Alisson POV.

- ¿Aspen estas bien? –me preguntó Kian preocupado-

No, claro que no lo estaba. No podía parar de dar vueltas por el balcón de su casa.

Desde que Kian había comenzado a contarme la historia de cómo nos conocimos mi mente comenzó a traerme recuerdos de aquella noche que había borrado completamente de mi memoria. Me sentía como cuando estas viendo una película y conoces al actor pero no puedes recordar en que otra película lo has visto antes, o como cuando estas en medio de un examen y sabes perfectamente en que lugar del libro esta la respuesta pero no puedes recordar la respuesta en si.

Tenía recuerdos inconexos de aquella noche que no lograba ordenarlos. Ahora me acordaba del momento en el que había visto a Kian y prácticamente me había tirado encima de él, pero me había olvidado de la discusión con el dueño de la fiesta, aunque sí recordaba el semblante de miedo de James y tenía una imagen borrosa de él gritando mientras corría en dirección opuesta a la nuestra.

Me acordaba de Kian y yo hablando en la entrada, y luego estaba el momento que nos quedamos mirándonos y el beso en la mano... cuando Kian llegó a esa parte me estremecí, no sabía si era por el tono de voz con el que lo había contado, como si estuviera recordando cada segundo de ese momento o porque de repente la viva imagen de nosotros apareció en mi mente junto con las fuertes ganas que tuve en ese momento de besarlo en los labios.

- Hey ¿Estas bien? –volvió a repetir Kian, acercándose a mi-

- Ehhh... eso creo, estoy empezando a recordar algunas cosas..

- ¿Como qué? -preguntó sonriendo-

- Solo voy a decirte que en un momento tus labios me recordaron a mi almohada por lo suave que eran y no voy a decir lo demás porque es humillante.

Kian lanzó una carcajada.

- Casi morimos y solo recuerdas eso, interesante.

Sonreí, pero luego fruncí el ceño.

- ¿Qué diablos me dio de beber James?

Kian negó con la cabeza antes de abrazarme.

- No se si quiero saberlo.

- Ahora entiendo como sabías mi nombre el primer día que hablamos.

- Era difícil de creer pero eras tú.

- El Kian del pasado no tuvo que haberse preocupado por si nos volveríamos a ver o no.

Kian se rió.

- Si el Kian del pasado tan solo hubiera sabido lo que le esperaba..

- ¿Y qué era lo que le esperaba exactamente? –pregunté sonriendo-

- Enamorarse irreversiblemente de la chica que pensó que no iba a volver a ver.

Sentí un cosquilló al escucharlo. Podía esperar que dijera "enamorarse locamente" o "enamorarse estúpidamente" ya que era lo que escuchaba a menudo en las películas, pero escuchar "irreversiblemente" me había sorprendido y había hecho que mi corazón latiera más fuerte.

Tiempo después me dieron ganas de buscar esa palabra en el diccionario, aunque ya sabía que significaba solo quería para saber que decía. Sonreí al leer:

Irreversible: que no puede volver a un estado o situación anterior, proceso en el que no se puede volver hacia atrás.

Y sonreí porque sabía que Kian había acertado. Nunca iba a volver a ser la misma persona que era antes de enamorarme de Kian Denovan y realmente creía que era imposible desenamorarme de él.

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Al otro día busqué con mi auto a Anne y a James para ir al instituto, James se había quedado a dormir en la casa de Anne y se lo veía de muy buen humor. De hecho, ambos estaban de buen humor y no paraban de cambiar la estación de radio.

- ¿Pueden dejar alguna canción? –protesté mientras conducía hacia el instituto-

James quien se suponía que estaba sentado en el asiento trasero (en realidad estaba entre medio de mi asiento y del asiento pasajero donde se sentaba Anne) me miró con el ceño fruncido.

- No es mi culpa si no me gusta ninguna de las canciones que están pasando y a Anne le gusten todas.

- ¡Deja esta! –se quejó Anne mientras bailaba al ritmo de Wiggle wiggle de Jason Derulo-

- No, es muy temprano para mover las caderas.

- Puedes escucharla en silencio sin tener que mover nada –le sugerí-

- ¿Cuál es la gracia de escuchar música si no puedo bailar?

- Mi amor, perdona pero a veces es mejor cuando no bailas –le dijo Anne bromeando-

- Tú no entiendes que no es que bailo mal, solo pretendo que bailo mal para que no vean como bailo realmente.

- ¿Y cómo bailas realmente? –le pregunté-

- Horrible, pero si pretendo que bailo peor de lo que bailo, estoy permitiendo que las personas se rían de mi porque estoy pretendiendo que bailo mal y no de mi bailando mal de verdad ¿entienden? Me hace sentir mejor.

Puse los ojos como platos al escuchar la lógica de mi amigo, Anne en cambio se rió.

- No te preocupes, para mi bailas perfecto sin importar lo que digan los demás o lo que tú mismo pienses.

Luego de escuchar la respuesta de Anne, James decidió dejar esa canción y hasta se permitió bailar un poco creyendo que ninguna de las dos lo veía cuando en realidad lo estábamos viendo por el espejo retrovisor y tratábamos de no reírnos.

- ¿Ha dicho algo más Sebastian? –le pregunté a Anne-

- No, solo que iba al instituto con Logan.

- ¿Qué creen que le pasará? –preguntó James-

- Planeo averiguarlo hoy –respondí-

Pero cuando llegamos al instituto encontramos a Logan en la entrada charlando con unos chicos de su equipo de lacrosse sin rastros de Sebastian por ningún lado. Se disculpó con sus amigos y se acercó a hablar con nosotros con el ceño fruncido.

- ¿Dónde esta Sebastian? –nos preguntó-

Anne me lanzó una mirada antes de contestar.

- Se supone que iba a venir contigo.

- ¿Qué? Él me dijo que lo traía Alisson, como siempre.

James lanzó un silbido.

- Golpe bajo.

- ¿Piensas que nos mintió para que no le insistiéramos con venir? –pregunté-

- ¿Por qué no querría venir? –preguntó Logan preocupado-

- Por los rumores –respondió Anne-

- Ya pasaron varios días de ello, y no es como si fuera el primer rumor que hay sobre Sebastian.

- Tenemos que ir a verlo –declaré mirando a Anne y luego a Logan- ¿Puedes venir?

- Ahora tengo una hora de entrenamiento al que tengo que asistir si o si, pero prometo que en cuanto salga iré a para su casa –respondió, saludando rápidamente antes de irse corriendo-

- ¿Qué? –preguntó Anne- ¿Nos escabulliremos de clases? ¿Haremos novillos*?

- ¿No quieres? Puedo ir sola..

- No, claro que quiero ¡Wow, ya estoy sintiendo la adrenalina!

Me preguntaba cuando había empezado a acostumbrarme a meterme en problemas. Desde que apreció Kian en mi vida, seguramente.

- Hey ¿Por qué yo no puedo participar en la acción? –preguntó James ofendido- Yo también soy amigo de Sebastian.

- Va a ser muy obvio si faltamos los tres, cuatro sumando a Sebastian. Llamarán a nuestras casas, sabes como es nuestro instituto. Además, Kian no entenderá nada cuando no vea a ninguno de nosotros en el instituto, le tienes que decir que fuimos a ver Sebastian.

James resopló pero asintió con la cabeza, luego acarició la mejilla de Anne.

- Luego llámame y cuéntame como les ha ido.

Anne le sonrió y se acercó para darle un corto beso que se terminó prologando e intensificando hasta que me aclaré la garganta al ver que no se separaban.

- ¿Por qué se despiden como si no fueran a verse por años? –pregunté- Iremos a la casa de Sebastian, no a otro continente por Dios.

James lanzó una carcajada.

- ¿Estas de mal humor porque no vas a poder ver a Kian?

- Claro que no –negué cruzándome de brazos- nosotros no somos como ustedes que no pueden separarse ni un segundo.

- Si, claro –contestó y luego retrocedió al ver que la entrada ya estaba vacía- si no me apuro voy a terminar llegando tarde y esa siempre es Alisson, no yo.

- ¿Qué tienes contra mi hoy?

- No me has dejado formar parte de su misión, heriste mis sentimientos. ¡Adios!

- ¿Misión? –le pregunté a Anne mientras subíamos al auto-

- Tiene que dejar de leer tantos libros –me respondió riendo-

- Eso es imposible de pedir –exclamé y arranqué el auto-

Estábamos a punto de salir del instituto cuando de repente nuestro director apareció en nuestro campo de visión y se paró en frente de la entrada con el ceño fruncido y una mano levantada para que parara el auto. Frené de repente ante la sorpresa y el corazón comenzó a latirme con fuerza.

