Capítulo 30 - Final
Jimin siempre había tenido de todo, sabía lo que era darse sus gustos.
Desde algo tan básico como comidas, hasta las ropas más exclusivas y caras de la industria, sus gustos siempre se basaban en lo extravagante y lo demostraba cada vez que podía.
Pero como muchos dicen, el dinero nunca lo ha comprado todo. Jimin ni con todas sus herencias podía sentirse del todo seguro consigo mismo, ser extravagante era algo que concordaba con su personalidad, pero era difícil ignorar las miradas sorprendidas, los tratos suaves y especiales, los reproches por no mantenerse al márgen. Todos querían limitarlo en lo que estaba socialmente aceptado, por algo sus círculos y redes habían sido totalmente enfocadas en publicitar su trabajo.
Pero ahora veía que no, sus gustos y preferencias siempre fueron más especiales, mantener su personalidad era vital para él, y ahora estaba junto a una persona que lo respetaba y admiraba por ello.
Jungkook no se asemejaba ni por asomo a lo que eran sus anteriores parejas, el realmente estaba fascinado con Jimin, lo cuidaba y admiraba como nunca nadie lo había hecho, se tomaba el tiempo de conocerlo y de tratar todos los días de que el rubio se sintiera cómodo a su lado.
Y lo logró, Jungkook estando a su lado en noche buena, mientras comían helado, había logrado que Jimin se integrara con facilidad en su círculo familiar, le había mostrado lo más dulce e íntimo que tenía, su familia había sido algo tan alejado de sí que el pelinegro estaba realmente feliz de tener a Jimin a su lado en esa festividad.
♡ ♡ ♡
L
a tarde de navidad Jimin había recibido una llamada de sus padres, en la cual tuvo que explicar su paradedo y con quién se encontraba, ya que les extrañaba la idea de que no estuviera en Europa junto a Seokjin.
"Así que Jungkook... Okey, cariño, cuando vuelvas preséntalo ante nosotros nuevamente".
El rubio había suspirado y asentido, estaba seguro de que sus padres no se opondrían a ellos.
Jungkook había decidido llevarlo a un pequeño Tour por Busan, comieron en diferentes puestos de comida y Jimin estaba sorprendido con lo poco que habían gastado y todo lo que habían conocido. Prosiguieron entrando a un salón de videojuegos, en donde nuevamente Jungkook perdió en casi todos y Jimin le terminó regalando un pequeño conejo rosa que había sacado de una máquina.
— Cuando era niño veníamos seguido con mis padres aquí — Jungkook miró a lo lejos como el agua daba un lindo contraste con el atardecer, se encontraban cerca de un parque que tenía como un gran lago.
— Es un lindo lugar para estar en familia — Asintió el rubio mientras mascaba un chicle de frutilla.
— Lo es, aquí me regalaron mi primer libro acerca de tecnología, gracias a eso supe a lo que me dedicaría en adelante — medio sonrió y tomó la mano de Jimin entre las suyas — Por qué te has decidido por especializarte en números?.
— No tiene una razón muy profunda, si te soy sincero — se rió un poco — Mis padres querían que estudie algo, siempre me fué fácil el tema de matemática avanzada, por lo que me decidí por ello — alzó sus hombros restándole importancia.
— Vaya, y tienes uno de los mejores promedios.
— Por supuesto, soy genial.
Jungkook sonrió y admiró a Jimin mientras éste reía y empezaba a retomar su charla en otro tema. El chico estaba especialmente bonito esa tarde, llevaba un gran abrigo negro brilloso y su cabello rubio se movía con el frío viento de invierno, su nariz estaba ligeramente enrojecida por el frío.
Es que siempre sería así? El brillaba, realmente deslumbraba ante la fría tarde de invierno, Jungkook realmente sentía que su corazón finalmente terminaría de explotar ante las maravillas que tenía Jimin sobre si mismo.
Sin poder contenerse mucho, acunó, como de costumbre, las mejillas del rubio y sonrió al notar que éste ya sabía que lo besaría. Ambos compartieron un suave y tierno beso, en donde nuevamente sus almas se entrelazarían y sus mejillas serían las que los expondrían ante todos los sentimientos que surcaban por sus corazones.
— Jimin... — murmuró alejándose — Quiero decirte algo.
El rubio miró algo desorientado a Jungkook y asintió, sabía por su tierna mirada que el pelinegro no diría nada que pudiera lastimarlo.
— Me gustas mucho — Suspiró soltando todo el aire de sus pulmones — ya lo sabes, pero... realmente me gustas, siento que estoy siendo muy malo al expresarme pero realmente creo que es momento de decirlo, te quiero tanto Jimin que a veces siento hasta irreal el hecho de que estemos en mi lugar favorito — hizo una pausa acariciando las mejillas del rubio — Aunque ahora que lo pienso, lo irreal es pensar que estoy aquí con una persona tan linda cómo tú, Jimin.
El rubio tragó saliva y batalló con sus impulsos de hablar, dejándole a Jungkook por fin terminar su idea principal.
— Adoro todo de ti, tus gustos extravagantes, tu personalidad tan única, tus pequeñas manos, tu linda sonrisa y lo cómodo que me haces sentir cuando estamos juntos — se alejó un poco y tomó las manos de Jimin entre las suyas para darles calor — Quiero estar contigo, Jimin.
Los latidos del rubio por un momento se alteraron a tal punto que tuvo que hablar.
— Hablas de...?.
— Si, rayos — suspiró tembloroso — Quiero decir... quiero tener ese honor de poder ser tu novio, Jimin, de poder demostrarte que te haré muy feliz, tan feliz juntos que si en algún momento ésto termina... seguirás siendo feliz por ti mismo.
— Jungkook...
— Quiero poder transmitirte todo lo que siento, quiero amarte y que me ames, que te ames y nos ames.
El rubio sintió sus mejillas húmedas y unió nuevamente sus labios en un tierno e intenso beso, Jungkook rodeó su cintura y ante la espera de por la respuesta se separó.
— Es un sí?.
— Claro que si, Jungkookie — sonrió sorbiendo su nariz.
Ambos se abrazaron por unos minutos en los que el gran parque se iluminó tras la caída del sol, sus cuerpos calientes los mantuvieron en temperatura y sus corazones vibraron juntos.
— Joder, tenía mucho miedo de que me lo pidieras primero.
Jimin explotó en risas y ambos prosiguieron a callarse entre suaves besos, ante la atenta mirada de niños asqueados, ancianas juzgadoras y adolescentes enternecidos.
Si así se sentía el amor, Jungkook estaba realmente agradecido de experimentarlo con Jimin.
Al final del día, entre millones de diferencias, eran uno, ambos disfrutaban sus compañias por igual y ante circunstancias sin medida se vieron encontrando la comodidad de sus corazones.
"Mi mundo se intercalaba en diferentes colores y tonalidades, pensaba que mi color feliz iba desvaneciéndose, pero gracias a él no, todo sigue rosa".
Fin...
-
-
-
-
*llora desconsolada*
TERMINAMOS EVERTHING IS PINK.
Bueno, momento de ponernos lloronas.
Estoy terminando ésto en un momento a solas que estoy teniendo en mi trabajo, después de un exámen y con el cerebro a mil, pero realmente quería darles un final lo suficientemente cerrado y fluf para todas.
Nuevamente y como en todos mis capítulos quiero agradecerles por haberse tomado el tiempo de leerme, al final de todo siempre caigo en que escribir me saca de muchas batallas mentales y que, por más que no sea un trabajo, siempre me siento muy comprometida a terminar.
Ustedes con sus votos y comentarios están siendo nuevamente mi gran incentivo para seguir creando, por ello siempre digo que todo es nuestro, nosotras(os) comenzamos y terminamos una novela, hacerlo sola sería dejar todo a la mitad y por eso nuevamente agradezco la paciencia y que sigan hasta el final *llora*.
Y bueno, me encargaré de crear uno o dos lindos extras para ver a futuras la relación de éstos muchachos si que si.
Gracias nuevamente, nos leemos como siempre.
Alexkuka se retira.
(No me llamo Alex ni Kuka, por las dudas)
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro