Capítulo extra - Bill Cipher - Surprise Bitches.
―Bill... ―murmuró Dipper, y por un momento no hizo nada más que quedarse perplejo en su lugar, no creo que realmente esperará encontrarme.
―Ya sé, me amas ―afirmé confiado, pero esa confianza fue disminuyendo poco a poco al ver la expresión en su rostro―, ¿estaremos juntos por siempre? ―pregunté tratando de bromear, un poco nervioso por lo que iba a responder.
―¡Eres un idiota! ―Dipper se acercó a donde me encontraba y me dio una fuerte bofetada en la cara―, ¿cómo te atreves? ¿Acaso crees que simplemente puedes venir, sonreír como siempre y me voy a olvidar de todo? ―asentí, me abrazó fuertemente, lo sostuve entre mis brazos por unos segundos, pero luego se separó de mí otra vez completamente irritado―. Si serás imbécil, el hecho de que te extrañe no quiere decir que estemos bien, ¡hace días que no sé nada de ti! Me estoy muriendo creyendo que fue mentira y encima... ¡no das seña alguna de estar vivo! ―me volvió a golpear sólo que más leve― Me debes muchas explicaciones, empieza a hablar, ahora.
―Pino... ―murmuré avergonzado―, ¿seguro? ¿Aquí? ¿Ahora?
―No, mañana, vamos por un café y me cuentas ―contesto burlón, debo admitir que la escena era divertida, verlo de esa manera... ―. ¡AHORA, DIJE!
―Está bien ―contesté resignado―, pero si me interrumpes una sola vez me detengo ―le sonreí―, ¿está claro?
―Cómo el agua ―dijo y se sentó en el piso.
―Bien empecemos de una vez, que esto tomará un buen rato, le daré un toque especial con mi increíble narración porque así es más divertido ―le guiñe un ojo.
***
"Solía preguntarme todo el tiempo cuándo empezó todo exactamente, tal vez fue esa primera vez que me sonreíste, o la primera vez que te vi sonrojado, tal vez fue la manera en la me llamabas idiota... tal vez todo empezó cuando caíste del segundo piso, vaya tonto ¿qué clase de idiota se pone en la orilla de un segundo piso? Probablemente los de la misma clase que se enamoran de un demonio que, encima es el mismo que intento matarlo hace unos años, ¿en serio Pine tree? Pero al menos supongo que para mí buena suerte, tú eras esa clase de idiota".
―Entonces, ¿tenemos un trato? ―pregunté extendiendo mi mano rodeada de fuego azul.
―Trato ―la castaña extendió su mano pero antes de estrecharla conmigo, se detuvo―, pero recuerda, Dipper no debe saber que es un sueño o que está en coma, porque la pasará mal, tienes que hacer que se distraiga, que este resolviendo un misterio o algo así, por favor.
―Por supuesto Shooting Star ―sonreí.
"En ese momento creí que sería sencillo engañar a la niña para que me pase información y así poder engañarte, dejar que mueras y quedarme con tu cuerpo hasta conseguir una forma de recuperar el mío, engañarla fue pan comido pero a ti..."
―Se la pasará de maravilla ―prometí.
―Bien ―estrechó mi mano―, me parece que tenemos un trato ―me sonrió.
"Tal vez empezó con ese trato... que tonto de mi parte.
Mi orgullo me había hecho creer que podría contra ustedes, 'Los gemelos Misterio' como se autodenominaban, creí estar preparado para cualquiera de sus trucos contra de mí, después de la última vez que me ganaron me preparé para ser a prueba de cualquiera de sus planes, ser inmune a sus armas pero me equivoqué, nunca me espere que esa mirada inocente, esa risa encantadora y esa actitud curiosa serían las armas más difíciles de enfrentar".
―¿Estás seguro de lo qué haces? ―preguntó Will cuando le había contado mis planes―, digo no deberías arriesgarte cuando apenas estás recuperando tus poderes, esta vez te podría ir peor, mira mejor olvídate de los Pines, conozco un sujeto que te puede ayudar con lo de tu forma física, no será cómo la que solías tener, será como la de un humano, no mantendrás todos tus poderes pero podrás hacer otras cosas.
―¿Cómo ser un esclavo? ―replique irónico, se ruborizó.
―Eso no es de tu incumbencia.
―Lo mismo va para ti con mis planes con Pino, tú puedes dejar que él te trate como se le dé la gana, pero yo no voy a permitir que se burlen de mí ―respondí―, te estoy contando porque eres mi hermano pero no quiero que me des tus sermones, aparte será algo sencillo, sólo debo ganarme la confianza de Dipper así como gane la de su hermana.
―¿Y ya pensaste cómo lo harás? ―pregunto inquisitivo―, porque no creo que confíe en ti en un parpadeo.
―Tengo mis trucos.
"Y vaya que los tenía, mi plan era simple, manipularía tu sueño como si continuará tu vida exactamente dónde la habías dejado, después del accidente haciéndolo pasar como algo menor, le añadiría algo de misterio y presión para que aceptes un trato, un excusa para pasar tiempo conmigo, enamorarte y así ganarme fácilmente tu confianza.
Pero estaba muy equivocado, no fue nada sencillo".
―No tan rápido Cipher, si has estado tan atento a mí, sabrás que tengo algunas condiciones —se alejó de mí, vamos mocoso acepta de una vez.
―Pensé que podrías olvidarlas pero bueno, como evidentemente no aceptarás sino tienes tus condiciones, negociemos, solo tienes 3 condiciones permitidas y tampoco exageres como pedirme que me tendré que sacrificar por tu familia o algo así ―respondí, ¿qué más daban sus condiciones? Todo estaba bajo mi control ahí―, así que apúrate ¿cuáles son tus condiciones?
"Y el trato se cerró, estabas atado a mí aunque tampoco es cómo que tuvieras muchas opciones, todo lo que pasaba a tu alrededor, eran mi producto, partes que se juntaban para mí plan final.
Aunque primero, quise jugar un poco contigo".
―Quiero helado Pino ―dije haciendo un puchero―, consígueme helado.
―Creo que hay una heladería en el centro del pueblo, podemos ir si qui- ―te interrumpí.
―No, yo no como cualquier helado, quiero uno que está en las afueras del pueblo ―Dipper rodó los ojos.
―¿Dónde exactamente?
"Te comportabas excelentemente a pesar de haberte hecho correr un montón y de obligarte a masajearme los pies, no protestabas, usar la excusa de tus padres era la mejor que se me hubiera ocurrido, soy un genio, tienes que reconocerlo".
—Shooting star, mueve mi mandíbula, soy demasiado perfecto para mascar, Pine tree ¿nadie te dio lecciones de masajes? Eres pésimo, mejor haz algo útil y trae más helado, que ya casi se acaba —dije divertido, ya estaba hartándose y yo necesitaba un momento a solas con "Mabel" para tener una excusa, cuando me vea hablando con ella, hice que "Stan" lo interrumpiera, eso me daría más tiempo y sería más un poco más creíble.
Chasqueé los dedos y la ilusión de Mabel, comenzó a hablar animosamente conmigo, usaría fragmentos de verdaderas conversaciones con ella.
"Después de hacer el trato seguía en constante contacto con ella para ganar su confianza y que tu 'sueño' se parezca lo más posible a la realidad. Y a la larga de verdad nos habíamos hecho amigos, bueno amigos".
—Ya traje el helado —había vuelto y estaba molesto, cada vez era más fácil meterse con él.
"O al menos eso creía.
Pero estaba muy equivocado, todo se estaba saliendo de control y yo no era consciente de ello en ese entonces.
Ahora también me pregunto cuándo todo empezó a salirse de mi control, tal vez fue cuando nos besamos por primera vez o cuando me llamabas idiota, o te sonrojabas ¿alguna vez te he dicho lo terriblemente lindo que te vez sonrojado y molesto? ¿No? Pues ya te lo dije, yo realmente creía estar metiéndome contigo, te coqueteaba y me parecía gracioso, te provocaba, te rodeaba con los brazos para hacerte ruborizar, me metía contigo en cualquier aspecto que te pudiera hacer bajar la guardia, pero fui yo quien termino por bajarla.
La noche del lago, no debías caerte sobre mí, fui yo quien hizo que te tropezarás... aun no sé por qué lo hice pero sé que no me arrepiento porque fuiste tú quién no se movió, así que aproveche la oportunidad para besarte, no debo negar que algo se removió dentro de mí, algo que no debí sentir".
—Eso fue interesante —murmuré cuando nos separamos—, no será necesario que me lleves a mi casa esta noche, puedo ir a pie —y simplemente me fui.
"Recuerdo cómo te deje ahí sentado, estaba seguro que no había peligro, nada pasaba ahí sin que yo quisiera, a excepción de las decisiones que tomabas todo lo demás pasaba por mí cuenta así que sabía que no te atacaría nada y que llegarías a salvo a la cabaña, también procuré que no te encontrarás a nadie, todavía no estoy seguro porque te deje ahí sentado... honestamente creo que se debía a que no podía enfrentarte, quería seguir, pero sabía que si seguía yo sería quien se perdiera totalmente en ti y no debía ser así.
Demonios niño, me estabas ganando en mi propio juego.
Esa noche cuando me fui a mi casa no pude concentrarme, no podía dejar de pensar en ti, Pino, no sabes cómo te metiste en mí y en mi organismo, y no fue hasta esa noche que comencé a darme cuenta".
―Pensé que tu coqueteo con el chico era para jugar y ganar más rápido su confianza ―dijo Will, siempre terminábamos reuniéndonos en el mismo lugar, uno que él escogía, era una especie de jardín con una mesita de té y sobre de ésta habían galletas y un juego de té, Will era fan de esas cosas, en esa ocasión le había contado lo del lago.
―Así es ―replique.
―Pues parece que alguien está cayendo por su Dipper.
―Cállate ―respondí ligeramente sonrojado―, tú eres el que menos puede hablar sobre caer por los Dipper.
―Pero al menos yo reconozco mis sentimientos —comento sacándome la lengua—, es decir, mírate estas sonrojado y ambos sabemos que ese beso no fue un simple beso para ti, estas totalmente cayendo por ese chico.
―Tan honesto y maduro como siempre —dije rodando los ojos.
—Perdone señor madurez, pero sabes que tengo razón —me comí una galleta con mala actitud.
"Y lo cierto es que la tenía, quería pasar más tiempo contigo, tu sonrisa me revolvía el estómago, tu presencia en mi vida me hacía relativamente feliz.
Yo creía tenerte bajo mi control, pero no me di cuenta que en realidad, yo estaba bajo el tuyo.
Cuando fui a la cabaña al día siguiente, quería verte aunque no tenía ninguna excusa planeada, ya se me ocurriría algo, estaba adentro de la cabaña buscándote cuando tus pensamientos me llegaron, 'supongo que tal vez quiera estar lejos de mí por un tiempo', estabas tan equivocado, ahí estaba buscando una torpe excusa para hablarte".
—No se te ocurra pensar eso otra vez, Pino —dije al salir de la cabaña.
—¿Bill? —preguntó Dipper evidentemente sorprendido.
—El mismo de tus sueños —conteste, luego me senté junto a él en el sillón "pesadillas querrás decir" pensó—. ¡Escuche eso! A veces te odio...
"Pero eso era igual una mentira, estaba muy lejos de odiarte.
Luego fue la tarde de las películas, en realidad ese día no me quede dormido, sólo quería ver que hacías, me cargaste hasta mi habitación, y luego de la nada te quedaste dormido conmigo, Pino fue tan hermoso no sabes cómo me emocione, fue la primera noche que dormimos juntos.
Al día siguiente fue lo de la broma de Gideon, ojalá hubiera sido de verdad porque moriría por ver la expresión del verdadero Gideon si le hiciéramos algo así, deberíamos hacerlo, es decir sería asombroso, por cierto cabe recalcar que te veías divino con pechos y peluca no lo negaré, pero me gustas más así como estas siempre Dipper.
Esa igual fue la tarde cuando me besaste, porque aún lo recuerdo bien, TÚ me besaste, cuando te fuiste a la cabaña no podía dejar de sonreír, lástima que no quisiste continuar, mi culpa, lo siento por eso no debí intentar propasarme, pero aun así estaba feliz, lo primero que hice una vez pasado mi entusiasmo, fui corriendo a decirle a Will".
—Nos volvimos a besar y él fue quién me beso, punto para Cipher —le conté emocionado a Will—, creo que llegaremos a algo pronto.
—Wow, realmente te está pegando duro —me respondió.
—Sí, creo que sí ―sonreí―, intente llegar a más, pero se resistió.
—Qué curioso, el otro Dipper al contrario, no me suelta ―dijo Will mientras tomaba una taza con té y la llevaba a sus labios.
—Por algo es su reverso, idiota ―contesté.
—Ya sé eso tonto, pero es curioso porque la otra tarde habíamos terminado de... ―se sonrojo―, ya sabes... hacer eso... y él me-
—¿¡QUÉ!? —grite—, ¿cómo que ya te acostaste con él? —se encogió de hombros.
―¿No te lo había mencionado? ―negué con la cabeza y le lancé una mirada incriminatoria—. No me veas así, él puede ser muy convincente cuando quiere.
—NONONONONONONO —comencé a aporrear la mesa con mis manos, las galletas se cayeron al piso—, NO ES POSIBLE QUE TÚ TENGAS ACCIÓN CON TU DIPPER Y YO NO. NO ES JUSTO.
—¿Por qué te molesta tanto? ¿No era sólo un peón más de tu tablero? ―me dijo.
"Cómo sabrás suelo ser muy competitivo y orgulloso, eso me pego en mi orgullo, qué mi hermano menor haya llegado lejos con su Dipper me alteraba".
—Porque se supone que yo soy el atrevido, no es justo, quiero a Pino en mi cama, ahora ―me crucé de brazos.
—Pues aquí sentado y haciendo berrinches no lo vas a conseguir.
—Te detesto ―le dije.
—Solo ve a por él, campeón —dijo divertido.
"No engañaba a nadie, mucho menos a Will, ¡por dios! Incluso tu hermana ya lo había notado".
—Vamos Bill, cuéntame, ¿cómo esta él? —me había preguntado en una ocasión que la visite en sus sueños para informarle cómo iba todo.
—Pues... —no sabía que decirle, tal vez debía contarle la verdad.
—¿Todo está en orden? ¿Él está bien? —pregunto preocupada.
—Lo he besado... dos veces ―solté de golpe.
—OH POR DIOS ―dijo sorprendida.
—Perdón, pero no pude evitarlo ―me sonrojé―, creo que me gusta.
"Para ese entonces mis planes estaban pasando a segundo plano, sólo me importabas tú, y Shooting Star claro; y nos llevábamos muy bien, en serio bien".
—Oficialmente los shippeo ―dijo.
—¿Qué? ―pregunté.
—Que los shippeo, demonios tengo que empezar a planear muchas cosas, las flores, las invitaciones, encontrar una buena agencia de adopción ―comenzó a hablar muy rápido.
—¿De qué estás hablando?
"Tú hermana puede ser muy entusiasta a veces".
—Mira Bill, antes de que me comprometa a esto, tengo que preguntarte algo honestamente.
—Claro ―asentí.
—¿Qué sientes por él? ¿Es un pasatiempo o en serio es algo más?
—Yo... —un fuerte sonrojo apareció en mi rostro, maldito Dipper, ¿ves lo que me haces? pensé―, creo que es algo más.
—¡Perfecto! Escucha sé que en un pasado eras malo, pero ahora eres bueno y mereces una oportunidad de salir con él, así que, conquístalo vaquero, tengo un par de trucos que podrían ayudarte.
—Soy todo oídos.
"La niña me había dado buenos consejos, consejos que seguí, te mostré cada lugar interesante que había en el pueblo (lugares que son totalmente reales), te besaba cada vez que podía y te daba a entender mis sentimientos de muchas maneras, directa e indirectamente".
—Dipper, ¿me acompañarías a un lugar en la noche? —pregunté.
—Bill Cipher pidiendo algo amablemente, ¿acaso estoy soñando? —Sí, sí lo estás pensé—, ¿se va a acabar el mundo? ¿Te vas a morir? Voy a llamar a urgencias —rió.
—Ja-ja-ja muy gracioso Pino —conteste—, hablo en serio, quiero mostrarte algo.
—Está bien Bill, ¿a dónde iremos?
—Espero que no le tengas miedo a las alturas —sonreí.
Llegamos a la punta de la cascada, ese día estaba particularmente callado, estaba planeando que decirte.
"Recuerdo que cuando logré sacar las palabras de mi boca tu reacción me dolió, estabas recio a iniciar algo serio conmigo, probablemente no sabías si estaba hablando en serio y por eso no te culpaba pero no lo soporté, te abracé y no quería soltarte, accediste después de un rato y bueno tú sabes que paso después".
—Dipper —susurré en su oreja y luego la mordí.
Besé su cuello y luego bajé un poco más, hasta sus clavículas dejando una que otra mordida que no hacían más que provocarle pequeños gemidos, sabía que era lo que seguía, así que baje un poco más, estaba completamente a mí merced.
"Te quedaste dormido casi de inmediato, me imagino que estabas exhausto, eres un sucio, me quede despierto un rato más, sólo viéndote, te veías hermoso.
Formalizamos nuestra relación e hicimos otras cosillas que me imaginaba que eran algo más salvajes y secas, pero no, contigo no fue así, demonios, no tienes ni una mínima idea de lo que hiciste conmigo.
Me traías a tus pies y tú ni siquiera te dabas cuenta.
Te hice mío esa noche y no me arrepiento ni un poco de nada, pero sabía que esto no podía durar por siempre y aunque acababa de empezar, sabía que estaba por acabar..."
—¿No tienes miedo de qué se dé cuenta? —pregunto Will.
—Por supuesto que sí, pero para eso tengo a Shooting Star, ella me da todo lo que necesito para que sea creíble, además todo el tiempo esta distraído, dudo que tenga mucho tiempo para pensar en los detalles que se me podrían escapar —tomé una galleta de la mesita—, tiene encima lo de sus padres perdidos, lo de su tarea con Ford y nuestra relación, que creo que es lo más lo consume porque se olvida mucho de las otras dos cosas, así que eso me tranquiliza.
—Si estas tan seguro de que todo está bien, pues supongo que lo tienes controlado.
"No tenía nada controlado, pero no le dada la importancia que debía.
Así pasaron los días, eran más que perfectos, obviamente tu familia me amaba, nos besábamos siempre y estábamos de maravilla... yo sólo sentía que debía aprovechar cada minuto
Siempre traté de ser muy cuidadoso con el sueño, cuidando todos los detalles posibles, especialmente con tu familia, hice a tu tío Stan apostar con tu sexualidad porque pensé, vamos tu tío siempre te está molestando con lo que haces, ¿así que por qué no? Hice a Mabel nuestra casamentera (cosa que estaba totalmente apegada a la realidad), y trataba de pintar a Ford recio a mí, porque eso sería lo más creíble, Ford no cedería fácilmente a sus sobrinos, pero aun así lo hice el más comprensivo con nuestra relación, sabía que necesitabas que te apoyarán en serio y tanto Estrella fugaz como Stan, ya tenían el papel de bromistas.
Yo sabía que aún tenías tus dudas conmigo, pero ¿quién podría culparte? Yo era un monstruo".
—Bill eres el mejor cuñado que podría pedir, pero necesito que me cuentes a detalles cómo les va, me emociona todo esto, es la primera relación de Dippy —dijo Mabel, estaba visitándola dentro de sus sueños, siempre eran como una extraña versión de su esfera, con brillos y castillos por todos lados, no importaba que edad tenía ella seguía siendo una niña por dentro.
—Claro Shooting Star —sonreí estábamos sentados en un tipo mesa de plástico rosa—, pues nos está yendo bien, ya llegamos a la última base —canturreé y ella soltó un fuerte grito.
—¡DIOS MIO BILL! —vaya que le emocionaba todo lo relacionado a nosotros—, me gustaría estar con él y hablarle en estos momentos especiales ¿sabes?... —bajo la mirada triste.
—Lo sé Mabel, sabes que estoy intentando desde mi lado —mentí y la culpa me mataba—, ¿cómo están las cosas desde tú lado?
—Pues está estable, los doctores dicen que ya debería haber despertado porque sus signos vitales están todos en orden, así que es cuestión de tiempo —sonrió—, espero que sea pronto.
—Sí... —exclamé desanimado.
—Oh, lo siento... —murmuro y apretó mi mano sobre la mesa—, sé que hay pocas probabilidades pero podemos encontrar una forma para que estén juntos cuando despierte, sé que podemos.
—¡Claro! —sonreí falsamente, honestamente lo dudaba mucho.
"Yo era en verdad una mala persona, pero una enamorada. Yo no creía que podríamos seguir en el mundo real, no encontraba la manera en la que funcionará ya que sólo te vería en sueños, sin una manera de desarrollar una forma física, lo veía bastante imposible.
Por eso le mentía constantemente a tu hermana, porque si de verdad hubiera intentado que despiertes, hubieras despertado desde la primera semana.
Era un egoísta y lo sabía... pero yo sólo quería un poco más de tiempo contigo, ¿tan malo era eso?".
—Sí sabes que esto se te está yendo de las manos, ¿verdad? —pregunto Will.
—¿De qué estás hablando? —pregunté a la defensiva.
—De Dipper y tú, es decir, puede que lo quieras y eso está bien, me alegro por ti, pero... —me miro con lastima—, él está en un sueño y tarde o temprano, va a tener que despertar.
—Lo sé, lo sé —suspire frustrado—, sólo quiero pasar un poco más de tiempo con él, Will es todo lo que pido.
"Hubo una noche en particular que recuerdo muy bien, ya sabes en la que te conté acerca de Will, y luego fuimos a mi habitación a hablar de cosas triviales, me contaste sobre que tu tío me estaba cazando lo recuerdo bien.
Eras un pésimo actor, si hubiera sido el Ford de verdad, se hubiera dado cuenta de inmediato en serio, pero bueno te preguntarás porque puse a Ford a cazarme y verás fue porque pensé que eso sería divertido, tu reacción sería genial y tendrías otra cosa con la cual entretenerte, un plus, merezco un premio por mi creatividad, debiste ver tu expresión cuando me contaste, me dio tanta ternura cómo te preocupaste por mí".
—Bill... —murmuró Dipper mientras estábamos acostados en mi cama.
—¿Sí Pino? —pregunte.
—Mi tío te está cazando —contestó—, estoy tratando de distraerlo y sabotear algunos de sus inventos pero no sé cuánto podré detenerlo y no quiero que te pase algo.
—Aww, mí Pino está preocupado por mí —lo abrace y bese su frente—, no te preocupes bebé lo tengo bajo control.
—No me digas bebé —hizo un mohín— claro que me preocupas idiota, eres mi novio.
—Creo que me va a dar algo —volví a besarlo.
"El resto de la noche hablamos de cosas triviales hasta que el silencio se instauro entre nosotros, estábamos sólo acostados uno al lado del otro, te eche en cara un par de cosas vergonzosas que habías hecho que Mabel me había contado, cómo cantar para vencer a los zombies, no sabía que te gustará BABA, aunque tampoco me sorprendió tanto, te quedaste dormido muy rápido, eso me alegro, tus problemas de insomnio no eran algo que yo hacía, era tu cerebro diciéndote '¿Cómo dormir en un sueño? No seas tonto, despierta', y no podía contra eso, por mucho que me gustará verte dormir.
Especialmente aquella noche, Dipper, para ese entonces ya estaba totalmente loco por ti".
—Despierta ya, dormilón —bese su nariz.
—¿Qué quieres Bill? Deja dormir —respondió y se dio la vuelta.
—Eres un patán, trato de ser lindo y me tratas mal —empuje a Dipper de la cama, debo admitir que su expresión valía oro, cuando estaba molesto hacía un gesto muy gracioso.
—¿Te han dicho lo odioso que eres? — lo ayude a levantarse.
—No, sólo me han dicho lo sensual que soy —respondí—, también me han dicho que soy excelente en la cama.
—O sea que te has acostado con más personas —replico Dipper.
—No, tú lo dijiste, ¿no lo recuerdas?
—Creo que lo recordaría, si yo lo hubiera dicho —respondió molesto.
—Claro que sí, cuando decías "más Bill, por favor, más" —Dipper se sonrojo como nunca y me lanzó un almohada.
—Eres un tremendo idiota —refunfuño.
—Pero soy el idiota con el que te acostaste —respondí—, que también es tu novio.
—Deberías conseguirte otro chiste, ese ya es viejo —salió del cuarto y comenzó a ir a la cocina.
—Pero amor, ese nuestro chiste interno —grité y lo seguí a la cocina.
—No sé cómo es que estoy saliendo contigo —murmuró y lo besé en los labios—. Creo que ya me acorde —lo volví a besar.
—No tardes mucho que te deben estar esperando para la cena de esta noche.
—Cierto, lo había olvidado, ellos quieren que vayas, ya sabes, te adoran ―comentó sacando algunas cosas del refrigerador para hacer el desayuno.
—No me lo perdería por nada, Pino ― me acerqué a él y le volví a besar la frente.
"Más tarde esa misma noche, me diste la esfera, mi plan era sencillo sólo tenía que quitarte la esfera para tener un poco más de tiempo a tu lado y eso era lo único que quería... un poco más de tiempo.
¿Era egoísta de mi parte quererte sólo para mí? Sí, pero no me importaba, aparte todos los demás iba a poder tenerte el resto de sus vidas y yo... no estaba tan seguro de tenerte mucho más, incluso aunque hubiera algo que me molestaba pero trataba de no pensar mucho en ello".
―Dipper, ¿tienes algo? Te he notado distraído la mayor parte de la noche ―pregunto "Ford".
―¿Ah? ―Dipper salió de su ensoñación―. No tío Ford, simplemente estaba pensando en... en... bueno... en la tarea que me dejaste, lo siento.
―¿Qué tarea? ―Dipper, me has facilitado el asunto pensé, obviamente ya sabía de qué tarea hablaban.
―No es nada, cosas de nerds ―respondió Dipper.
"Ese fue un golpe bajo, sabía más que cualquiera de ahí, bueno aunque en realidad sólo estábamos tú y yo, y no románticamente hablando en plan 'todo a nuestro alrededor desaparece cuando estamos juntos', sino que literalmente solo estábamos tú y yo, el resto eran una imitación, una ilusión, una mentira.
Una mentira que me hubiera gustado que durará un poco más, pero al fin y al cabo una mentira.
Hice que todos se marcharan y lo notaste, pero no te importo, me guiaste a tu habitación, nos besamos e hice que la esfera aparezca en tú la cama, fácil, sin embargo había algo que me acosaba, un cosa que me hacía pensar en cambiar mis planes... Mabel".
―Bill ―dijo entre llanto cuando la había ido a ver antes de la cena―, Bill...
―¿Qué pasa cariño? ¿Estás bien? ―la abracé.
―No ―sollozó en mi pecho―, Dipper casi se muere anoche...
―¿¡Qué!? ¿De qué estás hablando? ―grité.
―Anoche, cuando estábamos en el hospital tuvo un paro cardiaco y-
—La esfera... —murmure más para mí que para ella.
—¿Qué? —pregunto entre sollozos.
—Nada, continua contándome.
—Estuvo inestable un rato pero luego de la nada volvió a estar bien, ayúdame Bill, ayúdalo a despertar, por favor.
―Claro, yo... haré lo que pueda, lo prometo.
"El recuerdo de esa escena seguía apareciendo cada vez que te besaba, incluso aunque planeará dejarte a mi lado un poco más, incluso aunque fuera un egoísta de lo peor, no podía permitir que murieras.
Y ahí fue cuando me golpeo, Dipper, yo no podía hacerte eso, era consciente que mientras más tiempo pasarás aquí, más difícil sería despertarte y al paso que íbamos, tal vez nunca lo harías".
―Bueno... ―dijo―, no sé nada de esta estúpida cosa, se supone que tengo que descubrir cómo funciona pero la verdad ya me tiene harto, no puedo y me frustra, a veces hasta me gustaría rendirme ―NO, NO PUEDES RENDIRTE pensé―, es decir, se supone que debo seguir los pasos de mi tío Ford, que debo hacer grandes cosas y ni siquiera puedo abrir una idiota esfera, se supone que debo ser el listo y si no soy un chico listo, ¿qué soy?
―Oye, no digas eso ―me estaba partiendo el alma verlo así, le quite la esfera―, eres muchas cosas aparte de listo, eres lindo, amable, gracioso, valiente y atrevido, intrépido, eres una de las mejores personas que conozco y aunque no conozco muy buenas personas sé que lo eres, me haces querer ser una buena persona, ¡hace unos años salvaste al mundo... de mí! Pero lo salvaste ―reí, me quede viéndolo directamente a los ojos y sujete su rostro entre mis manos―. Eres muchas cosas Dipper Pines, una de ellas es mi novio y otra es que eres increíble, nunca pero nunca vuelvas a dudar de eso ―lo besé―, y no importa si tienes dificultades con la esfera, siempre puedes salir adelante de las cosas difíciles, nunca te rindes y esta no debe ser la primera vez, ¿me entendiste? Eso es algo de lo que me hizo enamorarme de ti. ―no te rindas por favor, era lo único que atinaba a pensar.
"No podía hacerte eso, merecías mucho más y fue cuando tomé mi decisión, sí te quitaría la esfera... pero lo haría por otros motivos, no podía permitir que te rindieras.
Así que aproveché esa noche al máximo, te besé, te acaricie, hice de todo, fue cómo mi despedida, porque sabía que no te volvería a tener así, no podría tenerte mucho más...
Cuando estuve con Mabel descubrí el truco de tu subconsciente, si la esfera se abría despertabas y si te rendías con ella morirías... y por mucho que me gustará estar contigo, no te podía tener ahí conmigo por siempre, pero la única manera de que despiertes es por elección, tenías que querer que todo acabe y lo nuestro no ayudaba a eso... así que lo decidí, tendría que forzarte a abrir la esfera.
Pero demonios, el único problema es que tendría que hacerlo de la única manera en la que sé hacer las cosas...
Mintiendo".
―Bill ―canturreó un día después de darme la esfera.
"Ya había empezado a poner en práctica mi distanciamiento".
―¿Qué quieres? ―contesté irritado, no quería ser así con él... pero era lo mejor.
―¿Qué haremos hoy? ―dijo un poco desanimado al notar mi actitud.
―Pues, no tengo nada planeado ―contesté tratando de no demostrar ninguna emoción en mi tono de voz.
―¿En serio? ―bajo la mirada triste.
―No, sorpréndeme ―sonreí,
"O al menos eso intentaba pero me es muy difícil resistirme a esas caras tristes.
Y entonces todo empezó a cambiar y tú lo notaste y te dolía pero no había nada que pudiera decir o hacer para evitar lo que venía a continuación... tenía que ser así.
—Tenías razón —dije cuando Will me abrió la puerta.
—¿De qué estás hablando? —pregunto Will.
—Esto se me salió de control, no puedo con esto.
—Ok, primero entra porque vas a tener que explicarme mejor que esto —rió—, nunca habías dicho eso, ¿puedes repetirlo para grabarte diciendo que tengo razón? Se lo mostrare a mis hij- —se interrumpió al notar la expresión en mi rostro—, creo... que mejor deberías sentarte y explicarte.
—Dipper ―solté exasperado―, ese es mi problema —puso un semblante serio, al parecer no era el único con problemas con los Dipper, me senté en el lugar de siempre, el jardín de "su casa", chasqueó los dedos e hizo aparecer un plato con galletas y té—, lo amo ―dije finalmente.
—¿Qué? —escupió un poco del té que acababa de llevarse a la boca.
—Que lo amo ―dije y sentí mis ojos picar un poco, no quería llorar. Yo nunca lloro.
—Bueno, ya son dos cosas que jamás creí escucharte decir que has dicho hoy ―intentó bromear, pero no estaba de ánimo.
—No bromees Will... —se me entrecorto la voz—, no puedo tenerlo, Mabel me contó que estuvo a punto de morir, ya no puede seguir en coma, y yo... ya no...―cada vez me era más difícil hablar―, ya no puedo seguir con él.
—¿Bill? —pregunto angustiado, nunca me había visto de esa forma... nunca había estado de esa forma—, ¿estás bien?
—No, idiota. No estoy bien —susurré y él se acercó a abrazarme, era evidente que me iba a romper en cualquier momento—, no quiero perderlo... —y ahí fue cuando no pude más... por primera vez en mi vida, estaba llorando.
"Creo que Will realmente se asustó ese día, nunca se imaginó verme de ese modo, tan... vulnerable. Qué bueno que no lo viste, fue demasiado... patético, yo me hubiera burlado de mí, es decir, ¡estaba llorando! Ni siquiera sabía que era capaz de llorar, pero Dipper... la idea de perderte me hacía llorar y lo peor de todo era que sabía que estaba cerca de hacerlo y eso me mataba...
Pero finalmente llegó el día en que el final se pondría en marcha".
—Bill, hay algo que he estado pensando —dijo mientras estaba recostado sobre sus piernas.
—¿Qué es? —dije mientras acariciabas mi cabello.
—¿Está todo bien? Te he notado... ausente últimamente.
—Pero si he estado contigo todo este tiempo Pino —le lancé una sonrisa burlona, pero por dentro me dolió hacer eso, sabía perfectamente a qué se refería.
—Me refiero a ausente espiritual, idiota —rió por lo bajo.
—Ya te dije, la esfera me tiene pensando siento que es importante en una manera que... —me interrumpí—, tal vez sólo estoy exagerando, pero no te preocupes ya pronto te la regreso —mentí.
—Está bien, sólo no le vayas a decir a Ford.
—Nunca —me besó rápidamente antes de levantarse.
—Te quiero Pino, no vayas a olvidar lo de esta noche —dije antes de que se vaya.
—Y yo a ti Bill, claro que no, aquí a las 10 como acordamos —yo sólo lo observé marcharse.
"Me fui rápido con Mabel, no la había encontrado durmiendo pero por casualidad la encontré esa tarde".
—Shooting Star necesitamos hablar...
—Claro Bill —sonrió pero entonces se fijo en mi mirada—, ¿está todo bien?
—¿Cuál es la manía de la gente preguntar eso cuando es obvio que no? —murmuré.
—¿Por qué? ¿Qué te pasa? —pregunto preocupada.
—No es relevante... —dije tratando de disimular mi dolor, últimamente me vivía ocultándolo—, lo importante es que la esfera es la clave para que Dipper despierte, y me estoy haciendo cargo de eso...
—¿Eso qué quiere decir? —pregunto tratando de contener su emoción.
—Que... Dipper está por despertar —suspiré—, es muy importante que hagas algo por mí, así que escúchame con atención.
—Claro, lo que sea ―asintió.
—Tendré que hacer unas cosas de las que no estoy orgulloso, Dipper... Dipper tendrá que enfrentar algunas cosas, no sé si lo volveré a ver después de eso, así que dejaré a tu decisión si le dices que... recuerde lo que hablamos la última noche, porque ahí está la respuesta y que espero que un día pueda perdonarme.
—¿De qué estás hablando?
—Si se lo dices, él lo entenderá... —la miré a los ojos por primera vez en todo lo que hablamos—, pero lo dejo a tu criterio... si crees que es necesario dile, sino será mejor pretender que en realidad nunca paso, para que le sea más fácil olvidar ―dije con un nudo en la garganta.
—Es-está bien Bill.
—Gracias Mabel, sabía que podía contar contigo —la abracé fuertemente, ella se sorprendió un poco—, te voy a extrañar pequeña... eres la mejor amiga que puede pedir.
—Y tú eres el mío Bill —rodeo sus brazos a mi alrededor—, lo sabes, tú y Dipper son mis mejores amigos en el mundo. Aún podemos vernos en los sueños... nosotros...
—Lo sé destello, haré lo posible por encontrar una solución ―fingí una sonrisa, y es que aunque aún pudiera visitarlos en sueños... no me parecía la mejor idea del mundo―, y por eso pronto lo tendrás de vuelta —la solté y le sonreí—, bueno tengo que ir con tu hermano, ¡es tiempo de la función!
"Y regrese al prado, faltaban aún un par de horas para den las 10 pero ya estaba ahí, no tenía nada más que hacer ya todo estaba listo para mañana, el gran final, estaba ahí solo, esperándote, me estaba muriendo, quería gritar, quería golpear algo, quería hacer cualquier cosa menos dejarte ir...
Pero sabía que no tenía opción.
Finalmente llegó la hora esperada tenía cada nervio de mi cuerpo alterado, sabía que estabas por llegar así que con un chasquido un telescopio apareció, comencé a "ajustarlo" estabas a unos pasos, te recibí con una de mis más radiantes sonrisas, quería esta noche libre de distancia, libre de dramas, quería aprovechar cada segundo... quería una buena noche a tu lado".
—Hola Pine tree, linda playera —le guiñé el ojo.
—Hola amor —dijo burlón y rió, su risa es la más linda pensé—, se la quite a un cretino y estoy seguro que me queda mejor.
—A pesar de que creo que ese cretino debería verse terriblemente ardiente con eso, no voy a debatir que te queda bien —respondí siguiéndole el juego.
"Te veías hermoso, más que cualquier constelación que vimos esa noche".
—Sabes que es broma —me dio un corto beso—, entonces ¿cuál será la primera constelación de la que aprenderemos hoy?
