Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

115

—¿Y tú a qué te dedicabas?— preguntó el Señor Park.

—Estaba estudiando derecho en la Universidad Nacional de Seúl— contestó Namjoon —Quería ser juez.

Jongsuk le dedicó una mirada muy intensa; Jimin supo al instante que la respuesta de su amigo le había agradado.

—Esa es una profesión muy respetable— dijo en un tono de profunda admiración —¿Qué te motivó a elegir la carrera?

—La gente con poder— afirmó sin apartar la mirada —Siempre se salen con la suya mientras los que carecen de él son injustamente castigados por un sistema corrupto.

El Señor Park esbozó una leve sonrisa. Namjoon no supo cómo tomársela.

—Conociéndote habrías sido un gran juez— aseguró Yoongi.

—El mejor juez de toda Corea— añadió Hoseok.

Namjoon bebió un poco de agua. Convertirse en juez no era solo una pasión o algo a lo que se quería dedicar por vocación; tenía un interés personal que solo su mejor amigo conocía.

—Eunha, ¿verdad?— la muchacha asintió con la cabeza —¿Qué estabas estudiando?

—Enfermería— Hoseok contestó por ella —De hecho ha tratado las heridas de Jungkook.

El maknae asintió, confirmando así las palabras del pelirrojo.

—Muchas gracias por cuidar de mi hijo, Eunha. Nos vendrá bien tener a dos enfermeros más en la comunidad.

La joven miró a Hoseok agradecida. Era evidente que lo había hecho para asegurarle un buen trabajo en el búnker.

—Tenemos un maestro, dos enfermeros y un juez— miró a Yoongi —¿Y tú? ¿Qué hacías antes de todo esto?

—Era chófer.

—¿Eras chófer mientras estudiabas algo más...?

—No estaba estudiando, era chófer— volvió a repetir con calma.

—Entiendo— Jongsuk se desentendió de él y miró a los demás —¿Queréis comer algo más?

Jimin sintió rabia. Su padre había mostrado interés en todas las profesiones menos en la de su novio. El rubio iba a decir algo cuando Yoongi lo agarró de la muñeca y negó con la cabeza.

Al mayor del grupo no le había tomado por sorpresa la actitud del Señor Park. Estaba al tanto del clasismo que corría por sus venas.

Mientras Jongsuk conversaba con Namjoon, Taehyung seguía ignorando todo lo que sucedía a su alrededor. Su mirada estaba única y exclusivamente sobre Jungkook y Sooyoung.

La chica no dejaba de hablarle, de tocarle y de acaparar toda su atención. Daba igual si el maknae apartaba su mano con delicadeza o intentaba centrarse en la conversación de otros, Sooyoung insistía sin cesar.

A Taehyung le habría venido bien un trago o dos de vodka para soportar aquella situación.

Eunha, que estaba sentada al lado de la joven y llevaba un rato observándoles, agarró un vaso de agua y lo tiró disimuladamente sobre el pantalón de la chica. Sooyoung se levantó rápidamente de la silla.

—¡Oh!— Eunha también se levantó —¡Lo siento muchísimo!

—No importa, no pasa nada— contestó algo apurada —Solo es agua.

—Vaya Eunha, qué torpe eres— se rió Hoseok —Parece que se ha meado encima.

Las palabras del pelirrojo sonrojaron a la muchacha. Sooyoung se disculpó con los demás y salió por la puerta. Eunha le guiñó el ojo al hermano de Yoongi antes de seguirla.

«Muchas gracias Eunha. Te debo una» pensó Taehyung emocionado.

—Papá, ¿te importa si nos vamos a descansar?— Jimin quería aprovechar la oportunidad que había creado su amiga para sacarlos de allí —El viaje ha sido muy duro y ahora que hemos comido, nos gustaría dormir.

—Lo entiendo— el hombre se levantó —Tenemos mucho tiempo para conversar y ponernos al día. Id a descansar.

Los pocos minutos que tardó el padre de los Park en abrazar a sus hijos y en despedirse de los demás, se sintieron como horas para Taehyung. El chico estaba impaciente por irse de allí, estaba agobiado por la situación, probablemente tanto como Jungkook.

—Esperad aquí. Os enviaré a alguien que os lleve a vuestras habitaciones.

En cuanto el hombre salió por la puerta, Taehyung abrazó a Jungkook con fuerza. El menor le devolvió el abrazo con las mismas ganas, sin embargo se apartó de él mucho antes de lo que le hubiera gustado a su novio. A pesar de ello, Taehyung agradeció no ser rechazado; intuía lo asustado que estaba.

—Chicos, muchas gracias.

—Dáselas a Eunha, TaeTae, ella ha sido la más lista de todos.

—Deberíamos irnos antes de que vuelva tu ex— dijo Yoongi con visible desagrado.

