Oscuridad, fue lo último que recuerdo, antes de morir, sentí un olor putrido que se apoderó de mi naríz me resultó familiar sangre, que será un animal? O mejor aún una persona?. Me levanté aún con la oscuridad nublado mi vista, me tope con una puerta, la abrí y la luz comenzó a quemarme los ojos no podía ver por aquel resplandor de color rubí, una vez mis ojos se adaptaron ví un funeral, me acerque y Vi a mi madre llorando frente a la tumba. Me acerque a la lápida y una euforia insaciable me lleno, Marcus había muerto, no tenía ojos y parecía que le habían cortado la mandíbula podía ver cada uno de sus dientes. Sacudí a mi madre y al levantar la mirada le había pasado lo mismo.

Desperté, de manera normal y tranquila más feliz de lo común, que buen sueño.

.- Levántate, nos vamos-. La voz de Evan me saco de mis recuerdos.

Me vestí con una sudadera negra me puse aretes negros, y bajé. Los ignore a los tres, no me importaba nada más que hacer ese sueño realidad al salir me puse mis audífonos y escuché música hasta llegar a la universidad. Era gigante podría hacer un incendio y solo quemar los salones, se me asignó un compañero de cuarto, estaría aquí metida cada semana y los fines de semana iría a aguantar a mi madre y su estúpido esposo.

.- Si vas a entrar dilo, me molestan los observadores-. Dijo un chico de pelo negro y ojos de color azul rey.
.- No es tu problema, además tú eres quien observa pero puede que seas el observado -. Dije y entre a mi dormitorio.

Era una chica alegre y colorida si no estoy mal su nombre es Ana.

.- Disculpa tú eres Ana?-.
.- Ah? Si! Yo soy Ana te doy la bienvenida a tu nuevo hogar- se detuvo para observar me- hmm Michelle ¿Verdad?-.
.- si...-.

Desempaque y de repente el mismo chico de antes entro y se puso en la cama a mi lado.

.- Hey! Al menos saluda Zack-. Pronunció Ana al parecer molesta.
.- Ya la conozco, la observadora y observada-. Dijo y me dió una mirada vacía.
.- Tsk me tengo que ir adiós Ana -. Dije y salí hacia el patio principal, no sin un cuaderno y un lápiz.

Dibujé casi media hora hasta sentir a un muchacho pidiendo que lo dejarán tranquilo, alze la mirada y Vi a un chico de lentes con el pelo y el rostro mojado, bullyings los típicos de la escuela, me levanté enojada y le di un empujón al que lo tenía agarrado.

.- Hey que te pasa- se paró y me observó- Ash otra emo, que asco -. Me escupió.
.- Ja que divertido pensé que esto iba a ser aburrido pero veo que me equivoqué - me limpie y lo agarre del cuello- no te metas con mi gente a menos de que tengas bolas para defenderte -. Le di una patada en la entrepierna.

Se retorcía como un gusano en el suelo, el resto retrocedió Vi a cada uno de ellos. Me retire no sin antes amenazar.

.- No entres en las sombras, porque no sabes que puede aparecer de ella-.