Capítulo 2: ¿Quiénes Somos?
Shinji era un manojo de nervios, estaba aquella muchacha de chaqueta blanca en frente de sus ojos, mirando el copo de nieve intrigada. Shinji la miraba nervioso, su ojos rojos eran realmente únicos, jamás había visto unos así, tampoco sabia si era posible ese color en humanos. El color pálido de su piel, también era muy destacable, no solo era muy blanca, si no que también, pareciera que el sol nunca había quemado su piel. Su cabello celeste, parecía completamente natural, estaba un tanto alborotado, y algunos mechones tocaban sus mejillas. Shinji había quedado maravillado con la belleza de aquella muchacha, todo en ella le parecía único y extrañamente familiar.
—Emm... Y-yo...— balbuceo Shinji mirando sus ojos escarlata.
—Como obtuviste ese copo de nieve...— dijo la joven lentamente, mientras tornaba sus ojos a los de Shinji, mirándolo directamente.
En el instante mismo dónde aquellos ojos rojos se posaron sobre los azules grises de Shinji, comenzó a experimentar una breve visión en su cabeza.
Se encontraba en un sitio totalmente impecable, escuchaba el ruido del agua fluir y a alguien que le hablaba, pero no podía distinguir que decía. En algún momento, Shinji se hizo consciente de su cuerpo, y sintió que su mano sujetaba otra... En ese momento volvió en si.
—Y-yo...— dijo Shinji intentando hilar sus palabras. —Este... El copo de nieve...— decía Shinji mirando el copo de nieve intentando no mirar aquellos ojos rojos que le presionaban sus nervios.
—Yo... Tengo uno igual— dijo la muchacha de ojos rojos sacando de su cuello un copo de nieve en una cadena, pero de color rojo. —Lo tengo desde que era pequeña...
Shinji no podía creer semejante coincidencia, ambos poseían aquellos copos de nieve, pero se dio cuenta que el de ella era muchísimo mas grande, pero tenia exactamente la misma forma, algo extraño entre los copos de nieve, que es imposible que compartan patrón. Shinji miró una vez mas a la muchacha nervioso.
—Yo... Me cayó en mi nariz esperando entrar al examen, aun que en ese momento era más pequeño, creció repentinamente en mi bolsillo... Fue en el mismo momento que te llamaron para entrar... Creo— decía secando el sudor nervioso que tenia en su frente. —No escuche tu nombre, pero me fije en tu chaqueta blanca... No es que haya estado pendiente ni nada...— dijo él asustado excusándose.
—Creo que también te vi en la entrada, estabas hablando con un joven— Dijo la joven mientras pensaba. —Tengo algunas preguntas que hacerte, la verdad... Me resultas muy familiar—, dijo la joven con un poco de vergüenza, aun que poco se le notaba.
Con eso, el joven Ikari quedó perplejo, para ella también él resultaba conocido, será que se habrán conocido de niños, será algún familiar lejano, lo cierto es que ni siquiera sabia su nombre.
—Emm... Tu también me resultas muy familiar la verdad— dijo Shinji, nervioso rascandose la mejilla e intentando mirar a otro lado, pero le era difícil escapar de aquellos ojos.
—¿Cómo te llamas?— pregunto la joven con una sincera curiosidad.
—Soy Shinji, Shinji Ikari...— le contesto con timidez.
—¿Ikari?— dijo la joven con los ojos abiertos, llevándose la mano cerca de su boca y comenzando a pensar. —Shinji Ikari... Tu nombre... Me es extrañamente muy familiar— dijo la joven cerrando los ojos. —Yo soy Rei A...
—¡Rei!— grito una mujer de cabello rubio desde atrás, —ya es tarde Rei, debemos volver ahora— le dijo mientras se acercaba a ella tomándola del brazo.
—Si srta. Ritsuko. Ikari, adiós...—dijo Rei mientras se alejaba siendo llevada por la rubia, con un tono de voz un tanto deprimido.
—Espera...—Dijo Ikari, pero Rei ya estaba demasiado lejos, como para oírlo. —eso fue demasiado extraño, será su madre, no, no tienen ningún parecido o quizás su tutora...— meditaba Shinji mientras caminaba fuera.
Touji y Kensuke lo estaban esperando, los chicos miraban un auto estacionado afuera del lugar, Shinji miró y vio un símbolo extraño, el auto era de color negro, con los vidrios polarizados, estaba completamente limpio, a pesar de la nevada de hace poco.
—Hey Shinji, si que te has tomado tu tiempo, ¿estabas marcando el baño acaso?—, dijo Touji riéndose.
—No! Es solo que pude encontrar a la muchacha de chaqueta blanca, creo que su nombre es Rei — dijo Shinji explicando a los chicos lo ocurrido.
—Rei...— pensaba Touji, —no tengo idea de quién será. ¿Kensuke tu la conoces?
—No, pero he oído hablar de ella, iba a la misma escuela que un amigo que tengo de internet, me contaba que era una persona bastante seria y fría, no hablaba con nadie en el salón, creo que solo iba, se sentaba y nada mas, nunca hizo amigos ni nadie sabe de ella más allá de su nombre, Rei Ayanami...
Al escuchar su apellido, Shinji escucho ecos de voces en su cabeza, era su propia voz gritando aquel apellido, pero jamás lo había oído ni nada. Un frio truculento subió por su espalda, todo lo que tenía que ver con esa muchacha le resultaba extraño y familiar, y al parecer, Shinji le provocaba lo mismo a ella.
—Ayanami...— Dijo shinji silenciosamente.
—¿Que pasa amigo?, tienes cara de haber visto un fantasma. Al parecer ella irá en esta secundaria, ahí tendrás mas oportunidades de hablar con ella— dijo Touji dando codazos a Shinji con malicia en su rostro.
—Ya muchachos, basta de chicas por hoy. Vamos Shinji, vamos a comer, cuéntanos mas de ti— dijo Kensuke con su brazo en el hombro de Shinji.
Los tres jóvenes caminaron bajo aquel blanco cielo, caminaron a través de la nieve y el cemento, los árboles despoblados de hojas le daban un ambiente de muerte a las calles, y la falta de sol, transformaba el paisaje urbano, en un estéril sitio de colores, pero con la compañía de aquellos dos muchachos, Ikari se sintió deprimido por el lugar.
Los tres muchachos llegaron a un sitio para comer, bastante humilde y tranquilo. Al entrar Shinji pudo sentir cierto regocijo de estar ahí con ambos muchachos, generalmente le costaba iniciar conversaciones con las personas, relacionarse no era uno de sus fuertes, menos tomar la iniciativa, pero aquel día las coincidencias lo ayudaron bastante a no estar solo en aquella ciudad. El resultado de los exámenes estarían en una semana, agradecía tener con quien pasar aquellos días ahora.
—Y cuéntanos Shinji, ¿De dónde eres?— pregunto Touji mientras acomodaba sus cosas en su puesto.
—Soy de un pueblo lejos de Tokio, ahí vivía con mis tíos— dijo shinji sacándose su abrigo.
—¿Y por que no fuiste a una secundaria de allá?— pregunto Kensuke intrigado, mientras se sentaba.
—La verdad, ya no quería estar más tiempo allá, mis tíos son agradables, pero sentía que no pertenecía a esa familia. Era como haber estado de visita un tiempo muy largo, me sentí siempre como un extraño, aun que ambos me criaron desde que era niño y me enseñaron muchas cosas...— les contó Shinji intentando ser sincero, aunque habían varias cosas que se guardo para si, no le gustaba hablar mucho de su vida.
—¿Y tus padres?— preguntó Touji despreocupadamente.
—¡Touji no lo preguntes así!— dijo Kensuke molesto con él. —no sabes si es un tema complejo, y nos estamos recién conociendo.
—Aay, es verdad, perdón Shinji — dijo Touji con una sonrisa vergonzosa.
—No se preocupen chicos, pero no es algo de lo que quiero hablar ahora...—, se sincero con un poco de tristeza en su voz.
—Ejem Shinji, esta vez te invito yo la comida—, dijo Touji intentando animarlo— pero tampoco pidas algo muy caro, estoy un tantito arruinado.
—No te preocupes Touji, yo...— decía shinji cuando Touji hizo que cerrará con su mano.
—Shhh... Vamos vamos vamos Shinji, vamos a elegir que comer— dijo Touji con mucha simpatía.
Primero fueron Shinji y Touji, Kensuke se quedó cuidando las cosas esperando su turno de ir a comprar. Al final los muchachos pidieron todos lo mismo, dos hotdog con un ingrediente verde, mostaza y mayonesa.
Así pasaron la tarde los muchachos hablando y riendo, luego del lugar para comer, fueron a unos videojuegos hasta bien tarde, manteniendo conversaciones ligeras, Touji vivía con sus padres y tenia una hermana menor, Kensuke pasaba todo el día solo, estudiando cosas de la escuela y también cosas militares. Ya había oscurecido en la ciudad, la nieve ahora una una gris masa que se desparramaba por todos aquellos lugares que estuvieron expuestos.
—Hey shinji, ¿tienes donde quedarte?— pregunto Kensuke— en mi casa tenemos una habitación para huéspedes, si quieres puedes quedarte conmigo.
—Gracias Kensuke, pero ya pague un hotel donde dormir por toda la semana en lo que espero los resultados del examen— dijo Shinji con una cálida sonrisa de agradecimiento.
—Oh muy bien Shinji, deberías darnos tu número, para que estemos en contacto— le dijo kensuke con una sonrisa amistosa.
—Buena idea— Shinji les dio su número, y comenzó a despedirse, —estamos en contacto entonces, nos vemos otro día, hasta luego.
—Adiós Shinji, llámanos si necesitas algo— dijo Kensuke amablemente.
—Cuidate Shinji, sueña con la chica de la chaqueta blanca, o quizás con la pelirroja, ay no, eso sería ya una pesadilla. Jajaja— decía Touji despidiéndose de Shinji y alejándose.
Shinji solo se puso rojo ante esos comentarios y se puso en marcha. Las luces de las luminarias comenzaron a teñir de amarillo la nieve, el cielo ahora un inmenso vacío oscuro, en donde nada se podía ver. Iba caminando por aquellas calles modernas, mirando las tiendas ya cerradas y atravesó una plaza para acortar camino.
Dentro de aquella plaza habían sitios donde sentarse con techo. Shinji iba escuchando música mientras caminaba, dando ambiente a todo el lugar, se dirigió a las bancas con techo y pudo ver a una persona sentada tranquilamente con las manos en algún aparato electrónico, mas atrás de aquella persona, vio a otra acercarse, esta tenía un aspecto mas desarreglado, pareciera como si fuera hacerle algo, pero aquella figura se detuvo al lado de la persona sentada, y estaba diciéndole algo, cuando de pronto, la persona sentada se pone de pie, y lanza una patada en el rostro de la persona desarreglada, dejándolo inconsciente. Shinji se asustó al ver esta escena, cuando de pronto pudo distinguir con la luz de la luminaria a aquella chica de pelo rojo, era Asuka. Shinji dudaba si acercarse, pero Asuka lo llamo.
—¿Hey, eres un tonto o qué?, ven— dijo Asuka desde la poca luz que le llegaba.
Shinji fue caminando hacia donde estaba Asuka, sus mejillas estaban muy coloradas por el frio, usaba un gorro que le ayudaba a cubrir sus orejas de la nieve. Al llegar pudo ver que la persona tirada en la nieve inconsciente era un vagabundo cualquiera, no le tomó mayor importancia, parecia que no iba a despertar en un buen rato.
—...Ella da miedo...— Pensó Shinji mirando a Asuka de reojo.
—Hola Langley, ¿Qué haces tan tarde en esta plaza?— preguntó Shinji soplando sus manos para calentarlas un poco.
—Estaba de camino al lugar donde me estoy quedando, pero quise venir a pensar un poco, por cierto, llámame Asuka— Dijo ella invitando a Shinji a sentarse en la misma banca.
—Muy bien, tu puedes decirme Shinji— dijo él amistosamente.
—Te parece mejor, ¿estúpido Shinji?— dijo Asuka con el ceño un poco fruncido, pero con una leve sonrisa.
—...Veo que sigues molesta por lo de hoy...— dijo él mirando para otro lado un poco avergonzado.
—Pues claro, ¿A donde ibas con tanta prisa?— preguntó la pelirroja inquisitiva.
—Pues...— Shinji pensaba si contarle o no. —Estaba siguiendo...— de pronto se escucho decir esas palabras sintiendo que iba a quedar como un acosador, —Estaba siguiendo a una chica del salón donde hice el examen, para devolverle su lápiz, que se le cayó— mintió Shinji, para no quedar como un pervertido.
—Das, vaya parece que eres mas amable de lo que aparentas estúpido Shinji, no eres solamente un tackleador inoportuno— dijo Asuka mirando a la oscuridad calmadamente — ¿y tu qué hacías a esta hora por el parque?, puede resultar peligroso para un pequeño como tu. —Sentenció Asuka mirándolo de pies a cabeza.
—Bueno, estaba con los muchachos que conociste hoy, Touji y Kensuke; nos quedamos hasta tarde y bueno, ahora vuelvo al hotel donde me hospedaré esta semana.
—¿En cual estás?- preguntó con un poco de curiosidad.
—En el Hotel 4 de Tokio— le respondió con simpatía.
—Que coincidencia estúpido Shinji, yo también duermo ahí, creo que va siendo hora que vayamos— dijo poniéndose de pie. —Vamos estúpido Shinji.
—S-si!— respondió Shinji incorporándose a caminar.
Ambos jóvenes salieron de la plaza por el camino más iluminado, los arboles titánicos y ancianos llenos de nieve, goteaban nieve cada cierto tiempo, los muchachos fueron esquivando como podían, divirtiéndose un poco.
—Y cuéntame, ¿de dónde vienes Asuka?— preguntó Shinji interesado.
—De Alemania, estoy en un programa de intercambio, pero pienso quedarme estudiando acá en Japón. —le platicaba la alemana mientras caminaba mirando el cielo.— Así que si quedas en la secundaria, podríamos ser compañeros hartos años Shinji, eso sería conveniente...
—¿Conveniente?— preguntó Shinji un poco nervioso y rojo.
—¡Si, recuerdas me debes mucho por lo que me hiciste hoy!— dijo la pelirroja acusando a Shinji con el dedo. —Dime, ¿Cómo eres en la cocina?.
—Em, normal supongo, mis tíos me enseñaron, pero aprendí muchos platos por mi cuenta, la verdad me gusta la cocina—, dijo Shinji mirando el cielo con una sonrisa en su rostro.
—Bueno estúpido Shinji, me tendrás que cocinar todos los lunes y martes, que son los días mas agotadores. —Dijo Asuka mirando con una sonrisa juguetona al joven Ikari.
—¿Qué?, ¡pero en los dormitorios no hay cocinas!— dejo él protestando.
—Bueno, ese es tu problema, no el mío estúpido Shinji. Es tu deber por lastimar a una dama — dijo la pelirroja reprochándolo.
—Ok... — dijo Shinji un tanto derrotado. —Ya estamos llegando, ¿estoy en el cuarto piso y tu?.
—También, pero en el ascensor se separa nuestro camino, no quiero que sepas mi numero de habitación, aun no sé si solo eres un estúpido, o un estúpido pervertido— Dijo la joven sospechando de Shinji mientras entraban al hotel.
—N-no es así— dijo el joven intentando defenderse.
Ambos se presentaron a la guardia, y ella les entrego las llaves correspondientes a cada cuarto después de que los jóvenes enseñaran su identificación.
—Bien, estúpido Shinji, fue agradable caminar hasta acá contigo. Después de todo no eres tan estúpido, al parecer. Bueno gute nacht. —Dijo Asuka tomando el primer ascensor.
—Emm, ¿la tuya?— Dijo Shinji susurrando para que no lo escuchara, un tanto confundido.
Shinji tomó el siguiente ascensor y fue a su recamara, era muy limpia pero pequeña, tampoco es como si planeara meter un robot gigante ahí. Pero era lo suficientemente espaciosa para él y sus pocas cosas. Su maleta había sido traída por un servicio de paquetería al hotel, para así no tener que cargarla durante el examen, se preparó para tomar una ducha con agua caliente. Al entrar vio que el baño también era pequeño, pero de todos modos estaba él solo, no es como si fuera a entrar un muchacho extraño a bañarse con él, había suficiente espacio para uno.
—El día de hoy ha sido demasiado largo— dijo con el cuerpo metido en el agua de la bañera, — habrá mucha gente interesante que conocer, Kensuke, Touji, Asuka, Ayanami... parece que fue buena decisión tomar el examen de admisión, mi vida hubiera seguido tal cual en mi pueblo, mis compañeros de secundaria habrían sido los mismos que tenía en mi escuela, nada hubiera cambiado, tal vez mi esperanza va por este camino, de todas formas, se que también seré lastimado en este lugar, pero creo que estará bien es algo que no pueden evitar, y yo tampoco, pero aun me cuesta relacionarme abiertamente con las personas, me incomoda cuando me miran o preguntan por cosas personales, no quiero que nadie sepa cosas de mi que puedan lastimarme... — dijo Shinji mientras se sumergía.
Shinji de pronto recordó el copo de nieve misterioso, emergió del agua y fue en búsqueda de su chaqueta, revisó el bolsillo de su pecho y lo encontró, ahora tenía un tamaño similar al de Ayanami.
—¿Qué clase de objeto es este?, al principio era un diminuto copo de nieve, pero a lo largo del día ha ido creciendo más y más, será algún objeto mágico o parecido a la ciencia ficción... Ayanami también tenía uno como collar, quizás debería usarlo de la misma manera, para tener algo en común... ¡Ay! que estoy pensando, acabo de conocerla... pero siento algo extraño con cada cosa relacionada a ella, además, que tendrá de especial que yo también le sea familiar. —Decía contemplando su copo. —Que clase de ojos son esos que tiene, jamás había visto unos de pupilas rojas, me hicieron sentir muy extraño, cuando me miró, me paralicé completamente, nunca me había provocado algo así una persona, creo que se asemeja a presenciar algún paisaje magnifico... Y estos copos de nieve, ¿nos relacionan? creo que será mejor que ya...
En ese momento, Shinji resbala y es sumergido en la tina, con copo de nieve y todo, se desespera y lo busca, temiendo que se haya derretido con el agua caliente. Pero no fue así, el copo de nieve estaba al fondo de la bañera. Shinji lo recoge y lo examina.
—Creo que nada ha cambiado... debería tener más cuidado , realmente es extraño... Ayanami, Rei Ayanami, nunca había tenido tantas ganas de que el tiempo transcurriese mas rápido, simplemente me apegaba a mi plan de dejar que las cosas fueran como fuesen y solo vivirlas como se supone que deban ser vividas. Mis tíos me regañaban constantemente por eso, pero acaso ¿Qué motivación podría tener?, nunca pude tener una familia ni lazos importantes, mis padres murieron hace años. Pero necesito seguir adelante, mi esperanza no está en quienes me abandonaron...—, meditaba sumergido en el agua— creo que es momento de ir a la cama.
Shinji comenzó a vestirse y dejar la ropa sucia en el canasto. La noche fría se filtraba por las pequeñas ranuras de aquella vieja ventana, la oscuridad del cielo desolaría a cualquier ave que saliera en búsqueda de su parvada, las luces de las luminarias, teñían la nieve de una triste paleta de color, y el aroma del invierno solo congelaba la nariz.
Acostado con las manos en su cabeza, comenzó a recordar el rostro de Ayanami, pensó en lo que le había dicho Kensuke, de su personalidad fría y sin emociones, pero el no la notó así, aun que si se dio cuenta que casi no mostraba emociones, pero el podía verlas claramente. Realmente Shinji no era una persona muy empática con su entorno, no hizo ningún amigo verdadero en su pueblo, y no tuvo intereses amorosos en ninguna persona, solo había encontrado bonita a una muchacha de cabello castaño oscuro y corto llamada Mana, estaba en su clase, pero al parecer tenía un novio, o amigo, realmente no le importaba. Pero más allá de eso, no se fijó en nada especial.
—Vaya, creo que es hora de dormir— dijo Shinji mientras se colocaba sus audífonos del walkman busco una canción para dormir (When i find peace of mind).
Shinji comenzó a soñar, en aquel, tres titanes enormes corrían en la misma dirección, rugían y crujían, de sus fauces blancas nubes emergían con densidad, el gigante de color purpura miró a Shinji y comenzó a extender su mano hasta alcanzarlo, Shinji corría en dirección opuesta a la mano, pero no era lo suficientemente rápido para huir, todo se torno oscuro. Luego de la oscuridad, estaba sumergido en una especie de liquido, en donde no podía respirar, al pestañar se encontró en medio de un bosque, y una voz masculina pronunciaba las siguientes palabras "Si te sientes feliz, creo que deberías sonreír". Luego de aquello vio la luna en el cielo, la cual le recordaba al rostro de Ayanami. El sueño se fue desvaneciendo en aquella imagen de la luna. Shinji despertó en la madrugada, y vio que el cielo se había despejado, la luz de la luna se colaba por su ventana otorgando un color pálido a cada cosa en su cuarto, el la contemplo pensando en Ayanami y en el significado de su sueño, aun que estaba muy cansado como para formular ideas claras, el sueño le gano y se entrego nuevamente a los brazos de Morfeo.
Fin del segundo capitulo.
...
Quise cerrar este capitulo con algo que mostrará para donde va esto :)
Por la emoción, estoy escribiendo muy rápido esto, espero que jamás me de un bloqueo creativo. Si ocurre, haré un capitulo especial de Pen2.
Agradecería que comentaran y dieran un voto?(no se como se le dice), de todas formas, yo seguiré escribiendo por que realmente me hace sentir que evangelion nunca terminara :'( jjajjajaja.
Por cierto, hay muchas cosas que no explicaré en el fic para seguir un poco la linea creativa de Evangelion, en donde muchas cosas han de ser supuestas y pensadas por los espectadores, pero si las explicaré en esta sección de palabras finales para que no se mal entiendan algunas cosas, así por ejemplo les explicaré una cosa, para que me entiendan a lo que me refiero: En este mundo, Gendo y Yui no existen, Shinji nació de otras personas, esto por que el alma de Yui quedó en el eva 01 junto con la de Gendo. En base a esa información o teoría, quiero basar el destino que tuvo Gendo y Yui :).
Hasta el siguiente capitulo!
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