Capítulo 11
•KENDALL PÁEZ•
Comienza a anochecer y corro hacia la orilla de la playa lo más rápido que puedo. Daniel me persigue desesperadamente intentando ver cómo se lleva a cabo mi transformación y entro en el agua sumergiéndome justo antes de convertirme en una sirena como cada noche.
-Estás preciosa -dice anonadado
-Gracias -respondo tímida
-Y pensar que esas sombras que veía cada noche eras tú -susurra fascinado
-Ven -digo armándome de valor
Extiendo mi mano en su dirección tras apoyar mis codos en la arena procurando que no se vea la cola y sonrío cuando la acepta algo asustado.
-¿Sabes nadar? -le pregunto
-Eh sí, sólo que hace tanto que no... -se detiene
-¿Que no qué? -frunzo el ceño
-Olvídalo -suelta finalmente
-Puedes contármelo si quieres -digo acariciando su mano
Sonríe levemente observando nuestras manos y se sienta en la orilla sin importarle que se esté empapando la ropa.
-Mis padres fallecieron chocando con aquel acantilado -dice señalándolo
Tapo mi boca con la mano que me queda libre y baja la mirada hacia la arena blanca.
-Lo siento muchísimo -articulo nerviosa
-Tranquila, no pasa nada -dice sonriendo falsamente
-Por eso tienes miedo -digo atando cabos al asunto
-No solamente tengo miedo al océano, sino también al amor -aclara
-¿Al amor? -pregunto tragando saliva
Asiente observando cómo anochece ante nuestros ojos y regresa su mirada realmente hipnotizante a mis labios.
Se acerca sutilmente a mí y acaricia mis labios con la yema de sus dedos. Los entreabro cuando estamos a milímetros y uno nuestros labios despacio.
-Me encanta la suavidad con la que me besas -susurra
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro