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Yoongi y Namjoon se dirigían por uno de los pasillos de la tercera planta hacia el parque favorito del mayor. Jimin le había pedido a su amigo que entretuviese a su novio durante unas horas y Namjoon creyó que llevarlo con Naeun sería una buena distracción.

Yoongi le había tomado mucho cariño a la bebé y aprovechaba cada ocasión que tenía para pasar tiempo con ella. A veces hasta jugaba con los hermanos de la pequeña, que eran unos auténticos diablillos con todos menos con Min Yoongi.

—¿Eres un ángel?— le había preguntado un día la madre de los críos al ver lo tranquilos que estaban —Por favor, déjame adoptarte.

Aquellas palabras sonrojaron a Yoongi, que no se consideraba un ángel en lo más mínimo, simplemente tenía buena mano con los niños y además le gustaba pasar tiempo con ellos. Tratar con aquella familia hacía su estancia en el búnker más llevadera.

—Me sorprende tu plan de pasar tiempo conmigo y Naeunie— el mayor le miró de reojo —¿Está todo bien en casa?

—¿Tiene que estar algo mal?— sonrió con una expresión pícara —¿Es que no te emociona la idea de jugar conmigo a la familia feliz?

—¿No eras alérgico al compromiso?— frunció el ceño —¿Esto tiene algo que ver con la chica que salió anoche de tu habitación o con el rollo que te traes con Jackson?

—No jodas— le miró sorprendido —No te tomaba por un cotilla.

—Tae es el cotilla que se lo cuenta todo a Jimin.

—Y Jimin te lo cuenta a ti, ¿no?— metió las manos en los bolsillos —¿Qué quieres que te diga? Soy un espíritu libre.

—Es mejor vivir con tu alma gemela a ser un espíritu libre. Te lo dice alguien que también lo fue.

Namjoon esbozó una media sonrisa. Entendía su punto de vista pero su caso era distinto.

Sálvalos

Yoongi se detuvo al escuchar un susurro.

Sálvalos

—¿Qué has dicho?

—No he dicho nada— Namjoon se giró hacia él —¿Qué pasa?

Sálvalos

—Otra vez— miró hacia todas partes —¿Es que no lo oyes?

—¿Oír el qué?— Namjoon le observó desconcertado —No oigo nada.

—Sálvalos— repitió —Solo ha sido un leve susurro pero lo he oído muy claro.

Namjoon frunció el ceño; Yoongi se percató de cómo le estaba mirando.

—No estoy pirado, quizá venga del parque.

Las bombillas del pasillo estallaron de repente en mil pedazos. Los jóvenes se cubrieron el rostro, asustados por el súbito sobresalto. Yoongi abrió los ojos lentamente. Solo quedaban dos luces alumbrando el lugar. Al fondo pudo detectar la silueta de alguien. No lograba verlo bien pero le resultaba familiar.

Sálvalos

Yoongi notó un aliento frío en la nuca. El chico se dio la vuelta con el corazón agitado.

—No hay nadie... ¿Pero qué demonios está pasando?

Sálvalos

—¿Salvar a quién?— el hermano de Taehyung ya no pudo encontrar la silueta de aquel desconocido —¿De quién estás hablando?— preguntó al aire.

Sálvalos

Namjoon vio cómo su amigo se movía nervioso por el pasillo.

—¿Sigues escuchando la voz?

—Sí. No para de decir sálvalos, sálvalos— se paró delante del cristal que dividía el pasillo del parque —Pero no entiendo a quién quiere que salve.

—Yoongi...— Namjoon no fue capaz de pronunciar hyung al ver cómo el cristal detrás de su amigo se empañaba de la nada.

El chico de cabello negro se giró lentamente; las letras de dos nombres fueron mostrándose paulatinamente.

—Taehyung y Jimin— pronunció el mayor atónito —¿Salvar a Taehyung y Jimin?— en cuanto lo repitió miró a Namjoon —¿Sabes dónde están?

—E-En tu habitación— contestó asombrado por lo que acababa de ver.

—Esto no es normal, algo está pasando— dijo apurado —¡Vamos!

Namjoon siguió a Yoongi por las escaleras. Ambos eran conscientes de que lo que acababan de presenciar podría tratarse de un fenómeno sobrenatural. Para el menor fue más fácil de asumir dado que creía en la vida después de la muerte pero Yoongi no quiso pensar en aquello; su mente solo giraba en torno a Jimin y Taehyung.

Cuando el mayor abrió la puerta de su dormitorio se encontró con una escena tan difícil de procesar que necesitó unos segundos para asimilar lo que tenía delante. A Namjoon le sucedió algo parecido. Al desviar la mirada hacia sus amigos sintió todo su dolor, impotencia y rabia.

—Que no quede ni uno vivo— la voz de Yoongi sonó a sentencia y Namjoon no pudo estar más de acuerdo con el veredicto.

Jaebum rompió inmediatamente la botella que sujetaba golpeándola contra la pared. Hyunwoo soltó a Jimin y se vistió apurado. A Jeonghan no le dio tiempo de reaccionar, se llevó un tremendo puñetazo en la cara por parte de Yoongi, chocando violentamente contra la cómoda de la habitación.

Jaebum quiso aprovechar el momento y rajarlo por la espalda pero Taehyung, que estaba tirado en el suelo, le puso la zancadilla y evitó de esa manera que pudiera alcanzar a su hermano.

Jaebum estuvo a punto de caer de bruces por la intervención del menor. Namjoon no desaprovechó la ventaja que le había concedido el novio de Jungkook y lo agarró de la muñeca para acto seguido degollar el cuello del joven con la misma botella que sujetaba en la mano.

Jeonghan se quedó paralizado al ver a su compañero desplomándose delante de él. Jaebum se llevó las manos al cuello, desesperado por tapar la herida sin éxito. Namjoon se había asegurado de hacerle un corte muy profundo.

—¡Lo has matado!— gritó Jeonghan aterrorizado —¡Oh Dios mío, lo has matado!

—Todavía sigue vivo— Namjoon ayudó a Taehyung a levantarse del suelo y le cortó las cuerdas de las manos con un fragmento de la botella —Tardará unos minutos en ahogarse en su propia sangre y espero que sufra cada puto segundo.

—¡Estás loco!— chilló incapaz de moverse del miedo —¡Estás demente!

Yoongi no le dedicó ni una mirada a Jaebum, tampoco se inmutó por las palabras de Jeonghan. Con Taehyung y Jimin fuera de peligro, su único objetivo era Hyunwoo.

Su adversario estaba al lado de la puerta del cuarto de baño, mirándole fijamente a los ojos. El odio entre ambos era tan palpable que se podía percibir fuertemente.

—Vamos a arreglar esto, Min Yoongi— le sonrió con aire de autosuficiencia —Tú y yo.

—Te voy a borrar esa puta sonrisa de la cara.

—Inténtalo— dijo antes de desaparecer dentro del cuarto de baño.

El joven de cabello negro desvió la mirada hacia Jimin. Taehyung lo había tapado con una manta y le estaba desatando las cuerdas mientras Namjoon arrinconaba a Jeonghan contra la pared. La rabia que había en él aumentó al ver cada una de las magulladuras en su rostro. Su hermano estaba alentándole y cuidándole por lo que Yoongi no tenía que preocuparse por su seguridad; ahora solo quería vengarse.

El chico entró en el cuarto de baño y cerró la puerta a pesar de oír la voz de su novio pidiéndole que no lo hiciera.

Nada más entrar, Hyunwoo le atacó desde la derecha. Yoongi esquivó el puñetazo apartando el cuerpo rápidamente de su alcance.

—¡Cobarde!

—En la guerra todo vale— aseguró Hyunwoo con tono adusto.

El cuarto tenía un tamaño mediano por lo que no podían distanciarse mucho el uno del otro. Yoongi aguardó hasta que Hyunwoo le lanzó la pierna para darle una fortísima patada. El menor se inclinó hacia un costado justo a tiempo. Cuando Hyunwoo quiso retroceder le dio un golpe firme entre las costillas. Lejos de ceder al dolor, aprovechó la proximidad de su atacante para agarrar a Yoongi del pelo y empujarlo contra la pared.

El hermano de Taehyung clavó las uñas en los brazos de Hyunwoo mientras este lo ahogaba.

—¡Vas a morir como un perro!— afirmó, reflejando en su mirada una frialdad absoluta. Yoongi intentó soltarse arañando sus brazos con violencia pero Hyunwoo no cedía —¡Mientras tu cadáver sigue caliente mataré a tu hermano y me follaré a tu novio! ¿O debería hacerlo al revés?

Las palabras de aquel tipo enfurecieron al menor de sobremanera. Yoongi le propinó un contundente rodillazo en los genitales, quedando así libre de sus garras. Mientras Hyunwoo se agachaba, condicionado por el dolor, Yoongi aprovechó la distancia entre ellos para coger aire.

—Maldito hijo de...— la voz de Hyunwoo se quebró por el intenso dolor. En su fuero interno lo maldijo de mil formas distintas.

Yoongi vio cómo su oponente se llevaba la mano a la espalda. No había que ser Hércules Poirot para llegar a la conclusión de que aquel tipo guardaba un arma. Yoongi lo sorprendió de repente, lanzándose con él contra la ducha acristalada.

El ruido del cristal roto asustó a los menores, que permanecían sobre la cama por petición de Namjoon. El chico de Seúl sabía lo arriesgado que era enfrentarse a Hyunwoo y más aún en un espacio cerrado, pero también sabía que Yoongi necesitaba hacerlo solo. Por eso no les permitía cruzar aquella puerta.

Algunos fragmentos de la mampara cortaron la piel de ambos tras el impacto. Hyunwoo se dolió de la espalda, jadeando del intenso dolor. Yoongi tampoco se libró del daño, se había lastimado una pierna pero el dolor no le impidió comenzar una ráfaga de puñetazos sobre el rostro de Hyunwoo.

El mayor aguantó el torbellino de golpes tratando de alcanzar su cuchillo pero el arma había caído con ellos y estaba dispersa, por alguna parte del cuarto. Con la adrenalina recorriendo su cuerpo, Hyunwoo buscó un trozo de cristal por el suelo y cuando lo alcanzó, agredió al menor con rabia.

Yoongi gritó por el corte que recibió en el brazo; esos pocos segundos de distracción bastaron para que el mayor lo empotrase contra la pared y le devolviese cada uno de los golpes que había recibido.

Después del quinto impacto, Yoongi logró girar la cabeza antes del ataque y el puño de Hyunwoo se estrelló contra la pared, rozándole una oreja. Hyunwoo creyó que su enemigo respondería con otro puñetazo pero el menor le propinó un cabezazo tan fuerte, que llevó a ambos al suelo.

La mejilla derecha de Hyunwoo empezó a sangrar con abundancia. Yoongi apretó los dientes por culpa del dolor en el brazo.

—Pensé que serías más fácil de matar— Hyunwoo resopló dolorido —Eres duro de cojones.

Yoongi no contestó, solo escupió un poco de sangre.

—Podríamos haber creado un mundo mejor, algo realmente único— se levantó del suelo, agarrándose el costado —Podríamos haberle protegido entre los dos. Podríamos...

—¡Cállate!— su rostro se ensombreció —¡No me importan tus putos podríamos y mucho menos quiero oírte hablar de protegerlo cuando ibas a violarlo!— apretó el puño sintiendo el dolor de sus nudillos rotos.

—Esa es la única forma de protegerle de sí mismo— contestó sin ninguna clase de remordimientos —A veces hay que doblegar a las personas para que hagan lo que deben hacer.

Yoongi no quería dejarse llevar por la ira, quería mantener la cabeza fría pero le estaba costando mucho no dejarse cegar por sus emociones.

—Estoy pensando en mantener a Taehyung con vida. ¿Sabes que tu novio estaba dispuesto a dejarse follar si no violaba a tu hermano?— sonrió visiblemente divertido —Sería útil tener a alguien dócil con quien poder amenazarlo.

Yoongi no pudo seguir controlándose. El menor se abalanzó sobre él poseído de una enorme rabia. Hyunwoo aprovechó su cólera descontrolada para golpearlo con el secador que había sobre el mueble.

Yoongi perdió el equilibrio con el impacto, chocando contra la pared. Hyunwoo se valió del momento para alcanzar el cuchillo. No tardó más de unos pocos segundos en tomarlo y tratar de acuchillar al menor.

Con lo que no contó fue con la astucia de Yoongi; el chico agarró un bote de laca y le cegó los ojos con el líquido.

—¡Quema!— gritó histérico —¡Hijo de puta!

Yoongi le golpeó con fuerza en la mano, haciéndole soltar el cuchillo. Acto seguido lo agarró de la nuca y le reventó la cabeza contra la pared. Hyunwoo no supo las veces que su cráneo chocó contra aquel muro. Tampoco notó cómo sus piernas cedieron y su cuerpo cayó desplomado al suelo. Lejos de apartarse, Yoongi se sentó encima de su torso y le siguió golpeando con los puños.

La cara de Hyunwoo se tiñó completamente de rojo. El menor no dejó de descargar su rabia sobre él. Probablemente le rompió más de un hueso, quizá hasta los catorce que componen el rostro humano. Yoongi solo paró cuando su furia cesó.

Para entonces Hyunwoo había dejado de moverse. Delante de él yacía el cuerpo destrozado de un chico que resultaba difícil reconocer.

Yoongi se levantó con la respiración agitada. Tenía las manos reventadas y un dolor muy fuerte en la pierna pero no le importó. El chico regresó a la habitación inmediatamente. Quería verlos, necesitaba comprobar que seguían a salvo. Su mirada se suavizó cuando los vio juntos sobre la cama.

Jimin y Taehyung se quedaron estupefactos, incapaces de moverse. Yoongi pensó que se debía a su aspecto; su ropa blanca estaba cubierta de sangre y a eso había que sumarle los golpes que había recibido en el rostro, el corte en el brazo y las manos que estaba hechas un cristo.

Yoongi se subió al colchón y los estrechó entre sus brazos. Taehyung no pudo contener las lágrimas al ver lo magullado que estaba. El menor hundió la cara en el cuello de su hermano, llorando inconsolable.

—Tranquilo, Tae— dijo intentando recuperar la respiración —Estoy aquí. Ya ha pasado.

Jimin no lograba apartar la mirada de él. Yoongi tenía el labio roto, el pómulo hinchado y un corte muy feo en la ceja izquierda aparte de otras heridas en la frente y en la barbilla. Había tanta sangre en su cuerpo, su ropa y su pelo que el rubio sintió cómo le faltaba el aire.

Yoongi notó que estaba a punto de tener un ataque de ansiedad y apoyó su frente sobre la suya.

—Respira, cariño— susurró —Estoy bien. Esto no es nada, ¿de acuerdo? Con unas tiritas se arregla.

—Lo siento mucho— sollozó su novio —Lo siento muchísimo.

—No tienes que disculparte— Yoongi lo agarró de la cintura, dejándole acomodar la cabeza sobre su hombro —No tienes la culpa de nada, Jiminie.

Namjoon los observó desde la otra punta de la habitación. En el bosque, cuando daban a Jimin por muerto y finalmente despertó, sintió la necesidad de unirse al abrazo grupal que le dieron sus seres más allegados. En aquel entonces no lo hizo pero en ese instante no dudó en unirse al abrazo.

Namjoon no quiso contener las ganas de transmitirles su apoyo y cariño. Además también le urgía sentir el calor de sus amigos. Yoongi lo recibió con una sonrisa, mientras Jimin y Taehyung lo hacían cubiertos de lágrimas.

Jeonghan no sabía qué sería de él sin la protección de Hyunwoo y Jaebum. El mejor amigo de Hoseok lo había atado de pies y manos y estaba tirado en el suelo, muerto de miedo.

Los chicos ignoraron su presencia dejándose llevar por la emoción del momento. Taehyung logró sonreír tras unas palabras de Namjoon y Jimin consiguió calmarse poco a poco.

Jeonghan aprovechó ese instante para arrastrarse por el suelo e intentar alcanzar uno de los trozos de la botella rota, que estaban esparcidos por el dormitorio. Taehyung se dio cuenta y avisó a los demás inmediatamente.

—¿A dónde crees que vas?— Namjoon lo agarró del pescuezo y lo empotró contra la pared.

—P-Por favor— suplicó —Yo no he hecho nada... Yo no... Yo no iba a violarlo...

—¿Tengo cara de idiota?— le miró a los ojos —Dime, ¿piensas que soy idiota?

—N-No...— tartamudeó —Claro que no.

—Entonces no me mientas a la cara— le tiró de una oreja —Eres tan responsable como los demás.

A diferencia de los Min, que tenían la vista fija sobre Namjoon y Jeonghan, Jimin observaba las heridas de su novio con sentimientos encontrados.

—Lo que habéis hecho no es un delito menor. No es como ir a robar un paquete de arroz porque teníais hambre— Namjoon le retorció la oreja, haciéndole sollozar —Cualquier persona sabe que violar está mal. Cualquier persona sabe que si violas a alguien, le destrozas la vida.

—S-Suéltame...

—Hay gente que cree que es posible rehabilitar a un violador. ¿Sabes lo que pienso yo?— Namjoon hizo una pausa larga, creando aún más tensión en él —Yo creo que la única forma de rehabilitar a un violador es con la castración.

Jeonghan palideció de golpe.

—¿Te parece un castigo demasiado prehistórico? Bueno, los violadores se comportan como una especie de otra época, ¿no crees?

—Y-Yo nunca... Yo jamás he violado a nadie... Yo solo quería...— se atragantó con su propia saliva —J-Jaebum me aseguró que si le ayudaba podría vivir como un "A".

Esas palabras llamaron la atención de todo el grupo.

—¿Por qué te iba a asegurar eso?— Yoongi intervino en la conversación —Él no tiene poder para ascender a nadie.

—Él no pero sí el que ordenó todo esto.

—¿Qué?— Taehyung se levantó de la cama —¿Quién lo hizo?

—No lo sé, nunca me lo dijo— aseguró —Lo siento, lo siento de verdad... Por favor... Por favor no me matéis— sollozó desesperado.

Nadie dijo nada pero todos sabían que el único que tenía poder suficiente para ascender a alguien era Park Jongsuk. Jimin fue consciente de las miradas que recibió. También supo en qué estaban pensando; su padre había ordenado que lo violaran.

—No puede ser— murmuró Taehyung impactado —No es posible que...— no se atrevió a pronunciarlo en voz alta. Era demasiado mezquino, demasiado turbio, demasiado cruel.

Jimin se levantó de la cama y tomó el cuchillo que Namjoon sostenía en la mano.

—No es buena idea— dijo el de Seúl —Soltar a un tipo como este en un lugar lleno de mujeres y niños es una irresponsabilidad.

—No lo volveré a hacer— juró Jeonghan entre lágrimas —Seré buena persona, lo seré de verdad.

—Eso dicen todos hasta que lo vuelven a hacer— Yoongi le miró con asco.

—Hiciste daño a mi mejor amigo— Jimin le clavó el cuchillo a pocos centímetros del corazón, sorprendiendo a todos con la acción —Tienes suerte— sacó la hoja lentamente —Si mi hermano estuviese aquí, te habría matado de una forma mucho más dolorosa.

El cuerpo de Jeonghan se deslizó por la pared, llevándose las manos al pecho.

—Era una amenaza— Jimin le devolvió el cuchillo a Namjoon, que lo miraba con cara de circunstancias —Si mi padre ha preparado esto, entonces estamos en peligro.

La puerta se abrió en ese mismo instante. Varios guardias entraron en el dormitorio con Ahn Hyojin en cabeza. En cuanto detectaron los cuerpos de Jeonghan y Jaebum tirados sobre un charco de sangre y vieron el aspecto de Yoongi y el cuchillo que Namjoon sostenía en la mano, alzaron sus armas de fuego apuntando a los jóvenes.

—¡No os mováis!— exigió la chica de cabello rubio —¡Quedáis arrestados por asesinato! 

Yoongi y Namjoon han logrado salvar y proteger a Jimin y Taehyung pero la muerte de esos tres parece que traerá consecuencias. La situación se complica una vez más y el futuro no pinta bien...¿Creéis que Jongsuk ordenó realmente violar a Jimin?

Por curiosidad. ¿Vosotrxs habríais dejado a Jeonghan con vida? 🤔

Sálvalos. ¿Sabéis a quién pertenece esa misteriosa voz? 👀

Por los comentarios que veo sé que algunxs sufrís por los idols que he elegido como villanos. Los malos son fundamentales, sin ellos las tramas no serían lo mismo. Siento si a vuestros faves les ha tocado ese papel. 

Que tengáis una gran semana. A cuidarse mucho. 💕💕

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