Meses atrás...

—¡Dame la mano, he dicho! —Namjoon tomó a Jimin con brusquedad jalándolo a la cama.

El anciano llevaba varios días tumbado porque una extraña gripe le fue contagiada en uno de sus cruceros por el mundo. Y Jimin estaba cansado de fingir que lo quería a causa de su actitud nefasta. Apretando los labios se sentó a la par del anciano decrépito, quien le acarició el muslo con avidez y deseo.

—Eres mi esposo. ¿Cuando vamos a culminar nuestro amor?

—Cuando te recuperes.

—Quítate la ropa ahora mismo, no puedo esperar más. Llevamos dos meses casados y nunca me has entregado tu tesoro. ¿Por qué tan recatado?

—Nam, no voy a acostarme contigo. No en ese estado. —Jimin suspiró antes de mentir—. Te quiero, por eso lo haremos después.

—Entonces largo, no quiero verte.

Jimin salió de la habitación para reunirse con su padre quien lo esperaba en el recibidor. Al verlo lo abrazó al mismo tiempo que decía:

—¡No soporto a ese viejo! ¿Ya puedo irme con todo su dinero?

—No hijo, hace falta que firme estos documentos. —Apolo se apartó de Jimin mostrándole una carpeta negra.

—¿Los firma y me largo? ¡Entonces ve que si se recupera va a querer...

—¿Ha querido propasarse contigo?

—¡Pues soy su esposo, papá! ¡¿Qué esperas que haga?!

—Darte tiempo, se supone que lo tienes comiendo de tu mano. ¿O me equivoco?

—Ya está viejo y como todo hombre quiere placer. Desde la última vez que estuve con un cliente me prometiste que no volvería a suceder. Así que me largo.

—¡Jimin!

—¡¿Qué?!

—No puedes irte, espera a la última fase de nuestro plan.

—Bien, pero no esperes que vuelva dentro con ese tipo yo solo. ¡Me da tanto asco!

Apolo sonrió de lado acariciando la cabeza de su hijo.

—Tranquilo, Namjoon no va a tocarte. Déjamelo a mí.

Y así fue.

Esa misma tarde Apolo convenció a Namjoon de firmar unos documentos para repartir su herencia en caso de morir. Claramente todos sus bienes fueron entregados a Jimin, pero había una carta que el viejo escribió la cual decía que si su hijo adoptivo rechazaba sus bienes serían todos para Jimin, sin embargo esa carta Apolo la escondió para que el joven no se enterara de la última voluntad del anciano.

—Ese tal Jeon Jungkook. ¿Qué an rico es?

—Mucho, mis riquezas no se comparan con la de los Jeon. De todas maneras he logrado quitarles un porcentaje de las acciones gracias a la estúpida heredera Jeon.

—¿Sabe Namjoon? Me gusta la historia que me contó, esa en donde engaña a la mujer para quedarse con sus bienes. ¿Pero, porqué le quiere regresar las acciones al nuevo heredero?

—Para morir en Paz. Tal vez vaya al cielo si Jungkook acepta las acciones o si le doy la oportunidad de tenerlas.

Namjoon era supersticioso y Apolo aprovechó su momento de vulnerabilidad para hacerlo sufrir todavía más.

—Pues yo no creo que vaya al cielo, señor Montalbán.

—¿Por qué dices eso?

Apolo sacó de entre su chaqueta una jeringa con un líquido sospechoso que comenzó a administrar en el suero de Namjoon.

—Porque no voy a entregarle a Jeon Jungkook su última voluntad.

—¿¡Por qué cojones no lo harías!? Además no es como que me vaya a morir ya he mejorado bastante. ¡Quedas despedido!

—No señor, usted no me puede despedir porque usted es hombre muerto.

El líquido que inyectó en las venas de Namjoon comenzó a hacer de las suyas provocando que el corazón del anciano se acelerara de manera espontánea.

—¿Qué me inyectaste? —Namjoon se arrancó las vías rápidamente a medida que intentaba sentarse en la cama.

—Lo importante aquí es que mi medusa de ojos púrpura logró convencerte de cederle todos tus bienes...

—¿Medusa?

—Mi hijo, Jimin. —Apolo sonrió de oreja a oreja mientras que Namjoon se tocaba el pecho sintiendo que su corazón iba a estallar.

—Fui engañado...

—Una sopa de tu propio chocolate. ¿No dices que también engañaste a la señora Jeon al quitarle parte de su fortuna? Ahora morirás sabiendo lo que se siente.

—¡Te envío ella! ¿Cierto?

—Trabajo por mi cuenta.

—Hijo de...

Namjoon comenzó a convulsionar, escupiendo espuma por la boca y después murió.

Apolo salió de la habitación luciendo impecable, después le entregó a Jimin la carpeta y le dijo que la guardara en su habitación. La fecha de la firma de derechos también había sido modificada porque si las autoridades leían que fue firmada horas antes de la muerte del viejo sospecharían de Jimin y él tenía que continuar con su trabajo.

—¿Ya me puedo ir a suiza?

—No.

—¿Por qué papá?

—Hoy asistiremos a un funeral.

—¿Funeral? —cuestionó confundido.

—Namjoon Montalbán acaba de morir a causa del COVID. Nos ha caído como anillo al dedo. —Jimin abrió la boca sorprendido—. Finge tristeza al sepultarlo, yo enviaré a un médico para que dé fe y legalidad de su muerte.

Apolo caminó hacia la salida, Jimin corrió hacia él tomándolo del brazo.

—¡¿Lo mataste?! —cuestionó alarmado—. Acabo de salir de la habitación y estaba bien, se había recuperado. Además él no tenía COVID, él tenía una enfermedad viral que contrajo en el barco de...

—¿Me crees capaz de matarlo? —Apolo miró a Jimin directo a los ojos—. El anciano murió por las razones que te he dicho y si mencionas lo del barco y enfermedad viral el primer sospechoso de su muerte serás tú.

—Entonces sí lo mataste...

—Dijiste que te daba asco y que no querías regresar con él porque quiso propasarse contigo. ¿Miento?

—No...

—Entonces te hice un favor, ahora actúa sorprendido que enviaré a un médico de confianza para que declare su muerte.

—Júrame que es el último cliente, ya quiero salir de esto...

—No es momento para hablar de eso, pero claro. Habíamos quedado en algo y sigue en pie. Solo tenemos que finalizar esto.

—Bien.

Apolo sonrió y después salió de la casa dejando a Jimin luciendo nervioso. Él se sentó en las escaleras mordiéndose las uñas mientras esperaba a que regresara con un médico para dar finalización a ese agrio momento de su vida.

No tengo palabras para expresar lo que acabo de escribir...

Estoy releyendo la historia luego de 3 años de haberla escrito aldhkwlsk y estoy así de: ¿Yo escribí esto?😨😱