Era un día como cualquier otro en la ciudad de París, y creo que todos saben a qué me refiero con esas pocas palabras.

El ataque de un Akuma, era algo de costumbre que sucedía por lo menos una vez a la semana, y este semana, en especial este día, no sería la excepción.

Un nuevo villano atacaba la ciudad, su nombre era Intrusa, una villana cuyos poderes manipulaban los pensamientos de las personas. Su disfraz era en verdad llamativo, un traje de una sirvienta completamente morado y un velo negro sobre su cabeza.

Era una villana débil en cuestión de ataques, disparos lentos que si llegaban a alcanzarte te verías obligado a realizar la última orden que fue encomendada por ella.

Está chica busca usar este poder, no solo para conseguir los Miracolous, si no para vengarse de aquella chica que la a tratado como sirvienta desde que llegó a su nuevo empleo.

–¡Todos ustedes seguirán esta orden a partir de ahora! Serán mis sirvientes o recibirán condena.

Exclamó ella con fuerza mientras disparaba a los parisinos, una orden simple que podrá encomendar más órdenes sin tener que volver a atacarlos.

La gente corría despavorida intentando esquivar los ataques de la villana, pero para aquellos que ya estaban siendo controlados… ellos no sabía que ya estaban controlados.

Los poderes de Intrusa no los hacía zombis que simplemente seguían órdenes, claro que no, estas personas estaban completamente concientes de sus acciones mientras las realizaban, incluso cuando ellos no podían controlar su cuerpo.

–Jejeje, creo que con esos me bastarán. ¡¡Detenganse!!

Grito ella, y al instante todos aquellos a los que ya controlaba se detuvieron.

–¡¿Qu-qué sucede con mi cuerpo?!

–¡No puedo moverme!

Muchos gritaban despavoridos. Sin importar cuánto lo intentará, no podían dar ni un simple paso.

–Bien, me alegra de que sean buenos sirvientes. ¡Ahora, vayan y busquen a Chloé Bourgeois!

Una nueva escena típica se volvía a presentar, la nueva villana había sido convertida por Chloé, como ya era de costumbre.

"–Intrusa, estoy de acuerdo con tu venganza, pero no olvides nuestro trato."

–Oh cierto, por poco lo olvidaba. ¡La mitad busquen a Chloé! Los demás, ¡tráiganme los Miracolous de Ladybug y ChatNoir!
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Mientras la ciudad está en problemas, ¿en dónde estarán nuestros héroes en estos momentos?

Varios minutos antes del ataque, recidencia Dupaing Cheng. Era un fin de semana tranquilo, la hora aproximada era de las 10 de la mañana, razón por la cual Marinette aún no se había despertado.

–¡Marinette, despierta o llegarás tarde!

Una voz chillona grito cerca del rostro de Marinette, la voz pertenecía a una pequeña criatura roja con pequeñas manchas negras cubriendo su cuerpo, se trataba del Kwami de Marinette, Tikky.

–Cinco minutos más, cincu minutos más y prometo que me levanto.

Dijo Marinette Dupaing-Cheng, una chica de aproximadamente 16 años, era una chica torpe y distraída, además de dulce y amable.

–¡Nada de eso, la última vez que me dijiste que solo cinco minutos, terminaste durmiendo por más de una hora!

Tikky comenzó a jalar el cabello azulado de Marinette en un intento por despertarla.

–Pero Tikky, hoy es domingo, no es como si tuviera algo que hacer.

–¡¿Acaso se te olvidó que irían hoy a casa de Adrien para estudiar?!

Tras esas palabras, como si por arte de magia se tratara, Marinette se despertó por completó, y la Kwami que sostenía su cabello termino siendo lanzada al aire por la inercia.

–¡Oh por dios, no puedo creer que lo haya olvidado, tengo que arreglarme! ¡¡Ahhh, mi cabello es un desastre, ¿que ropa debo de ponerme?!! ¡¡¿Por qué no me levanté antes?!!

–¡Marinette, tranquila, te desperté justo a esta hora para que tengas tiempo suficiente!

Tikky grito intentando calmar a Marinette. De alguna forma, sus palabras lograron llegar a los oídos de Marinette, haciendo que está se tranquilizara.

–¿En serio?

Tikky solo asintió con su pequeña cabeza a lo que Marinette soltó un largo suspiro de alivio.

–Ya veo, muchas gracias Tikky.

–Jeje, no te preocupes, ahora tomate tu tiempo y arreglate, no sabes lo que pueda pasar contigo y Adrien.

–Solo vamos a estudiar, además de que Alya y Nino también estarán ahí.

Comento Marinette intentando ocultar su rostro apenado. Estaba feliz de tener una oportunidad de pasar el día con Adrien, pero sabía que no estaría tranquila si Alya no estaba con ella.

–Vamos Marinette, es muy probable que Alya y Nino tengan algo planeado para dejarlos a ustedes dos solos.

En ese instante el rostro de Marinette se enrojeció hasta el punto en el que parecía un tomate, por su mente pasó una imagen de Adrien y ella, completamente solos en el cuarto de chicos, todo mientras se sostenían de las manos antes de besarse.

Tikky notó la enorme sonrisa en el rostro de Marinette, todo mientras ella estaba perdida en su propio mundo de imaginación.

–¿Marinette, estás bien?

Pregunto Tikky preocupada al ver que la chica ya no respondía, realmente su única preocupación era que desaprovechara el tiempo de arreglarse.

–¡Marinette, despierta!

Grito para sacar a la chica del trance.

–¡¿Qué?! ¡¿Qué sucede?! ¡Ahh~, se me va a hacer tarde!

Tikky no dijo nada ante la reacción de Marinette, tan solo vio como está se dirigía al baño para tomar una ducha.

Ya una vez estando sola en el cuarto, dijo:

–Vaya, despertar dos veces a Marinette en un solo día, un nuevo récord.

Dijo en forma de burla mientras reía tiernamente.
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Tras varios minutos Marinette estaba casi lista, usando un nuevo conjunto de ropa comenzó a lucirlo frente al espejo, pensando si era la ropa adecuada.

–Hmm, no lo sé, siento que el azul con negro no es mi color.

–Yo digo que te queda fantástico.

–Bien, en ese caso está entre los posibles.

Tras unos segundos volvió a cambiarse de ropa, repitiendo el proceso de juzgar el conjunto frente a el espejo y Tikky aprobando dicho conjunto. Esto se repitió varias veces, al final los diversos conjuntos que tenía no aligeraba para nada la carga al escoger que ponerse.

–¡Ahhh, estoy en donde empecé!

–Bueno Marinette, es que los conjuntos que haces se te ven muy bien.

–Gracias Tikky, pero eso no me ayuda a escoger.

–Tu solo escoge el que más te guste, te aseguro que ese será el adecuado.

Dijo Tikky tratando de brindarle confianza a Marinette, ella miro dudosa los diferentes conjuntos que había creado. Al final uno llamo bastante su atención a comparación con el resto, un conjunto que parecía combinar bastante con la usual ropa de Adrien.

–Tikky, crees que si me visto similar a Adrien… bueno, el creo que yo… bueno, ya sabes.

–¿Creerá que te gusta? Lo dudo, es tan denso que no se ha dado cuenta hasta ahora.

Marinette entendió el mensaje ocultó tras esas palabras de parte de Tikky.

–¡¿E-en serio soy tan obvia?!

–Bueno, sabiendo que todo tu salón de clases lo sabe. Claro, a excepción de Adrien.

Marinette comenzó a rodar en el suelo mientras sentía la necesidad de que se la tragara la tierra, estaba completamente apenada y sus gritos lo demostraban.

–¡No puedo creerlo, que vergüenza, todos saben que me gusta Adrien!

Tikky solo reía mientras veía a Marinette apenada. Para Tikky tener una poseedora tan rara era extraño para ella, pero disfrutaba mucho pasar el tiempo con ella y la apoyaría en todo lo que pudiera.

–Bueno, creo que ya no hay nada que pueda hacer con eso.

–Vamos, no te desanimes Marinette, sabes que tienes el apoyo de todos tus compañeros.

–Eso es cierto Tikky, la verdad es que puedo confiar en todos ellos.

–¡Así se habla, ahora vístete y ve con tu chico amado!

Grito Tikky al notar la hora, pero decidió ocultarlo para no preocupar a Marinette.
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Tras darse cuenta de la hora que era, salió corriendo en dirección de la mansión Agreste.

–¡No puedo creerlo, voy tarde!

Gritaba al mismo tiempo que corría. Mientras tanto en su bolsa, Tikky se sentía culpable por no avisarle de la hora.

Mientras corría, un fuerte estruendo se escuchó. Volteo en la dirección de aquella explosión y para su sorpresa una villana había aparecido.

–¡Un nuevo akumatizado! Tengo que apresurarme y transformarme.

Susurro lo último mientras buscaba un callejón en donde pudiera transformarse. Una vez encontrado uno, su Tikky salió de su bolso y con prisa grito las palabras.

–¡Tikky, motas!

Iniciando la transformación el traje de Ladybug cubrió su cuerpo por completó, una vez la transformación termino se lanzo a la acción.

Salto y se balanceo hasta llegar al lugar en donde se encontraba la villana.

–Vaya vaya, pero si es Ladybug, me alegra que hayas venido. ¡Al parecer necesito una sirvienta con poderes!

Intrusa comenzó a lanzar sus ataques aún con la misma orden de antes "Serás mi sirvienta".

–Muy lento. Sí quieres atraparme tendrás que esforzarte más.

Dijo en forma de burla, pero eso hizo que bajara la guardia, ya que no notó la horda de sirvientes detrás de ella, los cuales la sostuvieron con fuerza.

–¡¿Que sucede?! ¡Sueltenme!

–¡Perdonanos Ladybug, no podemos controlar nuestros cuerpos!

Al escucharlos hablar se preocupó ligeramente, no solo debía combatir contra la akumatizada, si no también con los parisinos, además de que debía asegurarse de no lastimarlos.

–Vaya vaya, veo que te atraparon mis sirvientes, pero sé que no lo lograrán por mucho, así que ¡vuélvete en mi sirviente!

–¡Chatnoir, ¿en dónde estás?!

Grito pidiendo ayuda a su compañero. ¿Aparecerá?
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Volvamos al pasado por última vez, esta ocasión en la mansión Agreste, lugar al que se dirigía Marinette antes de enfrentarse a la villana.

–No puedo creer que tu papá permitirá que invitarás amigos.

–¡Lo sé, y estoy realmente emocionado! Sé que solo vamos a estudiar, pero me siento feliz de tener visitas.

–Solo espero que se mantengan alejados de mi preciado Camembert.

–Tranquilo Plaga, dudo que alguno quiera robarte tu apestoso queso.

En estos momentos, el chico Adrien Agreste se encontraba hablando con una pequeña criatura mágica en forma de un gato, se trataba de su Kwami, Plaga.

–Apestoso, pero sabroso al final de todo.

Está pequeña criatura adoraba el sabor de los quesos fuertes, como si de un raton se tratara, lo cual extrañaba a su usuario, el guapo rubio modelo.

–Solo no vayas a salir cuando estén todos, no sabría cómo explicar tu presencia.

–Fácil, puedes decir que soy un animatrónico.

–Plaga.

Dijo esto último con un tono amenazante.

–Bien, prometo no salir, solo asegúrate de que tenga suficiente queso para todo el día.

–Tranquilo, ya lo tengo todo solucionado.

Dijo a la vez que le regalaba una sonrisa a su Kwami.

Adrien aún continuaba haciendo preparaciones para la llegada de sus amigos.

–Ahora que lo pienso, ese chico Nino y esa chica Alya, son pareja ¿cierto?

–Sí, ¿por qué la pregunta?

–¿Acaso no sé sentirían incómodos tu y Marinette mientras los ven a ellos coqueteando?

Adrien estaba un poco confundido ante las palabras de su Kwami.

–¿Por qué nos sentiríamos incómodos? Ya los he visto coquetear muchas veces antes.

–Sí, pero no mientras están en parejas.

–¿Parejas? ¿Te refieres a…?

–Sí, tu y esa chica Marinette.

Al escuchar esas últimas palabras soltó una ligera carcajada.

–No, creo que te equivocas, Marinette y yo solo somos amigos.

Dijo aquella fulminante frase que podría acabar con la vitalidad de Marinette si llegara a escucharla.

–¿Es así? Bueno, iré a mi cuarto, ese queso Camembert no se comerá solo.

Dijo Plaga con un tono un tanto burlón, en ese mismo momento fue cuando una explosión se escuchó, la misma que Marinette escucho.

–¡Ay por favor! Siento que el universo está en mi contra.

–Lo siento Plaga, pero París nos necesita. ¡Plaga, las garras!

Grito aquellas palabras que forzaron la transformación de Plaga. Cubierto totalmente de cuero negro, el héroe de París Chat Noir estaba listo para la acción.
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Ahora sí, volvamos al punto en el que Ladybug estaba por ser atacada.

–¡Chat Noir, ¿en dónde estás?!

Grito Ladybug en busca de la ayuda de su compañero, todo mientras veía ese proyectil acercándose a ella, para que antes de que la golpeara este fuera desviado.

–¿Llamaste mi Lady?

–Justo a tiempo gatito.

Dijo Ladybug a la vez que se libraba del agarre de los Parisinos.

Ambos saltaron a los techos en donde no podían ser capturados. Miraban a la villana tratando de descubrir una forma de vencerla sin lastimar a los ciudadanos.

–¿Alguna idea Bogaboo?

–Aun no, pero debe de haber una forma de liberarlos del hechizo.

–Bueno, ¿y que tal si hay una palabra mágica? Los magos siempre usan una muy rara.

–Esto no es un show de magia, y dudo que los poderes de un akumatizado funcionen de esa forma tan ridícula.

Comento Ladybug un tanto molesta. Chat Noir solo rasco su cabeza mientras reía de forma incómoda.

–¡Vamos, bajen! ¡¿Acaso me tienen miedo?!

–¡Claro que no te tenemos miedo, así que ¿por qué no subes tu con nosotros!

Grito Chat Noir ante la provocación de la villana.

–Ella sabe que estaremos en desventaja si peleamos en el suelo. Por ahora sus poderes no parecen dañar a nadie, así que hay que tener cuidado.

–¡¡Sueltenme!! ¡¿Acaso no saben quién soy?!

Cuando se creía que no había ningún peligro, aquellos gritos se escucharon con fuerza, se trataba de la joven Chloé, la cual había sido capturada.

Todos aquellos que la capturaron, de cierta forma no se sentían culpables, y no los culpo para ser sincero.

–Vaya vaya, pero si es mi juguetito nuevo, Chloé Bourgeois.

–¡¿Juguetito?! ¡¡Déjame aclararte que mi papi es el alcalde, y puede hacer que te encarcelen de por vida por llamarme juguetito!!

Chloé gritaba en la cara de la villana, esa expresión sin miedo en la cara de la chica, creo que asustaba mucho más que un ataque de cualquier villano.

–Sabes, a ti no te daré la orden de ser mi sirvienta, en su lugar, que tal esto. ¡Sube hasta la torre Eiffel y salta desde la cima!

–¡¿Acaso me crees idiota para hacer tal tontería?! E-espera. ¡¿Po-por que no puedo controlar mis pies?! ¡Que alguien me detenga!

Chloé comenzó a correr minutos después de que el ataque del Akumatizado la golpeara. Corrió en dirección de la torre Eiffel, la cual podía ser el último lugar en el que esté si es que nadie la detenía.

–¡Chat Noir, detenla, no podemos dejar que algo así suceda! Yo me encargare de Intrusa.

–¡Entendido mi Lady! Solo ten cuidado.

–Tranquilo gatito, lo tendré.

Mientras la conversación de ambos héroes se daba a cabo, Intrusa no se quedó en silencio. Mando a sus sirvientes a escoltar a Chloé en su salto, debían a partir a Cat Noir si este intentaba detener a Chloé de saltar.

Claro solo mando una pequeña parte de su séquito, la otra parte se quedó con ella para cuidarla de Ladybug.

–¡Detente de una vez intrusa, acabar con la vida de alguien es algo horrible, e incluso akumatizada no deberías cometer tal acto!

–Puede ser, pero dime una cosa Ladybug. Esa chica a creado muchos Akumatizados, ¿No es así? Así que realmente les estoy haciendo un favor, sin ella muchas personas vivirían felices su vida y Hawk Moth no los Akumatizaria.

–¡Sin importar el motivo no debes de quitar una vida!

–Oh, pero ahí está lo gracioso, yo no haré nada, ella saltará por su propia cuenta.

Intrusa dijo con un tono burlón en su voz, realmente no estaba tomando en serio a Ladybug.

–Oh, aunque creo que incluso si Chloé no muere Hawk Moth ya no Akumatizaria más gente. Después de todo, ¡yo seré quien les quite sus Miracolous!

Intrusa comenzó a disparar sus rayos con la orden "Entrégame tu Miracolous" en esta ocasión, quería jugar con Ladybug, incluso hacer tiempo le bastaría, después de todo, nadie podía salvar a Chloé, incluso Chat Noir.

Ahora vayamos con Chat en su persecución por Chloé. Frente a él se encontraba una multitud de gente escondiendo a su objetivo, la buscaba, pero no podía encontrarla por toda la gente, incluso la mayoría era rubia lo cual la enmascarada mucho mejor.

–Me hubiera gustado decirle a Chloé que no se pintara el cabello en aquella ocasión.

Dijo mientras buscaba a la chica a la distancia, sabía que si se acercaba bastante a la multitud entonces intentarían arrebatarle su Miracolous, y si llegaba tarde a rescatar a Chloé, entonces incluso en el aire ella trataría de librarse de su agarre.

–Este si que es un dilema, espero que Ladybug pueda vencerla.

Dijo un poco preocupado de que Ladybug lo necesitará.

Volvamos a la pelea de Ladybug. La batalla continuaba siendo a distancia, mientras que buscaba una forma de inutilizar los poderes de la villana. Sí lo lograba entonces la batalla sería sencilla, pero hasta ahora no ha dado ningún indicio de debilidad.

–Debe de haber una forma.

–¡¿Que esperas?! ¡¿Acaso estarías bien permitiendo la muerte de Chloé?!

–¡Estoy segura de que Chat Noir podrá salvarla, mi trabajo ahora es detenerte! ¡¡Amuleto encantado!!

Grito a la vez que lanzaba su yoyo al aire, de este salió un objeto rojo con puntos negros.

–¿Una trompeta? ¿Qué se supone que haga con esto?

–¡Jajaja, ¿en serio piensas enfrentarme con eso?!

Ladybug miro a su alrededor para saber que hacer con la trompeta en sus manos, lo único que se iluminaba ante su vista era únicamente la trompeta.

–¿Acaso debo tocarla? Jamás fui buena con los instrumentos, pero hay que inténtarlo.

Tomo aire hasta que no pudo más, posteriormente soplo con fuerza haciendo que se escuchará un sonido bastante molesto y ruidoso.

Esto hizo que todos los ciudadanos que protegían a Intrusa se cubrieran los oídos. Una vez se le acabó el aire dejo de tocar la trompeta, agotada intento recuperar el aliento, mientras que su adversaria la veía de forma cómica.

–¡Eso fue en verdad malo! ¿Ahora que ha…?

Antes de que pudiera terminar su frase está fue atacada por el yoyo de Ladybug. Tras este golpe la batalla comenzó en el suelo.

–Muy ingenua Ladybug. ¿Se te olvidó mi ejército? ¡Ataquen a Ladybug!

Grito su comando a sus sirvientes, pero ninguno de ellos se movió si quiera.

–¡¿Que están esperando?! ¡Ataquen!

–Lamento decirte que no te escuchan, así que ahora solo somos tu y yo.

Todos los ciudadanos tenían sus oídos aún cubiertos, sus cuerpos lo hacían por inercia por miedo a que aquel estruendo de antes continuará sonando, cosa que pudo aprovechar Ladybug.
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Por unos minutos la pelea se prolongó sin tener a un claro ganador. Claro que Ladybug tenía la supremacía en batalla, pero Intrusa no parecía quedarse atrás, y todo porque de había lanzado las órdenes "esquiva los ataques de Ladybug" y "Lucha a la par con Ladybug" cosa que solo podía hacer con ella misma.

No quería usar esto ya que la pelea sería bastante aburrida, si es que ella y sus sirvientes atacaban, pero viendo la situación sentía necesario el utilizarlo.

–¿Que pasa? Sabes que si no me detienes pronto Chloé morirá, ¿cierto?

–¡No es así, confío plenamente en Chat Noir!

Ladybug sabía que se estaba quedando sin tiempo, sus aretes ya habían pitado y no le quedaba más que un par de minutos antes de perder su transformación.

–Tienes mucha esperanza en ese tal Chat Noir. Tal vez deberías enamorarte de él.

Dijo Intrusa en forma burlona, en ese momento los aretes de Ladybug pintaron una vez más indicando que solo le quedaba un minuto.

"–¿Donde estás Chat?"

Pregunto un poco preocupada, pero su preocupación termino cuando Chat salto al frente de ella reflejando el último ataque que le fue lanzado.

–¿Me extrañaste?

–Justo a tiempo, como siempre.

Ladybug se sentía aliviada al ver a su compañero a su lado.

–Necesito recargar energías, regreso en unos minutos.

Dijo antes de saltar fuera de la acción. En estos momentos solo quedaban Intrusa y Chat Noir peleando.

–¿Acaso dejaste morir a Chloé para salvar a Ladybug? Vaya que eres un héroe.

–No es así, recordé que tú orden era salta de la torre Eiffel, espere hasta que saltará para poder rescatarla, y una vez que se cumplió tú orden ella retomo el control de su cuerpo.

–Tch, debí agregar caer al suelo a esa orden.

–Basta de charlas, peleemos.

–Eso me agradaría.

Intrusa volvió a atacar con sus disparos con la última orden que había impartido, "Se mi esclavo", la cual dijo mucho antes de que Ladybug se fuera.

Para Chat Noir no era complicado esquivar estos ataques, pero no podía acercarse a atacar ya que Intrusa se escudaba con los Parisinos que parecían congelados.

"–Solo tengo que esperar a que Ladybug regrese."

Pensó Chat mientras se acercaba a la villana. En ocasiones intentaba golpearla, pero terminaba fallando.

Unos minutos pasaron para que finalmente Ladybug regresará.

–Lamento haberte hecho esperar.

–No te disculpes mi Lady, como un caballero podría esperar eternamente por ti.

–Eres muy dulce, pero creo que esto ya duró demasiado. ¡Amuleto encantado!

Ladybug lanzo una vez más su yoyo al aire para hacer aparecer un amuleto mágico, pero en ese momento.

–¡Justo lo que esperaba!

Intrusa lanzo un ataque a Ladybug mientras invocaba su amuleto encantado. Chat trato de detenerlo, pero fue demasiado tarde.

El disparo golpeó a Ladybug haciendo que está bajara la cabeza y que el amuleto encantado, un espejo, galleta al suelo.

–¡Perfecto, ahora ven y entrégame tu Miracolous!

–¡No, Ladybug!

Chat trato de detener a Ladybug, pero en su lugar, él fue detenido por un pequeño grupo de ciudadanos que ya no tenían sus oídos cubiertos.

"–Así que hizo esto mientras la perseguía."

Pensó Chat mientras intentaba escaparse del agarre de los ciudadanos, pero no lo lograba ya que no quería lastimarlos. Lo único que podía hacer era ver cómo Ladybug caminaba hacia la villana sin ninguna intención de luchar.

Cuando se paró frente a ella, subió sus manos hasta la altura de sus orejas y estaba por quitarse sus aretes.

"–¡Sí, al fin gane!"

–¡Jajaja, te dije que los conseguiría, y siempre cumplo mis promesas!

–Lastima que no podrás cumplir esta.

–¿Qué?

Intrusa miro confundida a Ladybug, la cual sostenía el velo entre sus manos, el cual tenía al Akuma en su interior.

–¡¿Pero como?! ¡Mis órdenes son absolutas!

–Puede ser, pero esas órdenes acabaron.

Ladybug rompió el velo de Intrusa y al instante salió una pequeña mariposa morada.

–¡Es hora de terminar con la maldad!

Grito Ladybug mientras lanzaba su yoyo para capturar al Akuma, una vez atrapado lo dejo libre tras haberlo purificado.

–Adios mariposita.

Despidió a la mariposa la cual emprendió vuelo a lo desconocido.

Tras eso la chica se destransformo dejando ver a una chica vestida con un traje de sirvienta blanco con negro, un conjunto en verdad lindo.

–¿Que fue lo que sucedió?

–Fuiste akumatizada por Hawk Moth, pero logramos salvarte.

–¡Ladybug!

Detrás suyo se escuchaba la voz de Chat Noir gritando su nombre, este aún se encontraba atrapado entre la multitud de personas.

Volteo a verlo un instante mientras pensaba en ayudarlo, pero algo sucedía con ella, su corazón latió con fuerza cuando sus ojos se encontraron.

Unos segundos después todos soltaron a Chat Noir ya que la orden había terminado "Protejan a Intrusa", la cual ya no existía.

Aliviado tomo el espejo que estaba en el suelo y salto hasta Ladybug, ahí le dió un fuerte abrazo.

–Estaba realmente preocupado. ¿Cómo lograste evitar su ataque?

Ladybug se sentía en verdad nerviosa, su corazón latía, sus palmas sudaban y su rostro se pigmentaba de color rojo.

–Jajaja, l-la verdad no tengo idea de lo que sucedió. De-debió de haber fallado o algo.

–Bueno, no importa. ¡Ganamos!

Tras soltar a Ladybug, Chat dijo aquella frase mientras colocaba su puño frente a ella esperando el choque de siempre, pero este no llego.

–¿Mi Lady?

Pregunto este preocupado al ver mientras veía a Ladybug, la cual se notaba dispersa.

–¿Ah? Sí, solo déjame arreglar todo.

Tomo el espejo de las manos de Chat Noir y lo lanzó al aire mientras decía:

–¡Miracolous Ladybug!

Al instante, una horda de mariquitas comenzaron a cubrir la ciudad de París completa deshaciendo toda la destrucción ocasionada por la villana.

Una vez este proceso termino, Ladybug choco el puño de Chat Noir.

–Mejor tarde que nunca.

–Jeje, sí.

–¡Ganamos!x2

Dijeron los dos en unisono. Tras eso ambos se despidieron y salieron en direcciones contrarias.

Mientras tanto, en un edificio de París se encontraba Chloé Bourgeois, gritando desesperada por qué alguien la salvara.

–¡Hola, ¿hay alguien ahí?! ¡¡¿Chat Noir, Ladybug, alguien?!!

Ladybug llegó a una zona cerca de la mansión Agreste, debía disculparse por haber llegado tarde en esta ocasión, aunque por lo que sucedió ni siquiera sabía si la reunión continuaría.

Pero por alguna razón eso no es lo que estaba en su mente en aquellos momentos.

–¡¿Que hago, que hago?! Pe-pensé que después de que usará el Prodigio todo volvería a la normalidad.

Decía ella mientras su corazón continuaba latiendo con fuerza, y ahora no era por la presencia de alguien, si no por la imagen de una persona en su cabeza.

El último pitidi de sus aretes de había escuchado y su transformación había terminado.

–Vaya que eso fue agotador.

Dijo Tikky mientras caía rendida. Se recostó sobre el hombro de Marinette y la miro detenidamente, ella sabía que le sucedía ya que vivió en parte lo mismo.

La razón de que pudieran vencer a Intrusa no fue porque haya fallado, o incluso porque la orden no haya funcionado, al contrario, la orden funcionó a la perfección, pero la orden había cambiado de "Serás mi sirvienta" a "Deberías enamorarte de Chat Noir".

Esa misma orden le fue implantada a Ladybug en medio de la pelea, por eso su corazón latía, por eso su mirada se perdía en sus ojos… por eso ella sea había enamorado de él. Pero le era extraño, ¿cómo es que la orden sigue afectandola?

–Tranquila Marinette, puede que el efecto en tu caso termine más tarde, el Prodigio suele tardar cuando se trata de sus usuarios.

–Eso espero Tikky, ahora vamos a casa de Adrien. Solo espero que no llegue muy tarde.

Salió corriendo en dirección a la casa de los Agreste, el chico que amaba le esperaba en aquella mansión.

Vayamos con él para ver qué sucede.

–Vaya, se siente raro no haber usado Cataclismo, no me siento tan cansado como en otras ocasiones.

–Bueno, me estaba enfrentando contra ciudadanos, nunca ví la oportunidad de usarlo.

Adrien había llegado hace pocos minutos a su hogar, se encontraba acostado en su cama viendo su celular, leyendo un mensaje de Nino.

"–Lo siento amigo, estamos en casa de Alya y creo que no podremos ir."

–Haa~, bueno, no los culpo, después de lo que pasó ni yo quisiera salir.

Se veía deprimido al saber que su reunión se había arruinado, o así sería si alguien no hubiera tocado el timbre.

–¿Quien será?

Dijo mientras caminaba a la puerta principal, cuando se paró frente al interfón contesto con un tono extrañado.

–¿Sí?

"–Hola Adrien, lamento haber llegado tarde."

Se trataba de Marinette. Al verla ahí le saco una sonrisa.

–No te preocupes, adelante.

Dijo para después tocar un boton el cual abrió la puerta principal. Tras esto Marinette entro y ambos fueron a la habitación de Adrien.

–¿Dónde están Alya y Nino?

Pregunto Marinette al ver que el cuarto del chico estaba completamente vacío.

–Oh, me mandaron un mensaje hace unos minutos, al parecer no van a poder venir.

En ese momento el rostro de Marinette se coloro hasta el punto de parecer un tomate maduro.

Estaba nerviosa, estaría a solas con Adrien…, pero por alguna razón, el rostro de Chat Noir apareció en su rostro, lo cual la hizo tranquilizarse.

–¿Quieres que pospongamos la sección de estudios? Sé que puede ser algo incómodo que estemos los dos solos.

–No te preocupes, vamos a estudiar.

Dijo con tal tranquilidad que jamás se había visto antes en ella, incluso Tikky, la cual estaba aún en su bolso, estaba sorprendida.

Tikky sabía el porque Marinette actuaba de esta forma, sabía porque de repente se había enamorado de Chat Noir, pero esa historia es para otro momento.

--Continuara en el fic "Siempre en mi mente".