—Aah... bebé—Jadeó el pelinegro intentando apartar a su novio.

—Cállate, o si no te morderé más fuerte —Replicó el lindo pelirrubio —Si no me dejas convencerte de ir al centro comercial, te estaré mordiendo hasta que pierdas en tu tonto juego.

¿Y que fue lo qué pasó?

Era martes, día de salir a comprar y gastar a lo desgraciado. Yeonjun madrugó y fue hasta la casa de su novio, pero como siempre Soobin se encontraba aún en su cama y jugando con sus videojuegos.

—Ya, deja de morder o perderé.

—Me harías un gran favor —Murmuró Yeonjun mientras se abalanzaba contra su novio. Intento quitar el control pero fue en vano —Amor~ —Dijo Yeonjun a punto de llorar .

No ahora por favor.

—Ya nene, esta bien. Ya nos vamos al centro comercial a com..— Soobin ni terminó de decir la palabra para cuando Yeonjun se abalanzó contra su boca.

—Te amo —Beso —Mucho— Ahora vámonos porque quiero comprar mucho y si no se acabará la línea de ropa Gucci...

Comenzó a decir mientras se iba dirigiendo a la salida, pero no se percató que Soobin no estaba detrás de él.

El pelinegro aprovechó que su sexy novio estaba distraído para retomar la partida de su juego que minutos antes había perdido por culpa de él.

Sin embargó, no contó con que Yeonjun se daría cuenta.

—Nos vamos ahora...—Dijo agarrando la oreja izquierda de Soobin —O te quedas en abstinencia. Tú decides.

Ambos cruzaron miradas retadoras. Yeonjun pidiendo ir al centro comercial y Soobin seguir jugando en su videojuego.

—Bien. Tú lo pediste —Musitó el pelirrubio sentándose en la cama —Jugarás tu maldito juego, y luego iremos al centro comercial.

—Pero...

—Silenció —Dijo volviendo a retomar las palabras que iba a decir —Te quedarás un mes sin sexo Soobin.

Uff sí,  Yeonjun podía estar sin sexo también.

—¿Seguro? —Preguntó Soobin alzando sus cejas de forma provocativa —Tu Choi Yeonjun sin sexo por un mes... —Se lamió los labios— Quiero verte suplicando.

-Bien.

-Bien.

Un gran silencio reinó en la habitación. Yeonjun se puso a pensar sobre lo que había le dicho al pelinegro acerca de la abstinencia y sabía en el fondo que no podría aguantar estar tanto tiempo sin su lindo novio.

—Binnie~

El mencionado se levantó de la cama y tomó la manito de su novio haciendo que esté se levantará también.

—Ve por tu suéter , nos vamos de compras —Dijo dándole un casto beso.

—Maldito seas Soobin...- Murmuró para si mismo con un puchero..

—♥︎—♥︎—♥︎—♥︎—♥︎—

Después de un largo paseo en auto, y una parada a la heladería. Soobin no le daba siquiera una mirada al pelirrubio. Y esté tampoco.

Tal para cuál.

—Ya llegamos — Dijo Soobin. Observó a su novio dándole una lamida a su helado haciendo que su pene se sacudiera —Bájate ya.

—No me des órdenes. Tal vez eres mayor, guapo y sexy pero eso no te da el derecho de mandarme —Replicó Yeonjun volviendo a dar una lamida a su helado —Ooh...¿Te estás excitando por mi lengua?

Alzó las cejas de forma pícara.

— Yeonjun...

—¿Quieres que lama tu pene? —Comenzó a acercarse —¿Quieres que me meta tu pene a la boca y lo succioné?

Cómo que de pronto hace calor ¿no?

—No sigas Choi Yeonjun

—¿O qué? —Dijo provocativo —¿Me darás azotes?

—Ooh Choi Yeonjun acabas de tentar al mismísimo diablo— Dijo antes de juntar sus labios con los del contrario.

Chasquidos, gemidos y jadeos se escuchaban en todo el auto. El pelirrubio desabrochó su cinturón de seguridad y poco a poco fue sentándose a horcadas sobre Soobin. El pelinegro colocó ambas manos en el trasero de su novio y empezó a apretar y manosear a su antojó.

Yeonjun comenzó a desabrochar el pantalón de Soobin. Sin embargo, Soobin, lo frenó antes que sucediese algo más .

—Bebe... para —Dijo con un gemido ronco  —Debemos ir por tus compras.

—Pero... —Yeonjun se sentía caliente. Más que el sol .

Soobin lo bajó de sus piernas, y saliendo del auto con él.

Estaba jodido

Tenia una ereccion al igual Soobin. Y el maldito no quería seguir, apostaba a que su novio no le daría tregua.

El y su estúpida abstinencia se pueden ir a la...

—¡Yeonjun! —Soobin chasqueó los dedos delante de él para que reaccionara —Mi abstinencia y yo... ¿A dónde nos iremos?

Soobin esbozó su típica sonrisa de conejito moja braga.

—A freír espárragos— Bufó molesto.

Ambos entraron al centro comercial. Soobin intentó tomar la mano de su novio, pero el pelirrubio estaba molesto. No quería verlo pro haberlo dejado con las ganas.

—¡Ya nene! No puedes estar así todo el día.

Yeonjun se volteó y le sacó la lengua como lo hacían los niños.

—¡JODETE!

—Mejor te jodo a ti —Alzó sus cejas de manera provocativa —Y aprovechando, sacas tu hermosa lengua alrededor de mi polla— Susurró cerca de su oído.

—Idiota

—Tu idiota —Dijo dándole una nalgada

—Deja de manosearme en público— Dijo mientras quitaba las manos de su novio sobre su cuerpo —Espero que hayas traído suficiente dinero amor mío, porque compraré muchas cosas que sé qué te gustarán y lo podremos usar.

—¿Que tipo de cosas?

—Por qué no vamos a averiguarlo.

Soobin asintió y acompañó a su lindo novio a todas las tiendas de ropa. De cada lugar que salían con las manos llenas.

Llegaron a una tienda de ropa interior llamada Beauty Secrets. Según Yeonjun, allí vendían todo tipo de ropa interior.

Yeonjun tardaba un montón para decidir qué conjunto llevar o probarse, además de que también notó las miradas que la empleada del lugar le tiraba a Soobin. Ya sentía que se comía a su novio con la mirada.

Su lado celoso estaba por desatarse.

—Binnie~ ¿Puedes ayudarme con esto? —Dijo Yeonjun saliendo del vestidor con un conjunto de ropa interior muy provocativo.

Soobin trago duro ante la imagen que su pequeño y sexy novio le estaba regalando.

—C-claro que sí

El pelirrubio llevó a su novio hacia el vestidor y lo acorraló contra el espejo.

—Binnie, binnie... ¿Por qué eres tan bello? —Dijo sobre sus labios —¿Por qué eres tan caliente?

El mencionado no entendía lo que pasaba.

—¿Te encuentras bien?

—La empleada te estuvo tirando miradas de deseo y tú no hiciste nada para pararla —Dijo poniéndose de puntillas y darle una lamida rápida a los labios de su novio.

—Nene, estamos en... Ahg —Gimió Soobin al sentir que la traviesa mano de su novio se metió entre sus pantalones —D-Deja de hacer eso... ¡Aahg..! Estamos en un lugar público.

—Anda cariño, será rápido— El pelirrubio convenció a su novio. La mano de Yeonjun se movía cerca del pene de Soobin —¿Te gusta como me veo?

Soobin ya no pudo responder, ya que de un momento a otro Yeonjun se encontraba de rodillas frente a él.

Comenzó a desabrochar su pantalón para facilitar el trabajo al pelirrubio .

Yeonjun se encontraba ansioso por probar la parte favorita y bien dotada de su novio.

—¿Listo?

—Definitivamente sí.

Yeonjun pasó sus dedos por el elástico del bóxer de Soobin y lo fue bajado hasta llegar a las rodillas. Se relamió una vez los labios y se llevó el miembro a la boca .

Comenzó a succionar el glande de manera lenta y tortuosa. Soobin por su parte, comenzó a mover sus caderas hacia adelante para que su miembro entrara más en la boca del pelirrubio.

Tomó las hebras rubias de Yeonjun para aumentar más el ritmo. Su orgasmo ya estaba por venir, pero el no quería acabar en la preciosa boquita de su bebé. Por lo que saco su miembro y empujó a Yeonjun hacia la pared abriéndolo de piernas. Hizo un lado la braga que el pelirrubio tenía puesto y de una sola estocada entró en él.

—¡Ahg...Soobin!

—¿No que estaría en abstinencia?

Yeonjun había caído en su propia trampa.

—Me vale... Ahora dame más duro.

—Sus deseos son órdenes— Tomó a Yeonjun de las caderas y aumento el ritmo. Pieles chocando se escuchaba por todo el vestidor.

En ese momento no les importaba si los descubrieran. Soobin tomó posesión de la boca de Yeonjun, callando sus gemidos.

El pelirrubio sentía su clímax cerca, Soobin tomó el miembro de su pareja para masturbarlo al ritmo de las embestidas.

Ambos llegaron al ansiado orgasmo, Soobin acabó en el interior de Yeonjun y esté sobre su abdomen manchando con hilos blancos la pared.

Sus respiraciones se encontraban entrecortadas. Sin embargó, valió la pena.

¿O no?

—Creo que debes salir Soobin —El mencionado asintió y salió del interior de Yeonjun haciéndolo jadear, sintiendo un vacío.

—Creo que nos pasamos

—Es tú culpa por ser tan guapo Soobin —Comenzó a limpiarse los resto de esencia de su novio —¡Mierda, rompiste las bragas!

—¡Tu me provocaste! Además, me gustas más sin ellas.

—A mi también ¿Te gusta que use ese tipo de cosas? —preguntó Yeonjun volviendo a colocarse su ropa.

—Sabes que sí... Dime ¿Lo usarás todos los días?

Yeonjun alzó sus cejas y atrajo a su novio para darle un beso salvaje.

—Todos los días.