—No hay prisa— Namjoon cogió un trozo de kimchi y se lo comió —¿Por qué crees que Eunha ha ido con ella? No dejará que vuelva tan rápido.

—Eunha es genial— Jungkook suspiró aliviado. Encontrarse con su padre había sido un golpe inesperado pero volver a ver a Sooyoung no era para menos. La situación le había sobrepasado por completo.

—¿Por qué dice tu padre que es tu novia?— el pelirrojo ladeó un poco la cabeza, estaba confundido.

—Porque en teoría todavía lo es— contestó Jungkook, consciente de las miradas —Lo era antes del apocalipsis zombie. No tuve ocasión de cortar con ella.

—¡Joder!— se alteró Hoseok —Así que salías con ella antes de todo esto, pero durante estos meses te enamoraste de Taehyung y ahora estás con él pero ella cree que todavía estás con ella y desconoce que en realidad estás con él— se llevó la mano a la barbilla —Esto es como uno de esos culebrones que daban los domingos por la tarde.

—Hobi, cálmate— Namjoon puso los ojos en blanco.

—No puedes estar con dos personas a la vez y mucho menos por obligación. Tienes que cortar con ella— le aconsejó Jimin.

—¿Obligación?— Hoseok se llevó el pulgar a la boca —¿Es que no estabas con ella por amor?

—Fue cosa de su padre— aclaró Taehyung —Le impuso a esa chica.

—¡Vaya con los ricos!— Hoseok miró a Namjoon —¿Ves? En los culebrones también pasan estas cosas. Te digo yo que nos muestran la realidad más veces de lo que tú crees.

Namjoon pasó a su lado sin decir ni una sola palabra y cogió a Mellie en brazos. La perrita se dejó acariciar la panza con mucho gusto.

—Joonie, ¿me estás ignorando?— bufó —¡Serás zopenco!

En ese momento entró una joven de cabello largo por la puerta. Llevaba la melena castaña recogida en una coleta alta y vestía la típica ropa del lugar. En la mano sujetaba varios brazaletes marrones con diferentes letras. La suya era una «B».

—Hola, me llamo Park Jiyeon— hizo una reverencia —Monsieur me ha enviado.

—Te estábamos esperando— Yoongi miró los brazaletes —¿Son para nosotros?

—Así es— sacó un papel del bolsillo donde tenía varias cosas apuntadas —¿Os podéis presentar con vuestro nombre y profesión, por favor?

Los chicos hicieron lo que pidió. La muchacha fue repartiendo los brazaletes de uno en uno. Yoongi se fijó en las letras; Namjoon, Hoseok y Taehyung recibieron un brazalete con una «B». El que les fue entregado para Eunha también mostraba la misma letra. Jimin y Jungkook tenían una «V», la de Yoongi en cambio era una «D».

—¿Qué diferencia hay entre las letras?— preguntó Taehyung muerto de curiosidad.

—Las letras se otorgan según la profesión de cada individuo— explicó Jiyeon con calma —La letra "A" pertenece a médicos y científicos. Profesores, enfermeros y letrados reciben la letra "B". La "C" es para los cuerpos de seguridad, agricultores etc. Los chóferes, limpiadores, cocineros y demás adquieren la "D". La "V" es especial— miró a Jungkook con una sonrisa encantadora —Esa letra es para las personas más importantes del búnker.

—Genial, un sistema clasista— Jimin chasqueó la lengua —Y tú y yo somos los putos enchufados— le dijo a su hermano.

—¿Podemos cambiar las letras?— preguntó Jungkook —No es justo que tengamos una "V". Deberíamos tener la letra que corresponda a nuestra profesión.

—Lo lamento, Señor Park, pero Monsieur ha sido muy específico y no me permite, bajo ningún concepto, darle a Usted o a su hermano otra letra.

—¿Y en qué se diferencia tener una "B" de una "D"?— Namjoon pasó el mosqueo de los Park por alto y siguió indagando —¿Solo es para diferenciar las distintas actividades de cada persona?

—Las personas que poseen una "V" o una "A" tienen acceso a todas las plantas y habitaciones del búnker. Las personas con una "B" o una "C" tienen acceso a la mitad. Las personas con una "D" tienen el acceso limitado. Además del acceso a las distintas áreas del refugio, el tamaño y la comodidad de sus dormitorios también lo determinará la letra. Igual que el número de sus comidas diarias.

—¿Quién demonios ha decidido todo esto?— Jimin no pudo controlar su enfado —¿Cómo podéis estar de acuerdo con un sistema tan abusivo?

—Señor Park, en un mundo como este, todas las personas no tienen el mismo valor. Debemos dividir a la gente en grupos para asegurar una buena convivencia. Lo fundamental es que cada uno acepte el papel que le corresponde y aporte a la comunidad el conocimiento que posee— Jiyeon lo decía con una convicción absoluta y sin dejar de sonreír ni un instante.

Los jóvenes se miraron completamente desconcertados.

—Se les encomendarán unos trabajos que deberán hacer a diario— prosiguió —Su contribución a la comunidad es obligatoria. Aquí gozarán de protección, alimentación y servicio médico. No deben preocuparse por nada, solo necesitan seguir las normas.

—¿Qué clase de normas?— preguntó Yoongi con desconfianza.

—Solo deben seguir las normas de convivencia básicas que les han inculcado desde niños.

Jimin y Jungkook se podían imaginar en qué consistían aquellas reglas. Si su padre estaba a cargo de todo, entonces aquel lugar funcionaría como una prisión.

—Me gustaría llevarles a sus dormitorios.

—¿Están todos en la misma planta?— quiso saber Hoseok.

—Por supuesto que no— se rió ante aquella pregunta —Por favor, síganme.

El grupo recogió las mochilas mientras Taehyung tomó a Mellie en brazos. Durante el trayecto, Jiyeon les explicó que los dormitorios «D» se encontraban en la planta seis, los «C» y «B» en la siete, los «A» en la ocho y los «V» en la nueve.

—¿Tendremos habitaciones individuales?— se interesó Namjoon.

—Solo los "V" y "A" tienen habitaciones individuales. Los demás deben compartir su dormitorio con una, dos o tres personas.

—Joonie, Taehyung, Eunha y yo somos "B". ¿Podemos compartir habitación?

—Lo siento, no disponemos de habitaciones de tres en estos momentos— contestó con amabilidad —Aquí dividimos los dormitorios por sexos. Si son pareja pueden compartir habitación, sino no.

Taehyung torció la boca. Él quería quedarse con Jungkook pero sabía que sería imposible con su padre pululando por ahí.

Entraron en el ascensor y bajaron a la séptima planta. Jiyeon los llevó hacia el primer dormitorio. El grupo se encontró con un lugar sencillo. Dos camas individuales ocupaban el centro de la habitación. El cuarto solo disponía de una mesilla pequeña para dos personas. Por suerte no sucedía lo mismo con los armarios y las cómodas. Las sábanas blancas y rojas destacaban casi tanto como el olor a naranja que se percibía nada más pisar la habitación.

Taehyung decidió dejar a Hoseok y Namjoon en ese dormitorio y ocupar justo el que estaba a cinco puertas de allí. Su habitación era exactamente igual a la de sus amigos. Afortunadamente para él estaba vacía, por lo que no tendría que compartirla con nadie.

—Debes mantener la habitación limpia por tu cuenta— le explicó Jiyeon —El perro puede quedarse pero no debe molestar a los demás. Si hay quejas...

—No habrá quejas— aseguró Taehyung apretando a Mellie contra su pecho —Es un cielo y no molestará a nadie.

—Muy bien— Jiyeon miró a los Park —Síganme.

—Yo también me quedo aquí— Jungkook se sentó sobre la cama —Esta habitación es grande, no necesito un dormitorio "V".

El corazón de Taehyung se aceleró, no podía creer lo que estaba escuchando. Que Jungkook se estuviese arriesgando a compartir habitación con él, era mucho más de lo que hubiera esperado.

—Señor Park, con todos mis respetos, su padre no estaría de acuerdo.

—No estoy pidiendo permiso. Me quedaré aquí con él.

Taehyung se sentó a su lado, oprimiendo las ganas de sonreír. Mellie se acomodó sobre el regazo de Jungkook y miró a la desconocida con aire de indiferencia.

Yoongi sonrió al ver aquella escena; Jimin miró a su hermano muy satisfecho. Sabía lo difícil que era para Jungkook desobedecer a su padre, por eso se sintió muy orgulloso de él.

—Pero Monsieur...

—Mi hermano ha sido claro— el rubio miró a la joven —¿Puedes enseñarme mi habitación?

—Por supuesto, Señor Park— Jiyeon no estaba de acuerdo pero decidió hacer lo que le decían.

Los mayores se despidieron de sus hermanos y siguieron hasta el ascensor. No tardaron en llegar a la novena planta.

La decoración impactó mucho a Yoongi. El blanco seguía predominando pero el diseño era diferente. Varias pinturas colgaban de las paredes y el suelo de mármol estaba parcialmente cubierto por una alfombra granate de alta calidad.

No se oía ni un ruido a diferencia de las otras plantas por las que habían pasado. La habitación de Jimin estaba al fondo del pasillo de la izquierda.

Lo primero que les llamó la atención al entrar en el dormitorio fue la moqueta. Era gris y lucía un diseño distinto, con rayas blancas, dispersas por todo el suelo. Las paredes eran de madera, al igual que las mesillas. La cama doble disponía de varios cojines y de sábanas blancas que olían a jazmín. Al fondo estaba el cuarto de baño, oculto tras una puerta corredera. El armario empotrado ocupaba una pared entera y el banco de cama mostraba un estilo muy elegante.

—La habitación la limpiaremos todos los días, Señor Park. Una muchacha vendrá...

—No hace falta— Jimin tomó asiento sobre el sillón blanco de la esquina —Ya me ocupo yo de limpiar la habitación.

—Pero Señor Park...

—Gracias— el rubio se quitó las zapatillas —Por favor, muéstrale a Eunha su dormitorio y dile donde queda el mío y el de los demás.

—Por supuesto— Jiyeon miró a Yoongi —Ven conmigo. Te llevaré a tu habitación.

El rubio abrazó a su novio por la espalda, evitando que pudiera moverse.

—Gracias pero él se queda conmigo.

Yoongi sonrió.

—Señor Park, esta habitación es para una sola persona. No creo que su amigo se sienta cómodo viviendo aquí con Usted.

—No es mi amigo, es mi novio.

La chica le miró como si hubiese dicho que era un alienígena.

—Ya puedes irte— Jimin se mantuvo apretado a Yoongi —Y cierra la puerta al salir.

Jiyeon no pudo ocultar su desconcierto. Después de tropezar con su propio pie, salió de allí con la mayor dignidad que pudo.

—¿No te preocupa que se lo cuente a tu padre?

—Me importa una mierda— bufó molesto —No pienso dejar que duermas en una habitación con dos o tres tíos.

—Así que se trata de eso— se rió —¿Estás celoso?

—Por supuesto que sí— le soltó —Y también estoy cabreado. No me ha gustado cómo te ha tratado mi padre y tampoco me gusta este sistema. ¿Por qué tienen que ser tan clasistas? Me pone enfermo.

—Al menos me ha tocado la "D" de Daegu— Yoongi se giró y le miró a los ojos.

La mirada de Jimin se suavizó un poco.

—No sé cómo puedes tomártelo con humor— hizo un mohín —Todo esto está mal.

—Es una mierda de sistema, no te lo discuto pero Jimin, aquí estamos a salvo. Me da igual si tengo que lavar platos o hacer cualquier otro trabajo. Si nos dan un techo donde refugiarnos de ese infierno, por mí está bien.

—Lo entiendo... Créeme que entiendo lo que quieres decir pero Yoongi, soy bailarín, en mi brazo debería haber una "D" no una "V". Me siento como una sanguijuela...

—La sanguijuela soy yo que voy a vivir como un "V" siendo un "D" y solo por tirarme al hijo del jefe— se rió.

—Somos un par de sanguijuelas— el sonido de la risa de Yoongi cambió la expresión de Jimin, que se volvió mucho más risueña —Debería darnos vergüenza.

—Debería, pero ahora mismo me da igual— le pasó el pulgar por los labios —Ahora mismo lo único que quiero es meterme contigo en esa cama y no soltarte nunca más.

El corazón de Jimin se aceleró con sus palabras.

—Hoy he estado a punto de perderte— le besó la mejilla y lo apretó contra su pecho —No me importan las circunstancias, no me importa cómo vivir contigo, solo quiero vivir contigo.

—Yoongi...

Se quedaron abrazados y en silencio durante varios minutos, hasta que el rubio se separó de él y le miró a la cara. Yoongi no ocultó las lágrimas en sus ojos. Había sido un día muy duro para él, lleno de emociones fuertes y ahora le estaba pasando factura.

Jimin le cogió de la mano y lo llevó hacia la cama. Ninguno dijo nada mientras se quitaron la ropa, tampoco hablaron cuando se metieron dentro de las sábanas. El rubio acomodó la cabeza sobre el pecho de Yoongi y se dejó abrazar por su novio.

—No me iré a ningún lado— susurró el menor —No tienes que soltarme nunca más.

Yoongi le besó la cabeza. Ya no tenía que temer por él, ahora podían permanecer juntos. El peligro había cesado. 

A pesar de la presencia de Jongsuk, ni Jimin ni Jungkook se han dejado intimidar por su padre. El maknae ha dado un paso importante permaneciendo al lado de Taehyung, Yoongi en cambio evita el dormitorio "D" y logra quedarse con su chico. Poco a poco vamos conociendo más detalles sobre el búnker. ¿Qué os parece el sistema de letras?

Espero y deseo que paséis un buen fin de año. Que el 2019 os traiga solo cosas buenas y entre ellas lo que más deseáis. Cuidaros mucho y disfrutad de la noche. Feliz año nuevo. Besos y abrazos. Love you~ ❤️

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro