Capítulo 14
Jungkook desmontó cuando llegaron a la casona y miró burlón a Jimin.
- ¿Piensas quedarte sobre Trueno, princeso?
- Bájame- Jimin arrastró la palabra. El caballo agachó la cabeza para comer la hierba cerca del poste donde lo amarraban. El chillido de Jimin no se hizo esperar- ¡Bájame, bájame!
Jungkook le estiró los brazos y Jimin se tiró sobre ellos sin pensarlo dos veces aferrándose histérico a los hombros de Jungkook.
- ¡Idiota! - gritó Jimin a punto de llorar.
Jungkook lo miró a los ojos. Jimin tenía unos ojos castaños llenos de motitas al verlos así de cerca, y estaban brillantes de lágrimas. Jungkook le pasó el dedo índice por su contorno apartando unas cuantas lágrimas.
- Nunca te haría daño, ¿me crees, princeso?- le habló con dulzura porque le nació hacerlo de lo más profundo de su corazón.
Jimin parpadeó sorprendido del gesto de él. Ninguno de los dos había reparado que seguían abrazados. Ambos mirándose en los ojos del otro, como si fuera lo más natural del mundo.
- ¿Me crees?- repitió Jungkook y ahora con suma delicadeza le metió un mechón de pelo tras la oreja. Jimin lo miró con los ojos abiertos. Estaba desconcertado y un poco aturdido la verdad, hacía tiempo que no era objeto de una muestra de afecto tan puro, le recordó a su padre y eso lo conmovió.
- Te creo- respondió- pero no lo vuelvas a hacer. De verdad le tengo terror a los caballos- le dijo apenas en un hilo de voz perdido en la negrura de los ojos de Jungkook.
- Nunca más. Pero puedo ayudarte a superarlo, si me dejas. Trueno es un caballo entrenado por mí. Puedes confiar en él.
Jimin lo miró como si se hubiera vuelto loco y dándose cuenta de la intimidad del momento se apartó.
- No lo creo, igual gracias- prefiero una camioneta de todas formas- le dijo caminando hacia la casona.
Jungkook dejó libre a Trueno para que mordisqueara un poco de hierba fresca y siguió rápidamente a Jimin.
- Sólo una vez. Sí después de eso no quieres te dejaré en paz, ¿trato?
Jimin se detuvo en el último escalón de la entrada.
- Trato. Pero te advierto que no tengas ninguna espectativa al respecto. Odio lo que se mueve...bueno casi- Jimin le cerró un ojo con picardía ya más sereno.
Jungkook abrió y cerró la boca. Jimin era bastante descarado. El problema era que empezaba a gustarle.
Almorzaron tranquilamente y luego Jimin se escapó mientras Jungkook se cepillaba los dientes para no montar a Trueno de regreso a las instalaciones. Prefería achicharrarse, que subir nuevamente a la bestia de Jungkook.
Cuando llegó, Jungkook ya venía galopando tras él y desmontó de un salto.
- Cobarde- le dijo a sus espaldas.
Jimin ni siquiera alcanzó a responder la puya cuando la Negra salió hecha una furia con Yoongi pisándole los talones.
- ¡Te lo dije!- gritó Jane mirando a Jungkook- ése- señaló a Jimin con el dedo- tiene escrito "problema "en la frente- su mirada era de desprecio total hacia Jimin.
- ¿Y ahora qué hice para molestarte?- preguntó Jimin a la defensiva pero con tono fuerte. No sé iba a dejar intimidar.
- Cálmate, Negra, ¿qué sucede?- preguntó Jungkook suspirando. Odiaba que se generaran conflictos.
- Pregúntale- dijo Jane poniéndose las manos en la cintura con mirada desafiante.
Jungkook miró a Jimin y esté se encogió de hombros.
- No tengo idea de que habla esta mujer- le respondió y luego miró a Yoongi que se notaba nervioso.
- ¿Yoongi?- Jungkook ahora se dirigió a él.
- He tratado de decirle a la negra que fue un accidente. Jimin no lo haría a propósito...
- ¿Qué?¿Qué se supone que hice, Yoongi?- Jimin vio a Yoongi compungido.
- Olvidarte de cerrare la puerta del cubil de Bruto- dijo Yoongi bajito.
- ¡Yo lo dejé cerrado!- dijo Jimin empezando a enojarse. Estaba bien que fuera nuevo, pero el no cometería tal error. Tan tonto no era.
- ¡Mentiroso!- lo atacó Jane- nunca había pasado y Yoongi no comete esos errores. Fuiste tú, reconócelo.
Los trabajadores que venían llegando miraban expectantes la discusión.
Jungkook miró a Jimin.
- ¿Lo olvidaste?- preguntó indeciso al ver la mirada acusadora de todos sobre Jimin.
- ¿Importa acaso?¿me creerás si te digo que lo dejé cerrado?- Jimin estaba tenso como una cuerda y apretaba los puños a los costados de sus piernas.
- Lo peor es que el bendito animal se metió a la bodega de alimentos y comió más de lo que debía- dijo Jane- y además dio vuelta cinco tambores del alimento.
Jungkook sentía como la vena en la sien le latía. No tenía forma de defender a Jimin. Cinco tambores eran una suma de dinero considerable y reponerlos le llevaría semanas.
- ¿Dónde está Bruto ahora?
- En la bodega todavía. No deja que nadie se le acerque- respondió Yoongi.
Jungkook miró a los espectadores.
- Empiecen a trabajar, se acabó el show- su voz firme no daba lugar a discusión y todos empezaron a dirigirse a sus lugares de trabajo.
- Yoongi, negra, acompáñenme a la bodega. Jimin tú también- Jungkook echó a caminar a grandes zancadas en dirección a la bodega.
Bruto estaba molesto dando vueltas y vueltas por la bodega. Yoongi había cerrado nuevamente la bodega después de salir y el potro se sintió acorralado lo que lo hizo ponerse intranquilo.
Jungkook se acercó y el potro levantó la cola y relinchó, signo inequívoco de que no se le acercara.
- ¡Tranquilo! Shhh...no quiero hacerte daño pequeño- su voz era suave y calmada aunque no se sentía así. Empezó a acercarse lentamente- negra trae un lazo. Está le pasó uno, y trató de acercarse, pero el potro empezó a patear el suelo con sus patas delanteras y a relinchar- aléjate negra. El exceso de alimento lo tiene así. Yo me encargaré de él- Jungkook volvió a acercarse y Bruto empezó a retroceder sus orejas se aplanaron hacia atrás. El potro estaba asustado y cualquier intento de acercamiento sería mal recibido.
- ¿Puedo acercarme?- preguntó Jimin bajito para no alterar aún más a Bruto.
- ¡Mantente lejos!- dijo Jane- ¡mira tremendo desastre que armaste!
Jimin la ignoró. La tal negra lo tenía harto. Miró a Jungkook.
- ¿Puedo?- volvió a preguntarle.
- Patrone el potro se ha vuelto muy cercano a Jimine...tal vez funcione- señaló Yoongi.
Jungkook vio como el potro movió las orejas hacia adelante al escuchar la voz de Jimin y seguido movió su hocico de adelante hacia atrás. Señal de reconocimiento.
- Kook, no irás a de...
- Puedes acercarte- Jungkook no dejó terminar de hablar a Jane. Por primera vez la Negra no estaba atenta a las señales que enviaba el animal y Bruto había reconocido sólo a Jimin. Y para él en primer lugar siempre estaba hacer lo correcto fuera cual fuera la situación.
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