(Elegía a Dmitri Aleksandrovitch Khvorostovsky,célebre barítono ruso:Krasnoiarsk,Siberia,.ex URSS,18/10/1962-Moscú,Federación Rusa,22 /11/2018)

Mientras llega el olvido , se prepara

Dolorosa la nieve. La bandada

De unos pájaros tristes se refleja

En la tierra desierta .Y el silencio

Acompaña a las rosas en el viaje

De las grullas que pasan inmutables.

Ojos negros que brotan de la nada,

Y un Lyublyu que se pierde al viento.

Una batalla si dolor,sin armas:

Una canción que muere en el recuerdo

De un anciano ceñudo.En el humo

De la rústica pipa hay té de menta.

Los abedules callan:son de plata

Y la grima silente de la escarcha

Los acaricia débil y sedienta.

Son desiertos teñidos de rencores:

Polvoriento verano,y la sevicia

Inmisericorde de cien mil inviernos.

Una bala atraviesa del poeta

El corazón ya roto de antemano:

Una canción que expira en la miseria

Del que amasa las cuentas de un rosario.

Nunca gritó más tristemente el pájaro

Ese enorme pigargo de la estepa

Con las alas abiertas como lábaro

De guerreros caídos....Cosas viejas...

Cosas viejas que anidan en las barbas

Del campesino aquel, de pipa y vodka,

Parco en palabra y recio en la conseja.

Caerá otra vez la nieve,Y una a una

Las lágrimas del cielo irán diciendo

Y con tímidas letras escribiendo

Su leyenda de hielo.No habrá luna.

Una voz que calló no es mucha cosa

Para quien vive recuerdos de la hambruna,

Pero la voz callada se ha llevado

La miseria,la gloria, y la agonía

De todo un pueblo . ..Y todavía

Escudriñan los ojos las mañanas

Para ver a las grullas. Será muda

La escena con su vano terciopelo.

(Las letras se derriten:son de hielo).

Pero en un tronco viejo como el tiempo

O en la piedra del instante estanco

Se yergue en cruz de hierro la presencia

(Emblema secular) del Tigre Blanco