6. Conviviendo con las Rebels
Wallace se encontraba en el establo con Galeón cepillando su crin
Wallace: bueno viejo amigo, oficialmente mi titulo de Príncipe ya no vale nada, ya no soy considerado Royal... y tal vez algunos amigos Royal me consideren una deshonra... pero bueno, a fin de cuentas... es lo que quería... mas o menos... pero lo bueno... pude conocer a Raven y a otros amigos y amigas
dijo recordando a Raven y a Cerise, y se le dibuja una sonrisa.
En las clases, muchos de sus compañeros Royals se les quedaba mirando, su noticia ya se había esparcido por toda la escuela, en parte le entristecía que lo vean así, pero al final, solo tuvo que ignorarlos. En el almuerzo, Wallace ahora se sienta alejado de los Royals, y en esta mesa, se sienta Raven, y esta le sonríe, y por debajo de la mesa se toman de las manos, decidieron por el momento mantener su relación en secreto
Raven: ¿como te ha estado yendo?
Wallace: pues... relativamente bien... las clases de administración de Reinos se sintió un martirio, pero bueno
luego al lugar se sientan Cerise y Maddie
Cerise: vaya, tuve el placer de sentarme con el "Príncipe Semi-Rebelde"
dijo cómicamente, haciendo que las tres chicas se rían, lo mismo con Wallace
Maddie: oye Wallace ¿luego te gustaría pasarte por el café de mi padre? te gustará el té de ahí
Wallace: de acuerdo Maddie
pero, al lugar se acerca Apple, la cual estaba muy callada
Wallace: ehhh... ¿pasa algo Apple?
Apple:... Wallace... después del almuerzo ¿podrías acompañarme?
Wallace estaba confundido, y las tres chicas miran extrañas a Apple
Wallace: eh... de acuerdo
y terminando de almorzar, Apple toma a Wallace de la mano, y se lo lleva del lugar, Raven, Cerise y Maddie estos les daba ciertas malas vibras, sobre todo a Raven.
En la Villa al final del cuento, Apple y Wallace ayudaban a personas que encontraban, si bien era algo que Wallace disfrutaba, sabía lo que Apple pretendía. Una vez que terminaron de ayudar gente, se sentaron en una banca a descansar
Wallace: me la pasé bien Apple, pero... tengo un compromiso
pero Apple lo detiene
Apple: Wallace, por favor dímelo ¿por qué no quieres seguir tu destino? se que no tienes uno en el libro de cuentos legendarios, pero aún así, tenías un destino encantador, un rey, un héroe ¿por qué lo dejarías de lado?
Wallace: no lo estoy dejando de lado Apple, solo sigo mi destino a mi manera, mi padre no espera como el, espera que sea como yo quiero ser... Desde niño, siempre me vieron como Príncipe, nunca tuve amigos con los cuales congeniar, nadie en Camelot era mi amigo de verdad, los niños solo me trataban como un líder, no como alguien de su edad, y eso no me gusta, quiero un trato igualitario, no uno especial... por eso me llevo mejor con los Rebels, ellos me tratan como quería ser tratado
luego toma las manos de Apple
Wallace: sigan sus destinos, y yo sigo el mío propio, a ustedes también los considero amigos
Apple se ruboriza por las palabras y la acción de Wallace, luego este suelta sus manos
Wallace: ya tengo que irme
y Wallace se retira, dejando a Apple impresionada
Apple: Wallace... solo quiero que seas un buen rey
dijo imaginando a Wallace siguiendo su destino, siendo el nuevo soberano de Camelot, pero no solo eso, a su lado, se imagina a ella misma como su reina, lo que la hace ruborizarse
Apple: ¿por qué imaginé eso?
decía ruborizada.
Wallace caminaba por la Villa, hasta que ve la dichosa casa del Té de las Maravillas
Wallace: debe ser aquí
se acerca la puerta, y al abrirla, nada mas ve teteras volando, relojes, puertas en todos lados, todo ahí adentro era loco y caótico, hasta que frente a el aparece Maddie
Maddie: ¡Hola Wally! ¡bienvenido a la Casa del Té de las Maravillas!
Wallace: y vaya que es de las maravillas
decía impresionado por el lugar
Maddie: sabía que vendrías, así que te guardé una mesa
toma a Wallace del brazo, y lo lleva a una mesa, y le pasa un menú que era una extraña mariposa
Maddie: ¡te aseguro que te encantará nuestro Té!
Wallace: de eso estoy seguro
luego Wallace pide varias galletas, y diferentes tipos de té, y en un abrir y cerrar de ojos, todo lo que pidió estaba ahí
Wallace: eh... ¿Cómo hiciste eso?
Maddie: jijiji, no por nada se llama la Casa del Té de la Maravillas
Wallace: oh, cierto, provienen del País de las Maravillas ustedes
Luego Maddie se sienta junto a Wallace, y ambos tienen una fiesta del té
Wallace: y ¿Cómo es el país de las Maravillas? desde muy pequeño he querido conocerlo?
Maddie: oh, bueno, em... es difícil saber como estará ahora... ya que ambos mundos están incomunicados
Wallace: ¿incomunicados?
Maddie: si... no hay forma de llegar al País de las Maravillas de ninguna forma, todas las entradas están bloqueadas
luego le cuenta lo que sucedió en el País de las Maravillas, sobre como la Reina Malvada intentó apoderarse de este, y como ella y su padre, Kitty y Lizzie tuvieron que huir del lugar, debido a un hechizo usado para detenerla, todos los caminos que conectaban al País de las Maravillas con Ever After estaban cerrados
Wallace: wow ¿la madre de Raven hizo eso? que mal
Maddie: hay veces que extraño mi casa... espero que algún día vuelvan a reabrirse las entradas
dijo sonando algo triste, Wallace nota esto, y le sujeta la mano
Wallace: tal vez no entienda el dolor de eso, pero se que el País de las Maravillas siempre vivirá dentro de ti, en tus recuerdos y en la forma en que hablas de él. Y mientras lo lleves en tu corazón, nunca estará realmente cerrado. Tal vez algún día se vuelvan a abrir las entradas, pero hasta entonces, siempre tendrás un pedacito de tu hogar contigo
esas palabras impresionan a Maddie, lo cual hace que suelte unas lagrimas
Maddie: ¡Gracias Wally!
Maddie le da un fuerte abrazo a Wallace, el cual lo toma por sorpresa, pero, solo le corresponde el abrazo
Maddie: cuando vuelvan a reabrirse los portales, te prometo llevarte a conocer el País de las Maravillas
Wallace: wow, gracias Maddie
Maddie le sonríe dulcemente, y ambos continuaron con su pequeña fiesta del té.
Caía el atardecer, y Wallace sale de la Casa del Té de las Maravillas
Wallace: todo fue... maravillastico
Maddie le sonríe dulcemente
Maddie: ¡espero que vuelvas rápido como conejo!
Wallace: tal vez lo haga
luego Wallace se despide de Maddie, y se va de vuelta a la escuela
Maddie: el es todo un príncipe en el sentido de la palabra, je je
decía con un ligero rubor.
Al día siguiente, Wallace también había acordado pasar el rato con Cerise, pero antes, se le ocurrió llevar unos bocadillos, así que decide llegar a un lugar en especial, y lo visualiza, entra en la tienda, y ahí se encontraba Ginger
Wallace: buen día
dijo alegremente, Ginger sale de su cocina, y al ver a Wallace, se emociona
Ginger: ¡Wallace, buenos días!
Wallace: ¿Cómo ha estado mi repostera favorita?
dijo con camadería, Ginger le dio un poco de vergüenza lo que dijo Wallace
Ginger: pues, de salud, bien, pero en el negocio... je je... no tanto
dijo con una sonrisa incómoda
Wallace: bueno, por lo primero me alegro
dijo algo triste por su situación
Ginger: bueno... ¿y tu como has estado? me enteré de que oficialmente ya no eres considerado un Royal
Wallace: pues si, pero la verdad, no es como que eso me afecte mucho, estoy más cómodo así... tu también eres Rebel ¿no?
Ginger: bueno, si, no quiero seguir el mismo destino de mi madre, quiero cocinar para el mundo, para mis amigos... pero Helga y Gus no me dan la oportunidad
Wallace: esos dos la verdad son algo molestos, pero, nadie en la escuela sabe de lo que se pierde, no conozco mejor repostera que tu
Ginger se siente alagada
Wallace: deberías mostrarles tu postres, lo deliciosos que son, y comprendan que no eres mala, tal vez Raven y yo te podamos ayudar
Ginger: ¿harían eso por mí? ¡gracias, eres muy dulce que te comería, je je je!
dijo tiernamente. Ginger se dirige al mostrador
Ginger: vendrás por lo mismo de la otra vez ¿no?
Wallace: je je, que comes que adivinas, esta vez será para llevar, me invitaron a un picnic, y quería llevar bocadillos de cortesía
Ginger: ¿seguro? ¿no dirán nada por... saber quien los preparó?
Wallace: créeme, lo aceptará
Ginger accede, y prepara una caja con los postres que sabe que a Wallace le encantaron, las galletas, barras de cereal, los pasteles y flanes
Ginger: aquí tienes
le entrega su orden
Wallace: muchas gracias Ginger
Wallace iba a sacar el dinero, pero Ginger lo detiene
Ginger: insisto... la casa invita
dijo cordialmente
Wallace: ¿segura?
Ginger solo asiente y le dedica una dulce sonrisa, algo que sonroja un poco a Wallace
Ginger: em... de acuerdo, solo por esta vez... muchas gracias
Wallace le dedica una despedida, y sale de su tienda
Ginger: (¿debería ir con el?... igual no tengo nada que hacer... pero no se si en ese picnic haga mal tercio)
decía en su cabeza.
Wallace con la caja ingresa al bosque encantado, y llega al lugar que le había acordado Cerise, pero, no había nadie, todo estaba muy calmado
Wallace:... extraño... ¿llegué muy pronto?
pero siente una presencia, mira a su alrededor y no ve nada
Wallace: (ya se lo que trama)
dijo en su mente, deja la caja con postres en el suelo, finge que no pasa nada, hasta que, de los arbustos surge Cerise, salta e intenta derribar a Wallace, pero Wallace sorpresivamente logró reaccionar mas rápido que Cerise, por lo que la evade, y mientras la evadía, la sujeta del brazo y del hombro, y la derriba a ella, y Wallace se queda encima de ella
Wallace: je je, parece que la cazadora se volvió la presa
Cerise estaba sonrojada y sorprendida por los hábiles reflejos de Wallace, pero luego de unos segundos, en su rostro se dibuja una sonrisa triunfante
Wallace: ¿por qué sonrí- ¡ah!
no termina de hablar, ya que fue derribado por el lobo de Cerise
Cerise: por eso
el lobito le lamía la cara, y Wallace ríe
Wallace: ¡eso fue trampa!
dijo acariciando al lobo
Cerise: parece que tus reflejos no son tan buenos
Wallace: me tomó por sorpresa, no estaba concentrado
Cerise solo ríe
Cerise: me alegra que llegaras
Wallace: bueno, traje unos postres, por si gustas
Cerise de su cesta saca un mantel, y lo pone en el piso, luego ponen la caja en el medio, Cerise abre la caja
Cerise: wow, huelen delicioso
Wallace: y saben deliciosos
dijo seguro, luego los dos tienen una mañana agradable, Cerise prueba los postres, y queda fascinada
Cerise: wow, son deliciosos
Wallace: te lo dije
Cerise: ¿quien los preparó?
Wallace: supongo que conocerás a Ginger
Cerise: ¡¿Ginger Breadhouse?!
Wallace: así es
Cerise: y... ¿ella no intentó comerte o algo?
Wallace: ¿comerme? es una persona bastante tierna, y una gran repostera
Cerise: entonces ¿lo que dicen Helga y Gus no es cierto?
Wallace: obvio que no, ella solo quiere que todos prueben sus postres
Cerise: pues vaya, sin duda son deliciosos
luego siguieron probando los postres que trajo Wallace. Ambos tenían un momento agradable y amistoso, hasta que, escuchan las campanadas de la villa anunciando la hora
Cerise: ¡no puede ser, tenemos 10 minutos para llegar a la escuela!
Wallace oh oh, tengo clases de formación de príncipes
los chicos se levantan rápidamente, recogen todo , y corren de vuelta a la escuela, pero en el camino, el par ve un ciervo pasar, a Wallace le da bastante igual, pero al ver a Cerise, esta empieza a Gruñir
Wallace: ¿Cerise?
los ojos de Cerise se vuelven amarillos, esta actuaba como un lobo
Wallace: Cerise ¿que te pa-
no termina de hablar, ya que Cerise corre a toda velocidad detrás del ciervo
Wallce: ¡Cerise!
este intenta correr detrás de ella.
Salieron del bosque Encantado, Cerise perdió al ciervo de vista, y vuelve a la normalidad. Wallace llega después de unos segundos, jadeando del cansancio
Wallace: wow... eres... veloz...
intenta recuperar el aliento, y se sienta en el suelo
Wallace: ¿que fue eso?
Cerise se apena
Cerise: lo siento, es que
ella suspira y se sienta al lado de Wallace
Cerise: es algo que no puedo vitar...
Wallace: ¿puedes contármelo? sabes que soy el menos indicado para juzgar a alguien... ex Royal ¿recuerdas?
Cerise se ríe
Cerise: bueno... sería un gran alivio contárselo a alguien mas aparte de Raven
saca de su caperuza un collar en forma de hoja y lo abre, mostrando una foto de Cerise de niña, su madre Caperucita Roja, y el que parecía su padre
Cerise: mi familia está...
presiona un botón del costado, y la apariencia de su padre cambia
Cerise:... guardando un secreto
Wallace se sorprende por lo que pasó
Wallace: si esa es Caperucita Roja, o sea, tu madre, ese... ¡¿es el Lobo Feroz?! ¡¿tu padre es el Lobo Feroz?!
Cerise suspira
Wallace: tranquila, prometo no decir ni una palabra... de hecho... tampoco he sido muy sincero respecto a mi familia
Cerise: ¿ah si? ¿que tiene de malo? eres hijo del Rey Arturo, y tu madre, la Reina Ginebra, que dicen que rivaliza en belleza con Blancanieves
Wallace suelta un suspiro
Wallace:.. rivalizaba, en tiempo pasado
Cerise no entiende
Wallace:... (suspiro)... mi madre fue ejecutada por ordenes de mi padre
esa información impactó y tomó por sorpresa a Cerise
Cerise: ¡¿como pudo hacer eso?! ¡¿y aún así admiras a tu padre?!
Wallace:... Cuando tenía siete años, mi madre traicionó a mi padre con Lancelot, uno de los Caballeros de la Mesa Redonda, e intentaron orquestar un golpe de estado en Camelot, una guerra civil que duró siete meses... hasta que mi madre y Lancelot fueron capturados. Mi padre intentaba darle una oportunidad a Ginebra de que volviera en si, pero ella ni me reconocía como su hijo, y prefirió a Lancelot antes que a mi padre, y el con todo el dolor del mundo, tuvo que actuar como el Rey que es... y tener que sentenciarlos... Le prometí a mi padre que sería el Rey que espera que yo sea, que yo elija mi destino, y al principio seguía los mismos pasos de mi padre, fui pupilo del mago Merlín, y luego fui entrenando hasta mi edad actual, pero el siempre me decía "no eres un reflejo de mí ni de tu madre, se el Rey que tu crees que Camelot necesita"... y eso es lo que pasa
Cerise queda impactada por semejante historia
Cerise: yo... lo lamento... no tenía idea
dijo triste, pero Wallace le acaricia la cabeza, sonrojando a Cerise
Wallace: descuida... nadie aquí lo salve, salvo Raven también, y ahora tú... no sabemos en Camelot como esto impactaría en el resto de reinos, por lo que nadie sabe realmente que la Reina Ginebra ya no está entre nosotros
Cerise: lo entiendo... podría provocar un gran revuelo... prometo no contarlo a nadie, si tu no le cuentas a nadie mi secreto
y Wallace toma la mano de Cerise delicadamente, y se arrodilla
Wallace: juro por mi nombre
dijo hablando como la realeza, lo cual sorprende a Cerise, pero Wallace se da cuenta y se levanta rápidamente
Wallace: perdón... costumbre de casa, je je
Cerise sonríe
Cerise: Wallace... gracias por ser tu... eres un verdadero príncipe
y Cerise abraza el brazo izquierdo de Wallace, haciendo que este se sonroje
Wallace: em... n-no hay de que...
Cerise le sonríe gentilmente
Wallace: em... ¿no se nos hacía tarde para la escuela?
Cerise asiente, y ambos caminan juntos, pareciendo pareja de enamorados.
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