"Acercamiento".
Las dos niñas reían mientras black se sacudía y las salpicaba con agua.
Felix soltó una pequeña risa mientras lily las miraba con atención.
-ella...ella es su hija.
El escolta miro de reojo a la nana que parecía preocupada por el acercamiento de las dos niñas.
-...sé que ella no tiene la culpa de nada pero me preocupa lo que haga su majestad.
-no creo que haga algo que perjudique a la princesa, el emperador tiene sus ojos puestos en la princesa y...en la pequeña Jamileth...a pesar de que también llamo su atención no ocupará el lugar de la princesa, ninguna puede ocupar el lugar de la otra y su majestad lo sabe.
Lily se quedó callada y le dio la razón al pelirrojo, nadie iba a poder reemplazar a athanasia y lo mismo era con Jamileth. Dejo de lado su preocupación y sonrió con ternura al ver las sonrisas alegres de las amigas.
Esas niñas le hacían acordar a ella con Diana.
-bien, niñas será mejor que se den un baño y luego coman algo.
Ellas miraron con un puchero a la nana que las agarró de la mano llevándolas al baño.
Las dos seguían charlando mientras lily lavaba su cabello con suavidad.
-...yami por qué te cuida el hombre blanco y su esposa?.
Fue una pregunta que ya tenía respuesta pero quería saber lo que su prima pensaba de ellos. Después de todo ella no es zenit.
La mayor las miro nerviosa y luego miro a la peli marrón que tenía abrazadas sus piernas y ahora estaba mirando hacia abajo.
-....nunca les pregunte a mis tíos sobre mis padres, tampoco quiero saberlo ya que no tengo curiosidad por ellos, aunque...no veo a mis tíos como mis padres, ellos jamás van a ser mis padres.
Sus ojos no demostraban enojo o tristeza, seguía teniendo una mirada inocente y segura pero había algo más en ellos. Algo que Atthy conocía muy bien.
-...no los quieres?.
-claro que los quiero, pero...ellos no nos quieren del todo, siempre que la tía Rosalía viene a visitarnos nos mira raro, tiene la misma mirada que el tío Roger cuando estoy con mi hermana.
Movió los dedos de sus pies mientras la rubia, que también estaba abrazando sus piernas, miro hacia sus pies y sonrió levemente.
-...te gustaría dormir conmigo un día? -la miro sonriente haciendo que yami se sorprenda igual que lily.
-me gustaría pero tengo que preguntarle al tío además de que mi hermana se pondrá triste si no duermo con ella.
-duermen juntas? -hablo sin evitarlo la nana mirando curiosa a la peli marrón.
-sí, cuando éramos bebés nos hacían dormir juntas porque zenit lloraba mucho, o al menos eso me dijo la tía, así que siempre dormimos juntas.
Decidieron cambiar de tema y las tres hablaron amistosamente.
Lily le puso un vestido rosa a la princesa y uno celeste a la peli marrón, había dejado el cabello de yami a una coleta al costado y el de Atthy lo ató a dos coletas.
Luego de dibujar un rato juntas y jugar nuevamente con black. Tomaron la merienda.
-sabes yami!, mi nombre significa inmortalidad y el tuyo? -los dos adultos miraban divertidos la charla que tenían las niñas.
Por unos momentos estaban calladas murmurando entre ellas cosas de sus dibujos o de cosas que les gustan y luego sacaban temas de conversación que nadie se imaginaría.
-mmm por lo que me dijo kiel, significa hermosa, es cierto que en la familia Real los que tienen un nombre con significado de eternidad o inmortalidad están destinados a ser emperadores de obelia?.
-sí, hubo una emperatriz que se llamaba Embrose.
La peli marrón se quedó en silencio y pensativa para luego mirar a felix que parpadeo curioso, ella sonrio alegre.
-entonces cuando yo me convierte en caballero tú serás la emperatriz y yo tu escolta, como felix y el emperador!.
Los tres la miraron con sorpresa pero ella siguió sonriendo con alegría y esperanza.
-"yo ser la emperatriz?, jamás lo había pensando aunque no es malo soñar un poco" -sonrió levemente y asintió alegre -claro!, seremos como felix y papá!.
Las dos se sonrieron alegres y haciendo una promesa mientras lily las miraba con ternura y el caballero escarlata lloraba a mares.
-"la princesa y la señorita yami son tan tiernas, ojalá el emperador hubiese sido tan alegre de niño (7_7)".
.
.
.
Al llegar la hora de irse, las dos caminaron de la mano hacia la sala del trono donde estaba el emperador. Al verlas llegar arqueo una ceja pero se levantó y empezó a bajar.
-parece que se divirtieron.
-sí!, Atthy se divirtió mucho con yami.
La peli marrón miró curiosa a su amiga, cuando estaban solas actuaba libre y madura pero cuando estaba con el emperador era muy alegre y sonriente. Que raro.
-Alfierce vendrá en unos momentos -aviso mirando a la menor que asintió y luego miro curiosa el trono.
-...brilla mucho -susurro con el ceño fruncido, a ella no le gustaba que las cosas brillen.
-es oro yami, también hay estatuas de oro -conto con emoción, ella amaba el oro.
-la tía también pone esa expresión cuando el viejo le regala alguna piedra que brilla, no lo entiendo -hizo una mueca al recordar el rostro brillante de su tía al recibir joyas.
Felix rió por lo bajo igual que la rubia.
-parece que no te gustan las joyas -ante la voz de claude su sobrina lo miro y nego.
-no, creo que no sirven si en algún momento debes luchar con alguien.
Los tres la miraron con una gotita al saber que el mundo de yami estaba rodeado de luchar y usar la espada.
Digno de un futuro caballero.
Cuando el duque llegó y yami se despidió de los tres, el emperador y la princesa fueron a tomar el té.
Mientras iban directo a la mansión el duque revisaba unos papeles mientras yami miraba por la ventana. Iba moviendo sus pies alegre por haber jugado tanto tiempo con Atthy.
Hasta que recordó la charla que tuvieron en el baño y dejo de mover sus pies para luego mirar a su tío.
-...qué sucede? -la miro neutral al ver que apretaba su vestido dudosa.
-...tío, por...por qué zenit y yo no tenemos padres como los demás niños? -apreto su vestido y bajo su mirada con el ceño fruncido.
El albino quedó sorprendido ante su pregunta y la miro atento. Ella no era como zenit, si bien era infantil y rebelde ella no era alguien que pueda manipular. Era inocente pero no estúpida.
-...cuando nacieron su madre estaba muy débil y no pudo resistir, su madre se llamaba Penélope era parecida a tu tía solo que tenía los ojos verdes.
Ella lo miro con un brillo de felicidad en sus ojos al saber de su madre y sonrio sin poder evitarlo.
-ustedes se parecen mucho a su madre, pero sus ojos lo sacaron a su padre -el duque tuvo un brillo oscuro en sus ojos que incomodó a la menor -...cuando seas más grande sabrás acerca de él.
Ella sin decir nada más se quedó en silencio y apreto sus labios insatisfecha.
.
.
.
Miro a su gemela dormir a su lado, sus frentes estaban casi juntas y sus manos unidas. Como siempre, la noche había llegado pero yami no tenía sueño a pesar de haber jugado todo el día.
Estaba inquieta, sentía que algo malo había pasado y eso no la dejaba dormir. Además de que quería saber más sobre sus padres.
La pregunta de la princesa había despertado una gran curiosidad en ella.
Con cuidado solto a zenit y se bajó de la cama saliendo de su cuarto. Fue a la cocina y estuvo a punto de agarrar algunos dulces pero se escondió dentro de uno de los muebles al escuchar que alguien entraba a la cocina.
-parece que la pequeña yami tiene curiosidad por sus padres.
Era una de las sirvientas.
-así parece, aunque siento pena por ellas dos, recuerdo cuando nacieron, la señorita zenit nació fuerte y sana pero la señorita yami nació casi muerta y gracias a un milagro está viva.
Ante eso abrió sus ojos sorprendida y escuchó atenta la conversación.
-es una pena que la señorita Penélope haya muerto justo antes de que la pequeña yami naciera, tal vez haya sido por culpa de la pequeña yami que murió?.
Su corazón se detuvo ante lo que dijo y apreto su pijama con fuerza.
-shhh!, no digas esas cosas, es obvio que no es su culpa, ninguna mujer puede resistir un embarazo que proviene de esa familia y lo sabes, al menos si queda embarazada tiene que tener algo de mana en su interior y Lady Penélope no lo tenía.
-pero, escuche de la duquesa que Lady Penélope sí tenía mana en su interior por eso se comprometió con quien ya sabes quien.
-como sea, sabes que no debemos de hablar de eso es una orden del duque.
-oh vamos, aquí no hay nadie solo estamos nosotras.
Las dos salieron de la cocina ignorando que yami había escuchado todo lo que dijeron.
Salió del mueble sin hace ruido y fue directo al cuarto de kiel, al entrar se arrimó a la cama y movió su brazo.
-kiel, despierta, kiel.
El albino empezó a abrir los ojos adormilado y al verla se refrego un ojo.
-yami?, qué haces aquí?.
Se sentó mirándola preocupado, ella jamás pedía dormir con él, era muy rara la vez que lo hacía. Y ahora sus ojos lucían tristes.
-...kiel, crees que las personas que se acercan a mi en algún momento se morirán por mi culpa?.
Él parpadeo confuso y sonrió levemente haciéndose a un lado para que ella se siente a su lado.
-todas las personas llegan a morir en algún momento pero no creo que alguna muerte vaya a ser tu culpa, de dónde sacaste eso?.
Ella guardó silencio y apreto sus labios jugando con sus dedos.
-...soñé algo feo.
Al saber que estaba mintiendo solo acaricio su cabello y la abrazó. Los dos se acostaron juntos y él siguió acariciando su cabello.
-yo te protegere yami, lo prometo.
Ella sonrio cerrando sus ojos y oculto su rostro en su pecho escuchando los latidos de su primo.
Kiel miro preocupado a su prima, ella no era como zenit que si se sentía triste lloraba sin necesidad de ocultarlo. Yami ocultaba sus emociones tras una enorme sonrisa dispuesta a alegrar el día de los demás.
Qué le estaba pasando a yami?.
-la princesa está enferma?.
Zenim miro con sorpresa a su esposo mientras las gemelas se quedaron igual de sorprendidas pero yami bajó la cabeza triste.
-sí, nadie dice nada pero se sabe que los magos más poderosos han ido a ver a la princesa.
-espero que la princesa esté bien -susurro zenit juntando sus manos preocupada.
Su gemela sintió sus ojos cristalizarse pero trago saliva y miro determinada a su tío.
-quiero verla tío!, quiero ir a ver Atthy!.
Los duques la miraron y al ver sus ojos brillantes como gemas se sorprendieron, eran los ojos reales. El duque sonrió de lado y asintió ante la alegría de la menor.
Yami estaba rompiendo el hechizo que ocultaba sus verdaderos ojos.
.
.
.
-quédate aquí.
El duque ahogó un suspiro de irritación y miro a su sobrina que iba caminando tras el emperador.
Hace una semana que la princesa estaba en cama sin despertar. Claude, ante la sorpresa del duque, aceptó que yami visite a Atthy.
El silencio reinaba entre los dos mientras iban por los pasillos del palacio esmeralda.
-"parece que está cansado".
El emperador en verdad lucia cansado, yami al estar en frente de la habitación de la rubia vio a felix que le sonrió amable y ella le sonrió levemente ante su curiosidad.
La pequeña lucia triste, tal vez era por el estado de la princesa.
Ahogo un jadeo de sorpresa al ver el rostro pálido de la princesa, apretó sus manos y se acercó a la cama, la miro por un rato ante la mirada del emperador y del caballero. Se subió a la cama y con duda acarició el cabello de la rubia como hizo su primo con ella.
-no se preocupe, la princesa es fuerte despertará muy pronto -habló felix sonriendo amable mientras yami dejo de acariciar a Atthy y jugo con sus dedos.
Se mantuvo así por unos momentos y tragó saliva nerviosa.
-...y si Atthy esta así por mi culpa?.
Los dos la miraron incrédulos y luego se miraron entre ellos.
-eso no es posible -claude miro sereno a la niña ante él que reflejaba miedo y angustia -por qué piensas eso?.
-...yami escucho de alguien que por mi culpa mi madre murió -ante eso abrieron sus ojos sorprendidos y el pelirrojo la miro con tristeza -si yo maté a mi madre entonces...yo tengo la culpa de que Atthy esté así?...yo...debo de alejarme de ella?.
Al escuchar esas palabras el emperador abrió sus ojos en shock y luego frunció el ceño, se acercó a ella y la bajo de la cama ante su sorpresa. Lo miro sorprendida cuando se agachó a su altura y acarició su cabello.
-es estupido que pienses eso niña, Atthy no esta así por tu culpa, su cuerpo no pudo soportar su mana y por eso enfermo, tú no tienes la culpa de nada y tampoco tienes que alejarte de ella.
Ella lo miro sorprendida pero luego bajo la cabeza apretando su vestido.
-p-pero...
-eres una niña, los niños no tienen la culpa de nada -el rubio parecía estar hablandose a sí mismo mientras miraba los ojos celeste ante él, los cuales por leves segundos tuvieron un destello cerúleo azul -deja de pensar en eso y ten esperanza que athanasia despertará, un caballero siempre debe tener esperanza y seguir luchando, no?.
Ella parpadeo y al entender asintió sonriendo alegre. El rubio le sonrió de lado y se paró mirando a felix que había mirado todo sorprendido.
-dile a Alfierce que Jamileth se quedara hasta que ella desee irse.
El pelirrojo asintió y antes de irse un soldado entró agitado.
-su majestad, hay un mago que dice poder curar a la princesa!.
Yami parpadeo y luego miro hacia la ventana al sentir algo extraño.
Como hace 1 año sentía que algo la estaba llamando.
Qué era?.
~~~~~~~~~
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro