-Aun Tengo Fuerza-
Una brisa fría en el desierto ocurrió, tan silencioso que el biento hiso eco al deslizarse atraves de los granos de arena y las plantas secas que esperaban la época lluvias.
Una planta rodante se despego en esa noche fría y rodó, era pequeña y sin nada especial, esta rodó entre muchas otras plantas más similares a ella, sin nada aque la haga destacar, sin nada que la haga brillar.
Igual a las demás, una más entre el montón.
Haciendo acciones iguales, teniendo destinos similares.
Bajo la luz de la luna una de estas se choco con un zapato de color negro, la imagen subió, subió dejando ver un pantalón negro, una ramera verde, una mano y finalmente, un rejoj negro con verde...
Un ojo verde se proyecto, reflejando a una silueta tirada en el suelo a decenas de metros frente a el, la imagen se alejo dejando ver un rostro atractivo de un chico joven castaño de ojos verdes.
Más no era el único.
Decenas, cientos, miles de otros similares a el, casi pareciendo que el mismo sujeto vino de otras épocas de su vida para ese momento, más sin embargo.
Todos eran distintos...
Todos eran el mismo.
Frente a ellos, un niño, similar a el, llorando, suplicando por salvación, suplicando por perdón, su vida siento torturada por un artefacto que su vida condenaba.
Cables atravesando su brazo, sus lágrimas cayendo en el suelo.
La tensión.
La incertidumbre.
La voluntad era palpable en el campo desértico.
Un brillo verde iluminó aquel desierto dejando ver siluetas, formas distintas, unas voladoras, otras luchadoras, incluso una gigante que se alzaba imponente y orgulloso sobre todas las demás haciendo ver el ejército como hormigas de coloridos colores.
Empezaron a acercarse.
El chico lloro, suplicando que no se acercaran, más sus súplicas cayeron en oídos sordos mientras el ejército se acercaba, firme cada pazo hacia temblar el continente entero mientras en el cielo resonaban los rugidos del avance de esas bestias.
Todos serios avanzaron...
Todos firmes procesaron...
Pero ninguno, hiva a dañar a ese niño que lloraba solo...
El reloj del pequeño brillo, una malicia y maldad como ninguna para un aparato que no tenía ni una sola emoción en su programación, el simbolo de un reloj de arena verde cambió a una forma de diamante en la cual siluetas negras pasaban.
Una de cuatro brazos, otro con cola, otra con alas, una semiderretida, una como un perro para detenerse en una sola...
Una con tres cuernos.
Un brillo resonó en todo el lugar, adiferencia de los otros, que era una luz de voluntad, valentía, perseverancia y heroísmo.
La otra luz era, sombría...
Perversa...
Malvada...
Finalmente, una sirueta se formo en el chico, que grito en la más pura agonia y dolor mientras su cuerpo se destrozaba y se regeneraba en una forma vagamente humana...
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Raza absoluta.
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Que no posee conciencia.
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Este es el poder el horror y el pavor.
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Que rosa la Omnipotencia...
Uno de los sujetos, convertido en en un ser con armadura verde y partes similares al espacio sideral habrio sus ojos en shock poniéndose en guardia al ver la bestia levantar sus manos.
Una energía intensa de color Purpura se formo en sus garras antes de juntar sus palmas y una onda se extendió por el infinito albergando incontables universos.
"¡¡RAAAAAAAGGGGHHHHHH!!" -grito aquel horror cosmico fuera del entendimiento-
Aunque más que un grito de ravia...
Parecía un grito de ayuda.
La bestia giro su mirada, viendo mas haya de lo que los ojos mortales podrian ver en el espavio y cosmos exiatentes.
Todo se volvió oscuridad.
La imagen de una chica rubia de coletas con su ojos negro y un hoyo ensangrentado en su cabeza mientras su boca era una mueca de tristeza y un pozo de oscuridad y lamento.
Entre sollozos se subió encima de aquel que la miraba mientras dejaba caer sobre su rostro su sangre y lágrimas de lamento y dolor mientras lo tomaba del cuello y lo empezaba a asfixiar.
"Snif, snif"
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"¿Porque? Snif"
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"¿Por qué me dejaste morir?"
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"¿¡POR QUE ME DEJASTE MORIR!?"
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"¡¡AAAAHHHHHGG!!" -grito Ben despertándose-
Tenía ojeras en sus ojos mientras jadeava por aire, se sentó en el camper, aún era de noche, pero poco o nada faltaba para el amanecer, Ben miró a un lado suyo al sentir a alguien abrazandolo.
En eso la imagen de Toga pasó por su mente, esperanzado creyó que todo era solo un sueño y que al apartar las sábanas su amada chica estaría ahí.
Rápidamente trato de quitar la sabana solo para que un golpe de realidad le diera de ello al mirar su brazo derecho.
O mejor dicho.
La falta de este.
Y la que estaba al lado suyo era Gwen, la cual lo estaba preocupada, preocupada por el y se veía algo cansada, no tan acabada como el ni de cerca, pero verla en ese estado no le gustaba ni un poco.
Ben apartó sus brazos con cuidado, sintiendo dolor, sus heridas estaban cerradas y cicratizadas, pero el dolor fantasmal aún persistía en su cuerpo.
Camino con calma hacia afuera del camper, miró por unos momentos su moto algo dañada sintiendo lo que Kevin sentía cada que su auto era destruido haciendo una mueca.
Camino por unos minutos hasta llegar a una zona donde los autos se estacionaban cerca de una montaña y recostó sus brazos en el pasamanos de madera, sus ojos oscureciendose.
¿Cuantos días ya habían pasado desde ese día?
El había fallado.
Su amor había muerto.
Su imagen de héroe manchada.
Y sobre todas las cosas...
Ni siquiera pudo cobrar venganza.
Ben levantó la mirada del cielo que se nublaba más y más mientras su mirada también lo hacia, el amargo sabor del FRACASO llenaba su boca mientras la sensación más incomoda.
La sensación de haber podido echo más.
Recuerdos con Toga pasaron su cabeza mientras recordaba la sensación de la sangre de ella en su cara, su cara ahora masacrado, tenía marcas de cicatrices de quemaduras bajo su ojo.
Tenía marcas de cortes en su otra mejilla subiendo por su nariz hasta por debajo de su flequillo, su mejilla estaba desgarrada mostrando sus encías y carne roja oscurecida y cu oreja cortada.
Todo era su culpa...
Culpa de su propia debilidad...
El era un fracaso...
Indigno de ser heroe...
Indigno de tener el Omnitrix...
Solo era un patético despropósito...
Lo mejor era rendirse... Y dejar esto atrás...
Soltar la toalla y...
...
"No..."
"Yo no soy así" -murmuró levantando su mirada-
Un brillo de determinación en su mirada mientras su ceño se fruncia con enojo y ravia fluyendo de su corazón.
"Yo no soy así" -murmuro-
"Yo no soy un maldito hombre bebe que llora y se lamentarán por su fracaso, yo soy un hombre" -se dijo levantándose, su propia voluntad negándose a caer-
"Yo soy el ÚNICO que puede interponerse entre el fin del universo contra su final, soy el ÚNICO que puede enfrentarse y detener las amenazas de este mundo" -Ben con firmeza se dijo viendo el horizonte-
"Deja de comportarte como una maldita niña, subete y acomoda tus malditos pantalones y deja de llorar como un hombre debil" -Se dijo molesto por su casi renuncia-
"Yo no soy un hombre débil, voy a tragarme mi dolor, y voy a conformar tintar con mi camino, nadie más que YO podre interponerse entre el mal y los inocentes. Si yo renuncio, ¿Quien los detendra?" -Se dijo y la imagen de varias personas llegaron a su mente-
Animo...
Rojo...
Hex...
Charmcaster...
Kevin...
Y sobre todos ellos...
VILGAX.
Solo el podría hacerlo.
"Solo yo puedo detenernos, esta experiencia, esta tristeza y vergüenza ya no serán mi pesar que me estanca, serán la fuerza que me impulsará hacia adelante, este mundo me escupió en la cara cuando creí que todo sería igual al original" -Miro su mano cerrando su puño con firmesa-
"Pero ya no más, ya nadie será lastimado, ¡Nadie va a morir mientras yo esté ahí para evitarlo!" -Hablo con el sol emergiendo de las nubes que se dispersaban-
"¡PORQUE ES LO QUE UN HEROE HACE! ¡YO NO ME RENDIRE, PORQUE ESO ES LO QUE HACEN LOS DEBILES Y COBARDES! ¡Y LAS PERSONAS NECESITAN A UN HOMBRE FUERTE Y PODEROSO! ¡Aquellos villanos solo tendrán 2 oportunidades de rendirse y servirme a mi para hacer un mundo mejor... -Juro al cielo lleno de firmeza y determinación- "Y si se niegan solo queda hacerse una pregunta..."
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"¿Donde pondré tantas cabezas?" -Finalizo, un brillo oscuro en su mirada-
El necesitaba ser FUERTE...
Necesitaba ser FIRME...
Con una VOLUNTAD fuerte e inflexible...
Como el HIERRO.
En el Camper...
Gwen se estaba levantando por unos ruidos fueras del camper, casi como si alguien gritara una especie de juramento, trato de acomodarse antes de sentir que algo faltaba.
Al acomodarse se tallo los ojos y volteo a ambos lados dándose cuenta de lo que faltaba, faltaba Ben.
Preocupada se alistó como pudo y salió del camper caminando con su linterna mientras llamaba al castaño mal herido antes de notarlo encima de una colina levantando el puño.
Rápidamente corrio hasta allí alumbrando a Ben con su linterna deteniendose una vez esté se volteo a verla, ella podía verlo, vio el cambio.
Ben había llegado de su punto más bajo, parecía derrumbado, su voluntad antes como una Fortaleza de Roca parecía caerse a pedazos, pero ahí estaba frente ella, levantándose nuevamente como una Fortaleza del hierro.
Bajo una nueva luz...
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"¿Ocurre algo?" -Pregunto con calma observando a su prima-
"N-no nada, lo que pasa es que no te vi al despertar y me preocupe así que salí a buscarte" -Respondió suavemente tratando de no afectar a su primo en su estaba de duelo-
Ben la observo, su preocupación era genuina y realmente se preocupaba por el haciendo que una parte de su dañado corazón se conmoviera. Sin decir nada ante este acto de genuina preocupación Ben se acercó a Gwen.
Gwen cerro los ojos por reflejo antes de sentir una mano cálida detrás de su nuca empujándolo adelante y sintió en su quijada algo suave junto a una gran calides al igual que algo humedo en su mejilla. Al abrir los ojos lo noto.
Ben la estaba abrazando con su brazo izquierdo mientras una pequeña lagrima bajaba por su mejilla a la de ella. La genuina preocupación de Gwen le hizo ver que pese a lo malo que fiera la adversidad, que por muy oscuro que fuera el día.
No estaba solo.
"Gracias, encerio, gracias, por todo" -Se separo del abrazo limpiándose la lagrima dándole una sonrisa a la peliroja-
Levantó su mano acariciándo un momento la mejilla de la chica limpiandola de la lagrima que el había dejado atrás al sentirse conmovido.
Gwen sonrió de regreso ante ese gesto mientras llevaba poco a poco su mano a su mejilla donde quedó un poco de la lagrima antes de reaccionar, limpiar la lagrima y avergonzarse y sonrojarse.
"N-no se de que estás hablado, yo solo estaba tratando de ser amable por tu perdida, no es como si realmente me importaras" -Desvío la mirada del castaño-
Ben solo le sonrió dándole un par de palmadas antes de caminar de regreso al camper, su semblante se volvió serio mientras un montón de planes eh ideas pasaban por su cabeza.
Rápidamente decidió que había un sujeto al que debía darle una visita mientras continuaba con su viaje, un sujeto del que debía acabar para que ya no fuera un peligro más adelante al ser potencialmente demasiado poderoso.
Su nombre...
Michael Morningstar.
También conocido como...
DarkStar.
La mirada de Ben se volvió más afilada 6 la imagen de una Gwen casi momificada llegó a su mente anciendolo estar más decidido de acabar con ese tipo.
Al final al del día, demostro que con la suficiente energía y sin estar en su máximo poderío era capaz de derrotar a un Humungosaurio Supremo. Mejor acabar con la raiz antes que el árbol del mal se termine de desarrollar.
Imagen de despedida:
Saludos a ElJokerdelUNO Santidefinitivo ZaydelfernandoPaduaa CriCaLe LuimonGrx DemianSp34k3RM4n Hex-maniac- Gnk2130 DAGRtheOVERLORD Errorcross
Perdón por la espera.
Opiniones:
Preguntas:
Sujerencias:
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