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- ¡vamos tigres! - gritan las porristas mientras animan el partido. Steve y yo íbamos llegando juntos, ya que su cita ya estaba sentada en las gradas de una vez. Justo cuando estamos en la entrada, el me entrega mi bolsa de palomitas.

- muchas gracias.

- no es nada, obviamente vas a darme. - el sonríe, de una manera muy bonita y me empuja la cadera con la suya y empezamos a jugar, a realmente pasar un buen rato cuando va pasando una chica la cual lo deja sin habla.

- necesitamos una buena noticia, y no hay nada que llame mas la atención en estos momentos que no sea el básquetbol. - la chica le dice a su compañero y voltea a vernos. - Steve.

- Nancy. - el dice tan solo y eso me lo dijo todo, esta era la famosa Nancy. Vaya que si es hermosa, tal y como Robin me la describió. Ella me sonríe ya que no me conoce y yo hago lo mismo. Vi que Steve no iba a moverse pronto entonces mejor me fui caminado sola hasta las gradas y me puse a un lado de la chica con la que Steve venía. Me crucé de brazos y mejor voltee a ver hacia donde estaba la banda. Robin me saluda a lo lejos y veo que ahí estaba a su lado la chica que me dijo que le gustaba. Se que es ella porque es la única pelirroja en la banda. Es linda y espero que pronto Robin se anime a hablarle.

- volví. - Steve me dice mientras pasa por las gradas y se pone entre nosotras dos. - lo siento, es una amiga y...

- esta bien, Steve. - le dije ya que, bueno, no me debe ninguna explicación. Me voltee para mejor ver hacia el frente pero sentía todo el tiempo su mirada en mi. ¿Habrá notado que me sentí incomoda? Se que no debería pero no es como si pudiera controlarlo. Solo pasa.

- oye. - me dice y voltee a verlo, pero justo cuando estaba por decirme algo, Heidi empieza a hablar.

- ¿no te molesta que ganaremos un campeonato justo después de que te graduaste? - reí ante eso y mejor me quedé viendo de los jugadores sobre la cancha.

- si, interesante observación. gracias por mencionarlo. - abre su bolsa de palomitas y empieza a comer.

- ahora todos de pie para el himno nacional. - en efecto, eso hacemos una vez que creo que es el director de la escuela, empieza a hablar. - hoy escucharemos cantar a una invitada muy especial. Desde Nashville, nuestra Tammy Thompson.

Todos le aplauden a la chica y me hace pensar que es algo ¿famosa? No lo sé. Pero debe cantar bonito supongo. Ella empieza a hacerlo y um... esta bien. Pasable.

- te lo dije. Muppet. - escuché como Steve susurra y voltee a verlo.

- eso es muy grosero de tu parte. - el me mira y alza las cejas en ese momento. - pero okay, admito que si parece. Un poco.

- gracias, supuse que pensarías igual que yo.- el ríe y me empuja el hombro con el suyo, de nuevo jugando conmigo. - yo lo haría mucho mejor.

- lo dudo.

- no me has escuchado cantar, no lo sabrías. - me guiña el ojo y voltea a ver hacia el frente de nuevo.

- wow canta hermoso ¿no? - menciona su cita y de nuevo, me nace reír. La chica terminó de cantar y por fin, el partido había comenzado. Todos aplaudían y festejaban y yo solo estaba pensando en como irme sin verme grosera. Voltee a ver hacia la entrada y aproveché que todos estaban muy entretenidos con el juego y me bajé.

- voy al juego. - le dije a Steve.

- este es el juego. - me mira confundido y se baja de las gradas también para seguirme y salimos de la escuela. La puerta se cierra detras nuestro y se calma el ruido.

- voy con Justin.

- le estas dando mas importancia a un juego solo para ayudar a un niño que ni siquiera conoces. - Steve se cruza de brazos. - su nombre es Dustin.

- juro que no fue por grosera, realmente como dices, solo he tenido una conversación con el. - dije apenada. - pero me dijo que ocupaban ayuda y jugar D&D me hace muy feliz.

- jugaras con desconocidos ¿estas bien con eso?

- conozco a Dustin. - me rasqué la nuca nerviosa. - y a Eddie.

- ¿quién es Eddie? - este frunce el ceño. - hasta donde yo se, no es ninguno de los niños amigos de Dustin.

- no es un niño, es de nuestra edad creo. No lo sé exactamente. - reí. - nos conocimos en el supermercado y...

- oh ahora entiendo, te vas porque quieres ir a coquetear con ese chico, no porque realmente quieras jugar el juego o apoyar a Dustin.

- lo dices como si eso te molestara. No veo que tiene de malo que quiera pasar tiempo con el.

- ¿te gusta?

- no. - negué varias veces con la cabeza. - pero de ser así ¿qué tiene?

- no, nada. - el hace su cabello hacia atrás. - realmente nada. Solo me dio mucha curiosidad, es todo.

- te agradaría mucho, es muy divertido. - Steve aprieta los labios hacia adentro. - deséame suerte en el juego ¿si? Quiero ganar.

- mucha suerte. - camina lentamente a donde yo estoy y me da un beso en la mejilla. No me esperaba eso. Entiendo que las personas se despiden así pero fue un beso beso. Labios directos a mis mejillas y me dejaron toda nerviosa y sonrojada. Se separa para verme y me sonríe. - gánale a ese Eddie. ¿Okay?

- ese es el plan. - reí y me voltee para irme a jugar de una vez por todas.

...

- lo siento llegue tarde. - dije una vez que corrí a donde ellos estaban y dejé mi bolso a un lado. - ¿y bien? ¿Empezamos?

- por supuesto que no. - Eddie dice una vez que se cruza de brazos.

- pediste un sustituto. Conseguimos una. - Dustin se explica y me apunta lo cual me deja en una situación medio incomoda. No contaba con que Eddie se comportaría como un idiota y no me aceptaría en el juego.

- este es un club de fuego infernal. No un club de princesas. - sus tontos amigos se ríen una vez que el dice eso.

- te apuesto lo que quieras a que te gano sin problema alguno. - me crucé de brazos y lo miré fijamente a los ojos. - no te tengo miedo y dudo mucho que juegues tan bien como presumes.

- ¿apostaría lo que sea? - el sonríe, emocionado de lo que dije. Asentí con la cabeza. - perfecto, las apuestas me emocionan. Si yo gano, me debes algo.

- ¿y si yo gano?

- lo que gustes. - el levanta ambas manos en el alto. - ¿cual es tu clase y nivel, princesa?

- nivel 14.

- bienvenida. - me estrecha la mano. - Dustin, me hubiera mencionado que invitaste a Zoey Buckley. Me hubiera venido mucho mas arreglado. - el bromea y va a sentarse a su asiento.

- nunca te dije mi apellido. - le comenté una vez que tomé asiento enfrente suyo. - ¿cómo lo sabes?

- puede que haya hecho un poco de investigación. - no pude evitar sonreír ante ello. - empecemos. Primero ustedes. - nos lanza el dado.

- ¿lista? - me pregunta Dustin y asiento con la cabeza. - el es Mike. - este me saluda y yo a el. - uno de nuestros mejores jugadores.

- soy Zoey. - les dije a todos los demás. - es un placer.

- vamos a hacerlos pedazos. - Dustin dice con mucha emoción.

...

Estuvimos  jugando por lo que parece una hora y casi perdíamos. En serio es bueno, el maldito de Eddie en efecto es bueno jugando y no quiero que nos gane. Tiene todas sus jugadas bien preparadas y básicamente es el único de su equipo que hace algo. Pero me gusta mucho como juega, le mete mucha emoción y hasta actúa las escenas. Siempre que imitaba una jugada, me reía. Si, definitivamente me la estaba pasando mejor aquí jugando que viendo un partido de basquetbol donde Steve estaba en una cita y aparte solo pensando en Nancy mientras yo estaba solo a un lado existiendo.

Saber que ese tipo de cosas me enojan tan solo me confirman que quizás, solo quizás si tenga un pequeño enamoramiento con Steve. Lo cual, odio. Porque es justo lo que Robin me dijo que pasaría y no quería ser una chica mas que se enamora de el chico popular y perfecto.  Me convertí en la persona que juré que nunca seria pero que casualidad. Pero lo bueno es que solo me quedo aquí para las vacaciones. No veo porque desarrollar sentimientos por personas con las cuales conviviré muy poco tiempo.

- ¿te quedas o te peleas? - Eddie nos pregunta y lo miré muy molesta. - ¿qué pasa? Creí que estabas muy segura de que ganarías.

- vamos a seguir jugando. - le dije con una sonrisa para molestarlo. - y vamos a ganar, no cantes victoria aun. - el me sonríe ahora. - yo digo que peleemos hasta la muerte.

- hasta la muerte. - repite con emoción Dustin.

- hasta la muerte. - repite ahora Mike y lo terminamos decidiendo todos muy emocionados.

- chicos odio decirlo pero tenemos que huir. - arruina el momento uno de los chicos y voltee a verlo molesta. - hasta la muerte no es literal.

- vecna nos liquido, no podemos con dos jugadores. - comenta otro compañero.

- no sean miedosos. - Dustin dice poniendo los ojos en blanco. - no podemos rendirnos ahora... a menos de que tu así lo quieras Zoey. - me quedé pensando en que decirles.

