Narra Mark

-No te preocupes, si algún día necesitas algo, solo llámame. – Le paso mi número telefónico.

-Gracias. – No le iba a pedir el de ella, por ahora estaba bien que solo tenga el mío y que lo haya aceptado.

Luego de eso nos quedamos un tiempo en silencio, ninguno de los dos dijo ni una sola palabra, sin embargo no fue para nada embarazoso, al menos para mí, además ella ya no se encontraba llorando, todas las veces que la vi estaba en esa situación, no quiero volver a verla más así, no quiero volver a verla llorar, luego de un rato comenzó una llovizna que fue aumentando a medida del tiempo.

-Esto no parece que fuera a mejorar.

-Está bien si te quieres ir, yo me quedaré un rato más, en realidad no me interesa estar mojada. – No quería irme y dejarla ahí sola, en una plaza de noche, aunque ella lo prefiera, antes de responderle, la lluvia se largó con más fuerza y empezaron a sonar algunos truenos.

-Ven. – Me dijo, nos metimos dentro del tobogán con techo, que parecía un iglú, el lugar era estrecho y ambos estábamos empapados.

Miro por la "Puerta" del tobogán. –Hasta que se calme un poco, creo que es mejor es quedarnos aquí.

-Voy a salir.

-No, ¿Qué haces? Truena es peligroso.

-No exageres. – Empieza a salpicar los charcos y a jugar en la lluvia, se veía como una niña inocente, en todo este tiempo, la había visto de una manera más fría, pero se ve que tiene más de lo que muestra y ahora por primera vez la vi sonreír. Salgo del lugar la alzo y la tiro por el tobogán, parecía uno de esos que tiene agua, como en los parques de diversiones, al menos no había arena, si no sería un desastre. Luego ella me hace lo mismo a mí.

-No pesas nada, ¿Acaso eres un hombre?

-¿Acaso un hombre se define por cuánto pesa? - La intento agarrar para derribarla, pero se resiste y me tira a mí, no podía, por más que estemos jugando una chica tener más fuerza.

-Eres débil. – Me dice en forma de burla.

-¿Ah sí? – La doy vuelta a mi lugar, mi rodilla se resbala y quedamos a una corta distancia. Luego de aproximadamente 3 segundos, que para mí fueron eternos, me aparto de ella.

-Hay que volver al refugio. – Dije algo sin sentido por los nervios de la situación.

Ella se ríe –Si ya estamos mojados, ¿Cuál es el sentido de volver allí?

-Permiso – Me corre de la "Puerta"

-¿Qué haces? – Se sacó su campera y la coloca en el piso del tobogán.

-Voy a descansar hasta que la lluvia pare. – Entró al lugar y me recuesto a su lado, no podía dejar de mirarla, en tan poco tiempo ya tenía ciertos sentimientos hacia ella, en realidad 1 mes, pero no había vuelto a tener un acercamiento, sobre todo así, como el de ahora. Cierro los ojos y descanso un poco.

Me despierto y me doy cuenta que ya había amanecido, no recuerdo el momento en el que me dormí. -¿Momo? – Intentó despertarla, pero ella no hacía ni el más mínimo movimiento, en uno de mis intentos por despertarla, le acaricio el pelo, justo ahí ella se levanta, y me pongo a buscar algo en mis bolsillos.

-Mmm... ¿Cuánto tiempo pasó? ¿Me estabas tocando el cabello?

-Eh... Solo te quería despertar, lo intente de varias formas pero no lo conseguía, ya amaneció, mi plan no era dormirme, pero termine de esa manera.

-Entonces ya podemos irnos. – Se fija en su celular. -¡Son las 6 AM!– Le suena la panza.

-¿Tienes hambre?

-Es solo que... anoche no cené.

-¿Quieres que vayamos a comer algo?

-Ya que insistes, pero antes me cambiare esta ropa en mi casa, me siento toda pegoteada, si quieres espérame aquí, hasta que vuelva.

-Te acompaño, no tengo problema. – Fui junto a ella a su casa, yo la espere afuera, hasta que saliera nuevamente.

-Listo, ¿Tú estarás bien así? – Me suena el celular y atiendo.

-Está bien, estaré en casa dentro de poco tiempo. – Kai justo en este momento se le ocurre llamarme para pedirme un favor, pero él es el que me deja vivir en su casa, así que no puedo negárselo.

-¿Debes irte?

-Debo pasar por mi casa, para arreglar algo, pero no queda muy lejos de aquí, así que... el almuerzo lo podemos hacer igual. – Kai se había acordado de que la ducha en la casa no estaba funcionando correctamente y quería ver si lo podía arreglar, ya que él no estaba allí.

-Está bien... - No había sonado muy convincente, luego me había acordado, ella seguro pensaba que Kai iba a estar, así que no iba a querer ni entrar.

Llegamos y fue como dije, no quiso entrar.

-Si quieres pasa.

-Prefiero esperarte aquí fuera.

-No sé cuánto me vaya a tardar, ¿Estás segura? Kai no está. – Lo había estropeado, no debería haberlo nombrado.

-¿Kai? No me interesa, solo no quiero incomodarte a ti allí.

Pasan alrededor de 20 minutos y ella entra, ya que le había dejado la puerta abierta, por si cambiaba de opinión.

-¿Mark?

-Estoy en el baño. – Ella entra. - ¿Qué pasó?

-Lo vi a Kai venir para aquí, sinceramente no quiero cruzarlo, en vez de entrar debí ir a otro lado, a la esquina, no se...

-Tranquila, seguramente viene para aquí, pero lo distraeré, para que no te vea, y nos podamos ir ¿Okey?

-Okey.

Kai entra. -¿Mark? ¿Va todo bien? – En ese momento me distraigo, la ducha se desprende hacia Momo.

-¿Necesitas ayudas?

-No, está bien. – Intento agarrar el mango rápidamente, para que no llegue a golpearla, pero de todos modos le llegó a dar un pequeño golpe en la frente, cuando lo agarro, ella se choca contra la pared, haciendo que la luz se apague, quedamos cerca nuevamente, pero esta vez no me aparte, ella se hizo para dentro, la ducha volvió a la normalidad y dejó de mojarnos, Kai en ese momento entra y nos ve.

-¿Ya est... - Se quedó asombrado, yo me aparté de ella, Momo también tenía cara de sorprendida y de cómo no saber qué hacer, así que simplemente sale del baño y se retira de la casa sin decir una sola palabra.

-Veo que pudiste arreglar la ducha... - Me miró de una manera desafiante.

-No es como tú piensas.

Él se ríe. – No debes decirme absolutamente nada, no es como si tuviera algo con ella.

-Enserio, apenas la conozco.

-Desde cuándo... ¿La conoces? Mentiste al no saber nada de ella antes

-Kai, la termine conociendo, hace poco, no sabía que ella era tu novia antes. – Acababa de estropear con lo que había dicho, no sonaba nada bien y se podía malinterpretar.

El me agarra de la camisa. -¿Entonces me tomaste como idiota todo este tiempo? – Yo me aparto de él.

-¡CÁLMATE! No Salí, no estoy saliendo, y no voy a salir con ella. – Sin embargo era lo que quería. -La conocí en la entrevista de trabajo, y no sabía que era tu novia, cuando lo supe nada pasó, porque no somos ni amigos.

-Eso no explica la situación con la ducha, pareciera que la estabas por besar.

-NO, ella solo se asustó... y porque llegaste repentinamente, la ducha golpeó su cabeza, se estaba escondiendo de ti en realidad... - Kai me interrumpe.

-No me interesan las excusas, ya se que ella me dejo de querer hace mucho tiempo.

-No es así, ella todavía no te olvido.

-¿Qué sabes? No saliste con ella, o tal vez en eso estás ahora...

-No pienses cualquier cosa....

-Solo ten cuidado... No termines como yo.

-¿Por qué no me escuchas?

-¿Qué tengo que escuchar?

-No soy el que deba decirlo... pero dime una cosa, ¿La sigues queriendo a Momo? Si ella te diría que no te olvido, y no te puede sacar de su cabeza ¿Volverías?

Da un suspiro -La quise... Pero no terminamos bien, y lo sabes, como para que venga un día a disculparse, y hacer como si nada pasó, ella puede seguir su vida como quiera, como yo lo voy a hacer también. – Le llega una llamada, corta rápidamente cambiando su expresión de enfado a preocupado.

-¿Qué te pasó?

-Eh... Debo irme, alguien me necesita.

Me voy a dormir, y recuerdo el día que había tenido junto a Momo, en realidad la noche, lo que hace que sonría como un estúpido. Luego de que termine el día y los feriados, vuelvo a trabajar, esta vez llegando más temprano que de costumbre.

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-¿Mark? ¿Qué miras en la ventana con esa cara de bobo? Se te va a quemar la comida.

-Eh... Sí, lo siento. – Vuelvo a mirarla, Momo estaba en la otra tienda, haciendo cupcakes se veía adorable, en cambio yo, yo estaba en una parrilla, lleno de grasa. De repente ella levanta su mirada hacia este lugar y se da cuenta de que la estaba observando, yo rápidamente sin pensarlo desvié no solo la mirada sino que también la cabeza, eso me delataba el doble, ¿Por qué había reaccionado así? Si yo fui el que la persiguió desde un principio, volví a levantar un poco la mirada, me vio y sonrió, le devolví la sonrisa, luego otra persona, un chico, se acerca a ella y la abraza, la mirada había sido para él, desdibujo mi sonrisa en ese instante y continúo cocinando.

Las veces que ojeaba a Momo estaba junto a ese chico, parecía menor que ella

Luego de terminar el día regreso a mi casa caminando, se había hecho tarde, ya que me quede dando unas vueltas, pensando en una llamada que había tenido, de mi mamá, no sabía nada de ella desde hace ya mucho tiempo, en eso, veo a lo lejos a Momo, tenía muchas ganas de acercarme a ella, pero ¿Qué iba a decirle? También, que hacía por estas horas sola allí, decidí pasar por ahí para... no sé... también me daba algo de vergüenza si tal vez me vio observándola en la tienda, se sienta en una hamaca y se larga a llorar, no podía verla así, así que me acerco a ella para intentar consolarla.  

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  Perdonen la tardanza del capítulo~ Espero que lo sigan acompañando!

Va a ser el último del año, espero que tengan un buen 2017! ♥