Sus manos como tentáculos se movían por todo mi cuerpo, tocado cada rincón de mi desnudo ser. Dónde sea que sus manos tocará se sentía tan bien, una explosión de deseo quemando todo a su paso para luego crear olas corrosivas de calor puro.

No tenía tiempo ni para respirar cuando mi oxígeno era tomado por ellos tres, quienes se turnan para poder saborear mis labios, morderlos cómo si de comida se tratase.

Llega un punto en que se adormecen al igual que mi trasero al ser embestido una y otra vez por las filosas caderas de Kaiser.

Sus movimientos me hace perder la razón poniendo mi mente completamente en blanco, él como los otros dos, saben exactamente donde tocar cuando están dentro o fuera mío.

Ya perdí la cuenta de cuántas veces me he corrido y sigo haciéndolo sin poder detener mi descontrolado cuerpo, es demasiado bueno el ser sostenido de está manera. Quizás es por está misma razón es que en nigún momento me sentí tan satisfecho como hoy, al momento de tener relaciones sexuales.

Nadie me había hizo gemir tanto hasta que mi garganta se volvió aspera, bueno sí, pero solamente que yo no recuerdo mucho de nuestra vida pasada juntos.

Sin embargo, puedo estár seguro que siempre se a sentido así de bien, el follar en cuarteto.Juntos como en este momento que estamos en una posición extraña.

—¡.....~!

Valentín gimió ahogado, esa cosa en su boca no le permitía dejar salir alguno ruido más el chapoteo obsceno al momento en que, su boca era embestida por Sasha.

Ese joven de cabellos negros y llorosos ojos azules turquesa, tenía la boca llena con esa barra de chocolate llegando más allá de su garganta.

Sentía temor terminar ahogado por la comida en su boca, pero eso solo incremento la excitación en su cuerpo. A penas podía sostener ya que sus manos y rodillas cada vez se vuelven más flácidas.

Valentín estaba arrodillado sobre a cama con su trasero levantado para kairse, bajo de su cuerpo se encuentra Black, haciendo de las suyas y frente de sus ojos cristalizados se encuentra un lujurioso y lascivo Sasha con sus dedos enredados en los húmedos cabellos negros de Valentín.

Sasha está perdidamente disfrutado de esa felación, enloquecido por sensación de ser consumido por ese calor de esa cabida bucal, pero lo que más disfrutaba era ver la expresión de su maestro. Esa mirada que te hacía creer que tenía estrellas por la convulsión de placer.

Era tan sublime esa expresión que Sasha, se la tatuó en su mente. Mientras sus manos se aferran al cabello de Valentín y sus labios van en busca de los de kaiser.

Kaiser acepto el beso, deslizado su lengua en esa jadeante boca obscena de Sasha. El ruido de sus fluidos se convirtieron en uno con el sonido de sus caderas embistiendo a Valentín.

Valentín se había emocionado escuchado el ruido de ese beso entre Kaiser y Sasha. Ya que estos dos se había inclinado hacia adelante para que Valentín y Black lo escucharán.

—Mmg~—Black dejó salir un murmullo al sentir los dedos de Valentín, jugado con su expuesto trasero.—Maestro...¡Ahmg~!.—Cuatro dedos había entrado sin problemas, estába muy dilatado luego de tomar tres veces seguidas el miembro de Valentín.

Todos están perdidos en el frenesí de la excitación, pero más uno, Valentín. El está recibiendo placer de que manera, bajo de su cuerpo se encuentra Black, lamiendo y tomando con su boca ese duro árbol que envuelve con la lengua desde el glade hasta el tronco donde lame todavía más lascivo las canicas de su maestro.

Y como si eso fuera poco para morir locamente en placer, kairse sigue embestido más fuerte deslizándose todavía más profundo por ese interior hirviendo, contrayendosé por ese sin fin de placer.

—Señor~—Ese fue un aviso por parte de kairse, de que está llegado al límite.

—¡Valentín!—Sasha exclamó eufórico el nombre de su maestro.

—Maestro.—Black se estremecio al sentir como Valentín, destroza su punto dulce.

Los cuatros estaban por llegar al clímax al mismo tiempo, querían quedarse sin fuerza, eso lo volvía más emocionante.

—¡Uhg~!...—¡¿Tan caliente?!

Valentín no logró alejarse a tiempo y termino salpicado por esa cosa viscosa que dejó salir Sasha, lo mismo paso en su espalda. Kairse había salido de Valentín, corriendose en esa sudorosa y rojiza espalda con marcas de diferentes mordidas y chupetones.

—...Agua—Pidio Valentín con su voz ronca y una respiración inestable.—No tengo fuerza...—Cayo de lado sobre la cama, a lado de Black. Sus hombros se frotan entre sí.

Esto fue más intenso que la última vez, mi trasero sigue teniendo espamos, y mis piernas se han quedado sin fuerza al igual que mis brazos.

—Mmm~—Quería agua pero no precisamente así.

Sasha había puesto agua en su boca y de esa manera medió de beber, sería asqueroso en otras situaciones, sin embargo en mi boca tuve su polla y por poco me trago su semen, beber agua de su boca es lo de menos.

—¡Uhh!—Black tomó por el cuello a kairse, este también hizo lo mismo. Le dió un poco de agua al mismo tiempo que eso se convirtió en un beso con lengua.

Dos segundos después cambiar de pareja y kairse devoró los labios de Valentín y Sasha los de Black. Poco después ese beso se volvió de cuatro, encendido sus cuerpos una vez más.

—¿Uh?...¿Que estás haciendo?..mmhg~—Dejo cae su pecho hacia adelante, cayendo sobre Black.

Valentín fue subido al regazo de Black, este con sus manos separó la suave carne donde se esconde ese pequeño lugar.

—Black...no toques.—Su cuerpo estaba muy sensible, con el toque el más simple podría correrse una vez más.—¡Aahh!

Valentín se contrajo al sentir esa dura rama gruesa destrozado sus blandas y temblorosas paredes de su interior que, se van calentado cual volcán en erupción.

—No te muevas...mmgh~

Mierda no podía seguir refutando o advirtiendo cuando, mis pezones están siendo pellizcados y mordidos por este maldito zorro de nueve colas. Solo podía mover mi trasero sin poder hacer nada.

—Hay espacio para uno más.—Sugirió con una sonrisa perversa, estremeciendo a Valentín.

—¿De que demonios estás hablando?—No es que estoy pensando, ¿Verdad? ¡¿Imposible?!—Nmhg~—Gime una vez más al sentir como esa entrada está siendo expandida por los dos Black.

—Vamos, ¿qué esperan?—Expuso todavía más el trasero de Valentín.

Kaiser y Sasha lamieron sus labios muy sedientos, ellos dos solo veían cómo esa entrada se contrae cada vez que Black, empuja su miembro en el interior de Valentín.

—¿Valentín?

—¿Señor?

Sasha y kairse pidieron el permiso de Valentín, con esas miradas de cachorritos a las cuales no podías decirles no. Sin embargo, Valentín lo pensó por unos diez segundos antes de darles una respuesta.

—Bien—Suspiró derrotado.—Pero, si digo que se detengan se tienen. ¿De acuerdo?

—¡Sí!—Responde al unísono todos emocionados.

Valentín de un momento fue alejado de black, para terminar arriba del cuerpo de Sasha, deslizado su trasero por ese duro miembro.

—¡Oye!—Black se molestó.—Yo....¡Aahh~!—Giro un poco su cabeza solo para ver a kairse.—Tú...Mngm~—No se suponía que ésto fuera así.

—Estaras en el interior de mi señor.—Susurró cerca del oído de Black.—Mira, está esperando por ti.—Inclino la espalda de Black.—Tenemos que disfrutar los cuatro.

—Esta será la única vez en que usarás mis trasero.—Muerde la oreja de kairse.—Maestro—Pone sus manos en las caderas de Valentín.—Voy a entrar.—Besa la espalda de Valentín.

Valentín se encuentra super inclinado hacia adelante sobre el pecho de Sasha, con su trasero expuesto a la vista de Black y kairse quienes no retiran sus miradas de ese lugar, viendo como el miembro de Sasha es succionando por ese deseoso agujero.

—¡¡Aaahh!!

Joder siento que me van a romper en dos, puedo escuchar ese sonido de expansión, la opresión generada en la boca de mí estómago no es una maldita broma. Es sofocante y se me hace difícil el respirar bien, esas dos cosas me han llenado por completo.

Es aterrador el tener dos cosas moviéndose dentro de mí, creado esa fricción al momento en que sus miembros se frotan entre sí. Están calentando, haciendo arder todavía más todo mi descontrolado interior.

Ya no sé dónde estoy o quién soy mi mente está completamente en blanco, hasta el punto en que mi cuerpo se a empezado a mover por si sólo y los gemidos de Black, sobre mi espalda eriza mi piel.

—Valentín—Susurró a la vez que muerde los hombros de Valentín.—Se siente bien, muy bien.—Expresó Sasha escondió su rostro en el pecho de Valentín, querido morder los pezones de Valentín.

—Maestro—Black muerde la piel frente a él, estremecido a Valentín, quién levantó un poco su mirada para poder ver a kairse y a Black.

Como pudo levantó su mano derecha para acariciar el rostro de cada uno, ellos cerraron sus ojos disfrutado de sus caricias, acelerado el ritmo de sus movimientos.

—¡Uhg~!

Los cuatro una vez más llegaron al climax, jadeado pesadamente uno encima del otro, convirtiendo el sonido de sus respiraciones en una sola, al igual que el ruido de sus labios besándose sin importar la falta de aire.

Cuando vengan a darse cuenta verán que el los primeros rayos de la mañana están empezando a pintar el cielo, si que había tenido muchas rondas de sexo que ni siquiera prestaron a tención a su alrededor, que ya eran las cinco de la mañana.

Ellos se había dado mucho amor desde ayer hasta el amanecer sin descansar más de cinco minutos cuando empezaba la siguente y la siguente ronda.