Me gustas.

No puedo decir que te amo, porque aún no estoy seguro, pero de que me gustas, me gustas.

Si es algo pasajero, quedará así, pero si termina siendo algo más fuerte, bueno, al menos ya desahogué parte del amor que siento por ti.

Nunca podría decírtelo a la cara, porque de seguro en ese momento me molerías a golpes, como solías hacerlo antes de conocerme y ser amigos.

En una carta tampoco podría, porque sabrías de inmediato que fui yo, soy el único lo suficientemente "cursi" como para hacer algo así.

Me dejas sin opciones, estúpido.

Así que lo digo aquí, no lo leerás, y eso me hace feliz.

Me gustas, así de simple, no es complicado.

Lo complicado es aceptarlo y atesorarlo como algo hermoso.