Durante la tarde del 14 de febrero el doble negro se encontraba degustando el chocolate que había hecho el pelirrojo mientras miraban una comedia romántica por televisión, Copito yacía sobre las piernas de Chuuya descansado tranquilo mientras que el pelirrojo apoyaba su cabeza en el pecho del detective que le abrazaba.

-¿Estas seguro de que a ese borrego no le afectará el chocolate?- preguntó Dazai preocupado sobre el que tan bueno era darle chocolate a un borrego de seis meses, Chuuya arrugo el ceño.
-Mi Copito no es de estomago débil- dijo orgulloso mientras se llevaba un trocito de chocolate a la boca. Dazai suspiro rendido y simplemente beso la cabeza de su pareja, era una tarde increíblemente tranquila, no habían planeando algo  muy ostentoso para San Valentin, a pesar de los gustos lujosos de Chuuya este a veces simplemente prefería quedarse en casa y descansar debido a las largas jornadas de trabajo que tenia. Por su parte Dazai era el tipo de persona que le gustaba estar en casa.
-Hey Chuuya ¿y mi regalo?- cuestionó el castaño

Chuuya rechino los dientes molesto.

-Un día tranquilo es tu regalo cabron-

-Pero yo quiero un regalo mas grande- se quejo mientras sus largas manos  se escabullían a acariciar la pierna del mas bajo, Chuuya emitió algo parecido a un gruñido y alejo la mano de Dazai.

-No tengo ganas Dazai-

-Ah, pero yo puedo hacer que las tengas- debatió con voz cantarina tomando fácilmente al menor para apegarlo a su cuerpo, cabe decir que Copito salio huyendo cuando lo interrumpieron de su cómoda posición.
Chuuya chillo al sentir algo duro rozar su trasero y se sonrojo furiosamente.

-D-Dazai maldito…¡¿solo por cosas así ya estas duro?! ¡eres un precoz!-
El castaño solo atino a reírse y tomar en brazos al pelirrojo para llevarle a la habitación, sin embargo cuando Chuuya fue dejado en la cama la situación dio un giro, pues el mafioso empujo a Dazai con él y se puso rápidamente sobre este ejerciendo el control.
Dazai le miro entre divertido y confundido.

-Chibi, se supone que yo voy arriba- aclaro riéndose, Chuuya por su parte se quitó la camisa que llevaba puesta atrayendo de inmediato la atención de Dazai hacia su cuerpo.

-Si vamos a hacerlo, quiero ir arriba yo- demando sonriendo de lado imitando las sonrisitas de su pareja y se acerco a él a atacar sus labios. Los labios de ambos sabían sincronizarse a la perfección después de tantos besos compartidos, pero esta vez la situación era distinta pues era Chuuya quien controlaba el momento y lo demostraba succionando y mordiendo los labios de Dazai causando los suspiros y una que otra risilla del mas alto.

  Lentamente los besos comenzaron a dejar de ser suficientes y sus cuerpos comenzaban a pedir mas, Chuuya bajo sus labios al cuello vendado de Dazai y chasqueo la lengua molesto.
-Se que eres una momia, pero tus vendas me estorban-
      
Dazai negó lentamente.
-No, no me las voy a quitar -

-Si te las dejas te saldrá salpullido por el sudor- explico el menor pero Dazai hizo un mohín.

Chuuya no espero mas y solo le abrió la camisa a rayas que usaba para trabajar y comenzó a romper y retirar las vendas que cubrían el cuerpo de su novio.
Dazai solo le miraba atento sin perder detalle, quería evitar mirar su piel o provocaría que se levantar y se fuera olvidando su propia excitación.

Chuuya por el contrario abría las vendas del castaño exponiendo su lastimada piel. Cuando tuvo el pecho y brazos de Dazai libres se inclino a besar y lamer sus cicatrices, Dazai tuvo que morderse el labio para no suspirar, se debatía entre hacer suyo a Chuuya o abrazarlo por la ternura de sus gestos.

El pelirrojo se quito su propia camisa mirando como la mirada de Dazai viajaba directamente a sus pectorales, Chuuya soltó una risita.

-Anda, toca- le dijo riendo y rápidamente las manos del mas alto fueron a su pecho donde Dazai remarcaba sus marcados músculos con el dedo, Chuuya soltaba pequeños suspiros y se acerco nuevamente al castaño a besarlo mientras este tan solo seguía lo suyo.
De pronto los labios de Dazai se posaron sobre sus pezones y los lamió con suavidad, Chuuya se estremecía ante la lengua del castaño y sintió como las manos de este viajaban a su pantalón de pijama, Chuuya negó con la cabeza y alejo las manos del castaño.

-No, no, hoy mando yo- le anuncio con picardía, de pronto Dazai ya se encontraba bajo el mafioso y este atacaba su cuello lentamente para provocarle.
Sigilosamente la hebilla del pantalón del castaño fue soltada y Chuuya metió sus manos ansiosas dentro acariciando las caderas y posteriormente pasando su mano descaradamente por el pene del detective.

Dazai no pudo evitar soltar un gemido por la sorpresa y despuésse cubrió la cara avergonzado, le había agarrado con la guardia baja.

Chuuya se relamió los labios riendo.
-¿ahora te avergüenzas, Da-zai?~- lamió su estómago mirándole con sus bellos ojos azules dilatados y brillosos por la lujuria.

Dazai contuvo la respiración y solto el aire contenido en un suspiro placentero.
-Chuuya…hazme un favor y chupalo- suplicó mirandole fijamente, el pelirrojo asintió sin pudor y bajo la ropa interior de su pareja, Dazai no tenia un tamaño que alardear pero tampoco era pequeño y eso a Chuuya le gustaba si de sexo oral se trataba.

Tomo del cajón de la mesa de dormir su lubricante sabor uva y lo regó sobre el miembro del castaño para hacerse mas fácil el trabajo, se hizo sus rebeldes mechones hacia atrás de las orejas y se inclinó a lamer el miembro erecto del castaño. Dazai jadeo al sentir los húmedos labios rodear su pene, era una sensación tan cálida que sentía que podría venirse en ese momento, Chuuya había mejorado mucho con los años.

El pelirrojo comenzaba por lamer la base suavemente, le gustaba dejar la cereza para el final. Después paso a lamer la mitad del tronco y finalmente la punta donde depósito besos e hizo pequeñas succiones  cuyo sonido azotaba en los oídos del más alto.

El sabor no era nada del otro mundo para él, salado, de viscosa consistencia pero ya se había acostumbrado e incluso, llegaba a gustarle.

Dazai por su parte, jadeaba y apretaba los cabellos del menor, Chuuya hacia los mejores orales y no lo decía solo porque fuera su pareja. Realmente eran los mejores.

Alrededor de su vida se había acostado con muchas mujeres y ninguna lo hacia como Chuuya. Al lado del pelirrojo tocaba el cielo y veía las estrellas.

Repentinamente dejo de sentir la lengua del mafioso sobre su pene y le miro con reclamo, solo para descubrir que Chuuya había puesto lubricante en sus dedos y sobre la entrada del castaño y comenzó introduciendo el dedo medio.

Dazai apretó la sabana y gimio. Siempre sentía extraño ser el que recibía, era placentero, si, pero él no solía ser el que recibía así que su recto no estaba acostumbrado a la intromisión. Chuuya lentamente movía sus dedos estimulando y dilatando el lugar donde mas tarde estaría su pene.

Dos dedos ahora eran los que lo dilataban a modo de tijeras y el detective ya no se podía callar. Sus ahora, altos gemidos resonaban por el cuarto demostrando que amaba lo que el menor hacia con sus dedos.

Las  caderas de Dazai se movían por instinto para que los dedos del mafioso entraran mas profundo en él.
Chuuya como acto de rebeldía saco sus dedos justo cuando parecía que Dazai llegaba al éxtasis. Dazai rechino los dientes y chasqueo la lengua en desaprobación.

-Maldición ¡¿Por qué paras?!- cuestionó avergonzado y excitado, estaba disfrutando realmente los dedos de su novio, ¿por qué se había detenido?

Sin embargo, Chuuya libero de entre su ropa su ya necesitada ereccion y la frotó sobre la entrada de su pareja, Dazai jadeo y araño las caderas de Chuuya.

-Hazlo…no me hagas esperar- le dijo susurrando en su oído de forma suave y lo abrazo para ocultar su rostro. Chuuya  asintió y lamió el lóbulo de la oreja del castaño causando que gimiera. Seguido de eso se introdujo lentamente en el castaño  escuchando  como Dazai, no acostumbrado al contacto gritaba entre adolorido y dejándose llevar por el placer. Chuuya se detuvo y lo beso suavemente.

-Tranquilo cariño….solo respira y relajate- le aconsejo acariciando su mejilla con dulzura. Dazai no evito sentirse amado y querido por su precioso pelirrojo, tomó la mano de Chuuya y abrió sus castaños ojos.
-Sigue…necesito mas…por favor Chuuya- el mafioso solo asintió y se introdujo completamente dentro de su novio para después comenzar a embestirlo suavemente.

Con cada embestida los gemidos y gritos del castaño  inundaban la habitación. Dazai sudaba disfrutando la deliciosa sensación que le transmitía el pene de Chuuya al abrirse paso sobre sus paredes y golpear aquel lugar que lo hacia incluso sollozar de placer.
Se sentía tan amado, tan deseado y tan sumiso que no podía soportar todo ese placer en su cuerpo, tomo su pene y comenzó  a mover este de arriba hacia abajo logrando liberar todo ese placer.

Chuuya le miro y creyó que debía tomar una foto, el cabello de Dazai era todo un desastre de rizos castaños, de la comisura de su boca escapaba saliva y las piernas del castaño estaban abiertas dejando que recibiera el mayor número de embestidas posibles para sentir aun más esa placentera sensación.

El mafioso gruño y repentinamente las embestidas pasaron de duras a salvajes, ya no había nada de cuidado a no lastimar al detective. De alguna forma se lo merecía, también Dazai solía volverse poco amable en aquellos momentos así que ese día era la revancha de Chuuya.

Después de varios minutos Dazai llego al limite viniendose y manchando su abdomen de su espeso semen, suspiro aliviado y dejo que Chuuya diera las embestidas finales hasta que este se corrió dentro de el.
El mafioso también suspiro al venirse y lo beso dejando que su esencia se quedara dentro de el detective.  Se besaron un tiempo hasta que el orgasmo de ambos paso.

-Estuviste increíble- logró decir Dazai tomando aire para controlar su agitada respiración.

Chuuya se río y beso su frente.
-Me gusta ser el de arriba, tu cara cuando te vienes…podria hacer un poema sobre ella-
Dazai se río y le pegó suavemente en el hombro.

-Guardate los poemas para nuestro aniversario lindo- río suavemente y tomo la mano del pelirrojo -te amo-

Chuuya se sonrojo y después mostró esa boba sonrisa que a pesar de los años no desaparecía.
-También te amo Osamu-

Vaya, eso fue largo XD aquí esta el lemmon que prometí, es la primera vez que lo escribo yaoi así que espero les guste~~

Muchas gracias por apoyar esta historia y como pueden ver estrenamos portada.
Gracias a soraeucliffe por la portada, fue un gesto muy lindo de tu parte 🤗😘 disfruten el capítulo.

Actualización 2024
Capítulo corregido y revisado!
No había mucho que corregir, solo algunos acentos y palabras que no quedaban. Esta decente este capítulo, creo que es porque lo escribí ya un poco mayor jiji.