Extra
Parte extra: Fuegos Artificiales
¿Su primer recuerdo? Bakugo tenía miles de esos que retrataban toda su infancia.
¿Los mejores meses de su vida? Bakugo soltó una risa cuando la pregunta se apareció en su cabeza. La respuesta, por demás, era completamente obvia: sus mejores meses siempre serían cuando conoció a Kirishima en la U.A.
Y el día más feliz de su vida, entonces, ¿cuál sería? Pero esa respuesta nunca podría dársela a nadie, no había manera, ni siquiera a él mismo u otra persona. Simplemente no existe y, a la vez, son muchas.
Maldición, ¿por dónde comenzar?
El día más feliz de su vida fue aquel donde pudo pedirle perdón y confesarse con Kirishima, siendo extrañamente correspondido por el pelirrojo. Joder, Bakugo podría jurar que estuvo sonriendo todo el día después de eso. Tras cada día que lo recordaba era inevitable que un sentimiento cálido no decidiera invadir su pecho.
Pero también podría ser cuando decidió tomar la iniciativa, al día siguiente de aquellos hechos, y armar las pases con Deku —aún siendo rivales— y pedirle perdón como se debía por la mierda que había sido su amistad durante esos últimos años. Kirishima le sonrió con orgullo y satisfacción por su buen resultado tras haberlo estado apoyando y dándole ánimos durante largas horas para que lo hiciera. Ese día le pidió ser su novio al mejor estilo Katsuki Bakugo.
Aún así, el día más feliz de su vida también fue cuando compartieron su primera tomada de manos —esa mierda sí que le dio un vértigo horrible—, su primera cita... incluso la estúpida fiesta sorpresa que organizaron su grupo de imbéciles para su cumpleaños el año siguiente.
Jamás podría decir cuál de todos sería el día más feliz de su vida, no estando con Kirishima a su lado. Cada momento que compartía a su lado, aunque solo se sentaran a hablar, era un pequeño tesoro que Bakugo prefería guardar en su corazón como un diamante extremadamente delicado y precioso que alguna vez existió.
Nunca encontraría las palabras para describir ese momento —y quizás cuando logre hacerlo llegue otro día todavía mejor—, pero si de algo está seguro, es que la mayoría de esos momentos siempre estarán compartidos al lado de Kirishima.
—¿Está todo bien?
Bakugo frunció el labio y asintió, esbozando una diminuta sonrisa en su dirección. Había estado metido en sus pensamientos de nuevo.
—Por supuesto que si, idiota. ¿Por qué no lo estaría?
—Bueno —Kirishima encogió los hombros y señaló el trayecto que habían recorrido a pie —, esto es técnicamente ilegal. Aisawa-sensei va a matarnos si se entera.
Bakugo miró hacia atrás, al enorme edificio que representaba la escuela y los pisos residenciales de los estudiantes, y volvió a asentir con la cabeza. No es que fuera ilegal, pero sí estaba prohibido salir fuera de los horarios establecidos —el toque de queda—. Era Navidad, y como la azotea quedó completamente descartada, Bakugo pensó que escabullirse al patio del edificio mientras todos permanecían dentro sería una buena idea para tener su propio espacio con Eijiro.
—Puedes volver si te da tanto miedo —le dijo, en cambio. Kirishima se frotó las manos para mantener el calor y negó a los lados mientras expulsaba una débil nube de vaho.
—No —dijo y miró a otro lado —. No, quiero estar contigo.
Bakugo soltó un bufido para ocultar la forma en que la sangre se instalaba en sus mejillas y continuaron caminando hasta una zona lo suficientemente alejada para evitar las miradas indeseadas de quien pudiera verlos desde el edificio. El frío y la nieve evitó que se pudieran tirar sobre el pasto a ver la noche. Bakugo estaba nervioso, ha de admitir, ansioso con las palabras que se atacaban en su garganta cada que veía a Kirishima a los ojos y era incapaz de confesar.
—Oye, pelos de mierda...
Kirishima lo miró. Pero no pudo completar su oración cuando el primer fuego artificial voló al cielo con un silvido agudo y estalló en colores. Ambos voltearon hacia arriba para verlo y Bakugo maldijo al estúpido con problemas de ansiedad que decidió encender sus fuegos artificiales dos putos minutos antes de la medianoche.
Y a ese le siguieron otros más hasta que se cumplieron las cero horas y el cielo entero estalló en colores, lámparas flotantes y sonidos.
—Puede sonar algo tonto pero... —Kirishima permaneció con los ojos clavados en el cielo, con la nariz enrojecida por el frío y las manos metidas en los bolsillos de su abrigo — siempre me gustó salir y observar estos eventos desde fuera, incluso con el frío. Es hermoso, ¿no crees?
Katsuki bajó la vista de los fuegos artificiales y así contemplar a su novio, observando en primer plano el perfil de Eijiro. La forma tan única en la que sus ojos brillaban y sus iris reflejaban la pirotecnia como un acto de magia. La suave y sincera sonrisa que adornaba sus labios o la forma en que arrugaba la nariz y expulsaba el vaho cuando respiraba mientras los colores nocturnos y las luces artificiales danzaban en su piel de forma diferente con cada pequeña explosión, creando una pintura que Bakugo quiso guardar para siempre en sus memorias.
—Si... —murmuró sin despegar su vista del chico a su lado, totalmente hipnotizado como para prestarle atención a otra cosa.
Bakugo metió las manos en sus bolsillos y se conformó con la compañía de Kirishima en su vida, con su amistad y la nueva relación que han estado construyendo durante más de un año.
Kirishima bajó la mirada para conectarla con la del cenizo tras sentirse observado y sus pómulos adquirieron un rosa suave que apenas pudo ser perceptible, pero que Bakugo no pasó por alto.
—Hey, imbécil.
—¿Si?
—Espero aguantar tu oxigenada cabeza otro año más. Feliz navidad.
Kirishima soltó una carcajada abierta.
—Feliz navidad, Bakugo.
Después de unas cuantas semanas —meses, creo yo— decidí pasarme una vuelta por acá y terminar, finalmente, esta novela.
Estoy realmente satisfecha con el resultado. Cambié casi todo el extra y puedo decir me que gustó 100 veces más que la versión anterior.
Por otro lado, mil gracias a todas esas personas que leyeron y apoyaron este proyecto, tanto desde sus inicios como esta re-invención/resmasted. Se les adora un montón!!
Y nada, ya nos estaremos leyendo en próximas historias o actualizaciones, lo que ocurra primero (la segunda es lo más probable, porq dudo sacar algo nuevo de bnh alguna vez).
Atte: Kirishi365
FIN
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