{06}
Martes, 13:00 horas.
Yoon Gi cruza las piernas y junta sus manos sobre la rodilla. Mira al hombre que tiene frente a él y trata de mostrar su sonrisa.
Cree que aquel chico es muy apuesto, y fue más fácil invitarlo a una copa que a una mujer.
¿Por qué será? ¿Es más fácil atraer a un hombre? Se cuestiona demasiadas cosas, pero quiere probar.
—¿En qué trabajas?—le pregunta el otro, bebiendo un poco del vino blanco que tiene en su copa.
—Soy informático.
Yoon Gi siente un cosquilleo en el estómago; las manos de aquel hombre aparecen frente a él. Tocan su cara, bajan por su cuello, su torso y llegan a sus muslos.
—¿Qué quieres hacerme ahora, Yoon Gi?
—No lo sé...
Siente las manos apretar sus muslos con fuerza y los labios de aquella persona muy cerca de su boca.
—¿Cómo se siente esto?¿Te excita?
Siente el peso del cuerpo del otro sobre él, sus labios tiemblan un poco, el calor le sube hasta la frente. Siente un aroma a perfume de lavanda, algo no está bien, levanta sus manos y la empuja a esa mujer que de repente se aparece frente a su rostro. Abre los ojos y respira agitado.
Al otro lado de la mesita de vidrio lo tiene a él, en otro asiento, su psiquiatra lo mira fijamente y anota en la libreta.
—¿Cómo te sentiste con eso?—su bolígrafo hace un pequeño baile entre sus dedos, esperando para escribir.
—No lo sé, creo que me asfixio.
—Bueno, así se siente alguien cuando intentan obligarlo a hacer cosas que no desea—anota algo en el papel y vuelve la vista al paciente—¿Has tratado de hacerle esto a alguien, Yoon Gi? ¿Tus ansias han podido contigo?
A Yoon Gi le sudan las manos, pero niega con la cabeza. El doctor lo pone nervioso, aunque sabe que lo intenta ayudar, pero sus métodos son muy extraños. Su cuerpo y mente se sumergen dentro de su propia cabeza, dentro sus fantasías y todo parece muy real.
—¿Pensaste en una mujer desde el inicio?
—Sí...—mintió.
—¿Si hubiera sido un hombre la sensación sería la misma?
—Sí —volvió a mentir.
No le gustan los métodos del doctor Seok Jin para hacer que se adentre en sus pensamientos; a veces quiere lanzarse sobre él y ahorcarlo porque le provoca sofoco. Él sabe que tiene un problema y si no lo controla puede llegar a matar a alguien.
Eso le genera curiosidad y a la vez miedo. ¿Qué puede llegar a sentir hacerlo con esa chica? ¿Y por qué pensar en que es un hombre le da escalofríos y le genera algo en su más íntimo pensar?
—Yoon Gi... ¿Qué piensas sobre esa chica de la que me hablaste?
—Que me odia—responde de inmediato—.Todas me odian.
—Bien...—el joven doctor suspira y deja el cuadernito a un costado— .Hemos vuelto atrás, Yoon Gi. Las cosas no van bien y temo que te salgas de control, ¿entiendes lo que te digo?
—No haré nada a nadie— lo mira enojado—.He vuelto a mi rutina de running, eso me distrae.
—No lo suficiente.
—Le juro, doctor—Yoon Gi se levanta del sillón y se arrodilla ante él —,que no haré nada. Evado a cualquiera que se me acerca, en el trabajo también. Ya no socializo con nadie. Sólo me centro en correr.
Seok Jin lo mira sin expresión. Definitivamente cree que ha empeorado y que es peligroso.
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