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Yoongi no supo cómo reaccionar; el silencio entre ellos se volvió tan denso que casi se podía tocar.
—Minjun era un niño muy risueño— la mirada de Namjoon se suavizó al pensar en su hermano —Tenía un gran interés por la naturaleza, sobre todo en los escarabajos. Un día nos pasamos más de seis horas buscando escarabajos rinoceronte en el bosque— sonrió genuinamente —¿Te lo puedes creer? A veces me preguntaba de dónde sacaba tanta energía. Siempre se entusiasmaba con facilidad.
Yoongi sonrió pensando en Taehyung. Él también había sido un niño muy entusiasta.
—Mi madre murió en un accidente de moto cuando yo tenía diez años. Mi padre trabajaba muchas horas para sacarnos adelante, así que cuidaba de Minjun todo el tiempo. Hacía la comida, lo llevaba a casa de sus amigos, le ayudaba con los deberes, le acompañaba al médico... Esa clase de cosas recaían sobre mí.
El mayor pensó en lo similares que eran ambos. A él le había sucedido lo mismo después de la muerte de sus padres.
—En mi vecindario se celebraba todos los años un festival por el inicio del verano— Namjoon entrelazó las manos —La gente se disfrazaba y participaba en distintas actividades durante varios días. Minjun quería disfrazarse de Howl, es un personaje de una película de Ghibli— aclaró —Me rogó que le ayudase a hacer el disfraz así que cedí— sonrió pensando en aquel momento —La de tutoriales que me tragué para hacer la capa de ese tipo no es ni medio normal.
—Me sorprende que sepas coser.
—Sé hacer de todo— se encogió de hombros —A Minjun le encantó el resultado. Estaba muy guapo con su peluca rubia— recordó —El esfuerzo valió la pena solo por ver su sonrisa.
Yoongi intuía lo difícil que debía ser hablar sobre lo sucedido. Le asombraba la entereza de Namjoon y agradecía enormemente la confianza que estaba depositando en él.
—Me prometió que iría al festival acompañado del padre de uno de sus amigos— su mirada se tornó más seria —En vez de asegurarme que era cierto, confíe en su palabra y le dejé ir. Nunca me había mentido... El festival era cerca de casa y había mucha gente, supongo que mi hermano creyó que no podría pasar nada malo— hizo una breve pausa —Quedamos en que el padre de su amigo lo traería después de los fuegos artificiales pero no fue así.
Al volver se separó de sus amigos y cuatro desgraciados lo abordaron por el camino y lo violaron en un callejón, muy cerca de mi casa. Estaban tan borrachos que lo confundieron con una chica y lo dejaron allí tirado, hasta que un vecino lo encontró.
El mayor apretó el puño, haciéndose daño en los nudillos con el fuerte movimiento. No había palabras para expresar la rabia que estaba sintiendo.
—Cuando sonó el teléfono y me dijeron lo que había sucedido, no lo podía creer— se giró hacia él —Nunca te imaginas que algo así le pueda pasar a tu hermano pequeño. Es que no... No a tu hermano...
Yoongi le tocó el brazo en señal de apoyo. Namjoon agradeció que le dejase hablar sin interrupciones. Compartir su pasado le resultaba muy doloroso.
—Nuestro abogado nos aseguró que no llegaríamos a nada en un juicio, pero mi padre decidió arriesgarse y denunciar lo ocurrido. Habían agredido a Minjun y estaba dispuesto a luchar— resopló frustrado —Pero los agresores eran hijos de políticos y ya sabes cómo es este país— le miró crispado —Cualquiera puede librarse de un crimen si tiene los amigos adecuados. Mi padre recibió presiones en el trabajo, hasta nos llegaron amenazas a casa. Algunas cadenas de televisión aseguraron que mi hermano había acusado a cuatro estudiantes prometedores de violación por venganza, porque no soportó ser rechazado.
—¡Que hijos de puta!— se alteró —¡Era un niño!— Yoongi estuvo a punto de levantarse del suelo.
—Un niño que ni siquiera era homosexual, pero querían difamarlo y la gente se lo creyó. Es lo típico, ¿no? Cada vez que hay un caso de violación se cuestiona a la víctima. ¿Qué llevaba puesto? ¿Se negó a mantener relaciones? ¿Dijo que no claramente? ¿Acaso se defendió físicamente? ¿No estará mintiendo por dinero, celos o venganza?— Namjoon golpeó el suelo con el puño —En esta sociedad no se protege a las víctimas, se protege a los criminales. Se aplaude la violencia, se aplaude la corrupción, no se cuestiona el sistema, no se avanza en lo más mínimo.
Yoongi sintió la impotencia, la rabia y el dolor emanar en cada una de sus palabras. Namjoon no iba mal encaminado. El gobierno estaba corrupto y el sistema necesitaba una reforma pero también lo necesitaba la mentalidad y educación de la gente.
—El chico de doce años que había sido violado por cuatro adolescentes dejó de ser la víctima y pasó a ser un sinvergüenza— dijo con profundo dolor —Mi padre y yo intentamos hacer todo lo posible para lavar su imagen pero no pudimos. Tenían a la prensa a su favor y después de tantas mentiras también a la opinión pública.
Minjun vivió un auténtico calvario. Las burlas en la escuela, los comentarios maliciosos de los vecinos, hasta la chica que le gustaba se rió de él. Los padres de sus amigos les prohibieron tener contacto y aunque alguno se negó al principio, terminó distanciándose de mi hermano por miedo a sufrir acoso escolar.
Yoongi notó cómo se le cerraba el estómago. No había vivido nada de aquello y sin embargo le ahogaba la rabia y la impotencia por lo que le habían hecho. Si se sentía así solo escuchando lo sucedido, no quería ni imaginarse lo duro que debió ser para Minjun, Namjoon y el Señor Kim.
—Al final tuvimos que mudarnos a otra parte de Seúl... Como si fuéramos unos delincuentes— contó recordando aquel día —El carácter de Minjun cambió completamente. Mi hermano dejó de ser sociable y se volvió muy ermitaño. No salía. No hacía amigos. A veces sufría ataques de ansiedad y pesadillas muy intensas. Con el paso de los meses logró volver a una vida más o menos normal— bajó la mirada —Hasta que empezó a estudiar en una nueva escuela y alguien comenzó a difundir lo que le había pasado.
—¿Qué?— se le escapó de los labios.
—Como imaginarás lo hicieron en un contexto completamente distinto y los insultos volvieron a empezar. De eso no supe nada hasta después de su muerte— el menor se quedó callado, afligido por algún recuerdo.
Yoongi le dio unos minutos para recomponerse. Revivir su pasado debía ser muy difícil.
—Minjun regresó de la escuela— siguió hablando con la mirada perdida —Yo estaba cocinando su comida favorita y le pregunté si quería comer. Él asintió desde la puerta pero como se veía algo decaído quise saber si se encontraba mal.
"Estoy bien. No te preocupes, hyung. Me esforzaré" me contestó y subió a su cuarto.
A Minjun le gustaba tomar un té de hierbas específico con esa comida, decía que la combinación de sabores era exquisita. Como no nos quedaba salí a comprarlo. No tardé demasiado... Quizá diez minutos, quince como mucho. Al volver le llamé para que bajase.
Le llamé varias veces pero no contestó. Empecé a preocuparme— sus ojos se volvieron vidriosos —Subí las escaleras y entré en su habitación. Mi hermano menor estaba en el centro de su cuarto, colgando del techo.
Yoongi no logró retener las lágrimas. Visualizar aquella imagen le partió el corazón.
—No pude hacer nada por él. Lo bajé e intenté reanimarlo pero estaba muerto. Solo dejó una nota diciendo que no podía pasar otra vez por lo mismo y que quería irse con mamá— Namjoon cerró los ojos abatido —No dejo de pensar... Si no hubiera ido al supermercado, si no hubiera hecho esa comida o salido a por el dichoso té, lo podría haber evitado.
—No puedes culparte, él no lo hacía— Yoongi intentó sonar calmado.
—Si fuera Taehyung, ¿tú no te culparías?
—Sí lo haría, igual que me culpé de la muerte de mi mejor amigo— admitió sin dudar —Pero he comprendido que consumirse por la culpa no deshace lo pasado. Y tampoco les gustaría a ellos vernos sufrir así, ¿no crees?
Namjoon se limpió las lágrimas pensando que su amigo llevaba razón, que lo que decía tenía sentido, pero a pesar de tenerlo, no había logrado dejar de culparse a sí mismo.
—Intenté superarlo con la ayuda de mi padre y de Hobi, hasta decidí estudiar derecho por Minjun— se intentó tranquilizar —Quería evitar que esa clase de gente quedase libre. Poco a poco conseguimos seguir adelante, pero cuando parece que tu vida vuelve a tener un poco de sentido, entonces sucede algo que te devuelve al inicio de todo.
Yoongi lo sabía mejor que nadie. La vida podía ser muy caprichosa.
—En un centro comercial vi a uno de los violadores paseando con su novia. Les seguí durante horas, viendo cómo reían, comían, gastaban dinero...— apretó los dientes —¿Por qué ese monstruo tenía una vida y mi hermano no? No podía dejar de pensar en eso, ni siquiera en casa, en el trabajo o en clase podía desconectar— se tomó unos segundos antes de seguir hablando —No pudimos hacer justicia por Minjun, así que decidí tomarme la justicia por mi mano.
—¿Qué quieres decir con eso?— le miró fijamente a los ojos.
—Los seguí durante semanas, estudié sus rutinas, averigüé con quién quedaban, a qué se dedicaban, qué hacían en su tiempo libre y un día, cuando todos se reunieron, decidí vengar a mi hermano.
—¿Los mataste?— Yoongi no pudo evitar la pregunta.
—Es lo que pretendía— Namjoon apoyó la cabeza contra la pared —Cuando me dirigía a por el primero, que estaba en el jardín de la entrada de su casa hablando por el móvil, un infectado se le echó encima.
—¿Qué?— se alzó un poco —¿Quieres decir que el día que fuiste a matarlos fue el día que comenzó todo?
—Eso mismo. Vi cómo los atacaban y cómo se convertían en esos seres. Lo presencié todo— sonrió un poco —En ese instante creí que se trataba de justicia divina o algo así. Me había despedido de Hobi la noche anterior, sin decirle lo que tenía pensado hacer, claro. Estaba dispuesto a matarlos y a pudrirme en la cárcel pero ellos se encargaron por mí y sinceramente, disfruté viendo cómo los despedazaban.
—Joder— Yoongi le miró atónito —No sé qué decir...
—¿Crees que soy una mala persona?
—Si a Tae le hubiese pasado lo mismo que a Minjun y veo a uno de esos tipos por Daegu, habría hecho lo mismo que tú. No te juzgo, solo me choca que ese fuese tu primer contacto con los infectados. No me lo esperaba.
—Es lo único bueno que han hecho esos bichos— cerró los ojos —Lo único.
Yoongi contempló su rostro cansado. Su pasado había sido duro pero el de Namjoon no se quedaba atrás. Ambos habían tenido que enfrentarse a situaciones difíciles desde muy temprana edad. Ahora comprendía por qué era tan sobreprotector con Eunha y también por qué había sido tan tajante con Jeonghan.
—Hoy has logrado salvarlos de un sufrimiento similar al que pasó tu hermano. Si no llega a ser por tu ayuda, habría sido difícil para mí enfrentarme a los tres a la vez— aseguró de forma pausada —No has vacilado a la hora de proteger a tus amigos y estoy convencido de que Minjun, allá donde esté, está muy orgulloso de ti, Namjoon.
El menor giró el rostro hacia un lado, consciente de que sus ojos se volvían a llenar de lágrimas.
—Gracias— le apretó la mano con afecto —Espero que sigas cuidando de Jimin como lo has hecho hasta ahora. Creo que a Minjun también le gustaría.
Namjoon solo asintió, no fue capaz de articular palabra. Yoongi se tumbó en el suelo, dándole la espalda. Intuía que no quería llorar y que estaba siendo muy complicado para él retener las lágrimas.
—Hay una cosa que no entiendo. ¿Qué celda no tiene una puñetera cama?— se quejó intentando suavizar el ambiente —En este búnker hay ascensores bañados en oro, suelos de mármol y un montón de pijadas. En serio, ¿tanto les costaba poner una simple cama?
Namjoon agradeció ese gesto desde el fondo de su corazón. Yoongi era el primero al que le contaba la historia completa. Hoseok conocía lo sucedido con Minjun porque lo había vivido con él. Excepto por el asesinato que pretendía cometer, estaba al tanto de todo. Eunha en cambio no sabía nada. No era por falta de confianza, hablar de ello dolía mucho y Namjoon intentaba mantener su pasado alejado.
El menor se secó las lágrimas con la camisa. Todavía le costaba creer que Jimin, ese chico que tanto se parecía a Minjun, hubiese estado a punto de experimentar la misma violencia que su hermano. Si no hubiera sido por la misteriosa voz, ni él ni Yoongi habrían podido evitarlo.
—¿Qué piensas sobre lo que pasó en el pasillo?— Namjoon se volvió a sentar derecho —Y no me digas que no ha sido nada. Aunque no haya podido escuchar la voz, vi claramente cómo estallaban las bombillas y cómo aparecían los nombres de Taehyung y Jimin en el cristal.
Yoongi lo escuchó sin moverse del suelo.
—Eso ha tenido que ser un fenómeno paranormal, algo que está conectado a ti— miró hacia el mayor —Esa voz te habló a ti, no a mí y quería que salvaras a ambos— se llevó la mano a la barbilla —¿Por qué? ¿Te conoce? ¿Los conoce a ellos? ¿Qué os conecta exactamente?— hizo una breve pausa —Solo se me ocurre que sea un familiar tuyo.
—Lo es— Yoongi se alzó, sentándose cuidadosamente a su lado —Sé quién me habló, Namjoon. Sé quién ha evitado esta tragedia.
—¿Quién?— preguntó sorprendido —¿Tu padre? ¿Tu madre?
—Mi mejor amigo— afirmó con total seguridad —Ese idiota dijo que nunca nos dejaría solos... Y no lo ha hecho.
¿Qué os ha parecido el pasado de los Kim? Ya conocíamos parte de la historia de Namjoon (el viaje de Seúl a Busan etc) pero este capítulo muestra mejor que ninguno por qué es como es. Creo que ahora le entenderéis mucho mejor.
He leído todas vuestras teorías sobre Minjun y quería deciros que son muy creativas e interesantes. Gracias por compartirlas. 💕 Por curiosidad; lxs entusiastas del Namjoon y Jimin son hermanos, ¿qué pensáis ahora? 🤔
Minjun merecía algo mejor. 💜
¿Kim Seokjin? ✨ Yoongi está seguro; la voz pertenece a su mejor amigo. ¿Y ahora qué significa esto? Bueno, significa que aquí hay otro hilo más del que tirar. 👀
Siento no poder actualizar más seguido. Me encantaría hacerlo pero por mucho que me guste escribir esta historia, que me encanta, no puedo dedicarme a ello 24/7. Ya sabéis lo exigente que es la vida, ¿verdad? Espero que este capítulo os haya alegrado al menos el día. 😊
¿Lxs que estabais enfermxs ya os encontráis mejor? Ojalá sea así. Hay que recuperarse pronto. Ánimo y feliz semana a todxs. 💖😘
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