Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 22

Narrado por Bella 

23 de marzo 2012

El 23 de marzo de 2012 era un día que había esperado con ansias, un día que me llenaba de nervios y emoción a partes iguales. Era nuestro primer aniversario, y justo coincidía con el inicio de la segunda parte de la gira Up All Night en Canadá. Liam y yo habíamos recorrido juntos este año entre secretos, momentos robados, y un amor que, aunque nuevo, se sentía profundo e irrompible.

Había viajado con los chicos desde Londres, junto a Emma, quien estaba comenzando a acercarse más a Zayn de una manera que yo ya conocía bien: con esos nervios de enamoramiento, esas miradas furtivas y sonrisas tímidas. Zayn también parecía estar atento a cada uno de sus movimientos, como si la viera por primera vez. Cada momento con ellos dos era una sonrisa compartida, una risa disimulada entre amigas, y por un tiempo, todo parecía perfecto. Los chicos estaban emocionados, el equipo de la gira era amable y el ambiente estaba lleno de esa expectación única que trae el comienzo de una nueva aventura.

Sin embargo, cuando llegamos a Canadá, algo comenzó a cambiar en Liam. En el avión había estado callado, más pensativo de lo habitual, y aunque yo trataba de hacer que se animara, su sonrisa no llegaba a sus ojos. Al principio, pensé que era el cansancio acumulado del viaje o el peso de las expectativas, pero, después de instalarnos en el hotel, noté que la tensión en sus hombros aumentaba, sus manos temblaban ligeramente y sus respiraciones se hacían cada vez más cortas y desesperadas.

—Liam, ¿estás bien? —pregunté, tomando su mano mientras intentaba tranquilizarlo.

Él asintió, pero pude ver que su mandíbula estaba apretada, que estaba conteniendo algo que no podía o no quería expresar. Al cabo de unos minutos, se levantó bruscamente de la cama, pasándose las manos por el cabello, caminando de un lado al otro de la habitación.

—No puedo, Bella. Siento que todo esto me está ahogando —dijo finalmente, su voz temblando. Era la primera vez que lo escuchaba así, vulnerable, asustado.

Intenté acercarme, pero él levantó una mano, como si necesitara espacio.

—¿De verdad estás bien? Liam, estoy aquí para ti, no tienes que hacerlo solo —le dije, tratando de acercarme un poco más.

Él negó con la cabeza, frustrado.

—¿No lo entiendes? —dijo con la voz quebrada, su mirada fija en la ventana—. A veces siento que esto... todo esto me está destrozando. Los ensayos, las entrevistas, las expectativas. Y ahora, contigo aquí, solo empeora, Bella. No quiero que me veas así, no quiero arruinar esto...

Me dolió escuchar esas palabras, y por un instante, el miedo me paralizó. ¿Pensaba realmente que nuestro amor era una carga? ¿Que mi presencia hacía todo peor?

—Liam, no estoy aquí para juzgarte o presionarte. Estoy aquí porque te amo, y quiero ayudarte a llevar todo esto... juntos —le dije, mi voz temblando.

Pero él no parecía escucharme. Sus ojos estaban en algún otro lugar, en un miedo que yo no podía alcanzar, y su frustración solo aumentaba.

—Bella, no entiendes —me dijo, casi en un susurro, y pude ver la lucha interna en sus ojos—. ¿Y si no soy lo suficiente? ¿Y si fracaso y te arrastro conmigo? —preguntó, su voz cada vez más rota.

Me acerqué y tomé su rostro entre mis manos, obligándolo a mirarme.

—Escúchame, Liam. No eres solo suficiente, eres lo único que quiero. No estoy aquí esperando que seas perfecto. Estoy aquí para apoyarte, para sostenerte si caes —dije, dejando que mis palabras lo abrazaran.

En ese momento, la puerta se abrió, y Zayn, con una mirada preocupada, asomó la cabeza.

—¿Todo bien aquí? —preguntó suavemente, mirándonos a ambos.

Liam no respondió, y Zayn, al ver su expresión, se acercó y puso una mano en su hombro.

—Hermano, todos estamos aquí por ti. No estás solo —dijo Zayn, con esa calma que siempre tenía en momentos difíciles.

Después de unos minutos, Liam asintió y, como si el peso de su ansiedad se hubiera aligerado un poco, nos abrazó a ambos, dejando caer las barreras que había intentado construir.

Horas después...

Esa noche, Liam subió al escenario con una energía distinta, como si toda esa angustia hubiera encontrado un lugar donde canalizarse. Los chicos, sabiendo lo que había pasado, se mantenían cerca, bromeando y dándole ánimo. Y aunque mi corazón aún latía con el temor de que algo más pudiera quebrarlo, ver cómo ellos lo sostenían y cómo, a su manera, Liam seguía adelante, me dio un poco de paz.

Al final del show, cuando regresamos al camerino, Liam me tomó de la mano y me miró a los ojos, su expresión sincera.

—Gracias, Bella, por estar aquí —dijo en voz baja, como una promesa.

Le sonreí, sabiendo que no siempre sería fácil, pero también segura de que, mientras estuviéramos juntos, podíamos superar cualquier tormenta. 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro