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—¿Los dos se disfrazan de mujeres?
—Sí, porque les persigue la mafia. Por eso se disfrazan de mujeres y se unen a una orquesta femenina— explicó Taehyung muy emocionado.
—Parece una comedia divertida— Jungkook se apoyó con el codo en la almohada. Estaba tumbado sobre una de las camas individuales, justo al lado de su novio —Lo único malo es que es en blanco y negro.
—El cine en blanco y negro tiene su encanto, cachorrito— alzó la vista —Además es una gran película. Me rio mucho con el viejo millonario que se pasa toda la peli detrás de Jerry, el contrabajista.
—¿Y al final el viejo descubre que es un hombre?— al maknae le entró curiosidad.
—Mmm tendrás que verla para averiguarlo.
—Dudo mucho que aquí vayan a tener una película estadounidense de los años cincuenta— torció la boca —Anda, no seas malo y cuéntame el final.
—Lo haré pero si me das algo a cambio— Taehyung le mostró una sonrisa pícara.
—¿Qué quieres?— preguntó con cierta inocencia.
El mayor le pasó los dedos por los labios y luego señaló hacia su entrepierna. Jungkook se sonrojó al comprender lo que quería.
—Sabes que esta habitación está al lado de la de mi padre y que no puedo cerrar la puerta con llave, ¿verdad?
—Puedo apoyarme sobre la puerta— Taehyung lo apretó contra el colchón y se subió encima de él —Así nadie podrá entrar.
—Te podría oír— Jungkook se levantó, agarrándole de la espalda y sus rostros quedaron frente a frente.
—Entonces amordázame— propuso seductor —¿O es que no tienes ganas de chupármela?
—No, no tengo ganas— mintió —Pero quiero saber qué pasó entre el viejo y el contrabajista, así que me sacrificaré por ellos.
A Taehyung le dio la risa. Jungkook aprovechó para girarse con él y tumbarlo sobre la cama. El menor alcanzó a Cooky con el pie, provocando con ello los ladridos de la perrita.
—¿Qué?— Jungkook la miró confuso —¿Qué pasa?
Mellie saltó de la cama, recogió a Cooky del suelo y subió a la cama de enfrente. Allí lo acomodó al lado de la almohada y lo tapó con una manta. Luego les dio el culo a sus papás y se dispuso a seguir durmiendo.
—Es tan graciosa— se rió Taehyung —Ama a ese conejo con locura.
—Pase lo que pase recuérdame salvar a ese conejo o nos dejará de hablar de por vida— Jungkook observó la sonrisa del mayor. Verle tan contento le hacía realmente feliz —¿Sigues queriendo que te amordace?
—Sí— le besó el labio inferior —Kook, te necesito.
Jungkook tragó duro al observar su mirada lujurioso. Taehyung no era el único que tenía ganas de hacerlo, el maknae quería repetir lo que había sucedido en la casa de la montaña. Se moría de ganas por seguir explorando su cuerpo.
—Tae, aquí no tenemos lubricante— lamentó.
—Pues fóllame con saliva o jabón— deslizó ambas manos por su cuello —Quiero que hoy tomes el control.
Jungkook no pudo aguantar el impulso y poseyó su boca con desenfreno. A pesar de la herida en la pantorrilla, el maknae no solo logró levantarlo y sujetarlo con seguridad, sino que también lo llevó sin dificultad hacia la entrada.
Taehyung jadeó al sentir cómo lo apretaba contra la puerta; su cuerpo bajando y rozando el de su novio le resultó muy estimulante.
Jungkook se separó de su boca solo para buscar algo con lo que amordazarle.
El mayor se quedó recostado contra la madera, observando cómo abría torpemente varios cajones hasta dar con un pañuelo de cuello blanco. Jungkook lo miró durante unos segundos, meditando si ese pañuelo serviría. Luego regresó a su lado, apoderándose inmediatamente de los labios de Taehyung.
Tras un breve vaivén entre sus lenguas, el maknae le dio la vuelta.
—Cierra la boca— pidió.
Taehyung se dejó hacer, excitado por lo que seguiría a continuación. Era consciente de que tener sexo justo al lado de la habitación de Jongsuk no era la mejor de las ideas, pero eran jóvenes, estaban enamorados y habían pasado por demasiadas cosas.
Aunque fuese arriesgado, la necesidad que exigían sus cuerpos era incontrolable.
Cuando su chico le dio la vuelta, se miraron larga y tendidamente. El nudo que había hecho Jungkook era fuerte pero no le hacía daño, al contrario, a Taehyung todo lo relacionado con el bondage le parecía excitante.
Jungkook sintió los nervios aflorando en lo más profundo de su ser. Le abrió el botón del pantalón de lino con dedos torpes y luego bajó la cremallera mientras succionaba su lóbulo izquierdo.
El ladrido de Mellie los sobresaltó a ambos; la perrita se puso a jugar con Cooky sobre la cama.
—Joder— el maknae cogió a la Shiba Inu con una mano, al conejo con la otra y los metió dentro del cuarto de baño. Luego cerró la puerta corrediza y volvió junto a Taehyung —Casi me da un infarto— se quejó.
Su novio sonrió; a él también se le había acelerado el corazón del susto.
—¿Quieres que siga?
El mayor asintió con la cabeza.
Jungkook sonrió. Justo cuando estaba bajándole el pantalón sonó un fuerte golpe en la puerta. Los ojos del mayor se agrandaron tanto o más que los del maknae.
—¿Q-Quién es?— preguntó exaltado.
—Yoongi.
Taehyung y Jungkook suspiraron aliviados. Habían creído que se trataba de Jongsuk.
—Hyung, ¿puedes venir mañana?
—Jungkook, es importante.
Taehyung se subió el pantalón molesto. ¿Por qué tenía que ser justo en ese momento? El chico se apartó fastidiado de la puerta.
Cuando Yoongi entró en el cuarto pudo comprobar que el dormitorio era idéntico al suyo. La única diferencia consistía en que esta habitación disponía de dos camas, en vez de una matrimonial. Al girar la cabeza vio cómo su hermano se quitaba un pañuelo blanco de la boca.
—¿Qué es...?— el mayor lo pensó mejor y levantó la mano —Mira, no contestes.
—Hyung, estábamos a punto de tener sexo— se quejó Taehyung —Eres jodidamente inoportuno.
—¿Ah, sí?— Yoongi miró a Jungkook —¡¿A que jode?!
El maknae no dijo nada, solo se sonrojó aún más.
—Si es que interrumpir tantos polvos tenía que traer consecuencias— refunfuñó Taehyung cruzándose de brazos.
—T-Te lo compensaré— le prometió el menor avergonzado.
Unos ladridos llamaron la atención de Yoongi. Jungkook abrió la puerta del cuarto de baño y la perrita corrió rápidamente a saludar al mayor.
—Hola— la cogió en brazos —¿Y esa braguita?
—Está con el celo— su hermano se sentó molesto sobre la cama —Igual que yo. Con ganas de follar pero mira por donde, no nos dejan— gruñó.
Yoongi ignoró el dramatismo de Taehyung y acarició a Mellie.
—Hyung, ¿qué es tan importante?— Jungkook tomó asiento al lado de su novio. El maknae quería cambiar de tema cuanto antes.
Yoongi dejó a la perrita en el suelo y se sentó sobre la otra cama. Su seriedad no pasó desapercibida para los menores.
—Doy por hecho que todavía no le has dicho a tu padre que eres gay — el maknae se sorprendió un poco —Jungkook, no puedes decírselo bajo ningún concepto.
—¿Por qué?— le miró desconcertado.
—Porque en cuanto lo sepa, nos echará a todos del búnker.
—¿Qué?— Taehyung y Jungkook hablaron a la vez —¿Por qué piensas eso?— le preguntó su hermano.
—Ese pedazo de...— Yoongi se mordió el labio irritado —Ese hombre nos acaba de pillar en la cama y ha humillado a Jimin de la peor forma posible. Le ha dicho cosas que ningún padre debería decirle jamás a un hijo— apretó el puño con rabia —Palabras tan crueles como que desearía que Jimin hubiese muerto por el camino— hizo una pausa para respirar profundamente; la ira todavía le sofocaba.
El maknae no pudo quedarse quieto; se levantó de la cama horrorizado.
—¡Que hijo de puta!— Taehyung no se contuvo, esta vez no —¡No me digas que os ha echado!
—No lo ha hecho— miró a su hermano —Teme que Jungkook se vaya con Jimin, por eso nos permite seguir aquí— desvió la mirada hacia el maknae —Pero si le dices la verdad, nos echará a todos del búnker. No es un presentimiento, te lo puedo asegurar. Ese hombre no dudará en hacerlo.
El maknae seguía de pie, escuchándole con el rostro desencajado.
—Sé que esto es una putada para ti. Te ha costado mucho aceptarte y ahora te estoy pidiendo que vuelvas a vivir una farsa— Yoongi se levantó y le miró a los ojos —El sistema clasista de este sitio es una mierda pero ¿qué vamos a hacer si nos echan? Aquí no tenemos que luchar contra infectados, lobos u osos. No tenemos que arriesgarnos y salir heridos— señaló la venda de la mano de Taehyung —Tampoco tenemos que buscar comida en pueblos y centros comerciales donde podríamos perder la vida. Si nos quedamos aquí, tenemos más posibilidades de sobrevivir a esto. Si aguantamos en el búnker podremos tener un futuro— miró a ambos —Así que por favor, no os lo pido por mí, os lo pido por Jimin, Namjoon, Hoseok, Eunha y Mellie.
—¿Entonces quieres que cortemos?— Jungkook sintió un dolor punzante en el pecho —¿Quieres que Tae y yo solo seamos amigos?
Taehyung agarró la mano del maknae. Su hermano no le podía estar pidiendo eso.
—Quiero que tu padre piense que eres el hijo modélico que ha creado en su mente. Quiero que le mientas, le engañes y no le dejes averiguar la verdad— dijo sin apartar la vista de ellos —No quiero que os separéis. Solo tened cuidado.
—Gracias, hyung— Taehyung suspiró y apretó la mano de Jungkook.
—¿Dónde está mi hermano?— el maknae le devolvió el apretón.
—Durmiendo— desvió la mirada hacia la puerta —No quería dejarle solo pero era necesario que hablara con vosotros. Si tu padre os llega a pillar en una situación comprometida, no habría vuelta atrás.
—Has hecho bien en venir, hyung— Jungkook se mostró sereno —No te preocupes por nosotros y vuelve con él. Mi padre no se enterará de nada. Te lo aseguro.
Yoongi asintió aliviado. Jimin no estaba en condiciones de afrontar esa conversación con su hermano, seguía muy afectado y el mayor no quería presionarle. Por esa razón había decidido hacerlo por él.
Yoongi estaba convencido de que Jongsuk no soportaría la verdad. El desprecio con el que trataba a Jimin por ser bisexual se multiplicaría por mil si supiese que Jungkook era homosexual.
Por eso debían estar al tanto de la situación. No le gustaba el sacrificio que ambos debían hacer pero Yoongi no veía otra solución.
—Cuando todo esto acabe, Jimin y yo nos iremos a Londres— antes de salir de la habitación se giró hacia ellos —Nos gustaría que vinierais— sonrió —Pensadlo.
Taehyung se quedó mirando la puerta.
—¿Ha dicho Londres?— parpadeó confuso —¿Por qué Londres?
—Allí está mi madre— murmuró el maknae.
—Entonces deberíamos ir con ellos— le miró —No quiero separarme de mi hermano y tampoco de MinMin. Además, seguro que tienes ganas de ver a tu madre, ¿verdad?
Jungkook se sentó sobre la cama; Taehyung notó su cambio de humor.
—Háblame, Kook— pidió al ver lo tenso que estaba —No te calles tus sentimientos.
—No quería hacerte pasar por esto— dijo con profunda pena —Pensé que mi padre sería razonable. De verdad creí que, aunque no aceptara lo nuestro, nos permitiría vivir en el búnker, pero he sido un iluso...
—Tu padre es un miserable— soltó sin miramiento —Ni siquiera debería llamarse padre.
—Estaba convencido de que nos quería, a su manera, sí, pero de verdad pensé que nos quería— Jungkook entrelazó las manos —Me equivoqué, Tae. Me equivoqué en todo. Somos sus hijos pero no dudaría en enviarnos a morir ahí afuera— dijo con profundo dolor —Y lo que más me jode es que, a pesar de todo lo que ha hecho, a pesar de cómo nos trata, me duele que no nos quiera...
Taehyung sintió un gran pesar en su corazón. Por muy hijo de puta que fuera Jongsuk, que lo era, seguía siendo el padre de los Park y por lo tanto, su rechazo hacía sufrir a ambos.
—Actuaremos como amigos por el bien de todos— dijo el mayor —Y cuando podamos irnos de aquí, le dirás que eres gay— Taehyung se acercó a él y le apretó el hombro con fuerza —Le vas a decir que eres jodidamente gay y te vas a quedar muy a gusto diciéndole lo mal padre que ha sido y lo horrible que se ha portado contigo, con MinMin y con Sungjae. Vas a dejarle las cosas muy claras a ese imbécil, ¿entendido?
—Te lo prometo. El día que nos vayamos de aquí le diré todo lo que nunca me atreví a decirle. No me morderé la lengua, Tae— aseguró decidido —Ese día va a conocer quién es su hijo en realidad.
Taehyung se sintió orgulloso de él. Su mirada le transmitió una gran firmeza.
—Hasta que llegue ese día no podremos dormir juntos— lamentó Jungkook —Y tendremos que tener cuidado en cada momento.
—Lo sé— se sentó sobre el colchón de la otra cama —Nada de ser los hermanos imprudentes. Esta vez tenemos que cuidar nosotros de ellos. Necesitamos protegerlos a todos, Kook.
—Sí— el chico le miró pensativo —Buscaré algún lugar donde podamos vernos. No puedo actuar durante meses o incluso años como un simple amigo.
Taehyung le sonrió para ocultar su tristeza. Ahora que Jungkook había logrado superar sus traumas y empezaba a vivir la vida que quería, debía dar un paso atrás y actuar como el chico que detestaba ser. Eso le dolía más que el hecho de no poder besarle ni abrazarle cuando quisiera.
—Esto no nos va a separar. Solo es un contratiempo, nada más— Jungkook le miró con cariño —En Londres nos reiremos de todo esto.
La mirada de Taehyung se iluminó al saber que él también quería irse con Yoongi y Jimin a Europa.
—Ojalá llegue pronto el día de irnos a Inglaterra. Ojalá podamos empezar todos una nueva vida.
—Lo haremos. Ese día llegará antes de lo que crees— sonrió Jungkook —Te lo prometo.
¿Creéis que la petición de Yoongi es demasiado exagerada o viendo la reacción de Jongsuk ha sido lo más prudente?
Sea como sea, Jungkook ha aceptado engañar a su padre y tiene todo el apoyo de Taehyung. ¿Lograrán ambos sobrellevar una situación como esta? ¿Podrán fingir durante tanto tiempo o serán descubiertos? Veremos...
Como sabéis, he estado enferma durante casi dos meses por lo que no he podido subir un capítulo extra para agradeceros los 600K y 700K. 💔 Así que ahora que ya he dejado de ser un zombie y vuelvo a ser persona, no podía dejar pasar la ocasión; hemos alcanzado los 800K, que es una auténtica barbaridad y todo gracias a vosotrxs. Muchas gracias por seguir dándole tanto apoyo a Evanescente. De verdad, no es algo que me tome a la ligera. Espero seguir contando con vuestro amor. Muchísimas gracias. ¡Sois lxs mejores! ❤️❤️❤️❤️
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