Capítulo 10
•KENDALL PÁEZ•
Continua acariciando mi mejilla y mis nervios florecen en ellas tiñéndose de un color rojizo intenso.
-¿Cómo que soy diferente? ¿A qué te refieres? -digo intentando disimular
-Bonita, no finjas, sé que estás maldita
-¿Maldita yo? ¿Quién te ha dicho semejante barbaridad? -respondo con un hilo de voz
-Quien calla otorga preciosa -dice sonriendo levemente- tus ojos transmiten miedo, no puedes ocultarlo
Se acerca lentamente a mí quedando a escasos centímetros de mis labios y tiemblo al sentirlo tan cerca. Su aliento a menta se mezcla con el mío y rompe la distancia que nos separa con un cálido beso.
Me separo rápidamente y mi cuerpo exige más. Tiemblo de nuevo y él sonríe orgulloso. ¡Será hipócrita!
-No es lo suficientemente cerca -murmura
-¿Qué? -digo seria
-Que estás demasiado lejos -dice mordiendo su labio
De un solo gesto, me aproxima a él quedando nuevamente a centímetros. Nuestras miradas chocan y muerde su labio inferior sutilmente para, seguidamente, morder el mío.
-Esto no puede ser -digo separándome una segunda vez
-¿Por qué no? Joder, me fascinas chica, desde que te vi me tienes loco -dice alzando un poco la voz
-¡PORQUE SOY UNA SIRENA IMBÉCIL! -grito por encima de él
Me tapo la boca rápidamente y mis mano tapan mi rostro al mismo tiempo que él forma una O con la boca. Sonríe levemente y me abraza dulcemente haciendo que oculte mi rostro en su pecho.
-No tengas miedo -dice besando mi frente
-Es imposible no tenerlo Oviedo, soy un pez -ríe ante mi comentario
-Serás un pez pero me encanta que seas diferente a las demás -aclara
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro