- ¡Te mataré... juro que lo haré si vuelves a desafiarme!

- Seria lo de menos.

-¿Que dices?

-Matarme seria lo de menos.

-A ver explicate, ¿hay algo peor que perder tu vida en mis manos?

-Si, y es vivir contigo. Tanto que me harías un favor si me mataras, pero eso no es lo que tu realmente deseas.

-¿Y que quiero yo? Dime. ¡que no ves que haces todo mal y tengo que estar al pendiente de ti, contesta, ¿que es lo que quiero?!

-Tu disfrutas lastimarme. Tu sacias tus sombras oscuras viéndome sufrir. Tu quieres que yo sangre ante ti y te sientes poderoso con mis lágrimas y súplicas. Tu quieres sentirte ante mi un ser superior.

-¿Y acaso no lo soy? Si lloras como bebé cuando te doy un golpe o cuando alzo mi voz...

- No, no lo eres. Eres débil, y tu frialdad te hace ver así. Eres un animal, e incluso peor... no eres humano, no eres inteligente, no sientes amor... tu no puedes compararte con nadie, no eres un dios en ningún aspecto.

-Aun osas desafiarme ¡quien te crees tu que eres! ¡Te matare a golpes!... ¡ven aquí!

-Me golpearás pero no me matarás, tu me necesitas, conmigo te crees fuerte, pero no lo eres. Conmigo tu puedes regocijarte de placer por el falso poder que sientes al maltratarme. Sin mi tu no serias nadie.

-¿Y que harás? A ver dime... ¿crees que te dejare salir de aquí?... ¿crees, además, que eres la única persona en el mundo que puede satisfacerme?... ¿te crees realmente tan importante? Ni tu culo puedes salvar de mi y me desafías hablando así... ¿de que te escondes? Ven, acércate, ven y alimenta mi ser y mi ego como te crees que lo haces.

-Mátame entonces si no planeas dejarme ir y ya que tanto has amenazado hacer... mátame, hazme ese regalo.

-Eres un descaro... luego dices que yo tengo oscuridad cuando eres tu quien me pide la muerte. Y lo haces todo el tiempo, sobretodo con tus acciones que me sacan de quicio, con tu presencia que me hace arder la sangre... eres insoportable y dices que yo tengo la culpa de golpearte cuando bien sabemos los dos que es tu merito el provocarme tan solo con existir... saber que respiras es suficiente para enojarme, y es tu culpa, tu maldita culpa. Pero no te iras de aquí, tienes que pagar por el asco que me da sentirte, por la vergüenza que me da el matrimonio contigo, por lo humillante de compartirte mi bolsillo y cada plato que comes. Tu eres irritante. Te mereces todo lo que hago, y creeme que es poco para ti.

- ¡Matame!

- ¡Sabes que lo haré si no dejas de molestarme! ¡cierra ya la puta boca de una vez!

-¡No lo haré! ¡Estoy harta de ti y he decidido ponerle fin, así que matame porque me iré de aquí!

-¡joder, que cierres la puta boca dije!

        …

-¿Lo ves? no me haz matado, sigo aquí. Tu solo das golpes...

- ¡y la sigues... ¿que rayos quieres?! …
¡mirame!…
¡levantate!…
¿suficiente ego, cariño? ¿te duele mi poder? ¿acaso te está haciendo poco daño mi puño débil?…
¡eres una mierda! ¡tu no sirves para nada, no vales ni para salvar lo que comes!…
¿quieres que te mate ahora así o lo dejamos para mas tarde?… ¿he? ¿que quieres?… ¡contestame!…
Estas manchando el piso...
Carajo, me causas repulsión...

              …

-¡puta callejera ¿donde crees que vas? Cierra ya esa puerta!… No me quieres creer ¿verdad? Te quitare la vida, oh si que lo haré, pero sera cuando yo lo decida que crees...

-Saldré ganando yo de las dos maneras: saliendo de aquí o matandome. ¿No lo entiendes? Seré libre de ti por fin.