

Todos se cansaban de luchar en algún momento de sus vidas, pero acabar con ella era...algo que nunca entendió.

:')