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El círculo del juicio - Theo

Theo entró en su habitación y su mirada fue directo a la cama, más precisamente a la almohada de la izquierda, allí estaba, justo donde él lo había dejado hacía días... y como un tonto no lo había vuelto a tocar... tomó el diario de su madre, lo dio vuelta y lo abrió desde atrás, comenzó a pasar las hojas mientras caminaba de un lado a otro en la habitación.

¿Cómo había sido tan idiota?... bueno era entendible, demasiada información junta, cosas que había querido saber desde hacía mucho tiempo... era obvio que se le iban a pasar detalles. En realidad había estado tan atontado esos días por la preocupación que no había prestado mucha atención a nada.

Leía un hechizo tras otro, hasta que llegó a una página donde no había ningún hechizo o receta de poción...

El círculo del juicio.

Esto es más que un hechizo, extremadamente difícil de realizar y necesitaras a una de mis hermanas de la luna para poder hacerlo. Creemos que es lo que pueden utilizar para detener al señor tenebroso.

Hemos recopilado información durante mucho tiempo, y decidí que lo mejor sería ocultarla en un lugar seguro, y no hay lugar más seguro que mi hogar, es demasiada para escribirla toda aquí, pero te dejare una reseña para que puedas encontrar los libros. Con Amelia los hemos marcado, deben buscar cada dato, y juntar todo lo que necesiten para poder hacer el hechizo.

Necesitaran objetos que enlacen almas para que el círculo pueda abrirse. Y si esas almas fueron lastimadas por el ser al que quieren encerrar, mejor.

El círculo es un portal, a una dimensión vacía, donde no hay nada más que oscuridad, donde la magia no funciona y el tiempo se detiene, todas las partes del ser que entra se reúnen allí. Quien sea encerrado allí no podrá ser liberado a menos que se haga un círculo opuesto... con todo lo que ello implica.

Los libros terminaran de detallar todo... suerte con esto.

Theo pasó a la hoja siguiente y se encontró con un extraño código de letras y números. Sintió unos ojos sobre él, se detuvo y miró hacia la puerta de la habitación, allí estaba su rubia.

―¿Todo bien?

―Creo que esto va a ser un poco más difícil de lo que pensamos ―dijo acercándose a ella, la tomó de la mano y se encamino a la biblioteca, pero se encontró con Draco, Hermione y Harry esperándolo en el pasillo, les hizo una seña con la cabeza para que lo sigan, y no se hicieron rogar.

Abrió la puerta de la biblioteca y entró, el resto no se atrevió a hacerlo, había tantas torres de libros en el lugar, que en verdad daba la impresión que si tirabas una, todo caería en efecto domino aplastándolos.

―Lunaria trajo libros como para mantenerme ocupado bastante tiempo ―Theo sacó la varita de su bolsillo, la de Luna, con todo lo que había pasado todavía no se la había devuelto, la agitó y todos los libros que no estaban en los estantes se encogieron, y con otro movimiento de varita todos esos pequeños libros se acomodaron en el gran escritorio, volvió a mirar a los demás que lo observaban desde la puerta―. Pasen y tomen asiento ―todos obedecieron y esperaron en silencio a que Theo hablara―, bien, este libro ―levantó su mano izquierda, en la cual todavía sujetaba el libro azul, con uno de sus dedos dentro, marcando la página con el código de letras y números―, era el diario de mi madre, de un lado me cuenta un poco de su vida y del otro dejo hechizos, pociones y cosas que pueden ser útiles... desde que tu viniste Draco no había vuelto a tocar, y recién hoy caí en la cuenta de que mi madre había mencionado un plan que podría ayudarnos...

―¿A poco ahí dice como vencer a... el señor tenebroso? ―Harry lo miraba incrédulo como los demás.

―Casi... aquí dice dónde encontrar la información que necesitamos ―y sin decir más abrió el libro en la página que estaba señalando con su dedo y se lo tendió a Hermione que estaba sentada entre Harry y Draco, esta lo tomó y comenzó a leer―, Draco, tu madre sabia de esto, ella nos dio todas las pistas para que lleguemos hasta aquí.

―Pero... ¿Entonces porque nos hizo buscar en lugar de decirnos las cosas tal cual eran?

―Bueno, mi madre escondió toda la información y detalles aquí ―con sus manos señalo los estantes llenos de libros― y creo que tu madre quedo un poco de lado en el tema, cuando se comprometió y caso con tu padre... quizás por la relación de Lucius con el señor tenebroso, ella decidió no ahondar más en el tema para no arriesgar a los demás...

―Un momento, ¿en verdad piensan que podemos hacer esto? ―interrumpió Hermione algo seria―, estoy casi segura que en algún lado he leído sobre esto "el círculo del juicio" solo se ha usado una vez, y quien lo uso, fue la misma bruja que lo creo, por lo que se sabe era muy poderosa... si no me equivoco nadie más ha podido replicarlo...

―Yo he escuchado sobre eso ―la voz cantarina y serena de Luan hizo que todas las miradas se dirijan hacia ella, que ahora estaba en el mismo sillón que Theo había ocupado todos esos días, levantó las piernas y acomodo los pies sobre el asiento, cubriéndose un poco más con el sweater, y escondió sus manos dentro de las mangas del mismo―... mi madre me hablo sobre ese hechizo...hace mucho, mucho tiempo, vivió un mago oscuro que quería gobernar todo, las únicas que lograron enfrentarse a él fueron un grupo de brujas, una de ellas creo el círculo del juicio, necesitaba tres cosas para que funcionara, elementos que funcionaran de enlace con las almas, usaron varitas de personas a las que él había matado, tres brujas poderosas que pronunciaran el hechizo y lo más importante sangre del mago al que querían encerrar ―todos escuchaban atentos a la rubia sin despegar sus ojos de ella―, el hechizo funciono y el mago desapareció en aquel portal, junto con todo lo que lo ataba a la tierra... no es una historia conocida y todo mundo cree que es una leyenda, pero mi madre no lo creía así, ella dijo que la oscuridad volvería y ese hechizo tendría que volver a usarse durante una luna sangrienta, y la sangre de la luna diría las últimas palabras para que el hechizo funcione y la oscuridad abandone nuevamente nuestra tierra...

Ninguno decía nada era como si los narggles les hubieran robado las lenguas, sus ojos estaban fijos en la rubia que solo miraba el crepitar de las llamas en la chimenea.

Theo fue el primero en reaccionar, se llevó una mano a la cabeza.

―La próxima luna sangrienta... luna sangrienta es el nombre que las brujas le dan al eclipse lunar...

―¿No se supone que habrá uno más o menos en un mes? ―las miradas volvían a Hermione―, se supone que se verá en Inglaterra... iba a verlo con mis padres ―la chica inclino un poco la cabeza para evitar que vieran la tristeza en sus ojos.

―Si es así eso no nos deja mucho tiempo para prepararlo todo ―dijo Draco poniéndose de pie y acercándose a la chimenea.

―¿Creen que esto servirá, que pasa con los horrocruxes? ―Harry miró a Hermione, esperando una respuesta de su amiga.

―Se supone que el portal se los llevara también ―Theo señalo con el dedo la página en código donde Hermione todavía tenía abierto el libro―, tenemos que encontrar esos libros si queremos aclarar nuestras dudas sobre esto, aunque la verdad que no tengo ni idea de cómo resolver esos códigos.

―Es, un código de biblioteca muggle, tiene unas cuantas diferencias con los de las bibliotecas mágicas, si me dejas revisar tu biblioteca, estoy segura que no tardare mucho en encontrarlos todos.

―Siéntete como en tu casa.

Hermione se levantó de su lugar y comenzó a buscar entre los libros, algunos los sacaba y los volvía a guardar y otros se los pasaba al que estuviera más cerca en ese momento, después de casi tres horas buscando Hermione ya había recorrido toda la biblioteca y había sacado al menos cuarenta enormes libros. Ya con todos los libros a mano todos se dispusieron a leer.

Siendo cinco no les tomaría tanto tiempo, aunque era seguro que no terminarían todo en ese día, ya eran casi las cinco de la tarde cuando comenzaron, y después de algunas horas entró la elfina a la habitación a informarles que la cena estaba lista, a Theo no le gustó mucho la idea, quería terminar con eso lo antes posible, pero a Luna no le costó demasiado hacer que abandonara los libros.

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