Las calles encharcadas y húmedas fueron el rastro de las lluvias de esos días, aún después de unas frías noches, el clima no había cambiado ni un poco.

Las bancas mojadas no dejaban a los universitarios sentarse cómodamente para poder leer un libro o simplemente conversar.

Algunas gotas caían de las hojas de los árboles, y mojando a más de alguno de los que pasaban, incluso sobre papel de estudio y algunas páginas de libros abiertos.

-¡Achú!

-¡Salud!... ¿Seguro que estás bien?- le extendió un pañuelo a su amigo sentado frente a él, el rubio tenía una cara somnolienta, con la nariz rojiza, y los ojos llorosos.

-Si, es solo un resfriado.

Yeosang había estado resfriado después de aquel suceso por la madrugada, situación que solo había quedado como un secreto entre el y San, prefirió no decirles a sus amigos para no preocuparlos, sólo les había dicho que se había enfermado por el clima helado de la montaña.

Sobre su mesa había algunas toallitas para su nariz, aún con medicamentos no cedía el resfriado. Estaba sentado leyendo un libro y un té que Yunho le había llevado esa mañana.

Mingi no se había encontrado con ellos desde días pasados, siempre diciendo que era porque tenía proyectos y exámenes.

Después de ese último día en la montaña, Yeosang sospechaba que algo extraño había pasado entre sus amigos pero prefirió no preguntar.

-Dentro de unos días se hará otra exposición para la Fundación de ayuda que tienen mis padres...-hablo al mismo tiempo que sonaba su nariz discretamente.

-¿En serio estás considerando ir?- pregunto con expresion molesta sentado a su lado, tenía rato ocupado leyendo un libro, aún sin Mingi continuaba con sus estudios.

-No he dicho nada.

-Si lo mencionas es porque lo estás pensando.

-Mi madre me ha pedido que toque una pieza.

-No estás en condiciones, tu brazo aún no está del todo listo, ni siquiera vas a practicas de básquet porque estás reposando, dime ¿Has estado practicando piano?

-Yunho, no es tan grave, además quiero hacerlo. Estaré bien, espero que puedan ir... ambos.

-Si te refieres a Mingi es probable que no vaya, me ha estado evitando.- dijo con seguridad.

-Tiene algunas cosas que hacer.

-No creas todo lo que dice... Ese idiota.
Tiene la habilidad de hacerme exasperar.

-¿Sucedió algo que te puso en esa situación?

Yunho no contestó, se quedó mirando un punto fijo, recordaba ciertas cosas que no se atrevía a decirle a Yeosang, sea por vergüenza o porque no estaba listo.

-Nada. Solo que ya sabes cómo es Mingi. Como sea. ¿Y como vas con San?-la pregunta hizo a Yeosang sonrojar, era inevitable negar que se ponía nervioso con sólo escuchar el nombre de San.

-Pues, hemos estado en contacto, no lo he visto porque está ocupado con un proyecto. La última vez, me escribió "recupérate" .-suspiro.

-Excelente amigo, eso significa que has progresado, ya dile que te gusta, el otro día dijiste que se besaron. No me has dicho que tal son sus besos.

-Estaba ebrio, ni siquiera lo recuerda, y pues la verdad es que es excelente.

-¡Ahhhhhh!- se escuchó un fuerte grito en la sala de estudio, todos le hicieron una expresión de sonido de silencio y Yeosang le tapo la boca a su amigo, pidió disculpas y bajaron la voz.

-¡Por Dios! Que más quieres, quiza miente al decir que no lo recuerda, debe existir eso en su memoria. El alcohol nos hace hacer cosas que no nos atrevemos estando sobrios...

-¿Lo dices por experiencia?

-Exacto, ya diste un gran paso, ya dile ya que te gusta, se valiente.

-No lo sé, es que, tú escuchaste lo de esa noche, sus aventuras y...

-Si pero tú eres diferente, y no te ve con esos ojos, puedo verlo yo también, pero es tonto, seguro no se ha dado cuenta que tú le gustas. No es que a mi me guste eso de andar rogando pero reconozco el amor cuando existe.

-¿Enserio lo crees?

-Por supuesto. Se ven tan lindos juntos.

-Jamás me había gustado alguien de esa forma, no se qué me atrae de él.

Yeosang sonrió de oreja a oreja, sus ojos tenían nuevamente ese brillo, guardaba cierta esperanza anhelando por lo menos una oportunidad.

Le envío un mensaje a Mingi avisándole que estarían en la biblioteca un rato, que sería bueno que siguiera con las tutorías con Yunho, pero Mingi le contesto que estaba ocupado.

Pero la realidad era otra, Mingi estaba evitando a Yunho porque sabía que ambos explotarían, tenían que mantener distancia si quería conservar su amistad.

Se puso a fumar con sus amigos cerca de una cancha de fútbol rápido, para nada estaba estudiando, por un momento tuvo que callar a sus amigos por el ruido enorme que estaban haciendo, gritaban entre ellos, parecían estar entretenidos viendo algo en una tableta, apostando y adivinando por un ganador... supuso que sería un juego de fútbol.

-Mingi ven a a ver esto, deja de estar como hongo en esa esquina.

-¿Para que apostar? Paso, no me gusta el fútbol, lo sabes Yoongi.

-¿Quien habló de fútbol? No, son peleas. Vamos ven, son bastante interesantes.

Mingi hizo una expresión de molestia, pero ya que insistían se acercó a ver por curiosidad, por lo que veía se trataba de peleas clandestinas, era evidente, no le sorprendía porque sabia que sus amigos frecuentaban esos eventos, carreras de motos, autos, juegos de azar y ese tipo de lugares, lo habían invitado cientos de veces pero no era su estilo, hasta que noto algo que llamo su atención.

-Oh aquí viene mi peleador favorito, increíble amigo, está pelea es de las buenas, la subieron hace poco.

Mingi no podía creer lo que sus ojos estaban viendo, por un momento se rehusó a creerlo, incluso tuvo que arrebatarle la tableta a uno de sus amigos sin previo aviso.

-¡¿Oye que te pasa amigo?!

-¡Fuck! Maldita sea, dime ¿quién es este tipo?

-¿Que, hablas de ese chico? Oh pues solo es de los mejores peleadores de esa jaula, amigo es un espectáculo verlo, lo llaman la mamba negra. Letal, agresivo, ágil, rápido, puro músculo, con potencia en golpes, pocas veces asiste pero es increíble, jamás ha perdido, además es un novato, quizá tenga nuestra edad.

-Si pero su nombre...

-No lo sé, es un misterio.

Mingi se negaba a creerlo pero no había duda de que se trataba de Choi San, su rostro era inconfundible, su cuerpo comenzó a temblar de coraje, la poca confianza que había comenzado a tenerle habia desaparecido y no dejaría que alguien como el estuviese cerca de Yeosang.

📚☕

Yunho estaba ocupado buscando un libro por todos lados, la lista que una vez le dejo Mingi para estudio incluía un libro que no encontraba por ningún lado, pensó en llamarlo pero su orgullo le impidió teclear su número, no fue hasta que vio a lo lejos a un grupo de alumnos de Medicina, quiza ellos sabían dónde encontrar ese dichoso libro..

-Disculpen...

Los ojos de todos en la mesa se fueron hacia el rubio que se había acercado, la sonrisa de Yunho parecía tan encantadora que dejó a más de uno boquiabierto, tenía un brillo espectacular y un aura deslumbrante.

-¿eres Yunho? ¿No es así?

-Hum, si ¿Me conocen?

-Mingi habla mucho de ti, además el otro día te lo llevaste a prisa.

-Oh si, lo siento por eso. No nos han presentado formalmente soy Jeong Yunho.

-Min Yoongi, un gusto, no te preocupes, Mingi es algo posesivo, no deja que nos acerquemos a ustedes que porque somos demasiado jugadores, pero no le creas, sólo reconozco cuando existen tipos lindos como tú.- el cumplido sonrojo a Yunho.

-Oh gracias, bueno, yo me preguntaba si han visto un...

-¿A Mingi? Si, estuvo con nosotros hace un momento pero se fue a prisa, ¿Lo vieron todos?- dirigió su pregunta a los demás.

-Si, es bastante raro, no le gusta ir a esos lugares y allá se fue.

-Mingi suele ser misterioso...

-¿A donde fue exactamente?- cuestionó Yunho con preocupación.

-Escucha, no creo que quieras ir, es bastante aterrador y no creo que seas de ese tipo de lugares.

-Si las peleas clandestinas...

-Shhh...- hizo callar a otros de los chicos porque lo había dicho en voz alta.

-¿Espera dijiste pelas clandestinas?- la cara de sorpresa de Yunho al escuchar eso lo alteró un poco, pensar que Mingi estaría envuelto en esos lugares le preocupaba, lo conocía a la perfección, no era ese tipo de chico, se preguntaba que haría en esos lugares.

🚘🥊

Había conseguido la dirección luego de pedirla amablemente a los chicos... Oh quizá sólo los habia amenazado con exponerlos frente a su escuela de ser unos jugadores con todas las chicas.

-Yunho podrías bajar la velocidad, sabes que me asusta mucho ir a cierto kilometraje- Yeosang iba aferrado a su asiento, ir en carretera con Yunho al volante era un peligro.

-Lo lamento Yeo, en serio, iré solo un poco más despacio, asegura su cinturón de seguridad. No lo entiendo, ¿Que es lo que trata de hacer? ¿Llamar la atención? Idiota, lo voy a matar.

-Quiza es un malentendido, Mingi no estaría en esos lugares por apuestas. No es que necesite dinero, ni tampoco por diversión no le gustan esas cosas.

-Sus amigos dijeron que no sabían el motivo de porque fue ahí, sabes lo atraparé y lo regañare, siempre lo hace con nosotros, dice ser un modelo a seguir pero esto no es propio de él.

-¿Que es lo que te molesta tanto? Es porque está ahí, o porque no pasa tiempo con nosotros y prefiere estar en esos lugares que dice odiar.

-Quiza lo segundo, entonces me odia más a mi y prefiere estar en esos lugares.

Yeosang no dijo nada más, veía la furia en los ojos de Yunho, aceleraba el auto en ocasiones, eso lo asustaba mucho pero estaban por llegar, muy alejado de la Ciudad, habían llegado a uno de los barrios mas peligrosos de la zona. Además ya era tarde podía ver el Sol ocultandose.

-Esa es la camioneta de Mingi, conozco esas placas. Bingo. Te atrapé pequeño gato.

-¿En serio vamos a entrar?

-No, sólo echaremos un vistazo, y cuando Mingi salga lo vamos a acorralar.

-Yunho no creo que sea seguro.

-No te asustes, sólo veremos de lejos.

La curiosidad de Yunho fue más allá cuando encontro la forma de escabullirse.

Se escondieron entre algunos autos entre las zonas más oscuras, había una puerta que conducía adentro, no había nadie que pudiese darse cuenta que dos chicos estaban por escabullirse dentro del lugar, así que ambos rubios entraron desapercibidos.

Al entrar los ojos de ambos quedaron en total asombro, se levantaba una enorme jaula de metal, mucha gente alrededor en gradas que se dividían en zonas rodeadas de guardias de seguridad.

-¡Por Dios, es real, son peleas clandestinas!- dijo Yunho mirando con sorpresa, aún cuando olia a cerveza, cigarro y sudor era un lugar bastante grande e iluminado.

Yeosang estaba que temblaba de miedo, no le agradaban esos lugares, pasaba gente empujando y observándolos como si fueran bichos raros, y es que no era común ver a dos jovencitos que parecían ser en su totalidad niños ricos y delicados.

-Oigan ¿Ustedes los tontos que están estorbando, como entraron aquí? ¿Donde están sus brazaletes?

La cara de ambos fue de terror cuando vieron que los señalaban, miraron a su alrededor y notaron que todos tenían pulseras de diferentes colores, funcionaban para poder identificar a los invitados, incluso en ese lugar había niveles.

-Oh, los teníamos pero...

-¿Creen que soy idiota? Ustedes se colaron, no sé cómo lo hicieron pero de aquí no salen niños bonitos...

-Oye, creo que deberías bajar tu tono y no te atrevas a tocarme ni un pelo, mi padrastro es una persona importante.

-¡Yunho!... No.- intervino Yeosang.

-Tengo dinero de sobra para apostar... Es más incluso comprar este lugar sin pestañear.

-Me importa un comino hijo de quien seas. Creo que no bastará con el dinero. Llevenselos, denles un merecido, a ver si les quedan ganas de volver a meterse en estos lugares.

-Espera, espera... Amm, mi amigo aquí está, el entro con invitación.

-¿Y donde está ese dichoso amigo? Pierdo mi tiempo, sin excepción, quítales todo sus carteras y teléfonos, no quiero saber qué grabaron algo.

Aún cuando ponían resistencia, lograron quitarles sus pertenencias, los llevaron hasta un cuarto oscuro, Yeosang temblaba de miedo y Yunho aunque todo el tiempo puso resistencia comenzo a gritar que los ayudarán.

No tardaron mucho en regresar alguno de los guardias que se habían llevado sus pertenencias.

-Llévalos arriba- le indico al que los tenía en custodia.

-¿Señor?- cuestiono la orden, casi nunca hacían eso cuando atrapaban a alguien que no era de ese lugar.

-Arriba dije, en una de las zonas VIP.-sonrió.

El tipo hizo una llamada, su semblante cambió totalmente, miro a ambos y entonces les devolvío sus cosas.

-Una disculpa, pueden pasar, les daremos una excelente vista totalmente privada. Pasen por aquí.

Su tono ya fue amable, incluso más cortes, se les hizo algo extraño pero de todos modos entraron, era mejor a qué se los llevarán y les hicieran algo.

-Por aquí por favor.- señaló el guardia.

Los acomodaron en una área que tenía vista de frente, en una zona más alta, Yunho intento buscar a Mingi pero no lo veía por ningún lado.

El guardia los dejo y les señalo que podían observar sin hacer ninguna apuesta pero que al final el jefe deseaba verlos, esto los incomodo un poco pero ya estaban adentro.

-¿En qué rayos nos metimos?- dijo Yeosang mirando a Yunho.

-Estaremos bien, si cambiaron de parecer quizá podamos negociar.

-¿Negociar con quién? Yunho mejor vámonos, no me gusta esto, tengo un mal presentimiento.

La pelea era sangrienta, no se median en puños y a la gente parecía gustarle ver qué fueran más brutales, la pelea que ya estaba iniciada cuando entraron estaba llegando a su fin.

🥊🖤

-¿Listo amigo?

-Si, parece que mi oponente es aún más fuerte que el pasado.

-Por eso la apuesta es mayor. Lo harás bien, no te preocupes.

San asintio, se quedó pensando un rato, ese día había estado algo inquieto. Y esa noche estaba distraído, tenía muchas cosas en la cabeza que lo estaban desconcentrando.

No fue hasta que se anuncio la siguiente pelea que volvió a su realidad en donde tenía que concentrarse para su encuentro con su oponente.

-Llego la hora.

La arena de pelea esa noche estaba más encendida, muchas ovaciones por verlo pelear, apuestas, gritando su sobrenombre. Toda la atención estaba centrada en la pelea próxima a iniciar.

🥊🥊

-Deberiamos buscar la manera de escaparnos.

-¿Y Mingi?

-Al diablo Mingi, debemos irnos.

-Damas y caballeros estén listos desde sus asientos pues tenemos una pelea bastante esperada esta noche, saquen su dinero porque ahora vamos a recibir a dos de los mejores peleadores en esta arena, por lado el ya conocido y siempre querido nuestro gran peleador con ustedes "El Dragón"

Apareció un hombre de tez morena, grande, con más músculo que el oponente pasado de San, se veía un poco más preparado además de que ya tenía más tiempo peleando en esa arena, por supuesto que las apuestas eran mayores para él.

-De este otro lado tenemos, a un jovencito que ha ganado fama últimamente en nuestra arena, ustedes ya lo conocen también, tuvo una pelea recientemente con ustedes "La bamba negra"

Aunque tenía rato sentado en un rincón, tenía una capucha sobre la cabeza y apenas se le veía el rostro, pero justo cuando se destapó la cabeza los ojos de Yunho y Yeosang quedaron abiertos sin parpadear, los dos en desconcierto no podían ni hablar.

-¡San!- pronuncio entre dientes, Yeosang quería negarse a verlo en ese lugar.

-¿Tu sabías de esto?- pregunto Yunho pero su amigo negó con una cara de preocupación.

Por un lado estaba Wooyoung dándole indicaciones, San parecía muy concentrado en lo que iba a iniciar, no parecía inexperto, estaba listo.

-¿Oigan que hacen aquí?

Por fin apareció Mingi, había estado viendo las peleas pero cuando giro la cabeza hacia arriba para revisar el área los vio sentados, intento subir pero había tanta gente que no lo dejaban llegar, incluso cuando llegó el guardia no lo dejaba pasar.

-No ¡¿Tu que haces aquí?!- le grito Yunho con tanto enojo.

-Les dije que algo no me gustaba de este tipo. Vine a confrontarlo, Yeosang espero que con esto entiendas que no es bueno para ti. ¡Tenemos que salir ahora!

-Espera quiero ver esta pelea.

-¿Estas loco? Es ahora cuando tenemos que aprovechar a irnos. Están distraídos.

-Solo un momento Mingi.- insistió Yeosang.

Mingi quería llevárselos pero con la insistencia de Yeosang se quedó sentado observando, movía la cabeza con negación y Yunho estaba que queria golpearlo.

La pelea abajo en esa jaula enorme de metal comenzó.

El otro tipo le dio varios puñetazos en el rostro, en estómago y aunque San bloqueaba estaba bajo su patada.

Wooyoung le indicaba como debía moverse pero al parecer si tenía más ventaja sobre él.

-Esta es una masacre no quiero que Yeosang siga viendo esto. Aunque quizá después de esto ya dejé de perseguir a ese tipo.

Yunho miro a Yeosang, le preocupaba que con eso su corazón se partiera en mil pedazos, saber que el chico al que admiraba estaba metido en esos negocios y lugares.

San se levantó del suelo y se limpió la sangre de la boca, empezó a bloquear y luego dio también patadas en el aire. En un movimiento lo tomo con su cuerpo bloqueado sus manos y el cuello, hasta que el tipo empezó a golpear el suelo con la mano.

-Pues la verdad es que esta dando un buen espectáculo.

Yeosang tenía una cara de emoción viendo la pelea, sus ojitos estaban brillosos, quizá por preocupación, emoción, sorpresa, no sabía pero estaba embobado viendo la pelea de San. No estaba asustado, y aunque si le sorprendia que San estuviese en ese tipo de cosas ilegales, sabía que había una razón.

San entonces comenzó a pelear un poco más rudo, hasta que de plano después de un golpe donde casi lo dejan inconsciente se levantó y noqueó a su oponente.

Wooyoung salto de emoción había ganado la pelea. Mucha gente que habia apostado por él estaba gritando de emoción, otra sin embargo estaba molesta, habían perdido una gran cantidad apostando al otro retador.

-No sabía que San hacia estas cosas peligrosas, algo me decia que no estaba bien. Debemos irnos ahora.-Mingi jalo a Yunho pero cuando se iban a bajar, los guardias bloquearon su paso.

No tenían escapatoria.

🏆🥊🥊

-Amigo esto es increíble ganaste. ¿Te duele?

-Solo un poco, creo que tendré este golpe unos cuantos días.- se colocó una bolsa de hielo sobre su cara y se acostó sobre una banca.- no deberia ver a Yeosang en estos días, podría alterarse si me ve así.

-Y dices que no te importa...- hizo una expresión juguetona sólo para molestar a San.

-Solo callate.

Wooyoung se burló de su amigo, mientras preparaba sus cosas para irse.

-Excelente pelea Choi San. Usted ha ganado el respeto de la arena y sobre todo del jefe. Le gustaria verlo en persona.- uno de los guardias entró a su sala de descanso.

-¿ahora?

-Si, lo espera en su sala privada.

-Quiza después debo irme.

-Insisto, sería una grosería si usted no se presenta. Nunca asiste personalmente, pero está aquí ahora.

-Amigo sólo un momento, saludamos y nos vamos.- Wooyoung intento convencerlo.

San asintió con inconformidad, no quería ir porque eso significaría que estaría a la orden de alguien y para nada quería pertenecer a ese lugar.

Cuando llegó encontró a un tipo muy joven quizá tres años mayor a él, estaba sentado en un sofá largo con otras personas, había dinero en pequeños fajos de billetes sobre la mesa, joyas y mucha bebida.

El tipo le sonrió apenas lo vio y dejó su vape por un lado.

-Asi que tú eres "La Bamba negra" interesante nombre.-dijo en tono de burla y sus compañeros le siguieron la broma con una risita.-Interesante.

-¿Que desea? Pidió verme.-contesto San sin mucha paciencia.

-Por lo visto no eres muy sociable. Tranquilo, no estés a la defensiva, eres un ganador, eso eres ¿No es así? Un luchador un guerrero letal y peligroso como las Bambas. Has ganado bastante el día de hoy en mi arena. En poco tiempo has hecho un buen trabajo, fama, dinero, reputación, admiración. Alguien como tú con un excelente talento.

San se quedó parado pensando en que intenciones tenía aquel joven jefe, pero claramente no eran buenas, el tipo parecía estar muy interesado en él.

-Digame que desea. ¿No me llamó hasta aquí sólo para felicitarme o si?-dijo finalmente.

-Es verdad, no eres nada tonto. Me parece que a ti te interesara este negocio. Mucho dinero de por medio. Créeme está oferta que te haré te va a interesar.

-¿Que es lo que quieres?-hablo finalmente Wooyoung, había estado detras de San pero dio un paso al frente para encarar al jefe del lugar, no había tenido trato directamente con él, las peleas se hacían a trato con uno de sus súbditos.

El joven jefe ignoro por completo a Wooyoung, si lo había escuchado pero no tenía intención de contestar.

-Choi San ¿No es así?

-Si, y tú eres...

-Kim Hongjoong, quizá escuchaste de mi o quizás no. Soy el dueño de este lugar, cuando veo potencial invito a mis peleadores aquí, y si encuentro algo más interesante también lo verás en este lugar. Me encanta coleccionar trofeos.- tenía un porte bastante decente, impecable y elegante, contrario a lo que podría ser siendo el jefe de un lugar así. Incluso su voz tenía un acento distinto y refinado.

San pensaba que estaba ante un psicópata, miro a Wooyoung pero este miraba al jefe con algo de enojo, pero a diferencia de como solia ser de hablador y estar a la defensiva en ese momento no parecía querer hablar.

-Te ofrezco pelear con oponentes más interesantes, con una suma bastante tentadora, una noche por semana.

Le hizo una seña a uno de sus subordinados y le enseñaron un papel con una cantidad de dinero bastante tentadora.

-Podrias ganar incluso aún más, imagínalo, ser parte de este lugar, pelear unas noches y ganar mucho dinero. ¿Que más deseas? ¿Joyas? ¿Autos? ¿Mujeres o quizá... Chicos?

-Creo que no han entendido cuando dije que solo pelearía de vez en cuando, no es que me guste hacerlo siempre.

-Sabes que esté negocio requiere ser leal, aquí nadie es aficionado, no lo haces por divertirte, te interesa el dinero, ganar, veo tu rostro cuando te conviertes en campeón, se trata de poder, de la satisfacción de ser el mejor y número uno. ¿Lo niegas?

San estaba a punto de responder pero uno de los subordinados llegó a interrumpir.

-Jefe aquí están los chicos.

-Que entren.- Hongjoong le hizo con la mano la seña de pasarlos y sentarlos a un lado de él, mientras seguía convenciendo a su peleador más prometedor.-Tengo unos invitados especiales, quiza después me des una respuesta, ahí está el dinero de la noche.

Diciendo esto le pusieron un bolsa con un fajo enorme de billetes, una apuesta grande que se había jugado en su pelea. San no sabía si tomarlo, pero lo tomo porque en casa ese dinero ayudaría a su madre.

Hongjoong se dirigió ahora a Wooyoung antes de que se pudieran ir.

-Wooyoung... Saludame a Seonghwa.- la forma en su voz pronunció el nombre de Wooyoung sonaba con tal confianza como si fueran amigos, pero la forma en que dijo el nombre de Seonghwa fue más suave, alteró los nervios de Woo.

Pero Wooyoung aún con el coraje atorado en su garganta listo para responder, prefirió controlarse y salir de ese lugar. La sonrisa de satisfacción de Hongjoong por molestar a Wooyoung le alegro totalmente la noche.

-¿De qué rayos está hablando?

-Nada, vamonos.- tomo del brazo a San para poder salir del lugar.

Cuando se dieron vuelta San casi se va de espaldas, ante el estaban Mingi, Yunho y Yeosang. Su rostro de empalideció y no entendía que hacían ellos ahí en ese lugar.

-¿Que carajos haces aquí?- le había gritado enfrente de todos con bastante enojo, San estaba tan sorprendido por ver a Yeosang, lo tomo del brazo con fuerza que incluso el rubio soltó un quejido de dolor.

-San yo ...

-Esto es tu maldita culpa- solto Mingi y se le fue encima pero Wooyoung se interpuso.

-¿Que sucede, o es que se conocen ? ¡Ah interesante!- Hongjoong miro con interes aquel encuentro.

-Creo que hay un malentendido, nosotros ya nos íbamos. No queremos causar problemas. Nos iremos y haremos como que no vimos nada.- hablo Yunho y tomo a sus amigos para irse.

-Espera, espera... Quizá pueden irse todos pero tú - señaló en dirección a Yeosang-El heredero de los Kang ¿No es así?

Yeosang se quedó petrificado en su lugar, un miedo le recorrió todo el cuerpo. Pocos sabían que él era el siguiente en linea y de los pocos en la familia. Además ahí el problema de ir a esos lugares, sabía que su familia estaba bajo la mira y la última vez que lo golpearon fue a razon de negocios de su padre, el pago las consecuencias.

-Asi es, te conozco, no me di cuenta hasta que vi esa marca tuya, tu familia ha dado problemas últimamente, no directamente a mi. Tenía que asegurarme que alguien de los Kang fuese atendido como se debe, nuestras familias están bastante unidas. Tanto así que tú abuelo se aseguro de que jamás olvidemos su asqueroso apellido.

Yeosang sabía una historia, una no muy agradable, pero pensaba que eso ya había quedado atras. Su piel clara ahora estaba más pálida y empezó a temblar, sus manos empezaron a tornarse frías, su cuerpo no estaba respondiendo y su garganta estaba bloqueada.

-¿Qué es lo que quieres con él?- hablo San al notar esa expresión de miedo en el rostro de Yeosang.

-Calma sólo quería conocerlo eso es todo. Quiero platicar un rato, tu ya te puedes ir.

-¡No!

-¿no? Tu no das las órdenes, es mejor que se vayan ahora.- levantó la voz el joven jefe, su rostro era de molestia, habianalfo en sus ojos que daba miedo, pero San no estaba asustado.

- ¿Quieres que me quede en la Arena ¿no es así?

-¿Ya cambiaste de opinión?

-Solo si los dejas ir. Entonces Acepto.

-San no...

-No te metas Wooyoung.

-¿enserio lo harás, por él?

-Si, ahora déjalos ir.

-¿Que tienes que ver con el?

-No es tu maldito problema.

Los guardias de Hongjoong se iban acercando a San, nadie podía levantarle la voz a su jefe en su presencia. Pero Hongjoong les hizo una seña para que se calmarán y retrocedieran.

San envolvio a Yeosang con una chamarra que llevaba en su maleta y se lo llevó de ese lugar, Wooyoung jalo a Mingi y Yunho antes de que cambiara de opinión.

Mingi quería enfrentarse a Hongjoong pero Wooyoung lo jalo del brazo.

-Si quieren vivir, será mejor que nos vayamos ahora. Antes de que esté demente cambie de opinión.

💴🪙

-¿Jefe porque los dejo ir tan fácilmente?

-Tranquilo, esto solo es el comienzo.- su sonrisa sólo significaba una cosa, que las cosas se estaban acomodando a su modo.

☔🌈

-¡¿Estas loco? ¿Que carajo haces aquí?!- el reclamo fue con tal molestia que hizo sorprender a Yeosang, entendía la molestia de San, pero no podía exigirle y reclamar nada.

-Oye no le grites.- Yunho intento defenderlo.

-¿me siguieron no es así?

-Y que, ahora sabemos a qué te dedicas, lo sabía había algo que no me convencía de ti, estoy convencido de que eres una mala influencia para Yeo.

-No te metas en esto Mingi.-le respondió San con furia.

-No me hables como si fueras mi amigo.

-Acaso no saben que pudieron haber muerto ahí adentro. Esos tipos no se andan con juegos. Y si, a eso me dedico, pero es mi maldito problema.

-Lo lamento yo no...-intento disculparse, pero la voz demandante de San lo hizo sentir regañado.

- ¿Que me vas a decir? ya no se de qué forma hacerte saber que no quiero que te acerques, aléjate de mi, no te quiero cerca, enserio eres una molestia. Eres irritante, pegajoso y...

Yeosang estaba con los ojos enrojecidos, San tenía razon en varias cosas, ahora entendía el porqué de su fría actitud algunas veces.

En medio de la discusión y a media calle una lluvia se dejó venir, el cielo se iluminaba con brillantes relámpagos seguidos de estruendos.

-San ya basta, ellos no tenían idea. Tranquilízate.- Wooyoung trato de calmar la situación pero su amigo estaba furioso, ni siquiera a él lo escuchaba.

-¿Como quieres que me calme? tuve que venderme con ese idiota ahora.

-No me vengas con eso, tu ya estabas dentro, no intentes culparnos, estás podrido igual que ellos.

-Mingi ya basta.-intervino Yeosang.

-Pero...

-Solo váyanse.- dijo avergonzado.-El problema es conmigo. No quiero que salgan lastimados, ya fue suficiente.

-Amigo las cosas no son así.- Yunho lo tomo de la mano pero Yeosang se soltó.

-Yeo...

-Quiero estar solo, pueden volver sin mi.- se dirigió a San sin sostenerle la mirada- Lo lamento y no te preocupes, no te buscaré, disculpa si fui una molestia.

Se alejó aún con los gritos de Yunho tratando de detenerlo, pero hizo caso omiso, sus ropas estaban aún más empapadas, sus cabellos escurridos cubrían sus lágrimas.

-Mira lo que provocaste, eres un idiota- Mingi se fue encima de San, alcanzo a darle un puñetazo en el pómulo pero Wooyoung intervino para separarlos.

Yunho tomo a Mingi y lo arrastró a la camioneta, sabía que estando enojado podía perder los estribos.

-San no dejes que se vaya sólo, por favor escuchalo, me llevaré a Mingi. O esto va a terminar en tragedia.

-¿Que haces? No puede ir con él.

-Entra al maldito auto, tu también eres culpable por querer investigar.

Yunho le arrojo las llaves de su auto aún cuando San se negaba a ir detrás de Yeosang.

-Deberias ir detrás de él, no lo dejes sólo, no despues de saber con quién estamos tratando.-Wooyoung conocía a la perfección a Hongjoong, ahí el motivo de su advertencia.

-¿De que hablas?

-Te lo explico luego. En serio las cosas se complicaron, no se trata sólo de ti.

San respiro hondo y se fue tras Yeosang.

San estuvo dando vueltas hasta que vio a Yeosang sentado en la banca del parque justo donde lo vio dando vueltas cuando lo volvió a ver de nuevo.

Estaba caminando bajo la lluvia, iba abrazándose a si mismo debido al agua helada y la noche fría.

San se estacionó un poco más adelante de él y salió corriendo con una frazada que encontró en el auto. Bloqueo su camino y se acercó.

-Espera.

-No tienes por qué seguirme, lo lamento no debí meterme en tu vida, yo también sentí curiosidad. Ahora te metí en un problema.

-Eso no importa ahora. No puedes estar por aquí deambulando sólo.Vamonos de aquí, si te sigues mojando vas a resfriarte.- lo tomo del brazo pero Yeosang intentó soltarse.

-No, sólo vete. Se que me ves como una persona frágil y débil. Quiero estar solo.-Yeosang le jalo el brazo para poder soltarse.

-Como quieras ya me cansé de esta situación , deja de ser un niño caprichoso, no entenderías porque llevo esta vida, ¿Acaso crees que lo disfruto? No tengo opción, y yo jamás quise meterte en esto, tu me buscaste.

-No te estoy juzgando por eso, realmente no es así. Yo no tenía idea, lamento haberte metido en otro problema. Lo único que quería era saber más de ti.

-¿Porque? Si es solo porque te salve no me debes nada, no tienes ninguna deuda conmigo.

-¡Tú me gustas! - grito- ¿Ok? No es sólo por qué me salvaste. Quería saber más de ti solo eso.

San se quedó sin poder decir nada, estaban parados bajo la lluvia torrencial, con algo de frío, tal como ese día que se conocieron, el tenía casi la misma mirada sólo que Yeosang no tenía golpes, tenía los ojos llorosos, sus labios habían pronunciado lo que sentía por él, pero San creía no sentir lo mismo, no sabía exactamente porque seguía cerca de él.

-Si quieres que me aleje lo haré. Por favor déjame sólo.

-No, no en este lugar.

-No tienes porque sentir lástima. Toda mi vida he recibido insultos, culpas, reclamos, lástima y no lo quiero de la persona que me gusta.

-No siento lástima, no se porque piensas eso. Por favor vámonos de aquí te estás enfriando.

Yeosang estaba temblando, de frío, coraje, miedo, tristeza, ansiedad, no lo sabía pero estaba abrazado a si mismo, parado frente al muchacho que le gustaba, confesando sus sentimientos, los cuales no eran correspondidos.

San le coloco la frazada y se la coloco a los hombros, lo miro fijamente un poco más calmado.

-Vamos, podemos hablar en otro sitio.- ahora fue una súplica.

-Y sigues haciendo esa clase de cosas que me hacen suspirar, esa clase de cosas que me hacen sentir cálido, un lugar donde refugiarme de los problemas, sentir un poco de amor. ¿porque crees que me gustas?

Pero San no respondió, sólo se quedó mirando su rostro enrojecido, sus labios estaban algo pálidos, su cabellos escurrido por el agua, y sus ojos llorosos lo estaban destrozando.

Pudo haberse detenido ahí, pudo haber sido cruel e irse, pero no fue así prefirió hacer algo para poder convencerlo de no estar en ese lugar solitario, frío y oscuro.

Miro sus labios y no se detuvo, quizá esa era la acción menos correcta en esa situación, pero fue lo primero que se le ocurrió.

Yeosang sintió el toque de sus labios sobre los de él, suaves, torpes, continuos, sinceros e intensos.

Se hundieron en un beso profundo, San no tenía idea de porque lo hacía pero quizá era porque deseaba que Yeosang reaccionara, sin embargo eso lo estaba confundiendo aún más.

San se alejo un poco de sus labios y lo miro, estaba ahora enrojecido, le tomo el menton y una mejilla. Pero Yeosang entonces cerró los ojos y se desmayo en la brazos de San.

🥊💴🪙♟️

-¿Cómo es que conoce a ese chico?, jamás había venido aquí.

-Le cuestión aquí no es si lo conozco o no, la cuestión es que quiero venganza. Kang Yeosang, tu eres culpable de los pecados cometidos por tu familia, una víctima más, somos muy parecidos.

En los ojos de HongJoong había fuego, no era literal, si no el recuerdo de una noche fatídica, para dos familias en especial una. Una enorme casa en llamas y gritos de gente que no pudo salir. Un culpable y muchas víctimas, un niño llorando y otro viendo el fuego expandirse sin hacer nada más que observar.

-Encontre la pieza más débil de la familia y un peón que hará lo que yo quiera.- soltó un risa malévola y siguió bebiendo.

🌈☔NOTA:

Holis, tuve problemas al subir este capítulo, se acomodo arriba de otro que ya había subido así que no tendría una secuencia en caso de leerlo en orden. Pero es básicamente lo mismo no cambie nada.

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🌈🙏🏻 Gracias por leer dulces sueños.