Dedicado a KatherineIvannova

Viernes 13

Luego del primer día que Zayn había empezado su "plan" (principalmente ideado por Doniya) se encontraba más tranquilo, ya se imaginaba cómo serían las próximas reacciones de Harry y las preocupaciones no eran mayores en él.

Había sido un buen final del día cuando entregó la última flor en medio de Gemma y sus dos hermanas, fue incómodo absolutamente, pero valió la pena cuando Harry no quiso separarse de él por un largo tiempo. Incluso, provocando que los cinco chicos acabasen en un cercano parque luego de los berrinches del rizado por no querer dejar al de ojos mieles.

Sin duda, había sido un gran día y ya no podía esperar comenzar el día viernes. Las flores estaban ordenadas, solo eran seis de estas, pero de distintos tipos y colores. A diferencia del día anterior estas a además de llevar sus respectivas notas colgantes del tallo también portaban un pequeño bombón con diferentes formas junto a las notas, desde corazones hasta otras formas como lunas o estrellas. Era perfecto, definitivamente.

A diferencia del día anterior, volvió a retomar la rutina con su madre y Safaa, yendo primero a la escuela de su hermana y finalmente, a su destino. Con los ramos firmemente aferrados a sus manos y la pequeña y delicada flor por sí sola, se adentró a la recepción que por fortuna de él allí le esperaba Louis que luego de verle cruzar la puerta, dejó de lado su conversación con la chica que también llevaba un uniforme, pero de otro color.

El ojiazul saludó a Trisha y a él, por supuesto y con ello prosiguió a ayudar al menor con los ramos y comprobar que tanto como las de ayer, estás seis eran realmente lindas, sobre todo la que colgada sin envoltura y de un lindo tono blanco.

—Hasta más tarde, señora Malik —Se despidió el fisioterapeuta amablemente, correspondido en una sonrisa y una despedida de la mujer está no se retiró hasta abrazar fuertemente a su muchacho y besar su frente para partir.

Louis tenía una pequeña idea para impresionar a Harry hoy, quería ser de ayuda esta vez y no estaba dispuesto a solo quedarse a espiar detrás de la puerta, ¡él también quería participar! Por ello, el camino hacia la sala fue realmente silenciosa por su parte, fue extraño para Zayn, siempre tan acostumbrado a las palabras de su amigo o cualquier estupidez que surgiera de él, pero no le dio mayor importancia cuando finalmente cruzaron la puerta corrediza hacia la sala.

—Zayn—Murmuró el mayor, cerrando suavemente la puerta para ver también, como era que Zayn caminaba hacia la camilla y subía hasta acomodarse, como cada día.

Con pasos lentos se detuvo frente al escritorio y dejó descansar las flores allí, pero sin dar un paso más cuando notó como la atención del menor de ambos estaba sobre sí mismo. Bien, sólo le quedaba sugerir la idea, no habría problemas si Zayn se negaba..., aunque lo dudaba.

—Como noté que volverás a hacer lo de las flores, tuve una pequeña idea para hacerlo diferente. Realmente me gustaría ayudarte, ¿qué dices? —Los mieles cayeron sobre el rostro de Louis, por supuesto que le gustaría tener ayuda en algo, quería hacer cada cosa diferente, por lo que sin dejar de mover sus piernas que colgaban desde la camilla, él asintió contento. —Como no debes de ver a Harry hasta en una hora, podríamos hacer lo siguiente...

Cada palabra, cada idea de Louis sonaba estupendo. Zayn realmente quería hacerlo, estaba mucho más emocionado que desde que llegó, ¡Podría brincar por toda la sala de alegría y sin detenerse! Pero no, así no era él.

Sin embargo, a pesar de la grandiosa idea y del plan que se llevaría a cabo, ambos comenzaron con sus sesiones correspondientes cuando Elizabeth cruzó la puerta y ella, sin notar nada extraño además de las flores sobre el mesón –creyendo ciegamente que serían de Louis para alguien– dio inicio a las terapias.

El tiempo paso normal, excepto por las discretas miradas que ambos jóvenes se transmitían. Oh, estaban tan ansiosos por llevarlo por fin acabo, que cuando el timbre sonó en cada zona dando un cambio de hora y Elizabeth los dejó con dulces despedidas, ambos comenzaron a moverse por la sala para ordenar cada detalle. Sabía Louis que se metería en un problema si llegaban a descubrir que se saltó una terapia con Zayn, ¡pero lo que sucedería dentro de poco allí era mucho más importante!

(...)

Desde la otra ala de la institución, donde se llevaban a cabo clases de aprendizaje según especialidades, Harry sonreía positivamente a todo lo que aprendía con la dulce mujer de elevada edad y de lindo delantal de muchos colores. A pesar de sentir el rostro de la mujer enormemente conocido, aún no era capaz de aprender su nombre ni de mucho menos recordarla, pero algo le decía que su nombre era algo similar a brillo o..., brillito. No lo recodaba, pero las clases que daba eran realmente entretenidas.

Por ello, cuando el timbre que sonó fuertemente en cada rincón indicando las dos horas de esta, farfulló entre dientes y frunció sus labios molesto, pero no pudo evitar que la amable mujer lo escoltara con su grupo entre risas hacia el patio trasero donde se daban los recesos.

Para su desgracia y total tristeza, cuando pisó el fresco pasto del patio y corrió entorno a este en busca de un particular chico y no halló rastro de él, sus grandes ojos esmeraldas se desilusionaron, he incluso creyó estar a punto de llorar por la ausencia de quien para él era tan especial.

Vagamente aún tenía recuerdos de lindas flores y bonitas sonrisas de Zayn, lo extrañaba demasiado y quería estar cada segundo con él si era posible, sin embargo solo se dedicó a sentarse en la banqueta que ambos solían compartir cada receso, esperando que este terminara lo más rápido posible aquél día.

Los quince minutos correspondientes del receso acabaron, pero para Harry parecieron como si fueran treinta o más, estaba realmente triste y por ello, cuando el timbre sonó caminó hacia la entrada donde se percató de Liam. Los avellana de Liam cayeron cobre él curiosamente por su comportamiento, su ánimo comenzaba a causar una terrible depresión.

Con el entrecejo fruncido, no esperó más tiempo cuando extendió su mano hacia Harry y este la tomó sin rechistar –algo realmente extraño–, Harry siempre se negaba a tomarle la mano alegando que no tomaría la mano de un desconocido nunca. No importaba cuántas veces el rizado recuperara cada minuto de su memoria, la historia siempre era la misma y cuando por fin tuvo contacto con la del chico, se impresionó.

En un gran silencio, ambos caminaron hacia la sala de terapias. Liam sabía lo que allí había, él había sido informado por Louis y por ello, sabía que Zayn estaba en L.B.C, por lo que no comprendía aún el comportamiento de Harry, ¿le había sucedido algo?

En medio de su burbuja personal, cayó en cuenta a penas que habían llegado a la zona que tenían como objetivo. Liam no sabía exactamente que les esperaba, pero cuando se detuvo frente a la puerta corrediza y allí habían papeles de colores que formaban el nombre de Harry y bajo el mismo nombre, se hallaba una linda flor pegada en un tono malva.
Era blanca en el centro, pero las puntas de cada pétalo eran como de un lindo color rosa, o borgoña... no sabía muy bien.

—¡Es mi nombre! —Chilló emocionado el rizado a su lado, soltándose rápidamente del agarre para dar tiernos brinquitos frente a él, dándole la espalda. —¡Una flor, una flor! —Exclamó en medio de su sorpresa— ¡Zayn está aquí! —

Esperanzado y con su corazón latiendo fuertemente, despegó la flor de la puerta y olió de ella, era un rico olor dulzor que Dios, era mucho mejor de lo que se esperaba. Pero cuando la tomó, un extraño peso de la misma le llamó la atención, justo al final del tallo colgaba un papel rosa y un bombón en forma de estrella. Por supuesto, no dudo en leer la nota.

La flor es una Dalia,
es una de mis favoritas.
Es de color malva, o eso entendí...
significa agradecimiento.
Yo realmente agradezco que estés en mi vida.

Zayn.

El inocente y puro corazón de Harry pareció saltar como loco en su pecho, sus mejillas se tornaron rosas y sin esperar una indicación del castaño detrás de él, ingresó sin más y sin notar esta vez, que el terapeuta no lo siguió. Sólo esperó afuera siguiendo indicaciones.

Para la decepción del lindo niño de rizos la sala estaba vacía, pero a diferencia de todos los días, o de lo que apenas recordaba..., había una muy llamativa decoración con muchos corazones de papel pegados por las paredes, algunos regados por el suelo y un sutil brillo dorado por la mayoría del lugar. ¡Era tan lindo!

Dándole una detallada mirada a la sala, cayó en cuenta del par de flores que descansaba en el mesón y sin esperar un segundo más, por poco corrió allí tomando de ambas para apreciarlas con anhelo y sin poder soportarlo más, cayó como quien es hipnotizado hacia las notas. Primero, la flor violeta...

En el libro leí que su significado era muy lindo...
"mi amor por ti es fuerte y crece
cada día"

Entre su boba sonrisa y sus manos temblorosas, tomó la faltante; la roja.

La roja significa...
Te querré siempre.

Un nudo en su garganta se formó, ni siquiera pudo suspirar o jadear de genuino cariño al leerlas. Por supuesto, no pasó desapercibidos los dos bombones, uno en forma de corazón y el otro, en una linda media luna.

Pero a pesar de ello y de los lindos sentimientos que estaba teniendo, quería poder tener en frente a Zayn y llorar en su hombro, quizás darle muchos lindos besos y no soltarlo sin importar que tuviera que hacer esas tontas sesiones con rompecabezas o terapias de relajación.

Con un adorable puchero adornando sus labios, dejó nuevamente las flores sobre el mesón, ya luego iría por ellas, pero sentía y creía que debía seguir las pistas que se le dejaban puestas frente a sus ojos, pero que al momento de llegar no había notado.

A sus pies, un notable camino de corazones de papel lo guiaban hacia las colchonetas de colores, justo donde se hallaba los grandes balones de goma violetas,  y sin poder resistirse, caminó hacia allí. La curiosidad era mucho más grande que cualquier cosa y sin más, se introdujo en el suave camino de las colchonetas y justo detrás de los balones, se encontraban unas bonitas flores que les recordaron el sol.

Con cuidado, se acuclilló hacia ellas tomando entre sus manos, viajando su mirada tan rápido como pudo hacia las notas que eran acompañadas con otros bombones, un sol y una luna llena.

Es un girasol naranja,
oí que son muy extraños de conseguir.
Significa, "fidelidad en el amor"...
mis sentimientos son muy fieles a ti, Harry.

Quiso gritar y revolcarse de emoción sobre las colchonetas, quiso suspirar como una chica enamorada, pero es que ¡Realmente estaba enamorado! Aunque ni siquiera fuera consciente de sus propios sentimientos. Él solo creía querer al chico, no conocía un sentimiento más grande que aquél.

Y finalmente, leyó la siguiente creyendo también que sería la última flor por parte de Zayn. Lo cierto es que él solo quería ver a su moreno favorito, enrollarse entre los brazos de él y sentirse tan seguro como siempre.

El girasol amarillo significa
"eres mi sol"
tú eres la luz de mis días, solo tengo ojos para ti,
siempre tendré mi mirada sobre ti.

—¡Ugh! —Exclamó, estrujando la nota entre sus manos –pero sin arrugarla– y finalmente, abrazando de ella en su pecho, como si se tratara del moreno.

En parte estaba molesto, quería tener a Zayn cerca de él y darle mucho cariño y amor si fuera posible. Quería besarlo infinitamente como lo fue en su cumpleaños, quería sentir tantas lindas mariposas con el solo contacto de los labios de Zayn.

Sin percatarse de lo que sucedía en su entorno, preocupado solo de su molestia y cariño a la vez, no notó como alguien ingresó a la sala y caminó hacia él, tampoco notó como las colchonetas se hundieron por cada paso que eran dirigidos a su persona.

Pero lo que sí pudo notar, fue cuando una linda flor banca con un centro violeta cayó justo en su regazo, unas lindas "antenas" blancas con las puntas naranjas en el mismo centro. Era preciosa, pero sin embargo, no alcanzó a voltearse a ver el dueño de aquél hecho cuando una voz conocida y que añoraba habló cerca de su oído.

—E-Es un abis-sco... —Las palabras entrecortadas eran normales para él, pero no pudo evitar notar el nerviosismos por el tono de voz, pero no se volteó, quiso seguir oyendo— fue una d-de mis favoritas... sig-gnifica be-belleza delicada —Pero de pronto, balbuceos para nada entendibles salieron de su boca y Harry entendió que él se estaba dejando ganar por sus instintos.

Tomando delicadamente la flor, se volteó e hincándose, encontró los asustados mieles con los suyos y sonrió con cariño, extendiendo su mano libre hacia el hombro de Zayn.

—T-Tu eres... e-eres bello y tan de-delicado como u-una flor —Las mejillas de Zayn se tornaron rojizas, incluso la totalidad de su rostro, sin embargo tuvo una muy linda respuesta cuando Harry lo rodeó en un abrazo e inesperadamente, sintió sus labios aprisionados por los de su adorado chico.

No sabía qué hacer, solo mantuvo sus labios unidos a los adversos y fue él quien se llevó una sorpresa cuando Harry movió los suyos en un dulce masaje, o lo que él entendió como tal. No lo esperó, correspondió torpemente de igual forma, sintiendo su aliento mezclarse con los de su Harry.

Un enorme calor recorrió ambos cuerpos, uno de puro cariño, de amor y de emoción por lo que estaba sucediendo. No importaba para Zayn si Louis y Liam los estaban observando desde la puerta, Harry siempre era más importante que todo. Harry siempre, siempre lograba que vivieran dentro de su propia burbuja con solo un toque... con solo una mirada.

Falta en sábado 14.