Capítulo 6 "Primera charla"
Dedicado a @Marisol18 gracias por las recomendaciones cariño.
¿No puedes escucharme? Es lo que quiere preguntar, pero luego señala el gafete y a Louis.
"Oh sí" parece recordar Louis, él ya lo había visto antes y sabe que este chico usa un primitivo lenguaje de señas, pero no puede evitar apreciar el ligero temblor de sus manos y sus intentos por decir algo, es frustrante Louis lo sabe, querer gritar y no poder, las ganas inmensas de decir todo lo que el cerebro está pensando pero el mismo cuerpo se vuelve prisión.
El chico frente a él exhala cabizbajo, mira sus propias manos como reclamándoles por no ayudarlo, entonces aparece un puchero, algo que hasta este momento Louis hubiera considerado ridículo en un adulto, pero no lo es. Ver su desesperación por comunicarse con él lo vuelve todo dolorosamente perfecto.
Aquello solo lo convierte en alguien extremadamente valioso, infinitamente bello.
Louis lo mira como aquel humano que ha pedido una lámpara con un genio, porque la mayoría de las personas huyen de alguien que no los puede escuchar, las personas prefieren escapar antes de hacer un esfuerzo, perdiéndose de conocer a alguien tan especial como Louis. Harry sin embargo; no parece ser parte de ese grupo, él permanece de pie mientras Louis lo mira absorto y su cerebro cuestiona enérgicamente ¿de dónde diablos salió este hombre?
Louis ya no se sumerge en ese tipo de tristezas, dejó de sufrir por eso porque entendió que solo desgastaba su alma. Así que sube las puntas de su abrigo para dejar descubierta sus manos y presentarse.
"L-O-U-I-S" señala.
Algo debe notar en el rostro del otro hombre porque sus ojos verdes se abren cada vez más y está con la mirada fija en los ojos de Louis, de pronto recae en sus manos delgadas y Louis siente pena porque sus cutículas están carcomidas, las ha estado comiendo desde un tiempo y ¡mierda! Su mirada ahora se dirige a las manos de este tipo, sus dedos largos y delgados serían estupendos e intenta no pensar demasiado en eso.
Harry se siente como un perdedor cuando no logra comprender nada de lo que este hermoso hombre intenta comunicar, su frustración es demasiada y niega con la cabeza para sí mismo cuando siente que Louis se detiene en seco. Antes de que el chico huya, Harry saca un pedazo de papel, un ticket de la cafetería que aún guarda y un bolígrafo.
Hola, soy Harry. Lo siento, soy nuevo y un poco torpe.
Louis lee la única línea que el chico ha escrito y sonríe en su interior. Lo mira de nuevo y su cabeza hace un movimiento leve casi en zigzag.
Soy Louis, no te había visto aquí ¿primera vez? ¿vienes a alguna clase?
Harry lee y se sorprende asintiendo, un segundo después niega, toma el papel y lanza una súplica a la Divina providencia para que su cerebro coordine con sus acciones, porque ¿quién no tiembla tan cerca de este hermoso, hermoso castañito? Su cabello parece algo salvaje en las puntas y hay una barba salpicada que emerge junto a su perfecta mandíbula, el ojiverde sube escasos centímetros su vista y encuentra aquellos ojos impresionantemente azules, tan azules como el mar de su isla favorita.
Mientras escribe una respuesta que parezca coherente inhala ese hilo de perfume que baila entre ellos, Harry piensa que, si su oído no funcionara, quisiera tener un mejor olfato y olerlo desde donde está porque una ligera brisa a bebé se desprende desde el cuerpo de este magnífico hombre y él quiere hundir su nariz en su piel, sus glándulas parecen hechas para producir un aroma exquisito y Harry olvida por un momento lo que estaba a punto de escribir.
¿Eres nuevo?
¿Nuevo? ¿en qué? Su cerebro se desconecta de sus pocas neuronas parecen haberse ido de vacaciones a Louislópolis porque ya no sabe qué debe responder.
Las pestañas se entretejen delicadamente y proyectan una sombra perfecta sobre sus pómulos altos y Harry casi tiene que atar sus manos porque él quiere tocar su rostro y comprobar que es real.
Las cejas de Louis forman un arco perfecto, tanto como para hacerle un monumento o un tatuaje, piensa Harry, quizá en su pecho podría ser, para que cada vez que Louis lo vea de frente, recuerde que ha sido tan impresionante que Harry lo ha pintado en su piel.
"Tú eres precioso "
La última de sus neuronas, por cierto; la misma que se autoproclamó la mayor fan del instructor, vuela más alto cuando el cerebro grita "gay para llevar, por favor".
Louis sonríe y el rubor lo hace lucir más irreal, jodidamente como una visión. Sus manos no saben qué responder y solo juegan entre ellas.
Harry no puede creer lo que acaba de decir, él es un alma libre cierto, pero no sabe cómo es el chico frente a él, solo tiene claro que lo ha impresionado, de lejos parecía bello, de cerca parece descendiente de Afrodita, incluso tal vez sea alguien como Eros.
"Vine a verte"
"¿A mí?"
Louis pierde el enfoque por un momento porque ¡¿Qué carajos?! ¿Karma eres tú? ¿Quieres recompensarme la cagada anterior? Piensa Louis cuando, después de algo tan desastroso como Luke, este ser divino simplemente está frente a él y careciendo de un sentido como el oído ¿Podría ser más perfecto?
Este hombre es "el" hombre que él hubiera pedido a las estrellas fugaces cuando niño.
"Traje tu café"
Hay algo, algo en la forma en como Harry escribe, letra desprolija y rápida, una cursiva que Louis nunca logró. El ojiverde muerde su labio mientras la punta de su lengua sale apenas y moja su labio inferior y lo vuelve más brillante, eso roba un suspiro de Louis cuando nota que algo más que comparten son los hoyuelos en las mejillas, porque sí, Louis también tiene hoyuelos bajo esos pómulos de acero.
"Oh, entonces no viniste a verme a mí".
Corre una leve decepción pero no la deja permanecer, en su lugar se concentra en el hombre más alto, aquel día cuando lo vio desde lejos sabía que era atractivo, pero no imaginó cuánto.
Louis observa la estructura de su mentón, la forma tan arquitectónica en que su mandíbula es sostenida por su cuello, dando paso a una obra maestra.
Hay un rayito de sol que se cuela por una ventana y cae justo sobre la cabellera de Harry y choca contra la piel de Louis. Zayn es hermoso como los cielos de Van Gogh, él lo ha dicho, pero ahora mirando a Harry, Louis piensa que tal vez Harry puede ser el pináculo que Van Gogh guardó para sí mismo.
Aquel mismo rayito que ha besado la piel de Louis le regala un tono naranja bajo el perfecto bronce que su piel atesora y Harry no comprende cómo logra eso en pleno invierno, pero es quizá; uno de los muchos milagros que forman a Louis, porque sí; un hombre como Louis es el resultado de una multitud pidiendo un deseo a una estrella fugaz a través de los años.
"¿Crees en el amor a primera vista?"
Harry se endereza y Louis nota la diferencia de estaturas, no fue gracioso pero ha logrado sonrojarlo y ni siquiera está seguro que lo haya dicho por él, así que opta por dejar que su mano responda con una pregunta y no confirmación.
"No ¿No?"
El hombre de ojos verdes sonríe porque esa interrogante es la señal para que avance, no sabe nada del castañito y eso el último impulso que lo mueve, irá por él y si se estrella, pues que así sea.
Hay golpes como ésos, que valen la pena.
"Yo sí...recientemente"
Louis está ruborizado y se vuelve más precioso ante los ojos de Harry. Mete su mano a su bolsillo para pagarle al chico, Harry niega de inmediato.
Se miran por un momento y Louis señala hacia el pasillo, gira para volver a su sala, pero Harry no lo mira porque sigue escribiendo algo.
Louis duda pero comienza a retirarse hasta que siente un tirón en su brazo.
"¿Capuccino o late?
"Té" escribe como respuesta y devuelve el trozo de papel.
Harry asiente y sonríe. Toma la mano de Louis y deposita un pedazo de papel rosa, doblado por la mitad y la cierra, manteniendo su propia mano envuelta en la suya por tres segundos, tiempo suficiente para regalarle una sonrisa.
Cuando Harry da media vuelta y desaparece, Louis abre el papel que ha dejado en sus manos .
"Esto es para ti, espero que lo uses pronto"
"Vale por un beso...mío"
— "Mañana será té entonces" —se dice Harry cuando sube a su auto, porque sí, lo ha encontrado y no piensa dejarlo ir, mañana volverá.
Y bueno, para el mundo es un pequeño paso, pero un gran salto para Harry y su humanidad.
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"Eres un museo lleno de arte, no dejes que los visitantes mantengan los ojos cerrados"...
A ti que me lees, gracias ¿hubo algo en tu día que te haya hecho feliz? si no lo hubo, mírate al espejo, ésa es la mejor razón para sonreír, eres preciosx!
Louis usando lengua de señas es lo que necesitaba para amarlo más.
Besos.
MAKI<3
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