- hey, si me dejan intervenir. - escuchamos a Eddie y todos volteamos a verlo. - sería producente que escuchen a Gareth el grande. Huir no tiene nada de vergonzoso. No se hagan los héroes. No hoy. - entrecerré los ojos.

- hagámoslo. - les dije muy decidida.

- matemos a este hijo de puta. - Dustin dice y toma de los dados. Estaba tan nerviosa, si el fallaba, teníamos mucho porcentaje para que yo también perdiera. Todo estaría perdido, al menos casi todo. Y en efecto, no fue un buen lanzamiento.

- te equivocaste. - Eddie dice muy emocionado de que esta a nada de ganar. - ya solo falta que tu mi querida Zoey lances y por favor, adelante. Se mi huésped. - dice apuntando hacia la mesa. - me emociona tanto saber que sacaras.

- de acuerdo. - tomé del dado. - Eddie, estoy pensando en que me vas a deber una vez que gane.

- cariño, yo ya me imagine que tantas cosas voy a pedirte cuando mas bien, yo gane. - se cruza de brazos.

- primero que nada, no vas a ganar y segundo, no apostamos varias cosas, solo una.

- me emociona la idea de un beso. - me sonrojé toda una vez que el dijo eso. - ¿qué piensas?

- ew. - escucho a Mike decir detrás mio.

- eso no va a pasar. - sonreí y solté del dado. Todos volteamos a la mesa para ver en que cae y este gracias a todos los cielos, cayó en 20. Justo el numero que ocupábamos. - porque he ganado.

- ¡golpe critico! - grita emocionado Dustin y todos los demás del equipo. Me agitan los hombros y me abrazan.

- para eso jugamos. - Eddie me aplaude y voltee a verlo, este abre sus brazos y se inclina para mostrarse en forma de alabanza.

Tomé de mis cosas y los chicos también y salimos del salon para ir a la salida y al menos yo, esperar a Robin para regresarnos a la casa.

- muchas felicidades Zoey. - Eddie me alcanza en la salida. - te debo algo, cuando quieras puedo darte ese beso que tanto deseas.

- no gracias, estoy bien así. - me reí y el conmigo y Dustin llega a la conversación.

- no es el caso Eddie, ella esta saliendo con Steve. - Dustin dice algo emocionado. - ¿no es así? Era evidente por como te miraba y tu a el.

- ¿sales con Steve el rey de la escuela el año pasado Harrington? - se ríe Eddie y honestamente no veo lo gracioso. - eso no me lo esperaba.

- ¿por? - me crucé de brazos. - ¿no crees que pueda salir con el?

- no. - se ríe de nuevo.

- oh perdona por no ser tan genial como Steve. - me enojé ante eso.

- todo lo contrario, creo que tu si eres genial y divertida y única y el bueno... solo un chico mas. Uno guapo, claro. - fue un halago extraño pero uno que acepto con gusto.

- oh, Steve si es fabuloso. Me consta. - Dustin dice, aqui viene.

- solo les aclaro, no estamos saliendo. Solo somos amigos. - les dije antes de que dijeran algo que no deberían enfrente de el.

- yo me voy. - Eddie dice y se voltea para buscar de su carro.

- adios. - le dije a lo lejos pero este ya se había alejado mucho. Lastima, realmente me la había pasado muy bien hoy.

- hola ¿cómo te fue en tu juego? - Steve me toma de la mano y me da una vuelta lo cual me dio mucha ternura. - seguramente me extrañaste mucho.

- ganamos, y todo gracias a ella. - dice Dustin mientras me agita el brazo. - Steve, amo a tu novia.

- no soy...

- si, es la mejor. - Steve no se lo niega y me abraza de los hombros. - ¿cenamos?

- ¿dónde esta Robin? - le pregunté.

- saldrá con las chicas de la banda y créeme, eso le conviene y mucho. - me regresa mi bolsa de palomitas que olvidé por un momento.

- ¿y Heidi?

- um... realmente no tengo idea. - el dice y levanta ambos hombros. - pero insisto, te invito a cenar. ¿Vamos?

- por supuesto. - asentí emocionada. - ¿vamos? - le dije a Dustin. - supongo que si te dejan.

- claro, deja voy por mis cosas. - dice emocionado y se va corriendo al salon.

- invitaste a Henderson a nuestra primera cita, veamos como sale todo esto. - el camina a su carro y yo lo sigo.

- no es una cita, Steve. Solo aclaro eso.

- curioso, yo si estaba viendo esto como una. - me su mano por su mentón y se va a subir a su asiento para por fin manejar. Antes de yo entrar, tan solo me volteo para que no me vea, y sonrío. De la emoción literal.

- si que te gusta. - me asusté cuando escuché la voz de Dustin.

- por supuesto que no. - sonrojada, entré al carro de una vez por todas.