Pov Sky

— Llegaron por quienes lloraban — dije al entrar a la camioneta después de dejar estacionado mi coche una cuadra delante junto al de Fer.

Observe a cada uno, Michael y Rick estaban vestidos igual que Fernando, solo que ellos tenían la camisa de otro color al igual que sus zapatos. Mariana llevaba un vestuario casi idéntico al mío, con la diferencia de que este era azul platinado, manga larga y tenia un lazo amarrado en la cintura.

Si Mariana y yo parecíamos prostitutas... Elizabeth nos ganaba por mucho.

Ella llevaba un vestido blanco que le dejaba corta la imaginación a cualquiera que le vea, unas botas grises que le llegaban hasta arriba de la rodilla, un bolso y una chaqueta jean.

— Al parecer te fue fácil adaptarte al vestuario — dije molestándola y mirando como los chicos le miraban los senos que querían salir del pequeño y ajustado vestido. Mariana soltó una risita y Elizabeth nos miró mal.

— Cállate, solo hago mi trabajo — dijo y reí.

— ¿Y cuánto cobras?.-pregunté alzando una ceja.

Ella se iba a lanzar contra mi, pero los chicos la agarraron y antes de poder soltarse llegó el jefe.

— ¿Hay algún problema?.-preguntó mirándonos a ambas.

— Ninguno señor — dijimos al unísono para después mirarnos mal.

— Bueno, entonces empecemos — dijo y se sentó frente a un computador que hay en la camioneta — El es Miller Guinnes — dijo mostrando una foto de un hombre flacucho, con muchos tatuajes, rubio y de ojos azules — además de ser un asesino es un adicto a la hierva, por lo que debo aclararles que solo consume solo marihuana — habla mientras nos miraba a cada uno — Lo que necesito es que lo atrapen y vayan a su habitación, esta en la parte trasera de la zona VIP, allí se encuentra un rehén que planea asesinar mañana en la mañana, solo sabemos que se llama Kalan, ahora agentes Morgan, Esposito y Torner, hora de la acción, Agentes Wood y Dender a ustedes los necesito aquí hasta abrir toda la seguridad sin problema — culminó, Elizabeth y Rick suspiraron, ellos querían entrar.

— Si jefe — dijimos todos.

Mariana, Michael, Fernando y yo bajamos de la camioneta, claramente después de prepararnos con armas, cloroformo, balas y todo eso bien escondido entre la ropa y la cartera, también nos pusieron un micrófono para escuchar las ordenes de los que quedaran en la camioneta. 

Llegó la hora, diosito estoy en tus manos.

— Espero poder emborracharme al terminar la misión — dijo Mariana mirando el lugar.

— Después de terminar pueden hacer lo que se les apetezca, ahora en marcha — dijo el jefe por medio del auricular.

— S..si señor — tartamudeó ella recordando que el jefe nos podía escuchar.

— Buenas noches señoritas — dijo el guardia después de mirarnos perversamente de arriba a abajo — vienen solas? — preguntó.

— Jajaja ¡Obvio no bobito!.-dije con voz chillona y riendo como retrasada.

—  Venimos con nuestras parejas jiji — esta vez lo dijo Mariana con la voz super fina y con la risita estúpida al final.

— ¿Tienen reservaciones? — preguntó esta vez mirando a los chicos a nuestro lado.

— Torner, reserva al nombre de Justin Wester, Morgan reservas al nombre de Daniel Ross.

— Si, nosotros tenemos reservación al nombre de Justin Wester — habló Michael.

— Y nosotros al de Daniel Ross — dijo esta vez Fer.

— Aquí están — dijo el guardia — pueden pasar — dijo y entramos.

Si por fuera era grande, por dentro era aun más grande.

— ¿Dónde esta Miller? — pregunté.

— En la zona del final, necesito que una de las dos llame su atención, el querrá llevársela a la cama, y el resto debe seguirlo.

— ¿Tú o yo?.-preguntó Mariana.

— ¿Piedra, papel o tijera? — pregunté y ella asintió— Uno.. Dos.. ¡Tres!— dije y saque piedra... Ella sacó papel— ¡Carajo! 

— Al ataque — dijo Fer burlón, le saque el dedo del centro y camine hasta el final.

Ahí se encontraba Miller Guinnes, estaba sentado en un sofá con muchos hombres mirando a las chicas que bailaban fuera del cordón rojo que los separaba de los demás. Me puse frente a él pero obviamente con las demás para disimular, empecé a bailar y justo sonó "Mueve" de Abraham Mateo y Lali. Mientras bailaba observe donde estaba Miller, lo encontré mirándome, le guiñe un ojo y este sonrío, se levantó y se acerco a mi.

Me agarro de la cintura y empezó a bailar conmigo, de la nada empezó a repartir besos en mi cuello. Me gire para quedar frente a el y lo besé, si lo se "Iug" pero ¿Qué mas toca?. Me separe de él y acerque mi boca a su oído.

— ¿Te parece ir a un lugar mas privado guapo? — le pregunté en un susurro sexy y el apretó mas su agarre mientras asentía.

Nos adentramos por un pasillo oscuro que daba a unas escaleras, al subir llegamos a la zona VIP, este me guío hasta allí y dio vuelta en la pared de enfrente, había una puerta, la abrió y me di cuenta que era su habitación, en la esquina se encontraba el chico que mataría, Kalan.

Lo empuje en la cama y me le trepe encima, deje mi cartera a mi lado y empecé a besarlo ferozmente mientras este pasaba sus asquerosas y flacuchas manos por mi espalda para llegar a mi culo y apretarlo, gemí falsamente en sus labio y en eso tocaron la puerta, gracias al cielo.

El gruño y me hizo a un lado para levantarse, saque mi pistola de mi bota y mire al rehén, este abrió los ojos como platos, yo le hice seña de que no haga nada y este asintió.

-¿Quién es?.-pregunto detrás de la puerta mientras yo me acercaba a él y lo acariciaba mientras dejaba besos en su cuello, sin dejarlo darse vuelta le quite la chaqueta en la que cargaba un arma.

— ¡Soy yo señor! — escuche que dijeron, era la voz de Michael.

— ¿Qué demonios quieres?.-preguntó este disfrutando de mis caricias.

— Solo abre imbécil — dije apuntándole con mi pistola en la cabeza mientras sacaba la navaja y se la ponía en el cuello.

— ¡Mierda! — exclamó y lo vi palidecer.

El abrió y entraron los chicos. Mariana le coloco las esposas con los brazos en su espalda mientras los chicos desataban a Kalan, se veían sudados y algo agitados.

— No jodas ¡¿Tuvieron acción?!.-pregunté indignada.

— Todos los guardias mientras Elizabeth y Rick nos abrían las puertas — dijo Mariana.

— Podemos tener acción los tres si me sueltan — dijo Miller mirándonos a ambas, golpeamos su cabeza al mismo tiempo y este se quejo.

— ¿Vamos? — pregunté mientras me acercaba a agarrar mi cartera.

— Vamos — hablo Fer agarrando a Kalan con cuidado.

Salimos de la habitación y nos dimos cuenta que no podemos salir por donde entramos.

— Jefe, tenemos un problema — dijo Michael.

— ¿Qué sucede? — preguntó

— ¿Por dónde salimos? — preguntó esta vez Fer.

— Por la ventana de la habitación de Miller, pero solo él y uno de ustedes, el resto puede salir por la puerta.

— ¡Yo no!— exclamamos todos al unísono excepto Fer.

— Joder — se quejó y regresó a la habitación.

Nosotros seguimos nuestro camino con total tranquilidad hasta la zona donde estaba toda la gente divirtiéndose, en eso vi a una chica alta de cabello rubio, que al darse la vuelta me miró y yo palidecí, era Monique... Y se acercaba a mi.

— Jodida mierda, chicos Monique se acerca — dije, ellos sabían que era mi mejor amiga.

— Corre, te cubro — dijo y salí corriendo.

Me subí a la camioneta y suspiré.

— ¿Qué paso?.-pregunto mi tío que estaba sentado a lado de Fer y Miller.

— Monique — fue mi única palabra, mi tío palideció.

— ¿Te vio? — preguntó.

 — No lo se joder, no lo se — dije y mire mi reloj, las 3:30 am — me voy, mañana hay instituto — dije y me despedí de ambos.

Camine hasta mi coche y subí, lo encendí y arranque, todo el camino tuve una sola duda en mi cabeza...

¿Me vio?