—La tuya, por supuesto, mira —señalé el telescopio, puso su vista en él.
—Es muy bonita —susurró, tú lo eres más.
—Casi tanto como tu trasero —dije pícaramente y le agarre la nalga, a pesar de todo tenía que divertirme un poco.
—Eres un idiota —solté una carcajada y se sonrojó.
—Bueno empecemos con lo básico, está compuesta por 7 estrellas principales, con Alioth siendo la más brillante... —le explique cada detalle que pude acerca de esa y cualquier otra constelación que me pedía.
—Bill, por mucho que me guste todo esto... en serio hay algo que tengo que hablar contigo —dijo, y ya sabía por dónde iría esa conversación.
—¡Ay Pino! Si es otra vez porque estoy "ausente", no estoy de humor para hablar de esas cosas —conteste cortante, no quería hablar de eso y pelear, ¿qué no lo entendía? Por lo que me constaba era nuestra última noche juntos.
—Pero Bill, algo te está pasando y necesito que me digas —replicó.
—No es nada, no arruines el momento con tus cosas —por favor, pensé.
—¡BILL! ¡Vamos a hablar en este momento de qué te pasa quieras o no! —gritó furioso y mi expresión cambio, jamás me había hablado en ese tono—. Anda dime, ¿qué pasa? ¿O quieres que empiece a sacar mis conclusiones? ¿Quieres que comience a creerle a mi tío de qué tienes algo que ver con la desaparición de mis padres? ¡Ya que al parecer no has hecho nada por ellos en los últimos días mientras yo estoy saboteando los intentos de Ford por detenerte! ¡E incluso si estás haciendo algo por ellos no me dices nada! ¿Qué está pasando? —las palabras no salían de mi boca—. Por favor Bill... sólo dime que te está pasando, no soy como tú y no puedo saber qué piensas a menos que me lo digas, necesito que me digas.
—Yo... Dipper... yo... —me sentía fatal, pero ni siquiera podía decir una mentira y eso que las mentiras siempre se me dieron bien pero no me parecía adecuado, me dolía no poder decirle la verdad.
"Pino, no sabes lo mal que me la pase esa vez, no podía decirte la verdad, era necesario que despertarás y no podía decirte que era un sueño ya que podrías tanto esfuerzo para despertar al saber que posiblemente ya no estaríamos juntos y sólo si pensabas que te estaba traicionando podrías realmente querer salir del sueño, pondrías toda tu fuerza de voluntad en salir...
Pero yo estaba a punto de romperme otra vez y no quería eso... y menos si era frente a ti, porque no podría inventar una excusa para que todo pasará como debía pasar, así que no mentí, pero tampoco te dije la verdad".
—Por favor sólo tienes que decirme —dijo casi como una súplica esa vez—, podemos resolverlo juntos pero tienes que decirme que te está pasando, porqué has estado distante y cortante, yo... realmente no sé qué hacer contigo, pero no puedo estar sin ti, Bill... por favor —moría un poco con cada palabra.
—Te amo Dipper —lo abrace, fue lo único que sabía que si salía de mi boca, no sería una mentira—, te amo demasiado... y... ―titubee―, hay algunas cosas que no te puedo explicar ahora, pero necesito que confíes en mí, por favor sólo necesito que confíes —me separé y tomé sus manos—, porque no sé qué haría si algo te pasase o a tu familia porque he estado ocupado tratando de resolver lo de tus padres y me frustra no poder decirte nada, hice tratos que tengo que cumplir, de los que no te puedo hablar pero estoy dispuesto a que pienses que estoy ausente o a que te enojes por algo que haga, con tal de mantenerte a salvo.
—Bill yo... también te amo —susurró, morí un poco más—, y no podría enojarme contigo, resolveremos esto juntos —pero tenía que enojarse conmigo para despertar.
—No hables tan pronto Pino, no hables tan pronto —deposite un beso en su frente.
"La noche siguió pasando, nos recostamos y te abrace, pusiste tu cabeza en mi pecho, sabía que mañana todo acabaría así que quise aprovechar cada minuto contigo, te bese, te acaricié y te escuche reír todo lo que pude... esa noche no dormimos, creo que las emociones en ambos estaban fuera de control y no nos dejaron dormir o tal vez fue tu insomnio de siempre y mis ganas de no perder ni un segundo contigo que nos mantuvo despiertos... no lo sé y no me importa, sólo sé que esa noche, Dipper... desearía que jamás hubiera acabado.
—Lo siento... —amaneció y finalmente rompí el silencio que se había formado—, Pino todo estará bien, lo prometo —mentí, había regresado la función.
—Lo sé Bill, confío en ti —desafortunadamente.
—Eso es lo que me temo, sabía que no podrías resistirte a este bomboncito —intenté bromear pero no me salía como siempre—, nos vemos luego, ¿sí? Tengo... algo que hacer —le di un último beso, cargado con todos mis sentimientos, porque sí, sabía que sería el último beso así—, te quiero y tengo miedo de que de un momento a otro todo se acabe, nunca me había sentido así y por eso hay veces en las que me comporto raro, perdón si eso te angustia.
—Bill, todo va a estar bien, ahora ve a hacer eso y ve que no te maten en el intento —bromeó.
—Hasta luego Dipper —deposité otro beso en sus labios, esta vez pequeño y breve, me fui a empezar con todo.
"Tal vez debí abrazarte un poco más aquella última vez que te vi.
Y continúo el espectáculo, y bueno ya sabes que tanto pasó después, llegaste a la cabaña y fueron en busca de tus padres, yo estaba en la cueva esperando... dato curioso, Xólotl en realidad no es así, la verdad es muy simpático y divertido, es un desmadre en las fiestas especialmente en las suyas deberíamos ir un día a una; pero pensé que eso le daría más dramatismo, ya sabes... mi especialidad.
Cuando llegaste y viste toda la escena casi muero, aún tenías fe en mí...
Trate de recrear lo mejor que pude la reacción de todos pero me era muy difícil concretarme en eso, por eso la de Ford y Stan no me salieron del todo, no sabes cómo me dolió recrear la de Mabel, mi estrella fugaz diciéndome que no le diga así, me mato, pero la verdad es que no estaba tan concentrado en los detalles como siempre, sólo podía sentir tu mirada dolida sobre mí, ¿quién podría concentrarse con eso?
No tengo que contarte cómo fue todo porque lo sabes y creo que eso sólo abre viejas y falsas heridas, pero quiero que sepas algo Dipper, era necesario, no hubieras despertado de otra manera.
Después... despertaste, finalmente rompiste la esfera, eso fue suficiente, estaba abierta querías salir de ahí...
Así que eso fue lo que hiciste".
—Will... lo extraño —me queje por milésima vez.
—Bill, ¿por qué no tomas una forma humana y vuelves? Aunque no tengas todos tus poderes y que no seas inmortal pero podrás estar con él —me contesto.
—Porque no sé puede, no tengo el poder suficiente para hacer un cuerpo humano —dije frustrado.
—¡Tonto! Ya te dije que conozco a alguien que puede ayudarte.
—¿¡QUÉ!? —grite.
—Sí, te dije desde antes que empezaras con tu "venganza" —hizo comillas con los dedos—, que termino saliéndote mal porque estás aquí muriendo por el chico.
—Tú también te mueres por ese chico —se sonrojo.
—El punto es que él te puede ayudar, perderás algunas habilidades pero estarás con él.
—¿Cómo lo encuentro? —William sonrió.
"Fuimos con un sujeto, la verdad ni siquiera recuerdo su nombre, nunca supe cómo lo hizo, y honestamente no me importo en ese momento y no me importa ahora, tenía un cuerpo humano... igualito al de tu sueño y eso era suficiente para mí.
Creía estar listo para ir por ti, que nada podría detenerme... pero no".
—Dios mío Bill —me regaño Will, otra vez—, solo ve y háblale.
—No puedo, ¿y si me odia? —dije otra vez—. ¿Y si nunca me perdona? No podría vivir sabiendo que me odia.
—No seas melodramático, no te va a odiar, una vez que le expliques se van a reconciliar y todo estar a bien, él te ama y lo sabes —contestó.
—Pero...
—Sin peros, irás esta noche a su fiesta y le hablarás o no tendrás galletas por el resto de la eternidad... ni a Dipper, así vas, porque vas.
—Sí mamá —respondí—. Y tú, ¿cómo te va con Gleeful?
—Pues... —se sonrojo ligeramente—, nos reconciliamos, me explico todo y no tuve más remedio que perdonarlo, ugh, tiene ese efecto en mí que —me miró y se interrumpió—,al menos él tuvo el valor de hablarme.
—Ojala fuera así de fácil —respondí frustrado.
—Lo es Bill, sólo tienes que intentarlo —contesto sonriéndome.
—Lo estoy intentando, le deje mi playera de recuerdo —respondí—, no sabes lo difícil que fue meterme en su casa sin que me vean y poner la playera en una caja, su papá casi me descubre.
—Eres un idiota —viro los ojos—, no sé cómo es que estoy emparentado contigo.
"Lo cierto es que sí fui a tu fiesta, no sé si me viste... pero cuando te vi ahí, sonriendo con todos, no pude, te veías feliz sin mí y sí, tenías mí playera pero Dipper... fui el mayor cobarde del mundo, no estaba listo para tu reacción, así que me fui sin dirigirte la palabra, perdón por eso.
Will casi me mata por no haberte hablado, así que al día siguiente me llevo a rastras a tu casa, déjame decirte que tu mamá es encantadora, nos recibió dulcemente y tu papá me amo, sólo tuve que ver en su mente lo que le gustará para buscar temas de conversación (porque sí leer las mentes es algo que aún puedo hacer así que no te salvaste), ambos se portaron como ángeles conmigo, por cierto tus padres creo que van a querer emparejarme o con Mabel o contigo porque me amaron, lo sé soy tan amable pero no por ser bueno sino porque soy fácil de amar, volviendo al tema ahora ya sabes que me aprueban como yerno y no te preocupes porque en lo poco que indague en su mente (sí, claro poco, poquísimo) creo que ya se imaginan que eres gay y te aceptan (lo digo en serio Pinocho [me gusta ese apodo, en serio y eso que se me ocurrió de una manera tan boba, pero te aguantas porque se te queda]), pero ya me desvié del tema, el punto es que me comentaron que estabas en la Cabaña del Misterio, así que Will y yo, nos dirigimos hacia allá, pero cuando llegamos sólo encontramos a una Mabel con los ojos rojos en el patio de la Cabaña.
Casi se desmaya cuando me vio, vaya que la extrañaba también, mi pequeña estrella fugaz.
Me contó que te acababa de contar todo y que saliste corriendo al bosque, le presente a mi hermano y los deje ahí, me imagine a donde irías y me dirigí hacia ahí... el último lugar donde estuvimos juntos, cuando llegue te vi sentado bajo un árbol, debo decir que soy bastante oportuno porque justo cuando estabas pensando que todo era como ese día excepto que no estaba, aparecí, soy mago, brujo o demasiado genial, yo no sé pero fue increíble (como yo, creo que ya lo mencione mucho pero nunca es suficiente de mi genialidad, [perdón cuando estoy nervioso digo muchas tonterías, ¿ya te lo había dicho? Bueno ahora lo sabes])".
—Y bueno llegamos hasta el ahora, acabo de recuperar mi derecho a las galletas de Will, que por cierto deberías probar un día porque son endemoniadamente buenas —le sonreí, hubo un breve silencio, él estaba tratando de procesar todo lo que le acababa de decir—, ¿este es el momento en el que vienes, me abrazas y me dices que me amas? —extendí los brazos y rogué porque su reacción fuera positiva.
―Te odio maldito bastardo ―Dipper me abrazo con lágrimas en los ojos, escondió su cara en mi pecho―, nunca me vuelvas a hacer algo así, te odio, te odio, te odio ―decía mientras golpeaba mi pecho entre sollozos.
―Te equivocaste un poco con las palabras pero te perdono, y yo también te amo Pino ―dije y me separé un poco, levante el cabello que cubría su marca de nacimiento y lo bese en la frente―, te prometo que no habrán más mentiras ni trucos de ahora en adelante.
—Eres un idiota —contesto.
—Pero sigo siendo tú idiota —soltó una risa y finalmente por primera vez en el mundo real... nos besamos.
Fin.
***
Bueno cómo algunos ya sabrán la cuenta esta participando en los Premios Iluminati como mejor escritora y agradecería muchísimo a los que voten por la cuenta, la historia ya acabo (a excepción de la parte de curiosidades y eso), así que muchísimas gracias por todo el apoyo que le dieron, son los mejores.
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