- ¡Mierda! ¿Este hombre quiere que lo choque o qué?

- ¿Y por qué levanta la mano? –preguntó Anne boquiabierta- si se pone en frente del auto obviamente vamos a parar. Oh, por Dios. Mira su cara, va a matarnos.

- ¿Y si sigo conduciendo y le paso el auto por arriba?

- ¡Alisson! ¿Quieres matar a nuestro director?

- ¿Tal vez noquearlo?

- Si te sale mal y lo matas iremos a la cárcel –me dijo alarmada al ver que el director comenzaba a caminar hacia nuestro auto- no quiero ir a la cárcel tan joven. Ay ¿Qué foto de nosotras van a poner en la televisión cuando pasen en el noticiero que dos adolescentes mataron a su director? Espero que mi madre nos les de una vieja en donde tenía el flequillo recto porque estaba horrible.

- Me estas poniendo muy nerviosa Anne –murmuré sintiendo el sudor en mis manos-

- Bueno, por lo menos podemos decir que James estaba implicado ¿no? Irá a la cárcel con nosotras, tal vez Kian pueda pagar la fianza...

- ¡¿Qué están haciendo saliendo del instituto?! – nos gritó el director- ¡Aspen! Baje la ventanilla ya mismo.

Estuve a punto de no bajarla y acelerar, pero ya nos había visto. No teníamos escapatoria.

- Buenos días director.. –comencé pero su expresión me ordenaba que cerrara la boca-

- Aspen ¿Puede decirme por qué siempre que hay problemas esta usted implicada? ¿Qué le ha pasado este año? –luego miró dentro del auto- Me sorprende que no este el señor Denovan con usted, donde hay problemas siempre estan ustedes dos. ¿Esta en el maletero acaso? No me sorprendería –dijo escrutándome-

- Ehhh.. no..

- ¿Y usted quien es señorita? –le preguntó a Anne-

Anne estaba aterrada, pero eso pareció ofenderla y le contestó disgustada.

- ¿No sabe mi nombre?

- En este momento no puedo recordarlo –respondió el director, impaciente-

- ¿Por qué sabe perfectamente el nombre de las personas que viven causando problemas, como Aspen o Denovan? –me lanzó una mirada de disculpas antes de proseguir- ¿Y no de las que se portan excelentemente bien y sacan buenas notas, como yo? Me siento como esos famosos cuando los reconocen solo por las cosas malas que hicieron, como tomar drogas o emborracharse y no por las cosas buenas como, no se, ir a África a donar su dinero.

La miré sin poder creerlo. No entendía como ese ejemplo se relacionaba con que el director no podía recodar su nombre, pero me callé para no empeorar la situación.

- ¿Usted esta pensando en drogarse, señorita? –inquirió nuestro director asombrado-

- No, claro que no. Esta en mi top 5 de cosas que no haré, no se preocupe. El primer puesto es incendiar el instituto –dijo orgullosa, como si eso fuera a aliviar al director- después esta copiarme en un examen, rayarle el auto a una profesora..

La fulminé con la mirada y mi amiga se calló. El director volvió a su mirada sombría, sus labios formaban una fina línea y podía notar que estaba controlándose para no volver a gritarnos.

- Se ve que asistir a clases y no hacer novillos no esta en esa lista.

Anne hizo una mueca.

- No esta en mi top 5, pero alargaré la lista y la pondré en el top 10, no se preocupe.

El director se dirigió a mi esta vez.

- ¿Por qué se estaban yendo del instituto en vez de estar entrando a clases?

- Porque... me siento mal –respondí agarrándome rápidamente el estomago- realmente necesito volver a mi casa.

- ¿Se siente mal? –me cuestionó, entrecerrando los ojos- ¿Y por qué no va a la enfermería del instituto?

- No es que no me guste la enfermería del instituto pero.. yo tengo un problema con tomar pastillas, si son muy grandes no puedo tragarlas y siempre me dan pastillas grandes en la enfermería, me pongo nerviosa y siento que voy a morir asfixiada.

- ¿Y por qué necesita una acompañante? ¿No puede volver a su casa sola?

- Necesito saber que llegó bien a su casa –respondió Anne- y no me puede llamar mientras yo estoy en el instituto ya que tenemos que tener nuestros celulares apagados. ¿Cómo voy a saber si llego bien si no voy con ella?

El director parecía estar debatiendo si creernos o no. Finalmente miró su reloj y resopló.

