Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 23.

[Aquí no habrá el reto de las historias escondidas ya que es muy largo y no encuentro algún lugar para ponerlos.]

Tal vez he pasado por muchas cosas en mi vida. El abandono de mi padre, la muerte de mi madre, la acogida de Mr.Big, el encuentro con Thomas, luego el trabajo de policía con Jack, Judy. Simplificando todo lo que he vivido, eso sería lo importante. Pero nada había excedido aquellos recuerdos y momentos como el que hoy vivía junto a dos de las personas que más me importan en la vida. Mi hermano Jack y mi amada Judy. La tercera integrante solo la conozco por las cosas que había escuchado en la comisaria. Se supone que se llama Skye y era la ex compañera de Jack. Eso era lo que tenía entendido hasta ahora.

A veces la vida y el mundo mismo pueden ser tan pequeños que no alcanzas a ver como todo se junta en un solo lugar. Ahora solo quedaba un último momento, un clímax antes de que todo esto terminara y de ese momento me encargaré yo. De destrozar a Thomas con todas las fuerzas que tengo.

―Muy bien, vámonos de aquí. ―dijo Jack subiendo a los hombros de Skye―. Hay una ciudad que liberar.

―Espera. ―digo―. Ustedes vayan, yo tengo que terminar un asunto con él. ―miro sobre mi hombro para notar que Thomas estaba despertando de la caída―. Vayan ahora. No quiero que salgan lastimados.

―Nick, no te dejaremos. ―me contradice Judy―. No te dejare aquí como si nada hubiera pasado. ―me mira con ojos tiernos pero a la vez llenos de preocupación.

Me hubiera encantado decirle lo que siento en un mejor momento pero no tenia de otra. Y ahora, era el único momento que tenia de despedirme de ella. Le sonrió suave y tranquilo tomando sus mejillas entre mis patas, parece que va a llorar pero antes de que lo haga le doy un suave y tranquilo beso para que sepa que estaré bien. No he llegado hasta aquí para morir. Acabaré esto de una vez por todas.

Hago un cruce rápido de miradas con Jack, parecía dolido pero a la vez feliz. Sabía que Judy había tomado su decisión.

―Jack. ―digo antes de lanzar a Judy con él―. Cuídala y cuídense. Nos veremos luego. ―Jack me sonríe con compasión de hermano y asiente. Judy trató de zafarse del agarre del conejo pero no pudo.

Y sin más, los tres se fueron. Ellos encima de la espalda de Skye. Judy protestaba y lloraba sin éxito de salir del agarre. Me rompe el corazón ver esa imagen, con un suave movimiento me despido con la pata y desaparecen entre los escombros.

Ahora no había una Zootopia por la que pelear, no había un objetivo ni una misión. Era solo acabar con esto para volver a ver a la coneja que amo. Para conseguir un nuevo inicio y dejar todo atrás. Ser el verdadero héroe que ella necesita.

―Vaya... Vaya... vaya... ―dice Thomas detrás de mí. Me giro al verlo herido en un costado. Un color escarlata manchaba parte de su camisa en las costillas―. Realmente me has conmovido, Nick. Pero quiero decirte que esta es la última vez que las veras. ―con ira se lanza contra mí con sus cinco garras al aire sin impórtale su herida en las costillas.

Esquivo el ataque y remeto con una patada en su espalda haciéndolo caer de cara contra el suelo escabroso. Se levantó con dificultad, su respiración era desesperada, inestable, irregular. Alzó su cara hacia mí y ahora estaba peor que antes, una gran herida le abría la frente mientras que su ojo derecho estaba sangrando igual. Una de sus orejas ya no se alzaba y la otra parecía aun intacta.

―¡Me tienes arto! ―vuelve a lanzarse contra mi chocando en mi pecho, lanzándonos por la colina de escombros, llegando hasta abajo. Me trato de levantar pero él está encima de mí aplastando mis patas y mis piernas. Aún tenía sus dientes para desgarrar mi cuello―. ¡¿Sabes que hice después de que me abandonaras?! ¡Estuve cada maldito día esperando a que regresaras! ¡Cada noche esperando a que volvieras y empezaras con tus bromas ocurrentes! ¡Pero jamás volviste! ―sus filosos dientes estaban listos―. Ahora... ¡Ahora el momento de mi venganza! ―se hace hacia atrás para lanzar su mandíbula contra mi cuello.

Tal vez diría que este es mi fin, pero algo que él olvido es que un zorro es escurridizo y aprovecha cada pequeño segundo para salirse con la suya. Lo mismo hice yo, al hacerse para atrás movió un poco sus patas traseras dejándome con fuerza para retirar las mías y lanzarle de una patada en el estómago contra la pared del edificio destruido.

Estaba débil, estaba llorando, no podía moverse. No le quedaban fuerzas para ello. Solamente repetía "Mi amigo" en voz baja y desesperado. Alza la vista viendo mi semblante serio, casi despiadado.

―Vamos... ―me dice con una sonrisa burlona―. Mátame... para eso naciste... y para eso morirás. ―su sonrisa me desafiaba a hacerlo, con un zarpazo podría rasgarle el pecho hasta llegarle al corazón y hacer que dejara de latir, o clavarle mis garras en su cabeza herida que probablemente de introducirían en el cerebro al instante.

Pero no. No lo hice. No hice ninguna de esas tentabas formas de matarlo. Porque yo no mato a las personas como hace él. Matarlo a él me rebajaría a su nivel y soy mejor. Cierro una de mis patas en un puño y con toda la fuerza que me queda después de la caída, le doy un golpe en el rostro dejándolo inconsciente.


***

Los tres animales atacaban a cada grupo armado de invasores que se encontraban en el camino, saliendo victoriosos. Hace una hora que habían dejado a Nick atrás para que peleara con Thomas pero no tenían la seguridad de que siguiera vivo. Judy aún tenía esperanza. Que Nick seguía vivo y que podrían ser felices en el futuro.

―¡Sigan disparando! ―gritó uno de los invasores al frente.

Jack y Skye arremetían con todo neutralizando a cada uno de los invasores. Pero Judy estaba escondida, no podía pelear. No podía dejar de pensar en cómo estará Nick. No podría soportar la idea de que él...

―¡Judy! ―grita Jack―. ¡Ayúdanos! ¡Te necesitamos!

―Yo... yo no... puedo... ―susurró con miedo―. No puedo con esto.

Jack le dio una señal a Skye para que se agachara y recargara su arma.

―Oye, mírame. ―le dice haciendo que lo vea―. Estas preocupada por Nick, yo también pero sé que él estará bien. ¿Sabes por qué? ―ella niega lentamente―. Porque él jamás se ha dejado ganar por nadie, ni por mí. Habíamos hecho una apuesta para ver quién te conquistaba antes y hasta en eso él me ganó. ―la coneja rio ante tal declaración. "Que buen momento." Agradeció el de rayas dentro de si―. Y nosotros somos su motivación para que él vuelva. ¿Si? Él va a volver y si no ve a ninguno de los dos, su mundo se destruiría. Así que toma tu arma, levántate y ayúdanos a acabar con estos tipos. ―aunque los disparos eran sonoros, parecía que las palabras de Jack habían callado todo.

Ahora ella se sentía segura de sí misma, fuerte y valiente. Le dio una sonrisa alentadora a Jack y tomó su arma. Respiró tres veces y se levantó sobre el muro disparando en partes no comprometedoras a todos los que viera. Nadie le ganaba en puntería, nadie.


***

La ciudad era un campo de batalla. Algunos rebeldes combatían a los invasores pero al poco tiempo terminaban siendo asesinados o capturados. Demonios, ¿Cómo llegaré con ellos si hay invasores a cada tres pasos? Si se preguntan qué hice con Thomas, tranquilos, está muy bien guardado en un escondite que tengo en la comisaria y que, al parecer, sobrevivió a ese ataque.

Las tropas invasoras parecían jamás terminar. Esto será una guerra en todo el mundo si no la paramos aquí. Pero son demasiados, ¿Cómo detengo a un ejército?... Mmm... ¡Demonios! No puedo pensar si hélices de un helicóptero resuenan en mi cabeza.

Esperen... ¿Hélices de helicóptero?

Alzo la cabeza, admirando la maquina voladora que descendía lentamente sobre mí mientras que los que se encontraban dentro disparaban contra todos invasores, ganando gran parte y liberando a los capturados. Antes de que me aplastara, me aparto de debajo del helicóptero en un salto, gracias a una roca en medio camino, caigo de espaldas. Un equipo de animales sale de la maquina voladora revisando perímetros y asegurando el lugar en donde estaban.

Oh no... No me digas que uno de esos tipos se acerca a mí.

―Thomas Rustic. ―dice lentamente―. Me alegra encontrarnos. ―era un zorro―. Es una pena que tenga que matarte.

―¡Espera! ¡Espera! ―grito asustado―. ¡No soy Thomas!

―Sí, claro. Te hiciste pasar por el mejor policía de Zootopia, no me vas a engañar esta vez. ―sacó su arma para apuntarme―. Es una lástima, tus recursos hubieran sido utilizados de mejor manera pero decidiste usarlos para destruir. ―saca el seguro del arma.

―¡No soy Thomas! ¡Soy Nicholas Wilde! ―su dedo estaba listo para disparar. Yo solo cerré los ojos.

......... ¿Qué sucede? ¿Ya estoy muerto? No, aun escucho el alboroto a mí alrededor. No voy a abrir los ojos. No voy a abrir los ojos. No voy a...

―¿Nick? ―escucho que dice. Al fin entendió.

―Sí, sí, así es. Soy Nick Wilde, el mejor policía de Zootopia. ―balbuceo nerviosamente.

Su expresión se relaja y guarda el arma en su funda. Me ayuda a levantarme pero antes de que pudiera limpiarme o algo, el extraño zorro me abraza con fuerza dejándonos en una posición algo incomoda. Bueno, al menos, el incómodo soy yo porque no conozco a este tipo.

―Hijo. ―susurra en mi oreja―. Estas vivo.

Okey, demasiado por un día. Separo con fuerza al zorro desconocido mirándolo confundido. ¿Se ha golpeado al cabeza antes de venir o qué? Creo que me estaba confundiendo. Mi padre me abandonó apenas nací y nos dejó a mí y a mi madre a nuestra suerte.

―Bien, esto se hizo incómodo. Señor, creo que me está confundiendo. Yo no soy su hijo.

Hubiera dicho que sí si hubiera visto algo que nos hiciera ver igual pero no había mas similitud que la de la especie. Nada más. O al menos eso yo veo.

―Sé que no me reconoces pero realmente soy tu padre. ―¿Esto es Guerra de las Galaxias? "No Nick, yo soy tu padre." "¡Nooooooooo!" Bueno, al menos en mi mente había sonado gracioso―. Te pareces a tu madre en realidad, sacaste sus ojos y sus cejas. Eres todo un hombre.

―Señor, no lo conozco. Si realmente es mi padre, deme pruebas concretas de ello. ―me sonrió divertido. Llamó a uno de sus militares que llegó hasta nosotros con una carpeta, entregándosela al que está en frente mía que, supongo, es el general. Me extiende la carpeta abierta.

―Compruébalo tú mismo, hijo. ―tomo la carpeta que contiene unos papeles de algún examen.

"Norman Wilde: Tipo de sangre O+

Familia animal: Vulpina.

Nicholas Wilde: Tipo de sangre O-

Familia animal: Vulpina.

Relación/parentesco: Padre-hijo.

Los exámenes de sangre indican que el señor Norman Wilde es el padre de Nicholas Wilde."

Bien, me ha ganado. Cierro la carpeta de un golpe y lo miro aun desconfiado. ¿Cómo sé que no ha alterado estos resultados?

―Estarás preguntándote, ¿Alteré esos resultados? ―¿Pero cómo...? ―. La verdad es que no. Realmente soy tu padre, si quieres comprobarlo, muéstrame tu brazo izquierdo. ―con recelo, le extiendo mi brazo.

Él lo toma entre sus patas buscando algo, sonríe satisfecho y separa el pelaje lo suficiente para dejar ver mi piel. Justo donde tengo mi marca de nacimiento.

―Ahora mira esto. ―se alzó la ropa que le cubría el brazo izquierdo y se separó el pelaje en la misma zona, mostrando la misma marca de nacimiento que yo tengo―. Eres mi hijo, Nick, y estas vivo.

############################################

Hola hola! Bien, este es el capítulo antes de terminar la historia. Y subo los dos seguidos para terminar en un super capítulo largo la historia. En el anterior les pregunte sobre una secuela y lo hago aqui tambien. ¿Quieren una secuela de esta historia? Diganmelo en los coments.

PD: Este está recien salido del horno de las ideas. Creamen que es el mas largo que he escrito hasta ahora. Jeje.

Nos vemos.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro