17|Tal Vez No Era Hoy...
Connor
11 de Marzo del año 2015
Nueva York
Llamé una y otra vez. Me tomé la molestia de llamar dos veces cada una hora. Regresé al paradero donde la vi por última vez. Regresé a todos los sitios donde estuvimos caminando mientras nos conocíamos. La esperé en el mismo restaurante. Permanecí unos días más en Nueva York con la esperanza de que volveríamos a vernos.
Intenté localizarla a través de Timothy Scheider, e incluso involucré a Syd en el tema para que me ayudara. Pero ni eso funcionó.
Timothy me mandó al carajo casi al segundo, se negó rotundamente a darme noticias acerca de ella o lo que estaba sucediendo con su vida. Pero si me advirtió que me mantuviera lejos de ella. Lo cual no haría, no cuando los dos nos sentíamos exactamente igual.
Syd no pudo hacer mucho. Pospuso el trabajo que estaría realizando con Kenner Garnier y Timothy por asuntos privados que no pudo contarme debido al contrato exclusivo que se había planteado.
No tenía a nadie que me ayudara a entender que estaba sucediendo con Janesse Garnier. Había desaparecido de la noche a la mañana. Era como si nunca nos hubiéramos conocido, como si jamás nos pusimos de acuerdo para salir, o siquiera que compartimos un momento intimo. Lo único que tenía era la imagen que circulaba en las redes sociales, y los recuerdos que hicimos esa noche.
Soy consciente de que le conté que deseaba olvidarme de mis memorias como ella, pero ahora, son lo único que me mantienen cuerdo y me da compasión constante para no olvidarme de su rostro, de su existencia, de que compartimos sentimientos iguales. Lo único que me queda son los escasos vídeos de su rutina en gimnasia rítmica. Y una foto que robé de internet gracias a la elegante familia que posee.
Si no fuera por Janesse, jamás hubiera conocido a la prestigiosa familia Garnier. Tenían tantos artículos en internet que percibí la grandeza en la que se había criado la chica que hacía latir mi órgano llamado corazón. Leí poco sobre ellos, pero estaba al tanto de que se trataba de una pareja veterana en la industria de lo clásico, y que también dirigían el famoso y aclamado Teatro Glory; también poseían un bufete de abogados prestigiados; y por supuesto, tenían tantas inversiones en grandes proyectos que les traían muy buenas ganancias. La familia Garnier era extraordinaria, ni siquiera mi reconocimiento mundial como cantante podría asombrarlos.
Lo más probable es que sería una persona ordinaria para ellos. Alguien con quien no quisieran mezclarse.
Me quito el cubre bocas porqué he notado la poca gente que pasa frente al paradero. Sigo sorprendido de estar aquí una vez más, esperando ansioso por volver a verla. Es el último día que esperaré, mañana parto a Europa para continuar con los pendientes de TwoC.A. Las cosas se solucionaron cuando el CEO consiguió demostrar mi inocencia. Encontraron a la rubia de veintitantos años y revelaron que había mentido a causa de su pareja manipuladora, quien creía que podría sacarme algo de efectivo tras maquinar toda esa locura.
Fue una suerte resolver ese detalle.
Pero ahora, mi felicidad se había desteñido cuando no supe nada más de Janesse. No tengo motivos por el cual sentirme ansioso, pero estoy preocupado. Las personas no desaparecen solo porqué sí, debe existir algo que la hizo irse en silencio. Sea donde este, espero que este a salvo y sana. Espero que la tristeza no la acompañe y que este sonriendo a cada segundo, su sonrisa es preciosa y creo que todos deberían verla. Ella está iluminando mi oscuridad. Está derrumbando los recuerdos dolorosos con la ayuda de mis memorias de la infancia.
Jane y Janesse de algún modo se pusieron de acuerdo para hacerme recordar lo que es bueno, que todavía tengo una oportunidad para ser feliz. Que no necesito amargarme toda la vida. Janesse luce muy parecida a mi infante amiga, de no ser por los ojos oscuros, y alguna que otra diferencia como la nariz y los labios, serían la misma persona. Podría jurarlo. Su parecido era tan exacto y al mismo tiempo desigual.
Me había tentado demasiadas veces por preguntarle acerca de su infancia. Pero no lo hice porqué todavía no teníamos esa relación en la que pudiéramos preguntarnos cosas como esas. O tal vez era yo, tratando de alejarla de algún modo.
Una llamada entrante me sacó de mis pensamientos, era Arley, así que respondí.
—¿Qué pasa?
—Ya es hora, hermano —acotó—. Tenemos una entrevista en menos de una hora, date prisa, ¿quieres?
—Ya voy.
Cuelgo la llamada y me quedó unos segundos sentado, esperando a que algún milagro se cruce en mi camino. Pero no lo hizo. Nunca lo ha hecho, los milagros no llegan a ti como si nada, para ello hay que esforzarse. Bufo cansado de no recibir ayuda, y me levanto.
Pero una vez más, mi rostro fue reconocido por una pequeña multitud de fanáticas que me detuvo mucho antes de ponerme en marcha, y la cantidad se duplicó mientras los minutos transcurrían. Bueno, creo que el lado ventajoso de ser un artista es que podía olvidarme de mis problemas sentimentales y concentrarme en autografiar repetidas de veces.
Tuve que esperar a que Ricky llegara a intervenir entre la multitud que me había atrapado, y solo así logré llegar a tiempo a la entrevista final en Nueva York. Al terminar ese pendiente, los chicos y yo regresamos al hotel para continuar con nuestros pendientes: componer las canciones del nuevo álbum.
Arley había comentado que el titulo era esencial antes de comenzar a escribir las canciones. Así que sugerimos demasiadas ideas. No podíamos decidirnos, y yo estaba muy callado, pensando en lo triste que se sentía no saber nada de Janesse.
—Connor —me llamó Cati—. ¿Sucede algo? ¿Estás enfermo? Llevas minutos sin decir nada.
La miré inexpresivo, sin la menor idea de que responder, así que dije lo primero que se me vino a la cabeza después de un prolongado silencio.
—Unforgettable —comenté.
—¿Qué?
—Para el titulo del álbum —completé.
Rik dejó de comer de su helado de choco menta y tomó su cuaderno.
—Me gusta —respondió—. De echo tengo unas buenas letras para la primera canción.
Comenzó a tararear.
Tengo recuerdos inolvidables de una vida agradable.
Memorias que me hacían reír tan solo de pensarlas.
Hechos que marcaron mi vida durante mucho tiempo.
Motivos inolvidables por los que me levanto a diario.
Nos gustó lo que Rik tarareó. Él si estaba inspirado en componer una buena canción de inicio para nuestro nuevo álbum. Traté de concentrarme en lo que debíamos hacer, así que sugerí un par de ideas para completar nuestro single principal. El nuevo álbum era lo más importante para la banda, queríamos hacer un trabajo excelente, y si teníamos que desvelarnos durante días para conseguirlo, lo haríamos.
Con esa meta en la cabeza, los cuatro nos encerramos en la habitación con la intención de hacer un esplendido trabajo. Cati compuso la melodía acompañada de mi guitarra, mientras que Rik seguía creando letras fascinantes. Y por supuesto, Arley era quien decidía si era lo suficientemente bueno para continuarlo. En cuanto a mí, también sugería algunos versos. Nos divertimos durante el proceso, disfrutamos cada segundo de nuestras compañías y con éxito logramos un buen trabajo.
Rik se levantó del sofá dando brincos de alegría, como si fuera un niño de diez años.
—¡Sí, lo hicimos!
Y Cati, como ya de costumbre, tuiteó en su cuenta una referencia acerca de nuestro próximo single. Sí, a ella le encanta fastidiar las sorpresas.
—¡Eres una estúpida, Young!
Y Rik vive todos los días para fastidiarla a ella.
Cati levantó su teléfono y miró de mala gana al pelirrojo, antes de que estos dos iniciaran una nueva pelea, yo y Arley decidimos sobre la cena.
—¿Pedimos pizza? —Sugirió el moreno.
—Pizza —confirmo.
Caminamos hacia el balcón para poder llamar con tranquilidad a algún restaurante y pedir una pizza. Pero ni eso pudo evitar que escuchara la conversación no apta para menores de edad que tenían mis dos amigos.
—Mira cara de payaso, será mejor que guardes silencio si no quieres que te meta el teléfono por el culo blanco.
Rik reaccionó exageradamente, abriendo la boca en una redonda O llena de sorpresa, e indignado se acarició su trasero, como si de ese modo pudiera protegerlo de los insultos vulgares de nuestra querida amiga.
—Oye, malagradecida con boca infernal, diosito te va a castigar —sentenció el pelirrojo aumentando el tono de voz.
—Si me voy al infierno me asegurare de llevarte conmigo, bocón —aclaró con un enorme fastidio que podía notarse a través de sus ojos chispeantes.
—¿Llevarme? Yo iré directamente a la gloria...
—Sí, a la gloria de Satanás. Eres peores que un niño berrinchudo —contraatacó la chica, esto comenzaba a ponerse realmente interesante, tanto que sonreí escuchando lo que tenían que decirse—. Sí tu pobre madre te viera ahora, estaría llorando por la clase de hijo que tuvo que parir.
—Oye, con mi madre no te metas. Ella está orgullosa del hijo que tiene.
—Sí, no lo creo. Debe estar sufriendo por el hijo pendejo que le tocó tener. Me aseguraré que en la próxima vida le toqué un hijo más decente, como Connor.
—¿Estás diciendo qué Connor es más decente que yo?
—Todos sabemos que es más decente que tú, maldito bocón.
—¡Deja de llamarme bocón, estúpida!
—¡Debilucho moja pantalones!
Y todo explotó. Respecto a los pantalones mojados, habíamos jurado jamás mencionar esa pequeña anécdota. Rik se asombró, se indignó más de lo normal y caminó hacia el refrigerio. Cati, había notado su error, así que se mordió los labios y permaneció tímida, esperando a que Adrik le dijera algo al respecto.
Hay una cosa que ninguno de los tres debemos olvidar. Cuando Adrik se enfada demasiado o se siente muy indignado, lo que nuestro amigo suele hacer, es vengarse con una enorme travesura que podría costarnos incluso nuestro cabello.
Adrik regresó a la sala con una jarra transparente donde se podía apreciar un color extraño. Con una sonrisa maliciosa en su rostro se aproximó con prisa y le echó encima el liquido oscuro a Cati. Su cabello sufrió todo el impacto. Arley y yo prestamos atención, y decidimos no intervenir, no cuando Rik estaba empeñado a hacer una travesura.
—Prometimos que jamás hablaríamos sobre ese incidente —recordó el pelirrojo—. Haz provocado tu propia semana de mala suerte. Atente a las consecuencias.
Con Arley haciendo una mueca de disgusto, Cati asintiendo con la cabeza y aceptando su error, y Adrik mirándola sonriente mientras continua echándole hasta la ultima gota del líquido oscuro, la noche finaliza con una agradable sensación en la habitación.
Quizá no pueda sentirme completamente feliz debido a la ausencia de Janesse, pero cuando estoy con mis amigos, todos mis problemas parecen esfumarse por arte de magia. Sé que tengo que aprender a aceptar las cosas como se dan, incluso cuando empezaba a sucederme algo bueno. Lo había dicho antes, lo viví en el pasado, el destino no es para mí.
La buena suerte jamás estará de mi lado. Y las casualidades nunca significaran algo.
Los siguientes días transcurrieron lentos, vi todo pasar frente a mí y no tenía las ganas necesarias para sentirme pleno, traté de mantener una sonrisa en mi rostro pero no logré que permaneciera allí por mucho tiempo. Llegué al aeropuerto con mis tres amigos, nuestros fanáticos nos esperaban emocionados para despedirnos, y yo no pude demostrar la mejor versión de mí. Subí al avión y viajé a Europa. Nuevamente nuestros fanáticos europeos nos recibieron con una cálida bienvenida, y yo seguía deprimido.
Los momento más importantes para TwoC.A pasaron en un pestañeo frente a mí. Y los medios de comunicación no se quedaron callados, hablaron sobre mi inexpresivo rostro y asumieron que estaba más deprimido que las otras veces; la noticia se expandió tan rápido que muchas personas se olvidaron del tuiteó de Cati sobre la nueva canción y se centraron en el motivo por el que estaba decaído.
Comprendí que sería una larga semana en Europa.
Aún así me prometí algo: esperaría hasta que ella respondiera mis mensajes.
Tendré fe y esperanzas en que ella me escriba de regreso. No hoy, tal vez mañana sí.
Esperaré lo suficiente para que ella me recuerde.
https://youtu.be/MZJhh8ubZm0
Les dejo este capítulo por aquí, espero que les guste mucho.
¡MUCHOS BESOS PERFECTOS A TODOS!
No olviden dejar sus comentarios, yo los leeré, y sus lindos votos también.
JAJAJAJAJA y cuidado de como le hablan al Rik, no vaya a ser que les aparezca atrás con un balde de liquido extraño.
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