Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

❄️ 𝙁𝙖𝙙𝙞𝙣𝙜 𝙨𝙩𝙖𝙧


❄️

Aquí vuestra dosis de angst, mis queridos Sally lovers <3.


El día que llegaste todos nos sorprendimos. Parecías un meteorito callendo del cielo, llegamos a pensar que ibas a chocar contra la casa de alguno; pero en realidad eras una estrella fugaz. Una brillante y hermosa estrella fugaz. 

Eras tímida al principio, lo recuerdo, pero no te costó acostumbrarte al nuevo entorno; tampoco te costó acostumbrarte a mis constantes preguntas sobre las estrellas, el espacio, la astronomía. Amo la astronomía, y cuando te ví estaba intentando aguantarme las ganas de ir corriendo hacia tí y asegurar de que todo lo que ponía en los libros de astronomía de Frank era verdad; no lo hice porque estabas aturdida y levemente herida, y porque Howdy pudo pararme a tiempo. Nunca te lo dije, pero creo que lo pudiste deducir cuando empezamos a tener más confianza entre nosotros.

Cuando te diste cuenta que querías actuar, me alegré mucho por tí y te apoyé en todo lo que necesitaste; leí tus guiones y te dí mi opinión, te ayudé con los disfraces, me encargué del telón muchas veces y te daba la enhorabuena cada vez que terminabas tus obras y salías fuera del escenario. Cuando yo me di cuenta de lo que quería hacer con mi vida, tú hiciste lo mismo, y eso me hizo tan feliz. Creo que fue en ese momento en el que me empezaste a gustar.

Aquella noche en la que me explicaste cosas de tu vida en el espacio, viendo a tus familiares lejanos y respondiendo a mis preguntas, me dí cuenta de que quería estar contigo siempre; me enamoré de tí.

Brillabas en la noche, iluminabas mi corazón y mi vida. Nunca te lo dije, pero creo que la astronomía dejó de ser un hobby y se convirtió en mi pasión cuando te conocí. Cambiaste mi vida de la mejor manera posible. Para mí no eras sólo una estrella; eras mi estrella Polar, mi Sol personal, el astro más brillante en el cielo nocturno de mi corazón. 

Aquella mañana de abril llegó Eddie con una carta para mí; una carta tuya, expresando todo lo que sentías por mí. Siendo honesto, lloré de felicidad, de euforia, ¡sentías lo mismo que yo! Algo que en su principio parecía imposible, como un sueño lúcido, porque pensaba que eras demasiado para mí, pero acabó siendo real.

Llegó el otoño. Fui a visitarte por la tarde, pero algo no cuadraba. Tu casa estaba desordenada, había guiones de obras por el suelo, tu pijama encima del sofá, arrugado, pero lo más importante: no estabas igual de energética que siempre.

Ojalá me hubiese dado cuenta antes, me siento estúpido ahora que lo recuerdo, porque realmente te veías como si estuvieras enferma, pero no lo supe ver. Estabas más decaída, y puedo jurar que tu luz no era tan brillante como antes. Y, a medida de que pasaban los días, las cosas empeoraban. 

Empeoraste tan rápido que apenas me dio tiempo a reaccionar.

La misma noche que me enamoré, recuerdo que me dijiste: "¿Sabías que cuando las estrellas se van a morir se tornan azules? Como aquella de allí. Es un poco triste, pero no es algo que se pueda evitar". Lo recordé.

Sally, te estabas muriendo.

Y no me dijiste nada, no nos dijiste nada. Si lo hubieses hecho, hubiese podido hacer muchas más cosas contigo, haberte dicho tántas cosas que nunca pude o me atreví a decirte. Querías pasar todo el tiempo que te quedaba con las personas que te querían, con tus amigos, conmigo. Hubo un tiempo que me quedé contigo en tu casa, estabas tan débil que apenas podías andar sin caerte. Ya no brillabas para aquel entonces; eras azul.

Todos sabíamos lo que te ocurría, tú sabías que lo sabíamos. Pero no dijiste nada, quizás porque ni siquiera tú lo querías aceptar. Nadie quería aceptarlo.

Todos venían a visitarte a diario; Poppy te traía tus dulces caseros favoritos, Frank intentaba encontrar una forma de retrasar tu temprana ida, Julie traía juegos de mesa en un intento de animarte, Wally y Howdy ya no discutían por las manzanas, los demás te dábamos comfort y todos los mimos que podíamos. Nada funcionaba, no mejorabas. El barrio dejó de estar tan bullicioso y animado como antes. 

Una mañana desperté a tu lado, me abrazabas, ahora era yo el que te daba calor y no al revés. Temblabas, estabas pálida, como la nieve, débil, vulnerable. Me asusté mucho cuando no abriste los ojos o diste alguna señal de vida cuando pronuncié tu nombre. Pero eso quedó en un susto.

A lo largo del día empeorabas sin parar. Ya ni podías levantarte de la cama, estabas cansada, agotada, no sonabas alegre y hablabas muy bajito, no reías, pero sonreías débilmente, tampoco comías en condidiones, no te molestabas en gritar o buscar atención, no tenías ganas de nada. Los demás vecinos vinieron un poco mas tarde de lo normal, así que el atardecer ya se estaba transformando en la noche. 

─ Chicos, no me encuentro bien...

Sentí esas palabras como un golpe en mi estómago. Me alteré tan rapido cmo escuché esa frase saliendo de tu débil ser. Tomé tus manos, estaban frías, me entristeció mucho más de lo que ya lo estaba. 

─ Sally, todo va a estar bien, ¿sí? ─ Intenté mostrarte una sonrisa tranquilizadora, pero sólo se veía preocupación en mi rostro.

─ No... No respiro bien. T/N, tengo miedo... ─ te oí decir con voz temblorosa mientras lágrimas brotaban en tus ojos cansados. Todos te mirábamos preocupados, entristecidos. Intentamos calmarte como pudimos, hice el mayor esfuerzo que jamás hice por ser fuerte ante tu situación. Y aun así, no pudimos evitar lo inevitable.

─ Mi hora, ha llegado.

No. No, aún no, pensaba yo. Aún te quedaba tánto por vivir, tántas cosas que experimentar, tánto por hacer y decir, tánto por vivir. Mi agarre se hacía más fuerte, pero no hasta el punto de hacerte daño. Ahora eran mis ojos de los que florecían lágrimas abundantes.

Antes de irte, nos pediste que te lleváramos afuera para ver a tus familiares por última vez, y así hicimos, Barnaby te cargó y te dejó en el suelo, mirando al estrellado cielo nocturno; una vista espectacular. Pude ver un brillo en tus ojos, pero quizás eran lágrimas. Yo me puse de rodillas a tu lado, me miraste y te miré de vuelta, no pude aguantarlo más y comenzé a llorar. Tomaste mi rostro mojado con tu mano gélida y limpiaste algunas mientras una suave sonrisa se formaba en tus labios. 

─ Había tantas cosas que quería hacer contingo... ─ dije yo entre sollozos.

─ Prométeme que harás todo lo que queríamos por mí, por favor. Cumple mi deseo. ─ Ella acercó mi rostro y lo besó con delicadeza. Sus labios helados en los míos. Cuando nos separamos, continuó. ─ Cumple el deseo de esta estrella fugaz. 

Mis sollozos se hicieron mucho más intensos mientras asentía, posando mis manos sobre las tuyas. Tu sonrisa se hizo más amplia y cerraste los ojos. Con tu ultimo esfuerzo pudiste decir un "Gracias" y un "Te amo" antes de apagarte completamente.

"Te amo."

Se repetía en mi cabeza como si nunca lo hubiese escuchado.

"Te amo."

"Te amo."

"Te amo."

Yo a tí también.


Aunque ya no estés aquí, siempre te amaré, Sally.


Muy buenos días/tardes/noches/madrugadas, soy Booyah o Lu y este es mi primer oneshot de angst 😻. (Pronto haré la versión en inglés, ¡YIPPIEE!)

Casi lloro en el proceso de escribir esto, perdón es que me imagino todo tan detallado y soy muy emocional JAJSJA-

¡Gracias por leer este oneshot que hice por impulso! ¡Si os ha gustado por favor votad! Y si tenéis alguna crítica constructiva estaré encantadx de leerla <3.

"Bye-bye, Neighbor!~"

❄️


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro