¿Por qué no puedes abrazarme en la calle?
¿Por qué no puedo besarte en la pista de baile?
Desearía que pudiera ser así...

Ser infiel es uno de los actos de cobardía más grandes que alguien puede cometer, traicionar la confianza de la persona que dices amar es algo imperdonable... Decía el artículo publicado por la revista "Corazón Gitano" -Que tontería-pienso mientras Nico  se acerca a mi.

-¿Qué lees hermosa?-pregunta con curiosidad a lo que le muestro el dichoso artículo.

-Es una tontería, nadie es infiel sólo por serlo va mucho más allá- digo bebiendo un poco de vino de mi copa.

-¿Cuál sería la necesidad de ser infiel? Si se supone que amas a alguien debes respetarlo- dice Nico con molestia.

-Yo no se amor la gente es extraña-le sonrio para evitar sospechas.

-Amor-rie ante mi comentario-¿Hoy tienes ensayo?-pregunta amablemente.

-Si-por un momento me siento culpable-Tengo ensayo durante la noche-agrego con seguridad, pues por más que quiera dejarlo no puedo hacerlo.

-Me encanta lo mucho que te esfuerzas para sacar tu carrera adelante-dice con su hermosa sonrisa y la culpa viene a mi de nuevo.

-Lo siento- digo en un susurro que el logra escuchar- Por no poder estar contigo esta noche- añado tratando de mantenerme tranquila.

Nos levantamos de la mesa salimos juntos del lugar lo amo, todo de el es perfecto me ama, me apoya, me comprende ¿Por qué lo hago? ¿Por qué no dejo que sea feliz con alguien más?- Te veo por la mañana- su voz me saca de mis vacilaciones.

-Si- respondo mientras se acerca para darme un beso el cual correspondo con intensidad.

Nos subimos a su auto como cada noche va a dejarme a aquel lugar, el camino es tranquilo hablamos sobre negocios que lo entusiasman bastante, dice algo de casarnos, pero evito el tema no quiero hacerlo, no puedo hacerlo simplemente no puedo...

-Llegamos amor- informa abro la puerta para bajarme el me detiene y me besa otra vez se separa de mi- Adiós te amo- me dice una vez que estoy fuera del auto.

- También yo- digo un tanto nerviosa cosa que el no logra percibir enciende el auto y comienza su camino de regreso a su casa, yo espero perderlo de vista y una vez listo camino una calle más lejos del Centro de Artes, ingreso al bar de siempre.

-¿Lo mismo de siempre?- cuestiona Matteo el barman quien conoce toda la historia.

-Si- respondo con seguridad.

-Martini seco para la rubia- dice bromeando.

-¡Que sean dos!- exclama el mi debilidad.

-Hola- lo saludo con un corto beso.

Terminamos nuestros tragos, y salimos de aquel bar entre miradas extrañas pero nada nos importa cuando estamos juntos, todos a nuestro alrededor desaparece le doy la mano, el sólo me sonríe con felicidad.

-¿Dónde quieres ir?- pregunta dulcemente.

-A la calle-contesto rápido.

-¿Y si alguien nos ve?- pregunta con nerviosismo.

-Vamos a Nashville nadie nos conoce allí y estamos a 20 minutos- respondo haciendo un puchero.

-Sabes que no puedo resistirme a eso- dice tomándome por la cintura y dándome un beso.

No tenemos auto por lo que cogemos el autobús común que por ser de noche prácticamente va vacío, por lo que otra vez no seremos reconocidos llegamos a nuestro destino estamos en la calle tomados de la mano bailando en el medio, delicadamente toma mi mano y me acerca a él me mira un momento es extraño lo que siento, una lágrima amenaza con salir y antes de cerrar los ojos el la corre con su mano, vuelve a mirarme está vez sonríe para besarme...

Cuando me abrazas en la calle, 
y me besas en la pista de baile.
Ojalá pudiera ser así, 
¿por qué no puede ser así?
Porque soy tuya...

Eso es lo que me pregunto siempre porque no puedo decidirme, y estar sólo con el quisiera gritarle al mundo que lo amo que me hace feliz que sus besos y caricias me vuelven loca, pero soy cobarde no puedo hacerlo eso... ¿Está posible amar a dos personas? Claramente no a uno lo amo, y me arriesgo por el mientras que  al otro no quiero herirlo.

-¿Qué piensas tanto?- pregunta mientras su brazo rodea mi espalda.

-Quiero dejarlo- respondo con una seguridad de la que yo misma me sorprendo.

-¿Y contarle que estas conmigo?- cuestiona el algo sorprendido.

-Es lo que debemos hacer, Benicio no podemos seguir así quiero hacer esto contigo durante el día, quiero que caminemos de la mano quiero- explico pero el me detiene.

-Sabes que es imposible hacerlo- dice el con angustia.

-¿Por qué? Diremos que nos enamoramos- digo rápido.

-¿Qué hay de Nico? Aún sigue siendo mi primo- pregunta con tristeza.

-El puede entenderlo-digo en un susurro.

-Emilia me gustas mucho, pero no quiero eso- dice con sinceridad.

-¿No quieres estar conmigo?- pregunto con cierta molestia.

-Sabes bien que lo nuestro no tiene futuro- dice sin tapujos.

-¿ En qué momento te preferí a ti antes que Nico?- grito enojada.

-Cuando estás con él, ¿le llamas por su nombre?-pregunta- ¿Igual que haces cuando estás conmigo? ¿sientes lo mismo?- me llena de preguntas yo sólo lo miro es extraño discutimos como novios, pero sólo somos amantes nocturnos, sin embargo, lo amo.

Sin pensar más me lanzo a sus brazos, y comienzo a besarlo desesperadamente quiero marcar su piel con mis labios, el me corresponde con la misma intensidad ataca mi cuello con esa mezcla de delicadeza y pasión que me vuelve loca, que me hace olvidar que tengo novio, la intensidad comienza a subir aún más, y la ropa empieza a estorbar nos entregamos una vez más con la luz de la luna como nuestro testigo.

Amanece una vez más los rayos del sol están apenas naciendo, recogemos nuestra ropa nos vestimos rápidamente, buscamos el autobús es temprano aún le hago un par de bromas antes de tomar el autobús de regreso a nuestras vidas, entrelazados nuestra manos le digo un te amo, a lo que el me responde con un beso.

El autobús se detiene nos bajamos y volvemos a despedirnos el entra a su lugar el bar, y yo a mi vida de niña rica con la vida perfecta llego a mi departamento me doy una ducha relajante, en ese momento alguien toca la puerta es Nico.

-¿Cómo estuvo lo de ayer?- pregunta.

-Bien-rio al recordar.

-Me alegro ¿Estas lista para la noche?-vuelve a preguntar algo confundido.

-¿Noche?- pregunto, pero al ver su cara me recuerda que hoy es la inauguración del parque acuático que ha estado armando desde hace tiempo.- Si tengo el vestido perfecto- añado con seguridad.

-Paso por ti a las 7 te amo hermosa- dice otra vez la culpa viene a mi.

-Nico-lo detengo analizando cada parte de su rostro- Ponte la corbata azul- digo evitando cometer algún error el sólo me sonríe y deposita un dulce beso en mi frente para luego irse.

Nos encontramos en la fiesta todo está hermoso, y elegante todo es perfecto fotos por aquí y entrevistas por allá  en un momento mi vista se encuentra con la de Benicio viene acompañado de una chica castaña, pero rápidamente se acerca hasta nosotros.

Rápidamente le lanzo a besarlo mientras todos miran extrañados pero lo amo y no puedo seguir evitandolo siento un alivio enorme al escuchar su voz diciendo que me ama que al final somos nosotros dos con nuestro amor...

-¿Emilia?- escucho a lo lejos.

-¿Qué?-caigo en cuenta que nada ha pasado- Necesito ir al baño-digo disculpandome con la gente que estaba ahí.

Sigo el camino hasta el baño, me mojo un poco la cara y bebo agua una vez que salgo lo veo a el a Benicio se acerca para besarme otra vez no puedo rechazarlo, a pesar de estar en una fiesta.

-Te amo-dice el separándose de mi.

-Sabes que yo también- digo sincera.

-Pero tenemos un amor sin esperanza-dice alejándose.

-¿Cómo?-cuestiono.

-Hoy presentare a Nina  como mi novia oficial-informa con pesadez en su voz.

-¿Novia?-pregunto, sin embargo, se que no tengo derecho a ponerme celosa yo hago lo mismo y no sería justo, me acerco a el y le doy un beso el último de nuestros encuentros.

Ha pasado 1 año desde aquel encuentro dentro de 2 meses me casare con Nicolás.

-¿Ensayas hoy?-pregunta.

-Si-respondo segura.

Me bajo del auto y espero a que Nico desaparezca camino la misma cuadra de siempre y entro al bar pido mi martini y llega el salimos del lugar hasta su departamento sirve dos copas de vino que bebemos en seguida, para dar paso a nuestro cóctel de besos...

Me levanto rápidamente hoy veré a la diseñadora miro a Benicio quien aún duerme me grabo cada lunar de su espalda tomo una hoja de su agenda y escribo.

¿Por qué no puedes abrazarme en la calle?
¿Por qué no puedo besarte en la pista de baile?
Desearía que pudiera ser así,
¿por qué no puede ser así?
Porque soy tuya...

Mi piel siempre le perteneciera Benicio así como mi corazón, pero nuestra cobardía es más fuerte y debemos seguir viviendo un amor en secreto.

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Espero les haya gustado este one shot Bemilia para todas quienes lo pidieron está hecho con cariño y basado en esta cancion que me encanta.


Para Ustedes Hermosas!

CaritoTheQueen4 y Karolsevilla2013