—Nunca he escuchado sobre esa enfermedad antes ¿es muy grave?— cuestioné bastante preocupada.

—Esa enfermedad, según los médicos, es una de las más graves y no tan comunes alrededor del mundo— me contó.

—¿Morirás?— interrogué aterrada.

—No, no— negó rápidamente— pero, sí puedo perder la visión— respondió en un tono más que triste.

—¡¿Perderás la qué?!— exclamé con el dolor de Ling quemándome en la piel.

—Podría, por eso no quería contarte— dijo.

—¿Y no tiene solución?— pregunté levantándome de la cama.

—Debo operarme, pero no creo que tengo suficiente, y no quiero molestar a mis padres ¿sabes? Con mis problemas de salud, al final, no es tan grave— mintió.

—¿¡Qué!?— grité enojada— ¡¿Te parece normal perder la jodida visión para siempre?! ¿Te parece algo que no es grave, Park Lingsoo?— la regañé, con mi presión arterial a nada de estallar de la molestia y frustración.

—Sabía que te pondrías así, Nicole— negó con un gesto físico, y en un tono triste.

—Pues, créeme, cualquiera se habría molestado— contraataqué y agarré mi celular, con la intención de irme a caminar a saber a dónde, con tal de relajarme.

—¿Dónde vas?— preguntó preocupada.

—No te preocupes por mí, Lingsoo, preocúpate por tí, pues eres la que está a punto de perder un sentido, y sólo porque quieres— eso fue lo último que expresé antes de salir rápidamente de la casa.

Mi mejor amiga podría perder la visión.

Decidí ir a caminar por ahí. Afortunadamente, me aprendí el camino a la cancha donde conocí a los chicos, así que me dirigí hacia allá, con tal de pensar un poco.

Pero con mi campo de visión apuntando hacia el suelo, choqué con un cuerpo alto. Alcé la mirada, reencontrándome con..

—¡Hey! ¡Nicole!— me saludó activamente y sonriente— ¿cómo estás?

—Estoy bien, gracias, Namjoon— mentí, no quería agobiarlo con mis problemas.

—¿Segura? Tienes cara de querer ir a un bar, beber, desahogarte y olvidarte de todo a tu alrededor— opinó.

Diablos, Namjoon, acertaste.

—¿Dónde hay un bar?— cuestioné y sonrió.

—Ven, por aquí— indicó, y caminó conmigo unas cuántas cuadras después de la cancha.

Namjoon, te lo compensaré, lo juro.

—¿Entrarás?— preguntó y asentí.

Tomamos asiento, frente a la barra, y me observó atentamente.

—¿Has probado soju?— cuestionó y negué.

—No, ni siquiera sé qué es— dije burlona.

—Hoy lo sabrás, bonita— afirmó— una botella de soju, por favor— pidió.

—Namjoon, pero..tu dinero.

—Tranquila, yo también vengo con los deseos de desahogarme— me tranquilizó.

—¿Quieres contarme qué ocurre?— cuestioné.

—No, primero tú, me preocupas más que mis problemas— confesó, admito que me sorprendió su confesión.

Namjoon me transmite esa aura de confianza, siento que este tema estará bajo llaves con él, o eso espero, correré el riesgo.

—Es Lingsoo, está enferma y no quiere hacer nada al respecto. Eso me frustra mucho, Namjoon, ¿sabes qué se siente saber que la única persona que amas pueda perder un sentido?— le conté frustrada.

—¿Qué es lo que tiene?— cuestionó.

—Tiene una enfermedad ocular, llamada..eh— me interrumpí a mí misma al no recordar ese nombre tan extraño— que..quera..quera algo, no recuerdo.

—Te refieres a queratocono— respondió inteligentemente— es una enfermedad bastante grave— afirmó— ¿por qué se niega a operarse?

—Me dijo que por el precio de las operaciones, pero la conozco, ella teme a las agujas en partes tan sensibles, además no quiere molestar a sus padres, pidiéndoles dinero para operarse— le conté.

—¿Qué debería hacer para que dejes de preocuparte por ella?— interrogó curioso.

—Tranquilo, eso se me pasará al rato— dije intentando remediarlo.

—No, señorita, es obvio que ayudaré con esto— negó y acarició mi cabello suavemente con su mano derecha, lo cual me relajó e hizo sonreír— prometo ayudarte.

—Agradezco mucho tu ayuda, pero ¿Por qué? Apenas nos conocemos, Namjoon— cuestioné curiosa, él, en cambio, sonrió.

—Porque sé lo que siente, y quiero ayudarte, antes de que algo le pase a la persona que amas, quiero ayudarte a hacerla reaccionar a tiempo— explicó amablemente— no cometas el mismo error que yo, no pude hacer nada para salvar a mi madre— confesó.

Su madre no estaba.

—¡Dios! Namjoon, lo siento mucho— me disculpé apenada y triste por él— no tenía ni idea—me justifiqué.

—Tranquila, bonita— negó— eso fue hace mucho— sonrió— agradezco que me hayas contado lo que te pasa, puedes confiar en mí ¿vale? Quien es amiga de Jungkook, se vuelve automáticamente en amiga mía también— expresó brindándome confianza.

—Gracias por escucharme, Namjoon, te considero un buen chico— agradecí con honestidad.

—¿Quieres que sea tu hermano mayor a partir de ahora?— propuso divertido.

—Adóptame~..— pedí en tono de berrinche, causándonos gracia.

—Eres adorable, Nicole; serías muy buena para Jungkook— comentó en un tono poco audible, pero alcancé a escucharlo.

—¡Oye!— lo regañé— que no.

—Vale, lo siento— dijo divertido.

—¿Quieres contarme qué te ocurre a tí?

Su hermosa sonrisa desapareció, su expresión se tornó entristecida.

—¿Nunca te ha pasado, que sólo tienes un familiar sanguíneo, el cual amas y darías la vida por él, y te odia?— preguntó, transmitiéndome todo el dolor que tenía en su interior.

Mis impulsos vencieron a mi timidez, sin más me acerqué y lo abracé suavemente, él correspondió al momento.

—Gracias, Nicole, lo necesitaba— agradeció.

—No es nada, habrías hecho lo mismo por mí— expresé y me alejé lentamente para observarlo— ¿quién es ese familiar?

—Es mi hermano.

—¿Lo conozco acaso?— pregunté burlona.

—De hecho, sí lo conoces— respondió serio y me sorprendí.

—¿Sí? ¿Quién es?— interrogué.

—Es Seokjin..

Namjoon-ah!! Lo adoro con toda mi vida y alma. Créanme, juega un papel importante en esta historia, so, mucho love para él. Y Lingsoo, no me la desprecien, es un amor.

No dejen de leer <3