Capitulo 25: La trajedia 1/2
Danila.
Matthew no dejaba de besarme mientras se hundía de nuevo en mi, acariciaba cada parte de mi cuerpo con tanta delicadeza, como si tratara de evitar que me rompiera al igual que una muñeca de porcelana. Scarlet estaba dormida, Miranda seguía en sus "viajes" y sus "reuniones" lo que hacía que llegara demasiado tarde.
Matt y yo volvimos a nuestra "relación" ya que no sabía que era realmente, pero siempre tratábamos de hacer el amor cada vez que podíamos, está era una de esas veces.
-Te extrañe tanto.-volvió a embestirme.-Pensaba en ti todos los días.
Gemi.-Ah, yo igual...soñaba con volver a estar contigo.
-Te fuiste.-chupo mi cuello.
-Era...nece.....necesario. ¡Ah! ¡Matt!.-arañe su espalda, nuestros cuerpos sudorosos por el calor que emanabamos.
No escuchábamos más que nuestros gemidos, y nuestros cuerpos chocar, tal vez debimos prestar más atención.
-Es hermosa.-dijo mientras miraba a Scarlet dormir.
Después de hacer el amor, nos bañamos y luego de ponernos algo cómodo, fuimos al cuarto de Scarlet.
-Me alegra haber venido.-lo abrace y el a mi.
-Te extrañe demasiado, pensé en ir a buscarte pero tenía miedo de que no quisieras saber nada más de mi.
-Yo pensé que tú te habías divorciado de mi hermana y que tal vez me odiabas por irme sin despedirme de ti.
-Jamás podría odiarte.-dio un beso en mi cabeza.-¿Te casaste o vives con tu pareja en unión libre?
-No tengo pareja, ni marido ¿Por qué lo dices?
-Pues tu hija.-sonreí.
-¿Aún tienes la carta que te deje?
-La leo todos los días, cada momento que tengo libre.
-¿Recuerdas la parte de quiero que sepas que me llevo algo de ti, que siempre me hará recordarte?.-asintió.-Antes de irme descubrí que estaba embarazada.-su expresión fue de sorpresa para después pasar a felicidad.
-Entonces ella....
-Es tu hija Matthew.-unió nuestros labios en un tierno beso.
-Nuestra hija.
-Así es amor, tuya y mía.-sonrío.
-¿Interrumpo su reunión familiar?
-Miranda...-la mire.
-¿Te acostaste con mi marido?.-no escuchamos cuando había entrado a la casa, y mucho menos cuando entro a la habitación.-Llego a mi casa, primero escucho ruidos en tu baño, luego los veo a los dos aquí, besándose y me entero que tuviste una hija de Matthew.
-Te lo puedo explicar.
-Eres una zorra.
-No eres la indicada para decirme eso.
-Ahora tú me juzgaras a mi, yo no le quite el marido a nadie.
-Fue mi culpa, yo seduje a tu hermana, yo la buscaba cuando tú no estabas.
El culpable soy yo.
-No, los culpables son los dos, ¡Ustedes me traicionaron!
-¿Y tú a mí no? Yo te aseguro que ninguna vez te fui infiel en todo nuestro matrimonio, pero tú, tú fuiste la primera en engañarme, por esa razón te deje de amar.
-¡Tú nunca estabas para mí! Primero era tu trabajo, quería sentirme amada.
-Sabes que tenía mucho trabajo y debía aprovecharlo, pero después cuando te buscaba tú eras la que se apartaba.
-Porque encontré a alguien más, que me hace sentir deseada.
-¡Entonces dame el divorcio!
-Nunca y menos ahora que sé que te metiste con mi hermana.
-Miranda por favor, compréndeme. No quería perderte como hermana.
-Pues lo has hecho, quiero que te vayas y no vuelvas jamás.
-Perdóname.
-¡Vete de mi casa!
-No tienes derecho a correrla.
-Tu ni te metas Matthew.
-Me meto porque amo a Danila y no podrás separarnos.
-Esta bien, me iré. Pero quiero que sepas si alguna vez me necesitas estaré ahí para ti.-camine a mi habitación, saque una maleta y comencé a meter mi ropa, álbumes, cosas importantes, estoy segura que a esta casa no volveré.
-No puedes volver a dejarme.-entro a mi habitación, tome mi celular y pedí un taxi.
-Regresare a San Francisco, espero que esto se calme.-saque una libreta y anote mi dirección.-Se que no te dejará ir tras de mí, pero aquí tienes la dirección de donde vivo, para que vayas y puedas ver a Scarlet.
-¿No quieres formar una familia conmigo?.-lo abrace.
-Claro que si. Te estaré esperando.-sonrío.-Ahora debo irme.
-Te prometo que iré en cuanto pueda.-volví a besarlo como si fuera la ultima vez, aunque sabía que no sería así ya que nos volveríamos a ver.
Tome mi bolso, camine a la habitación de Scarlet, Matt bajo mi maleta y la dejo junto a la puerta, intente abrir la puerta pero estaba cerrada, mi niña comenzó a llorar, ¿Miranda le está haciendo daño? Comencé a desesperarme, peleaba con la perilla de la puerta para poder entrar.
-¿Qué sucede?
-No se abre.
-Miranda la cerró, tengo las llaves en mi despacho, ahora vuelvo.
En el momento que Matt bajo Miranda ya lo esperaba, a él también lo encerró en su despacho, subió las escaleras para verme despertada por entrar.
-¿Qué esperas para irte?
-No me iré sin mi hija.
-Mi sobrina no se irá contigo, no mereces ser su madre.
-Es mi hija Miranda, dame la llave.
-Su madre debería ser yo ¡No tu!
-Lo hubieras pensado antes de engañar a tu marido.
-Eso no importa, con o sin Matthew yo jamás podré ser madre.
-¿Eres estéril?
-Lo peor es que lo deseaba con toda mi alma, y ahora tú me diste a una hermosa niña.
-¡Estás loca si crees que te dejaré quedarte con mi hija!
-Ella no se merece a una madre como tú, yo la cuidaré, seré su madre y me encargaré de que tú jamás la vuelvas a ver ¿Crees que el juez te dejaría conservarla si sabe que te metiste con mi marido? Con una prueba de ADN es fácil de comprobarlo.
-Abre la puerta.
-Lárgate.-me sujetó del brazo y me jaló por las escaleras, casi caía, intentaba soltarme, escuchaba los llantos de mi niña.
-Scarlet me necesita, suéltame.
-Me tendrá a mi.-me saco de la casa.-Vete, no me interesa saber nada de ti y espera mi demanda porque te aseguro que te quitaré la custodia de mi sobrina.-cerro de un portazo.
-¡Miranda!.-el cielo estaba gris a pesar de ser noche, sabía que en cualquier momento comenzaría a llover.-¡Miranda dame a mi hija!.-mis lagrimas salían, quería a mi hija.-¡Dámela Miranda! ¡Estás secuestrándola!.-no paraba de golpear la puerta.-¡No puedes apartarla de mi lado!.-la lluvia comenzó.
¿Qué podía hacer? Me desespere, vi al taxi llegar, ¿Podría irme sin mi hija? Puedo ir a San Francisco, conozco un buen abogado que me ayudara en todo esto, me subí al taxi, suerte que por lo menos tenía mi bolso con mi monedero y mi celular.
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