- Ya he desperdiciado bastante tiempo con ustedes, así que será mejor que se vayan ya antes de que me arrepienta y llame a sus padres.

Suspiré aliviada.

- Muchísimas gracias director, no volverá a pasar –contesté y aceleré antes de que cambiara de opinión-

Cuando llegamos a la casa de Sebastian, lo llamamos a su celular pero no nos atendió.

- No contesta nuestros mensajes, ni siquiera atiende el teléfono. ¿Qué haremos? –preguntó Anne preocupada-

- No se.. podríamos bajar del auto y llamar a la puerta ¿no?

- ¿Por qué no se me ha ocurrido antes?

- James te ha acostumbrado a mandar mensajes en vez de tocar el timbre de su casa –le dije mientras me dirigía hacia la puerta de la casa de Sebastian-

- Es que no quiere que nadie toque el timbre de su casa hasta que no lo haya cambiado por el tema de Star Wars –respondió rodeando los ojos-

- ¿Por qué no me sorprende?

No supe decir cuantas veces tocamos la puerta hasta que Sebastian nos abrió. Tenía el pelo despeinado, los ojos somnolientos y llevaba solo unos jeans que podría jurar que se los había puesto recién.

- ¿Qué hacen aquí? –su voz sonaba ronca y parecía sorprendido-

- ¿Que qué hacemos aquí? –preguntó Anne mirándolo de arriba abajo- ¿Qué haces tú aquí? ¿Por qué no estas en el instituto? ¿Y por qué no has ido todos estos días?

Sebastian cerró los ojos por un momento y se apoyó contra la puerta.

- ¿Puedes callarte por un segundo? Tengo dolor de cabeza y no estas ayudando.

Entramos a su casa como si nada y Sebastian no tuvo otra opción que cerrar la puerta y dejarse caer en el sofa de la sala de estar.

- ¿Estas bien? –le pregunté con el ceño fruncido mientras me sentaba enfrente de él- estas hecho un asco ¿Recién te despiertas?

- Gracias, eso es lo que todo chico quiere escuchar. Si, recien me despierto.

- ¿Por qué nos has mentido hoy? Le has dicho a Logan que yo te llevaba al instituto mientras tú nos habías dicho a nosotras que ibas con él.

- No quiero hablar de eso.

- ¿Por qué no? Nosotras te podemos ayudar –le dijo Anne dulcemente- puedes hablar con nosotras, ya lo sabes.

- No quiero hablar con nadie sobre esto. En realidad, no tengo nada para decir.

Miré a Anne inquieta, Sebastian nunca se ponía así, siempre estaba dispuesto a hablar sobre lo que le pasaba y no se cerraba en si mismo.

- ¿Te sentirías más cómodo hablando con Logan? Él vendrá ahora en un—

- ¡No! ¿Logan vendrá a mi casa? Tienen que decirle que no lo haga –respondió alarmado-

- ¿Por qué?

Sebastian apartó la mirada sin contestar.

- Él estaba preocupado por ti –continué pero él me interrumpió-

- Quiero romper con él.

­- ¡¿Qué?! –exclamamos Anne y yo a la vez-

- Si, ya lo he decidido. Solo estoy esperando el momento indicado así que díganle que no venga.

Estaba segura que algo más le estaba pasando a Sebastian, no solo se podía notar tan solo con verlo si no que también podía notarlo por como actuaba. Aunque nunca antes mi mejor amigo había estado de novio, sabía que no era el tipo de chico que esperaba el momento indicado para romper con alguien. Sebastian sería honesto y le diría la verdad sin dar muchas vueltas. Algo me decía que él no estaba siendo honesto con nosotras en ese momento.

- ¿Se han peleado? -preguntó Anne- ¿Has conocido a otra persona?

- No y no. Solo... siento que estaría mejor estando solo.

- ¿De qué hablas? Si se nota lo feliz que eres estando al lado de él.

- ¿Es por el rumor que están diciendo de ti? –inquirí- estas muy raro desde ese día. Sebastian, todos sabemos que es solo un rumor estúpido.

- Ojalá fuera verdad –masculló frustrado-

- ¿Qué? No estas hablando en serio.

- Claro que hablo en serio –contestó mirándonos fijamente- desde que he escuchado ese rumor no puedo dejar de pensar ¿Por qué diablos no es verdad? ¿Por qué diablos no me he acostado con esas dos chicas? Todo sería más fácil si fuera heterosexual y estuviera con chicas. Estoy tan harto de ser yo mismo, estoy tan harto de ser quien soy. Y siempre enterré mis sentimientos para no pensar en ellos, pero ya no puedo con esto. Ya no quiero hablar con mis amigos de chicas pretendiendo estar interesado, ya no quiero estar con una chica por miedo que otras personas comiencen a dudar de mi, estoy tan harto de estar aterrado de que las otras personas no me acepten y de sentirme fuera de lugar, como si no perteneciera a ningún otro lugar.. luego conozco a este chico que es todo lo que me gustaría ser y todo lo que no soy, conozco a este chico que me hace sentir cosas que nunca nadie me hizo sentir y aunque actúo con seguridad me pregunto si en realidad no tendría que sentir las cosas que siento, si en realidad no debería sentirlas y él... él esta tan seguro y me odio. Me odio por no ser el chico que Logan se merece, él no se merece estar con alguien que no quiere decir que esta orgulloso de estar con él, no se merece que coquetee con otras chicas en frente de él y no se merece a alguien que oculte su relación. No valgo la pena y aún así él me sigue eligiendo. Esto esta tan mal, tan jodidamente mal.

Estaba tan conmocionada que no podía hablar. De repente la realidad me cayó como un balde de agua fría. En ese momento me di cuenta que Sebastian estaba luchando una batalla contra si mismo.

- Sebastian.. -la voz de Anne sonaba afligida- no tendrías que odiarte ¿Sabes todas las cualidades que tú tienes? En serio, ojala todas las personas fueran más como tú. Eres una de las mejores personas que conozco y amo, y no te lo digo porque eres mi mejor amigo. Sabes perfectamente que Logan te ama más que a nadie ¿Piensas que romper con él es la mejor opción? ¿No te parece que él se merece más que eso? ¿Que se merece saber por lo que estas pasando? Si, seguramente es doloroso para él verte con chicas pero ¿Piensas que él no sabe lo doloroso que es para ti no actuar como verdaderamente eres?

Le di la mano antes de hablar.

- Yo te amo, Anne te ama, James, Kian, Logan te aman, tus amigos de lacrosse te aman, tus padres te aman, creo que mi madre te ama más a ti que a mi. ¿Por qué te odias a ti mismo? Por Dios, Sebastian ser gay no es algo por lo que tienes que lamentarte, nosotros no te amamos por tu orientación sexual, tu orientación sexual solo una parte mínima de quien eres. Sinceramente no entiendo como hoy en día hacemos de algo tan complejo algo tan simple como decir que una persona es gay. Si, una persona puede ser homosexual pero una persona no solo es homosexual, es un conjunto de otras millones de cosas también. Reducimos a las personas a cosas como su sexualidad o si tienen una enfermedad, o su religión cuando en realidad eso no es lo que son las personas, las personas poseen cosas mucho más interesantes que su sexualidad y tú eres mucho más interesante que tu sexualidad, no dejes que eso te defina. Tampoco dejes que las otras personas te digan como vivir tu vida ni te influencien en no ser quien eres. Deja de pensar tanto en que dirán las otras personas y solo se tú mismo.

La charla continuó por horas y Anne y yo no pudimos evitar llorar un poco, nunca habíamos tenido una conversación así y el hecho de que Sebastian se pudiera descargar con nosotras y decirnos todo lo que pensaba me hacía feliz, también me hacía feliz haberlo podido ayudar porque cuando había empezado a hablar había temido que fuera demasiado tarde y que no nos escuchara ni recapacitara pero a medida que paso el tiempo pude ver como reflexionaba y como se sentía mejor. Logan apareció dos horas después y cuando Sebastian abrió la puerta y nos miró a todos su cara de confusión me hizo reir.

- ¿Qué diablos les pasa? ¿Por qué están llorando? ¿Estas bien? –le preguntó a Sebastian preocupado- trate de venir antes pero no pude escaparme del instituto y trate de llamarte pero--

Mi corazón dio un vuelco cuando Sebastian lo calló con un beso y no pude detener las lágrimas que cayeron por mis mejillas. Dios, estaba muy sensible

- Ahora estoy mejor.

*Hacer novillos: escaparse de clase.

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Espero que les haya gustado el capítulo. Muchísimas gracias a todas las personas que votan y comentan, leo todo y amo lo que me dicen <3