Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝟬𝟮𝟱. the best ending

capítulo veinticinco

·˚• .✦ ──────────────────

Yamagawa Kenjiro no recordaba que antes de esa vida tuvo otra más caótica, pero igualmente llena de amor. Tampoco recordaba haber sido tan duro consigo mismo, o el haber perdido la memoria, e incluso haber perdido amigos.

En esta línea temporal todo era bueno. Aunque hubo altas y bajas en donde su vida no pudo ser perfecta, en ese punto de su vida ya era muy feliz. Era Embajador de la paz en las Naciones Unidas y vivía con el amor de su vida, Mitsuya Takashi. Fue muy difícil poder llegar hasta ese punto, ya que se salió de su casa cuando terminó la preparatoria y se inscribió en una buena universidad, ganando contactos debido a su gran carisma y personalidad extrovertida.

Sobre todo era inmensamente feliz con Takashi. Tenían una modesta casa en la misma zona donde vivieron siempre, aunque Kenjiro viajaba constantemente debido a trabajo y Takashi estaba ocupado muchas horas, lo hacían funcionar perfectamente. Ellos no sabían que hubo una línea temporal en donde no se conocían, otra en donde Kenjiro moría joven y una más en la que fueron muy felices juntos a pesar de las adversidades. En esa línea se conocieron de la misma forma que en la línea anterior, Kenjiro se enamoró aún más de él porque gracias al apoyo de sus amigos no escondió tanto tiempo sus sentimientos y Takashi los correspondió al instante.

Si bien, ninguno era conocedor de lo que fueron alguna vez, del futuro tan incierto que les tenía preparado la vida, actualmente no debían preocuparse por eso. Todos aún así tuvieron sus obstáculos, Kenjiro sobre todo fue uno de los que más batalló para poder salir adelante debido a su familia, pero pudo desprenderse de ahí y ser feliz por su cuenta.

Ya once años atrás la Tokio Manji Gang se disolvió y con ello la época de pandillero de Kenjiro. Agradecía inmensamente a todos los involucrados porque lograron ser la mejor pandilla y para él no había cosas más increíble que eso. Inclusive porque en cada lugar al que iban a pelear Kenjiro y Takashi eran reconocidos como los reyes, apodo que amablemente Mikey se encargó de esparcir, así que podía decirse que conquistó Tokio con el amor de su vida, como siempre quiso.

El tres de julio del 2017 era una fecha que para Kenjiro sería importante, ya que siendo la boda de Takemicchi y Hina, volvería a ver a todos reunidos nuevamente. Estaba tan emocionado que todo el día estuvo cuidando cada detalle de su aspecto, inclusive le pidió a Takashi que le repitiera mil veces que se veía impecable para ver a sus amigos.

—Eres el más guapo de toda la boda —le dijo Takashi en un susurró justo cuando iban entrando al lugar y de lejos en el pasillo veían a varios de sus amigos. Kenjiro se rio, tomando fuertemente la mano de su hombre.

—No le digas eso a Takemicchi, estoy seguro que se está muriendo de nervios y no ayudaría.

—Oh, no. No soy insensible, Ken.

—Lo sé perfectamente.

Llegaron justo cuando estaban discutiendo algunos por temas de dinero. Izana se burlaba de Kisaki y Koko diciéndoles que debían hacer más dinero porque dependía de ellos en donaciones para su organización sin fines de lucro «Tenjiku», en la cual Kenjiro también era un donador activo y que constantemente viajan juntos por trabajo. Se saludaron entonces.

—¡Yamagawa! Es genial verte —lo saludó amablemente Izana, sonriendo y también saludando con un asentamiento a Takashi—. Se ven increíbles juntos, ¿lo sabían?

—Ken se esmeró mucho en su impresión de hoy —se burló un poco Takashi, dándole una sonrisa a Kenjiro. El mencionado se sonrojó un poco.

—Ya, basta. No quieran hacer un complot para burlarse de mí como siempre.

—¿Quién podría hacer un complot contra ti, rey? —interrumpió Mikey, robándose por un momento a Kenjiro y tomando su brazo con mientras lo veía con curiosidad.

—¡Tú hermano!

—¿De verdad? Izana, deja al niño —lo reprendió Mikey, pero claramente su tono era burlista. Izana se rio entre dientes y Kenjiro puso los ojos en blanco. Entonces llega Emma para colocarse al lado de Draken, él preguntándole que sí su condición física estaba bien, y ella asintió para después ver a los chicos riéndose de Kenjiro.

—Más les vale que dejen a mi mejor amigo o los voy a golpear —amenazó, aún sonriendo y tomando de la mano a Kenjiro para arrastrarlo fuera de ellos. Todos se miraron indignados aunque se rieron rápidamente, pero Takashi suspiró al ver la escena.

—Emma de nuevo me robó a Ken.

—A veces creo que sí el rey no estuviera lo suficientemente enamorado de ti o no fuera gay, y si Emma no estuviera muy enamorada de Draken desde siempre, pudieron haber hecho una bonita pareja —opinó Mikey entre risas con el propósito de hacer molestar un poco a Takashi. No lo logró, aunque él al pensarlo sintió un escalofrío en su cuerpo y negó rápidamente con la cabeza.

—Ni lo menciones.

—Tienen suerte de que Emma tiene ojos para mí y Ken para ti, Mitsuya —dijo Draken poniendo su brazo en el hombro del mencionado, sonriente.

—¿Qué tal está el mini Draken o la mini Emma? —le preguntó emocionado Kenjiro tocando la panza de su amiga, provocando que el ambiente cambiara y se emocionarán mucho.

—Perfecto. Creo que Draken me cuida de más.

—Oye, debes entenderlo. Solo quiere estén bien.

Emma asintió un poco, sonriente.

—Lo sé.

Kenjiro tomó su brazo de pronto transformando su rostro en uno serio, por lo que Emma lo miró con curiosidad y un poco de temor.

—Además, ¿seré su padrino, verdad? ¡Me lo habías prometido, Emma!

Debido a que ella pensó que era un tema serio no pudo evitar soltar una carcajada.

—¡Bobo! Me asustaste mucho. Pero sí lo serás, Draken está de acuerdo solo porque Mitsuya sería su otro padrino. No sé ustedes, pero estoy segura de que serán los mejores.

—Estoy seguro de eso.

—Aunque debo admitir que sigo estando un poco nerviosa —confesó Emma en voz baja, cuidando que nadie a su alrededor los escuchara—. Temo ser una mala madre, arruinar algo o…

—Emma —Kenjiro puso sus manos en sus hombros, viéndose fijamente y con una sonrisa en su rostro—, serás la mejor mamá. Naciste para ser una bella mujer y ser feliz con el amor de tu vida, junto a un fruto de su amor. Puedo confiar ciegamente en que todo va a salir bien.

Los ojos de Emma se cristalizaron un poco, asintiendo y dándole un abrazo a Kenjiro, que rápidamente él correspondió. Para él, Emma era como una hermana con la cual podía llevarse bien, ser cómplices en todo y contarse sus más grandes temores y preocupaciones. Nunca se llevó bien con sus padres y menos con su hermano, así que sabía que podia tener la familia que siempre quiso al lado de sus amigos y Takashi.

—Te quiero mucho, Ken. Gracias.

—No tienes que agradecerme nada, tontita, para eso estamos los mejores amigos —murmuró él, acariciando su cabello—. Y yo te quiero también.

—¡Oigan, ya va a empezar la ceremonia! ¡Vengan rápido! —les habló Mikey a los dos, por lo que se encaminaron hacia ellos y cada quien se colocó con su pareja. Kenjiro no dudó en plantarle un beso a Takashi.

» ¡No coman frente a los pobres!

Todos se rieron del comentario de Mikey pero siguieron su camino. La recepción era linda pero ahora venía la iglesia y Kenjiro tenía pavor de estar ahí porque sentía que iba a llorar. Era muy sentimental en este tipo de eventos y así como cuando se casaron Emma y Draken, él lloró demasiado. El lado bueno es que eso ya no sería sorpresa para nadie.

Estando en sus asientos de la boda, les tocó escuchar toda la misa atentamente. Lloró todo el tiempo en silencio mientras que Takashi lo tomaba de la mano y le acariciaba la palma haciendo círculos para intentar ayudarle, aunque sabía que al llanto nada lo iba a detener. Aunque pudo ver que no era el único que lloraba y eso lo tranquilizó. Al finalizar todo salieron corriendo a felicitar a los recién casados, incluyendo a Ken y Takashi, para después festejar también con los demás como si incluso ellos fueran los recién casados.

En ese preciso momento Kenjiro se sentía en absoluta felicidad, no existían palabras para expresarlo. Aunque él no sabía, en algún punto deseó vivir un momento similar y sobre todo tener a todas las personas que quería a su lado.

Que si futuro fuera así de perfecto fue gracias a Hanagaki Takemichi, incluso si no lo recordaba.

Cuando regresaron a la recepción fueron directo a su mesa y en esta se encontraban sus amigos, algunos en otras mesas, pero al momento de tomarse fotos pensó que el fotógrafo debía hacer magia para tomar una foto donde salieran todos los de ToMan. Varios no podían dejar de reírse, otros lloraban y unos como Kenjiro solo procuraba salir bien, ya que probablemente iba a subir esa fotografía a sus redes sociales. Le encantaba presumir su vida ahí, subía fotografías de casi todo lo que hacía y consideraba importante (siendo la mayor parte fotografías de Takashi).

En verdad su vida era muy feliz.

—¡Vamos a bailarrr! —insistió Kenjiro a Takashi cuando ya todos se sentaron, cenaron y justo pusieron música. Nadie más que Takemicchi y Hina estaban bailando. Su novio sonrió avergonzado.

—Ya sabes que no sé bailar.

—¿Y eso me importa? Solo quiero estar en el centro de la pista contigo —se levantó de su asiento y le ofreció su mano, esperando que aceptará con una gran sonrisa—. ¿Me permite una pieza, señor Mitsuya?

—No me digas señor, bobo —se rio entre dientes, rehusandose y levantándose de su asiento para tomar la mano de Kenjiro. Este sonrió aún más, apretando con fuerza la mano de Takashi y arrastrándolo a la pista.

Y claro, ni siquiera Kenjiro bailaba muy bien, pero lo intentó. Moverse al ritmo de la música era difícil más no imposible, así que intentó bailar y a la vez reírse de lo lindo que se veía Takashi en el intento. Por suerte poco después los demás chicos les secundaron, así que pronto la pista estaba llena.

—¿Sabías que eres un excelente bailarín? —se intentó burlar un poco, sonriendo de lado y acercándose a su rostro para verlo fijamente. Takashi alzó una ceja al oírlo,

—Te estás burlando de mí.

—¡Por supuesto que no, mi rey! ¿Cómo crees que podría hacerlo?

—Ya basta —se quejó entre risas, negando con la cabeza. Por el contrario Kenjiro negó también, pero atrayéndolo más a él para que bailarán más pegado; al mismo tiempo colocó sus labios en su oído.

—Mira, si eres buen bailarín. Me haces emocionarme de más.

Pudo oír la risita ronca de Takashi y sintió como él agarraba con fuerza su cintura, sin dejar que se fuera; igualmente Kenjiro no pensaba hacerlo.

—No me hagas esto porque luego en la noche vas a sufrir.

—Estoy dispuesto a sufrir ese riesgo si es por ti —canturreó emocionado por la idea. Takashi sonrió cómplice, asintiendo.

—Bien.

Decidieron besarse. Kenjiro sentía el fuerte agarre de Takashi en su cintura, muy cerca uno del otro, y dejó su rostro enterrado en su cuello. La música cada vez iba más lenta y ahora todos los que eran pareja estaban bailando juntos. Inclusive podía sentir miradas, seguro de los familiares de los novios o personas externas, pero realmente no le importaba porque a su alrededor estaban sus amigos que nunca lo juzgaron (a unos les tomó un tiempo aceptarlo nada más). Disfrutó ese momento como si fuera su propia boda, consciente de que no era posible por el momento.

—Te amo —susurró de pronto Takashi, provocando que Kenjiro sintiera un pequeño escalofrío recorrer su cuerpo, y sonrió.

—Yo te amo más.

—¿Has oído ese dicho sobre que uno se enamora primero, pero el otro se enamora más fuerte?

Kenjiro hizo un sonido afirmativo, consciente de sus palabras y del dicho.

—Creo que tú me amaste primero y yo te amo más fuerte, así que no permitiré que digas que me amas más de lo que yo te amo a ti.

—Me gustaría objetar ante ese comentario, pero creo que te dejaré pensar eso por ahora —canturreó. Takashi se rio en voz baja

—Eres un tonto.

—Tú tonto, evidentemente.

A veces Kenjiro quería decir muchas cosas, tenía pensamientos que quería externar a todas las personas que quería, pero debido a los traumas con su familia se los guardaba. Aunque, por supuesto que con Takashi era diferente, él podía decir la tontería más grande o el chiste más malo y se iba a reír, lo que significaba que estando a su lado podía ser él mismo sin miedos.

Recordaba haber leído libros y visto películas de amor, pensando en sí algún día podría tener algo tan bonito como eso y estaba muy feliz de tener la vida que siempre soñó. El camino fue difícil, todo lo fue, solo que ahora la vida le recompensaba cada mal trato e incluso sabía que no sería todo, que aún faltaba más por vivir y podría tener obstáculos, pero unos que estaba dispuestos a correr teniendo a su lado a personas que lo amaban por como era.

Tal vez tenía menos obstáculos que en sus vidas que prácticamente nunca vivió, pero esto él no lo sabía y se dedicaba a vivir esa vida como la única y la más importante. En donde por fin pudo ser feliz.

Porque para Kenjiro, al fin reinaba con Takashi ese pequeño reino que ambos habían creado. Eran los reyes y Takashi su preciado rey.


WAAA ÚLTIMO CAPÍTULO!! esperen mañana los agradecimientos <3

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro