Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Ivonne vuelve a atacar - Luna

Llevaba unos días tratando de hablar con el director, pero nunca lo encontraba. Esa mañana, como todas las anteriores lo primero que hizo al entrar al gran comedor fue ver hacia la mesa de Slytherin y sonreírle a Theo, él no demostraba demasiado, pero sabía que la había visto, su mirada pasó como si nada por el resto del lugar, pero algo la hizo volver a mirar la mesa de profesores y si allí estaba el director, Dumbledore, después de días de esperar verlo allí estaba, se sentó a desayunar, terminó antes que los demás y decidió esperar al director en la entrada de su oficina y después de esperar un rato él apareció ante ella.

─Señorita Lovegood buenos días, ¿puedo ayudarla en algo?

─Buenos días señor, si necesito hablar con usted.

─Bien en ese caso, acompáñeme ─dijo mientras la gárgola les daba paso a las escaleras, entraron a la oficina y Dumbledore le hizo una seña para que tomara asiento, mientras él ocupaba su lugar y esperó a que ella iniciara.

─Señor usted sabe que yo suelo tener sueños que se hacen realidad ─el anciano asintió con la cabeza─, bueno... hace unos días tuve uno sobre usted donde...

─Luna ─la interrumpió─, gracias por preocuparte por mí, pero ese es un futuro que no se puede cambiar, y lo sabes ─dijo con una sonrisa en su rostro, mirando su mano que estaba algo negra.

─Pero señor, tal vez usted ─la sonrisa de Dumbledore se amplió y Luna solo lo miró algo sorprendida.

─Eres una digna hija de tu madre y una verdadera bruja de la luna, aunque no me creas, tu nos vas a ayudar a todos... pero ya deja de preocuparte por mí, ya viví suficiente deja que sea yo quien me preocupe por ti... ¿tienes algo más que contarme? ─la mano de Luna fue inconscientemente a su antebrazo derecho, pero rápidamente negó con la cabeza─. Bien, creo que entonces nos veremos luego.

Luna no terminaba de entender a ese hombre, pero aunque le costara admitirlo, él tenía razón, no había nada que pudiera hacer para cambiar esa visión... y si lo pensaba tenía otras cosas por las que preocuparse, había notado la presencia de Mary y Nell cerca de los lugares y pasillos que ella solía tomar, eso no debería de ser raro... pero ella no podía dejar de sentirse extraña, tenía un presentimiento que la perturbaba, pero no quería decirle a nadie, no quería volver a preocupar a Neville y mucho menos a Theo, trataba de convencerse de que solo era impresión suya, quizás si les había tomado algo de miedo... quien sabía, puede que con él tiempo se le pasara.

Ya hacía dos meses que era la novia de Theo, seguían encontrándose como antes en diferentes lugares del colegio. Aunque Ivonne y sus amigas no habían vuelto a molestarla Luna seguía teniendo ese extraño presentimiento y ese día era más fuerte que nunca.

Desde que se levantó esa mañana sus sentidos estaban muy alertas, cada ruido o cosa a su alrededor la hacían girarse para ver que era y eso la estaba haciendo sentirse muy intranquila, así pasó la mañana y parte de su tarde, si le preguntaban no tenía la más mínima idea de lo que se había hablado durante las clases ese día.

Al salir de su última clase se sentía mareada, fue al baño, tenía que mojarse un poco la cara, escuchó que Ginny la llamaba pero no le hizo caso, ya la alcanzaría en el baño, pero al entrar se encontró con Ivonne y sus amigas... antes de que pudiera hacer algo la habían paralizado; escuchó un grito de Ginny y la puerta que se cerraba.

─Nell asegura esa puerta... por tu bien que la pelirroja no entre ─dijo Mary sin dejar de apuntar a Luna.

Ivonne se veía realmente furiosa y con un dejo de locura en la mirada, caminaba de un lado a otro sin despegar sus ojos del cuerpo paralizado de Luna, de repente sacó una navaja, la misma con la que le había cortado el brazo y se la pasó a Mary, quien la tomó y se acercó a Luna mientras Ivonne le lanzaba un hechizo silenciador.

─La verdad no quiero que tus inútiles gritos me interrumpan ─dijo, mientras Mary comenzaba a hacerle pequeños cortes a Luna─, lo hiciste bien, fingiendo que estás loca, que eres demasiado distraída chocando con él cada vez que podías... no sé cómo lo hiciste, pero de alguna forma te lo ganaste... eres una MALDITA, MALDITA, MALDITA ─de repente Ivonne le quitó la navaja a Mary y comenzó a cortar y golpear a Luna, mientras gritaba y reía como desquiciada, los cortes eran cada vez más grandes y profundos─. MALDITOS... TU Y ÉL... TRATARON DE BURLARSE DE MI, Y ESO ES ALGO QUE SE PAGA MUY CARO, NADIE SE BURLA DE MIIII ─gritó y soltó una risa estridente.

Luna sentía cada corte y como la sangre emanaba de ellos, escuchaba la risa y gritos de Ivonne y otra cosa... golpes, seguramente era Ginny tratando de entrar... todo le dolía, no podía moverse ni hablar, comenzó a sentirse mareada, estaba segura de que ya había perdido bastante sangre y sus ojos comenzaron a cerrarse, lo último que vió fueron dos siluetas acercándose a ella y apuntando a Ivonne con sus varitas...

─Hola mi Looney... despierta ─sus parpados pesaban, pero al abrir los ojos se encontró en un campo repleto de flores y delante de ella estaba su madre, vestida de blanco, con una hermosa sonrisa en su rostro; el cabello rubio suelto y adornado con aquellas pequeñas flores, como lo hacia ella cuando niña.

─¿Mamá... dónde estoy... morí?

─No amor, solo estas inconsciente ─dijo entre risas─, y aproveche para decirte algo importante, probablemente no lo recuerdes todo, pero en su momento lo harás... sé que amas a Theo, y él también te ama, como no tienes una idea ─esto dibujó una enorme sonrisa en el rostro de Luna─, hay algo que debes saber, él tiene poderes muy especiales, pero todavía no han terminado de despertar... cuando lo hagan y no falta demasiado para ello, pueden ser algo bueno, o algo muy malo...

─¿Qué quieres decir con eso?

─Luna ─una voz dulce sonó a su espalda y al girarse se encontró con una bella mujer de cabello negro y ondulado, con ojos celestes y una dulce sonrisa, también vestía de blanco y llevaba una pequeña flor enredada en su cabello─, tú haces feliz a Theo y eso le permitirá controlar todo ese poder... pero si a pesar de todo el poder y el dolor lo dominan...

─Eso sería terrible, solo tú podrás ayudarlo, él hará todo por ti... tienes la sabiduría de generaciones de brujas de la luna, esta todo en tu interior, solo debes dejarlo salir.

─Ahora debes irte, ya es tiempo de que despiertes... traten de ser felices ─una especie de neblina comenzó a inundarlo todo y Luna volvía a estar sola.

Luna abrió los ojos, tenía una extraña sensación, había soñado algo, algo importante, pero como de costumbre no lo recordaba... pero de repente el dolor devolvió su mente a la realidad, estaba en la enfermería, recordaba que Ivonne y Mary la atacaron, el movimiento de una sombra llamó su atención, era Theo que entraba, se lo veía muy preocupado, cerró los ojos y esperó a que se acercara, estuvo así un rato y nada, no se escuchaba nada, entreabrió los ojos y ya estaba delante de ella observando sus heridas, ¿Cómo era posible que fuera así de silencioso? una sonrisa se formó en su rostro al pensar en ello y no se aguantó más.

─¿Te vas a quedar ahí viendo? ─él extendió su mano y acarició la mejilla de Luna mientras intentaba sonreír, la chica puso su mano sobre la de él, en verdad estaba preocupado─, ¡qué cara! Cualquiera diría que es a ti a quien atacaron... ¿tan mal me veo que no puedes cambiar esa cara? ─Luna hizo un puchero y consiguió sacarle una sonrisa, él besó sus labios y susurró.

─Tu siempre estas hermosa ─la sonrisa desapareció de sus labios y siguió─, lo siento Luna, esto es mi culpa, si yo no ─Luna lo calló depositando uno de sus dedos sobre su boca...

─Esto no es tu culpa y no sé cómo... pero estoy segura que de no ser por ti, ahora estaría mucho peor ─él se estremeció─ no sé qué hiciste, pero lo que sea hoy me salvo ─Luna quitó su mano de la boca de Theo y lo besó─... gracias ─esto hizo sonreír al chico.

Al día siguiente Ivonne fue trasladada a San Mungo, sus heridas habían dejado de sangrar, pero no podían avanzar con ellas para cerrarlas. Ya no volvería al colegio, tanto ella como Mary fueron expulsadas y a Nell le permitieron quedarse con la advertencia de que si hacia algo a quien fuera también seria expulsada.

Luna se encontraba otra vez en la oficina del director, sus heridas ya habían sanado, la magia era genial, no tenía ni una marca, lo único que le quedaba era alguna que otra mancha verdosa de los moretones, que poco a poco desaparecían.

─Luna... ¿Por qué no me contaste lo que había pasado antes con Ivonne?

─No fue gran cosa, no tenía importancia...

─¿No tenía importancia? Luna tienes que preocuparte por ti también, no solo por los demás... ¿te das cuenta que Ivonne pudo haberte matado? de no ser por las señoritas Parkinson y Weasley... y lo que sea que él señor Nott, le haya hecho, aunque no lo admita.

─Lo sé todos me dicen lo mismo.

─Bueno, me alegro de que estés bien, y en verdad comienza a pensar en ti.

Todos tenían razón, tenía que pensar un poco más en ella, en su seguridad, Theo ya le había llamado la atención por eso, también Ginny, Neville, Hermione, Harry y ahora también Dumbledore... pero ella no sabía porque simplemente no podía... siempre había alguien con un problema más importante que el suyo. Seguía sintiendo que había algo importante que no recordaba, pero como su padre decía "a veces los narggles se llevan nuestras cosas y nos las devuelven cuando menos lo esperamos" quizás los narggles se llevaron su recuerdo y cuando menos lo pensara se lo devolverían.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro