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un incidente sin querer parte 2

Metal Sonic y HK 47 se dirigieron hacia la entrada de la base, listos para enfrentar a quienes fueran los portadores de las voces desconocidas. Al salir, se encontraron con una escena sorprendente: Sonic y Knuckles, ambos con expresiones de sorpresa y molestia al ver a Metal Sonic y su compañero mecánico.

Metal Sonic: (confundido) ¿Sonic, Knuckles? ¿Qué hacen aquí?

Sonic: (frunciendo el ceño) ¿Qué hacemos aquí? Nos topamos con Eggman no hace mucho y nos dijo que una de sus creaciones se había vuelto contra él. Y, oh sorpresa, encontramos el Tornado aquí.

Las tensiones se palpaban en el aire mientras Sonic señalaba acusadoramente a Metal Sonic y HK 47. Las miradas de desconfianza eran evidentes en los ojos del erizo azul y el equidna rojo.

HK 47: (analizando) Amo, parece que Eggman nos ha señalado como la fuente de sus problemas.

Metal Sonic: (decidiendo) Tenemos que explicarles lo que está sucediendo.

Antes de que pudieran decir algo, Knuckles, impulsado por la desconfianza y la furia, lanzó un ataque hacia Metal Sonic.

Knuckles: ¡No quiero oír nada de una máquina como tú!

El puño de Knuckles se estrelló contra Metal Sonic, desatando una breve pero intensa confrontación. Sonic intentó intervenir para calmar los ánimos.

Sonic: ¡Knuckles, detente! Necesitamos entender lo que está pasando.

Knuckles, sin embargo, no se detuvo y continuó con su embate contra Metal Sonic, expresando su rechazo hacia la máquina que, según Eggman, se había rebelado.

Metal Sonic: (defendiéndose) ¡Esperen! No somos enemigos. Hay mucho que explicar.

Sonic, usando su velocidad, se interpuso entre Knuckles y Metal Sonic, buscando poner fin al conflicto.

Sonic: (serio) ¡Basta, Knuckles! Necesitamos escuchar lo que tienen que decir.

Con un gesto de Sonic, Knuckles retrocedió, aunque aún mostraba desconfianza en sus ojos. Metal Sonic, aunque no era propenso a mostrar emociones, estaba determinado a aclarar la situación.

Metal Sonic: (explicando) Eggman ya no tiene control sobre nosotros. hk 47 y yo reprogramamos esta base para nuestros propios propósitos.

HK 47: (añadiendo) Amo, nuestro objetivo no es atacar, sino asegurar nuestra existencia y ayudar en la lucha contra amenazas comunes.

Sonic y Knuckles intercambiaron miradas, procesando la información proporcionada. La tensión persistía en el ambiente, pero Sonic decidió darles el beneficio de la duda.

Sonic: (respirando hondo) Tails está en la base. Necesitamos hablar con él y obtener su versión de la historia.

Con una mirada de acuerdo, Metal Sonic y HK 47 guiaron a Sonic y Knuckles hacia el interior de la base. Las voces del pasado, las lealtades cuestionadas y las alianzas cambiantes definían este nuevo capítulo en el conflicto entre la tecnología y la biología en el mundo de Sonic.

El caos se desató en la base de metal sonic mientras los Badniks, desprovistos de órdenes claras de Metal Sonic, interpretaron la presencia de Sonic y Knuckles como una amenaza. La atmósfera se tensó aún más cuando los robots mecánicos se lanzaron al ataque, provocando una confusión generalizada.

Knuckles: ¡Esto es una trampa! ¡Metal Sonic nos emboscó!

Enfurecido y convencido de que Metal Sonic había orquestado todo como una artimaña, Knuckles canalizó su rabia hacia la destrucción de los Badniks que se interponían en su camino. Los puños del equidna se movían con una velocidad impresionante, desmantelando a los robots con facilidad.

Metal Sonic: (intentando calmar) ¡Knuckles, esto no es una trampa! No dimos órdenes a los Badniks.

Sin embargo, las palabras de Metal Sonic se perdieron entre el ruido de la batalla. La desconfianza de Knuckles estaba en su punto máximo, y su atención se centraba en la figura metálica frente a él.

Mientras Sonic observaba la escena con preocupación, HK 47 intervino, utilizando su eficiencia táctica para contener a los Badniks y evitar que el conflicto escalara aún más.

HK 47: (neutralizando Badniks) Amo, permita que me encargue de los robots. Foqueémonos en resolver este malentendido.

Mientras tanto, la pelea entre Knuckles y Metal Sonic se intensificaba. Los puños de Knuckles se encontraban con la resistencia metálica de Metal Sonic, creando chispas en el proceso. La batalla mecánica versus biológica estaba en pleno apogeo.

Knuckles: ¡No me engañarás, Metal Sonic! ¡Esto es tu culpa!

Metal Sonic: (defendiéndose) ¡Knuckles, escucha! No queremos pelear. Hay una explicación para todo esto.

Sin embargo, los intentos de Metal Sonic por comunicarse se veían frustrados por la furia ciega de Knuckles. Sonic, consciente de que la situación se estaba saliendo de control, buscó una forma de intervenir.

Sonic: (gritando) ¡Knuckles, para! ¡Esto no nos lleva a ninguna parte!

Knuckles, sin embargo, estaba decidido a hacer que Metal Sonic pagara, convencido de que este era el cerebro detrás de la aparente traición de Eggman. La batalla continuaba mientras la base temblaba con la fuerza de los golpes intercambiados.

Mientras tanto, HK 47 logró neutralizar la mayoría de los Badniks, dejando el área circundante más tranquila. Observó la pelea entre Knuckles y Metal Sonic con una frialdad mecánica, calculando el mejor momento para intervenir y poner fin al conflicto.

HK 47: (analizando) Amo, la situación está bajo control. ¿Debo intervenir para detener la confrontación?

Metal Sonic: (resuelto) No, aún no. Déjalos pelear hasta que Knuckles se agote. Después, explicaremos todo.

La base resonaba con el estruendo de la batalla entre el equidna rojo y el erizo metálico. La verdad detrás de la aparente traición de Eggman estaba a punto de revelarse, pero primero, se debía calmar la tormenta de emociones y desconfianza que nublaba la razón de los presentes en la base.

La intensidad del enfrentamiento llenó el aire mientras Metal Sonic y Knuckles intercambiaban golpes en la base de Eggman. Cada impacto resonaba a través de la estructura metálica, creando una sinfonía discordante de metal y furia.

Knuckles: ¡No me importan tus explicaciones, Metal Sonic! ¡Esto es por traicionarnos!

La ira ardía en los ojos de Knuckles, quien estaba decidido a hacer que Metal Sonic pagara por lo que creía que era una traición. Sus puños, imbuidos de una fuerza increíble, buscaban debilitar la resistencia del erizo metálico.

Metal Sonic: (defendiéndose) ¡Knuckles, escucha! No traicionamos a Eggman. Reconfiguramos esta base para servir a nuestros propios intereses.

Metal Sonic se esforzaba por defenderse de los rápidos y poderosos golpes de Knuckles. Aunque no experimentaba dolor físico como los organismos biológicos, la persistencia de Knuckles planteaba un desafío táctico.

Knuckles: ¡Eggman no te programó para hablar! ¡Solo para obedecer!

La desconfianza de Knuckles lo impulsaba a atacar con más ferocidad. Metal Sonic, sin embargo, estaba decidido a demostrar que había cambiado, que ahora tenía su propia voluntad y propósito.

Metal Sonic: (respondiendo) ¡No somos simples títeres! Tuvimos que tomar el control para asegurar nuestra existencia.

A medida que la pelea avanzaba, Sonic observaba con preocupación desde la distancia. Buscó una oportunidad para intervenir y poner fin al conflicto.

Sonic: (gritando) ¡Knuckles, para! ¡Este no es el camino!

Pero Knuckles, cegado por la furia y la desconfianza, no escuchaba las palabras de Sonic. Continuó lanzando ataques poderosos, buscando debilitar a Metal Sonic y hacerlo rendir.

La base temblaba con la fuerza de la batalla. Metal Sonic, con su agilidad y velocidad, esquivaba algunos golpes, pero no podía evitar todos los embates de Knuckles. La confrontación mecánica contra biológica alcanzó su punto álgido cuando Knuckles, agotado pero aún furioso, lanzó su ataque final.

Knuckles: ¡Esto termina ahora!

Metal Sonic, con un cálculo preciso, esquivó el golpe final de Knuckles y aprovechó la oportunidad para agarrar su brazo, deteniendo el ataque.

Metal Sonic: (sereno) ¡Ya es suficiente, Knuckles! Necesitas escucharnos.

Knuckles, aunque resistiéndose al principio, finalmente se detuvo, mirando a Metal Sonic con desconfianza y agotamiento.

Sonic: (aproximándose) ¡Ambos, paren! Necesitamos hablar y entender lo que está pasando.

La tensión en la base era palpable mientras Metal Sonic soltaba a Knuckles y retrocedía, mostrando que no tenía intenciones hostiles. La confrontación física dejó espacio para la confrontación verbal.

Metal Sonic: (explicando) Hemos reprogramado esta base para servir a nuestros propios propósitos. Eggman ya no tiene control sobre nosotros.

Knuckles: (escéptico) ¿Por qué debería creerte?

Metal Sonic: (sereno) La verdad es que buscamos nuestra propia existencia, no destrucción. Necesitamos aliados, no enemigos.

La atmósfera se llenó de silencio mientras las palabras de Metal Sonic resonaban en la base. Sonic, Knuckles y Metal Sonic se encontraban en un punto crítico, donde las alianzas podrían cambiar y el destino de la base de metal sonic colgaría en la balanza. La verdad detrás de la aparente traición estaba lista para ser revelada, y el futuro de esta inusual coalición estaba por definirse.

Tails, después de recuperarse del encuentro inicial con los Badniks en la base, emergió de las entrañas metálicas de la estructura. Al ver la tensa situación entre Sonic, Knuckles y Metal Sonic, decidió intervenir para esclarecer el malentendido.

Tails: (acercándose) ¡Esperen! Necesitamos calmarnos y hablar. Esto no es lo que parece.

Sonic y Knuckles, aún en guardia, dirigieron sus miradas hacia Tails, quien llevaba una expresión de determinación y diplomacia.

Sonic: (frunciendo el ceño) ¿Tails? ¿Qué está pasando aquí?

Tails: (explicando) Hay un malentendido. Metal Sonic y HK 47 no están aquí para atacarnos. Tuvieron un problema con Eggman y reconfiguraron la base para sus propios fines.

Knuckles, aunque seguía desconfiado, escuchó con atención las palabras de Tails. Metal Sonic aprovechó la oportunidad para reforzar la explicación.

Metal Sonic: (añadiendo) Lo que dice Tails es verdad. No tenemos intenciones hostiles. Solo queremos asegurar nuestra existencia y, si es posible, colaborar en la lucha contra amenazas comunes.

La información pareció calar en Sonic y Knuckles, quienes comenzaron a bajar la guardia, aunque la desconfianza persistía en sus miradas.

Knuckles: (escéptico) ¿Reconfiguraron la base? ¿Para qué?

Tails: (aclarando) Quieren usarla como base de operaciones y ayudar en la lucha contra Eggman u otras amenazas. No están aquí para hacernos daño.

La explicación de Tails comenzó a despejar las nubes de sospecha en el ambiente. Sonic, siempre dispuesto a dar el beneficio de la duda, se acercó a Metal Sonic.

Sonic: (observando) Entonces, ¿no hubo traición?

Metal Sonic: (sereno) No. Eggman perdió el control sobre nosotros, y ahora estamos buscando un nuevo propósito.

La tensión empezaba a disiparse mientras la verdad se abría paso en la base de Eggman. Tails, como mediador, continuó trabajando para reconciliar a las partes involucradas.

Tails: (proponiendo) Podemos trabajar juntos. Eggman sigue siendo una amenaza, y tener a Metal Sonic de nuestro lado podría ser beneficioso.

Knuckles, aunque aún desconfiado, asintió lentamente al reconocer la lógica en las palabras de Tails.

Knuckles: (cediendo) Está bien, pero estamos en alerta. No confiamos plenamente en ti, Metal Sonic.

Metal Sonic: (aceptando) Entiendo. No espero confianza de inmediato, pero demostraré con hechos que estamos del mismo lado.

La alianza, aunque nacida de un malentendido, se consolidaba en un propósito compartido. Sonic, Knuckles, Tails y Metal Sonic enfrentarían juntos los desafíos que la base de Eggman y el futuro les deparaban. La base, una vez lugar de conflictos, se convertiría en un punto de encuentro para una coalición inusual en el siempre cambiante mundo de Sonic.

Con el malentendido aclarado, Tails, Sonic y Knuckles decidieron abandonar la base de Eggman y regresar al Tornado, listos para continuar su lucha contra Eggman y cualquier otra amenaza que se les presentara. Mientras se dirigían hacia la nave, Metal Sonic se acercó, consciente de la necesidad de despedirse de sus recién encontrados aliados.

Metal Sonic: (formal) Gracias por escuchar nuestras explicaciones. Aprecio que estemos en términos más claros ahora.

Sonic: (asintiendo) No hay problema, Metal Sonic. Pero aún estamos en alerta.

Knuckles: (serio) No creas que hemos olvidado todo lo que ha pasado.

Metal Sonic: (respetuoso) Entiendo. Estoy dispuesto a demostrar con acciones que mi lealtad es genuina.

Mientras Sonic, Knuckles y Tails abordaban el Tornado, Metal Sonic observaba la nave despegar, sintiendo un vínculo efímero pero significativo con estos héroes. La brisa mecánica soplaba a través de sus placas metálicas mientras se dirigía hacia sus aliados momentáneos.

Metal Sonic: (a la distancia) Buena suerte en sus futuras misiones. Que nuestros caminos se crucen nuevamente.

Aunque no expresaba emociones, Metal Sonic comprendía la importancia de este encuentro y la posibilidad de colaboración en el futuro. Mientras el Tornado se perdía en el horizonte, Metal Sonic volvió su atención hacia la base, lista para continuar sus propios planes y demostrar su valía en el mundo en constante cambio de Sonic.

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