Apple White
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Apple White
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Ever after High se encontraba encantadora como cualquier otro día, donde la hija de Blancanieves, desde pequeña, Apple había heredado la amabilidad y el carisma de su madre. Era amada por todos en la escuela, ella prácticamente era como un rayo de sol en un día nublado, siempre saludando a cada compañero con una sonrisa radiante que iluminaba incluso los corazones más apagados.
Una tarde, durante un descanso en su habitación, Apple decidió salir al balcón, un lugar que era su refugio secreto. El aire fresco acariciaba su rostro mientras contemplaba el paisaje, una sinfonía de colores que abarcaba desde el verde profundo de los árboles hasta el azul vibrante del cielo. Fue en ese instante de paz cuando su mirada se posó en un pequeño sapo que la observaba fijamente, con ojos tan grandes como dos perlas brillantes.
—Hola, soy T/n hija de Tiana la princesa del sapo—Dijo el sapo con una voz suave y melodiosa que parecía resonar en el aire—He estado buscando a mi amor verdadero, aquel que me devuelva a mi forma humana con un beso de amor verdadero.
Intrigada, Apple se acercó, inclinándose hacia el pequeño ser que parecía tan lleno de anhelos. T/n le relató su historia con un susurro, detallando cómo su destino siempre sería una condena a vagar por el mundo en forma de sapo.
—¡Claro que te ayudare! Una Apple White siempre cumple con su palabra—Se levanta haciendo una pose en forma de heroína.
T/n la miro con los ojos brillantes admirando la valentía y la belleza de la rubia.
—Gracias, Apple —Respondió T/n, su voz temblando de emoción—No sé cómo podré agradecerte. He perdido la esperanza de encontrar a alguien que quiera ayudarme.
Apple sonrió, sintiendo que la calidez en su pecho se expandía.
—Cada uno de nosotros tiene un papel que desempeñar en esta historia. Y este es el tuyo, T/n. ¿Tienes alguna idea de cómo podríamos encontrar a tu amor verdadero?
T/n se rasguñó la cabeza, pensando en lo que había escuchado de los cuentos y leyendas que le contaba su madre.
—He oído que los verdaderos amores se encuentran en momentos inesperados, y a menudo están conectados a la magia de los corazones sinceros. Quizás debamos visitar el Bosque donde se dice que habita un espíritu que conoce los secretos del amor.
Apple se iluminó con la idea.
—¡Eso suena emocionante! Pero, ¿No es peligroso? El Bosque de los Susurros está lleno de criaturas misteriosas y trampas mágicas.
—Lo sé, pero también he escuchado que, si nos acercamos con pureza en el corazón, el bosque nos guiará. Confía en mí, Apple—T/n miró a Apple con una determinación que desbordaba su pequeño cuerpo—. Juntas podemos enfrentarlo.
Apple sintió una chispa de aventura en su interior.
—¡De acuerdo! Preparémonos—Se volvió hacia su habitación para recoger algunas cosas esenciales: un mapa, su diario y un par de manzanas, por supuesto, porque nunca se sabe cuándo podría ser necesario un bocadillo.
Mientras se preparaban para la aventura, T/n no pudo evitar sentirse un poco nervioso.
—¿Y si no encontramos a mi amor verdadero? —Preguntó, la voz temblorosa.
—No pienses en eso, T/n. —Apple le dio un suave toque en el hombro—Lo importante es que estamos juntas y que vamos a hacer todo lo posible. La verdadera magia está en el viaje, no solo en el destino.
El bosque se reveló ante ellas como un lugar encantado, repleto de árboles que susurraban secretos y flores que parecían bailar al compás del viento. Mientras se sentaban en un tronco cubierto de musgo, conversando sobre sus sueños, T/n notó que Apple no brillaba con la misma luz de antes.
—¿Qué te pasa, amiga? —Preguntó con preocupación, sus ojos profundos llenos de ternura.
Apple, con lágrimas en los ojos que parecían reflejar el cielo gris, le reveló su pesar sobre la ruptura con Darling a saber que él no era su amor verdadero, añorando conocerlo en algún momento; pero se sentía vacía a no tenerlo cerca y su inquietud de no encontrar nunca a su verdadero amor.
T/n, con su cálido corazón de sapo—Eres más valiosa de lo que crees. El amor verdadero no siempre se presenta como esperamos, pero está en los gestos y las palabras. No te desanimes—Las palabras de T/n resonaron en el corazón de Apple, como un canto de esperanza que comenzaba a disipar la sombra de la duda.
Las palabras del sapo resonaron en el corazón de Apple, como un canto de esperanza que comenzaba a disipar la sombra de la duda. Sin pensarlo, Apple se inclinó y sus labios rozaron los de T/n en un acto de amor sincero. En un instante mágico, una luz brillante envolvió al sapo, iluminando el bosque con un resplandor deslumbrante. Cuando la luz se disipó, ante Apple apareció una hermosa joven, con cabello resplandeciente y una sonrisa radiante que podía iluminar los días más oscuros. Ambas se miraron, sorprendidas y asombradas.
—¡Eres tú! —Exclamó T/n, y en ese preciso momento, Apple entendió que había encontrado a su amor verdadero.
Ambas chicas se quedaron mirándose, la magia del momento envolviendo el aire a su alrededor. Apple sintió cómo su corazón latía con fuerza, comprendiendo que el amor verdadero no siempre se presenta de la manera que uno espera.
—No puedo creerlo —Dijo Apple, aún asombrada—¡Eres... eres increíble!
T/n sonrió, una chispa de alegría brillando en sus ojos.
—Gracias, Apple; pero, ¿Qué significa esto? ¿Cómo es que...?
—Creo que el beso fue un acto de amor sincero. —Apple se sintió un poco avergonzada—Quería que supieras cuánto vales, y quizás, en el proceso, mi corazón también encontró algo que le faltaba.
T/n no dijo nada simplemente la miro con ojos de amor, para propinarle muchos besos en los labios de la rubia que se sonrojaba el amor que le transmitía, juntando sus frentes entre risas y besos.
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